Fate/Zero:Acto 13 Parte 4

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Cuando Irisviel abrió sus ojos, lo primero que cayó en su vista fue la luz de la puesta del sol tiñendo las ventanas altas de la bodega subterránea de un brillo de rojo carmesí.

Desde que perdió la conciencia, ha estado inmersa en un profundo sueño y sentía como si todo el día hubiese desaparecido. En lugar de durmiendo, su deteriorando cuerpo se describe mejor como entrando a un estado de muerte cercana.

Pero se sentía bien por el momento, así que tal vez tal largo descanso tuvo algún efecto después de todo. Aún no tenía la fuerza suficiente para sentarse, pero al menos podía reunir aliento para hablar.

Irisviel miró a su lado y descubrió a Hisau Maiya todavía sentada en un rincón del cuarto, quieta como una pintura. Ella estaba en el mismo lugar con la misma postura que antes de que Irisviel se quedara dormida, pero la mirada afilada que emana de sus ojos no tenía ni una pizca de cansancio o fatiga. Simplemente con la mirada perdida en el aire.

A pesar de que hizo un avistamiento confiable, fácilmente podría haber sido confundida con un robot o un familiar. Incluso Irisviel no podía evitar sentir un cierto grado de temor hacia ella. ¿Qué clase de entrenamiento y que tan fuerte voluntad debe de haber tenido para ser capaz de mantener tal grado de concentración? Era inimaginable.

Con un poco de temor, Irisviel repentinamente se dio cuenta - esta mujer llamada Hisau Maiya puede haber alcanzado un estado por encima de la dimensión que Kiritsugu persiguió.

"- Hey, Maiya.”

Irisviel llamó en voz baja. Al igual que un perro que de repente escucha su trompeta de llamando, Maiya inmediatamente volvió sus ojos hacia Irisviel.

"¿Por qué... luchas por Kiritsugu?"

"...Porque no tengo nada más."

Cuando se dio cuenta de que su obligación no estaba en ningún tipo de dolor o molestia y sólo quería charlar, Maiya relajó sus nervios tensos un poco y respondió tras una breve pausa para reflexionar.

"No puedo recordar nada acerca de mi familia o mi nombre. Esté nombre, Hisau Maiya, me fue dado por Kiritsugu cuando hizo mi pasaporte falso. "

"- ¿Huh?"

Al ver la sorpresa en el rostro de Irisviel, el final de la boca de Maiya se contrajo con una pequeña sonrisa. Para alguien como ella, que no mostró ninguna emoción perceptible en su cara, eso era el límite de lo que podía hacer para mostrar su estado de ánimo relajado.

"Lo único que recuerdo es que era un país muy pobre. No había esperanza, no había futuro. Las únicas cosas que se dejaron, fueron el odio comunal y los conflictos por alimentos para sobrevivir.

La guerra nunca terminaría. No había más fondos para mantener a los ejércitos, pero la masacre mutua continuó sin un momento de pausa... Nadie se acordaba de quién fue la idea, pero en aquel tiempo alguien decidió que era más rápido que los niños vayan a la primera línea con armas de fuego que contratar soldados y entrenarlos. "

"..."

"Por lo tanto, no recuerdo nada antes de tener una pistola en mi mano. Sólo podía seguir matando a otros para prolongar mi vida. Apuntar escondida a mi enemigo, halar el gatillo, esa fue la única función restante en mí ser. Todo lo demás fue descartado... los niños que no podían hacer eso, fueron asesinados por los niños que sí podían. Yo vivía sin rumbo tal como eso, hasta que conocí a Kiritsugu.”

Mientras Maiya hablaba, ella bajó la cabeza para mirar a sus manos. Esos dedos largos y delgados no poseían la dulzura femenina, sólo comparables con armas afiladas de asesinato.

"Como ser humano, mi corazón ya ha muerto. Sólo mi cuerpo sigue funcionando, manteniendo mi comportamiento humano. La persona que me recogió y guardó mi "vida" fue Kiritsugu, por lo tanto, él puede usar mi vida en cualquier forma que desee... Esa es la razón por la cual yo me quedo aquí.”

Aunque Irisviel había predicho hace mucho tiempo que Maiya tuvo un pasado trágico, las cosas que dijo superan con creces la imaginación de Irisviel.

