Fate/Zero:Acto 16 Parte 5

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

-03:55:51[edit]

-- Una mujer estaba llorando.

Su hermoso rostro se volvió más desigual por el día con dolor, y arrugas de dilema fueron grabadas en los extremos de sus cejas; la mujer estaba silenciosamente llorando.

Se culpó y cuestionó a sí misma.

Estaba avergonzada sin medida.

Como una pecadora quien asumió toda la culpabilidad y la culpa en el mundo, sólo podía mojarse la cara día tras día con sus lágrimas.

Todos estaban hablando palabras crueles sobre ella - una esposa impúdica, una reina desleal.

Esos tontos plebeyos cegados por los gloriosos mitos no sabían la verdad, pero sólo la rodearon y reprendieron todos a la vez.

Ellos ni siquiera sabían que su esposo no era un hombre.


En este mundo, sólo su noble rostro le hizo a "él" dar a conocer su verdadero corazón.

Sin embargo, todo lo que "él" podía recordar fueron sus frustradas y tristes lágrimas.

Sí, "él" la había lastimado.

La amaba –

Fue amado por ella –

Esa fue la raíz de la caída de ambos.


Incluso ella debió haber descartado todo en aquel entonces y consignado a sí misma.

Un rey ideal era necesitado para salvar al país asolado por el caos y la guerra -- y una noble y virtuosa reina necesitaba estar al lado del rey. Esa era la forma en que la monarquía se suponía que debía ser en los sueños de la población.

La vida de una mujer era tan insignificante en comparación con este grandioso ideal.

Incluso si el rey no era un hombre, incluso si este matrimonio era entre dos mujeres quienes escondían el verdadero género de una y nunca pudieron consumarse, este sacrificio era necesario para proteger el país y su mayor bien.

Aun así, "él" aún quería salvarla.

La primera vez que a "él" se le había concedido audiencia en la corte, "él" había jurado silenciosamente en su corazón que "él" haría cualquier cosa por esta mujer, e incluso renunciaría a "su" vida por ella.

Había sido demasiado tarde cuando descubrió que era este pensamiento "suyo" que había estado atormentándola.

Había caído perdidamente enamorada de "él".

Ella ya había descartado la felicidad de una mujer. El amor era el mayor tabú.


Incluso si este romance no era permisible, aún debería haber un camino en el cual podrían hacer su difícil resolución, asumir sus pecados, y continuar hasta el final.

¿Qué hombre no lucharía contra el mundo entero por la mujer que amaba?

Sin embargo -- "él" no podía hacer eso.

Ella no era una "mujer", ni era un "humano", sino una parte mecánica llamada "reina" que apoyaba al rey gobernando el mundo.

"Él” no era un "hombre", ni era un "humano", sino una parte mecánica llamada "caballero" que servía al rey con absoluta lealtad.

"Él” era el hombre llamado "el Caballero del Lago"-- incomparablemente valiente, cortés y caballeroso, elegante y extravagante al mismo tiempo. "Él” era de hecho la personificación de la esencia de la caballería, una existencia que todos admiraban.

No sólo era este caballero ideal adorado por todos, había sido incluso bendecido por las hadas. Este título fue "su" gloria final, y al mismo tiempo, la maldición más grande concedida sobre "él".

El "caballero perfecto" quien sirvió al “rey perfecto"-- este hombre sólo podía vivir de esta manera, que otros habían esperado y confiado a "él", por lo que dio "su" vida por ello.

“Su” vida no le pertenece a "sí mismo", sino a la gente quien honra la caballería y dan su vida por ella.

Y el rey que "él" sirvió, era realmente demasiado perfecto, un héroe quien era absolutamente impecable. El “Caballero del Lago" nunca podría albergar pensamientos de traición hacia este "Rey de los Caballeros” quien había salvado a "su" país de origen de las profundidades de la guerra.

"Él" juró “su" absoluta lealtad al monarca perfecto, e hizo una noble amistad con el monarca.

"Él” también sabía que, detrás de esta noble caballería, había una atormentada e ignorada mujer, quien lloraba cada día.


¿Sólo cuál camino había sido el correcto? Nadie puede decirlo ahora.

¿Debió "él" haber sido cruel hasta el final y quedado con "sus" ideales, o debió "él" haber descartado la lealtad y vivido por amor?

Mientras "su" corazón estaba retorciéndose en agonía, el tiempo pasaba sin piedad. Finalmente, el peor resultado lo recibió a "él".

Villanos compañeros habían destruido el prestigio del rey en pedazos, y la traición de la reina fue finalmente revelada al mundo. Con el fin de salvar a la reina, quien había recibido la sentencia de muerte, "él" solo podía ir en contra de "su" rey en armas - por lo tanto, "él" lo perdió todo.

Un caballero convertido en traidor –

"Su" deslealtad rompió el equilibrio dentro de los Caballeros de la Mesa Redonda. Finalmente, este incidente se convirtió en el detonante de la guerra y la carnicería, y el país se destrozó en pedazos en las llamas de la guerra.

Los hombres "lo" habían llamado a menudo con esos tonos de burla.

Ese manchado nombre estaba tallado profundamente en la historia del pasado y nunca sería limpiado.