Irisviel se quedó en silencio y no sabía cómo responder. Esta vez, fue Maiya quien abrió su boca y planteó una pregunta en su lugar.

"- Oh?"

Irisviel no esperaba que Maiya dijera tal cosa y no pudo evitar sentirse sorprendida.

"Siempre has vivido en tal aislado castillo y conoces muy poco sobre el mundo exterior. ¿Por qué apoyar a Kiritsugu, quien se comprometió a cambiar el mundo, a tal grado que estarías dispuesta a sacrificar tu propia vida...? "

"Yo -"

Las palabras de Maiya una vez más hunden a Irisviel en profundo pensamiento.

Emiya Kiritsugu, su esposo, el hombre con el sueño de "salvar el mundo '. Ahora que sabía que buscaba el Santo Grial oculto en su propio cuerpo, ¿en su estado actual aún mantiene el mismo ideal que él?

"- Es cierto. Para ser honesta, no entiendo mucho el ideal de Kiritsugu.”

Sí, su respuesta fue - negativa.

"Al final, probablemente sólo pretendí entenderlo. Tal vez fue sólo para mantenerme junto a la persona que amo. Como has dicho, Maiya, no sé casi nada del mundo que Kiritsugu quiere cambiar. El ideal en mi corazón fue probablemente algo que Kiritsugu me enseñó.”

"... ¿Piensas eso?"

"Mmm. Pero, por favor mantenlo en secreto de Kiritsugu.”

Esta fue una sensación increíble para Irisviel. Ella había dicho palabras delante de esta persona que nunca diría en frente de su propio esposo.

"No importa cuál sea la situación, yo le diría a él que creo firmemente que está en lo correcto. Podría incluso sacrificar mi vida por su ideal. Pretendí que tenía el mismo ideal que él. Si doy mi vida por un ideal que ambos compartimos - en comparación con una mujer que simplemente se sacrifica por su esposo, ¿no me convertiría en una carga menor para Kiritsugu?”

"Ya veo.”

Su amor por Kiritsugu y su confianza a Saber eran dos sensaciones completamente diferentes. Para Irisviel, este sentimiento de confiar en alguien, Un sentimiento que estaba teniendo por primera vez, probablemente se podría llamar "amistad".

"Entonces, madam, ¿no tiene algún deseo propio?"

Como le fue hecha esta pregunta una vez más, Irisviel no pudo evitar recordar la batalla que ella y Maiya habían enfrentado juntas en el bosque. En ese entonces, ante la presencia enorme y abrumadora de Kotomine Kirei, ¿justo de donde había venido ese surgimiento de espíritu de lucha?

"Probablemente sí tenga… un deseo. Deseo que Kiritsugu y Saber obtengan la victoria. Yo, para ellos, deseo que posean el Santo Grial."

Por supuesto, eso también significaría la muerte de Irisviel, su eterno adiós con Kiritsugu.

Sin embargo, aún así, esté deseo - se convirtió en la fuente que proporcionó el palpitante coraje en el corazón de Irisviel.

"Es eso... el llamado deseo de la familia Einsbern, el logro de la Tercera Magia?"

"No. No me importa incluso si no alcanzamos el Gran Grial. Lo que espero es el fin de la guerra para siempre. Es lo mismo que busca Kiritsugu, para cambiar la estructura de este mundo y terminar toda lucha. Está batalla por el Santo Grial en la ciudad de Fuyuki no sería la excepción, ¿o no?

Está es ya la cuarta vez, y deseo que esto sea el último Toque del Cielo. En términos de homúnculos sacrificados como recipientes del Grial -. Espero ser la última."

"Mmm.”

Illyasviel von Einsbern. Una criatura con todos los grandes logros de la alquimia reunidos dentro de ella, nació del vientre de un homúnculo y concebida con el esperma de un mago. A pesar de que no la había visto con sus propios ojos, Maiya había escuchado de su existencia hace mucho tiempo.

"Era el plan de la cabeza de la familia. Para el "protector del Grial" después de mí, pensaba usar un homúnculo con mecanismos aún mayores. No sólo implantó el secreto del Santo Grial en el embrión, si no también añadió Circuitos Mágicos a su exterior e hizo su cuerpo físico capaz de convertirse en un recipiente del 'Grial' por sí misma.