Por lo tanto, ella cayó en un profundo auto-desprecio por haber descaminado a ese "caballero perfecto", y estaba llorando hasta este día.

Al final, la única cosa que "él" había hecho por la mujer que "él" amada - fue hacerla llorar para siempre.

Hubiese "él" nacido como un hombre sórdido, sin honor, “él" podría haberse llevado a la reina sin dudarlo un instante y destruido el prestigio del rey.

Pero "él" era un caballero, un caballero demasiado perfecto.

Para el rey quien era "su" rival en el amor, el que causó a la mujer que "él” amaba pisar sobre ese doloroso y difícil camino -- "él" nunca había tenido sentimientos de odio hasta el final.

Sí, ¿quién posiblemente podría despreciar a ese famoso rey? Ese rey, cuyo glorioso nombre fue pasado a través de las eras, fue más valiente y noble que cualquier otro. Ese rey había terminado ese tiempo problemático.

Ese rey, quien nunca había perdido una batalla, era incorruptible y justo, honorable pero nunca afectado por las emociones personales, y nunca había cometido un error en la vida.

Después de todo, ese rey nunca lo había culpado a "él" durante toda la vida. Incluso cuando el rey se había ido para intercambiar golpes con "él", quien había sido descartado por la Mesa Redonda, había sido un incapaz acto para hacer un ejemplo de "él" con el país como su testigo, y nunca la intención original del rey. Para "él", quien había cometido el mayor pecado de la traición, el rey siempre lo había tratado con una pura y noble amistad incluso hasta el final.

Ese noble rey era tan "correcto". ¿Cómo podría alguien odiar o despreciar a aquel monarca?

Sin embargo - si ese fuera el caso, entonces ¿sobre quién debería descargarse "su" pesar y las lágrimas de ella?


El odio que “él” se llevó a la tumba fue extraído al final del largo pasaje del tiempo, y "lo" ha atormentado por una eternidad en el Trono de los Héroes que no tiene fin... Y luego "él" finalmente escuchó el llamado desde lejos.

Ven, bestia loca.

Ven, terco espíritu vengativo. Ese sonido desde el final del tiempo había llamado.

Ese sonido despertó "su" deseo de mucho tiempo.

No hubiese "él" sido un caballero.

Hubiese "él" sido una bestia no conociendo honor y no teniendo razón, hubiese "él" sido un demonio caído en la liga de las bestias, tal vez "él" podría haber vengado este odio y remordimiento.

Sí, la locura era el camino a la salvación.

Una bestia no se perdería. Por lo tanto, no sentiría dolor. Nadie esperará algo de ella, nadie le confiaría algo a ella. Si "él" pudiera convertirse en una bestia y dirigir los movimientos de “sus” miembros sin nada más que "su" propio deseo –

Este deseo se convirtió en la conexión que unía a "él" con el fin del tiempo, y colocado a "él" en este campo de batalla que a "él" le importaba y no sabía nada.

"Él” hacía mucho que había olvidado "su" nombre, hace mucho olvidado “su” disciplinado voto. “Su” cuerpo sólo existía para llevar a cabo las habilidades asesinas que “sus” manos desde hace mucho habían estado empapadas de ellas. El orgullo que tomaba vergüenza de esto ya no existía, y el corazón que se lamentaba, se perdió también. Esto era quién era en la actualidad "él" - la existencia llamada "Berserker".

No habían arrepentimientos. Para caer, para ser liberado, eso era lo que "él" había buscado.

Además, la mano despiadada del destino había incluso preparado tal irónico encuentro.

"... Ar... thur..."

El llamado que se escabulló de “sus” labios ya no significaba nada.

Aun así, este plateado espadachín quien ahora se arrodilló en la lluvia torrencial, era indudablemente, esa persona a quien "él" había amado y odiado en el pasado.


Ese noble rostro y esa majestuosa y solemne cara, sobre la cual innumerables esperanzas y bendiciones habían sido concedidas, estaba ahora arrodillándose frente a la desesperación. Ahora el rey conocía la verdad que había estado escondida durante tanto tiempo, conocía el odio que había sido enterrado en eterna oscuridad. El rey olvidó el orgullo de un monarca y lloró.


-- ¿Me odias tanto, mi amigo? –


Sí, eso es lo que quería ver -- la bestia en su corazón lloraba, el caballero en su corazón sollozaba. Saboréalo bien. Ahora sabes cuántas lágrimas hemos derramado por tu gloria pasajera, cómo nos hemos aniquilado a nosotros mismos, desperdiciado nuestros días, y sentado en el vacío esperando a la vejez.

Ahora era el momento cuando su injusticia sepultada sería vengada. El caído caballero negro levantó su espada de la venganza en lo alto.


-- ¡¿Me odias tanto, Caballero del Lago?! –


Ah. Sí, es cierto.

En ese momento, si no hubiese sido un caballero, pero sólo vivido como un hombre –

Si no hubiese sido un súbdito leal, pero odiado a ti como un humano –

Entonces, quizás, ¡podría haber salvado a esa mujer!



Regresar a: Acto 16, parte 4 Ir a:Página Principal Avanzar a: Acto 16, parte 6