"La cabeza de la familia ya había predicho la posibilidad de "la quinta ronda” antes de que el "Cuarto" Toque del Cielo comenzara, y me permitió dar a luz a Illya. Si Kiritsugu y yo fallamos, esa niña se convertirá en el espécimen experimental de "el Vestido del Cielo".”

En este momento, la voz de Irisviel estaba llena de la dulzura del amor familiar.

Esta fue la prueba concreta de que el homúnculo llamado Irisviel no era simplemente una máquina artificial. Ella tenía el corazón de un ser humano, la bondad del amor, una sonrisa de felicidad y lágrimas de tristeza. La calidez hinchándose en su corazón era la parte más importante de ser un humano.

"Cuando sostuve a esa niña y la alimente... Yo también estaba muy consciente de que ella no sería capaz de escapar del destino de convertirse en un "recipiente" al final. ¿Puedes entender los sentimientos de una madre que siente desesperación sin fin cuando mira a su hijo amado? "

"..."

Maiya estaba en silencio y no respondió. Irisviel continuó.

"Sin embargo, ese es el destino llevado por los homúnculos de los Einsberns. Ya sea esa niña o mi nieta, este dolor es probado una y otra vez cada vez que nace una hija. Este destino se repetirá cada vez que el Santo Grial de Fuyuki descienda.

Por lo tanto, espero que este dolor pueda terminar aquí, conmigo, usando mi cuerpo para acabar con el deseo obstinado de los Einsberns. Si mi deseo puede cumplirse, entonces mi hija será liberada de este trágico destino. Esa niña probablemente sería capaz de vivir toda su vida como un ser humano y no tener nada que ver con el Santo Grial."

"¿Son esos los sentimientos de una madre?"

Sólo cuando Maiya pregunto esto Irisviel se dio cuenta de que había expuesto demasiado de sus sentimientos. Ella dio una avergonzada y amarga sonrisa.

"Quizás. Tal vez te resulta difícil de entender, Maiya.”

"No es demasiado difícil. También he sido madre, yo misma."

"- ¿Huh?"

Realmente fue una respuesta sorprendente. Irisviel casi dudaba de sus propios oídos.

Como sintiéndose un poco en disculpa por sorprender a Irisviel, Maiya relató el evento con una voz calmada.

"Yo... en realidad experimenté el embarazo y el parto, aunque se podría decir que fue un accidente.”

"... ¿Estuviste casada alguna vez?"

"No. No sé quién es el padre. Durante la batalla, todas las noches en los cuarteles, los soldados hombres venían a todas las soldados mujeres y... No puedo recordar cuándo empezó... de todos modos, me quedé embarazada muy pronto después de convertirme en mujer.

Al niño no se le dio un nombre y no sé si todavía está vivo. Si no ha muerto, todavía debe existir en algún remoto rincón de aquel campo de batalla, luchando por su vida. A los niños ahí, se les da armas de fuego y son enviados a la batalla cuando cumplen cinco años de edad."

"Cómo puede eso..."

Cuando escuchó a esta antiguo niña soldado frente a ella recontar historias trágicas del pasado, Irisviel no podía evitar sentirse aturdida.

"¿Te sorprende? ¿Pero tales cosas no son definitivamente nuevas en este mundo, ¿verdad? Los terroristas modernos y los grupos de guerrilla, todos saben de los beneficios de usar niños como soldados, un temprano éxito como yo, también sirve como evidencia. Por lo tanto, los niños que comparten mi experiencia, no disminuyen en la era moderna, sino aumentan más."

Maiya narró silenciosamente, sus ojos parecían menos y menos vivos. El dolor y odio también comenzó a desaparecer de su voz. Quizás lo único que queda en sus recuerdos era la desesperación sin fin.

"Madam, quizás pensó que el mundo que vio con sus propios ojos por primera vez, era muy hermoso y envidió a la gente feliz viviendo ahí. Sin embargo, tengo mucha envidia de usted, quien siempre vivió en ese castillo. No experimentó nada del terror y la fealdad de este mundo.”

Aunque no hubo sentimientos de celos o odio en la contemplación de Maiya, Irisviel se sintió algo avergonzada al oírlo.

Maiya parecía detectar los sentimientos de Irisviel, por lo que continuó.

"Si tal mundo puede realmente cambiarse... entonces no importa cómo Kiritsugu escoja usar mi vida hacia ese fin, no voy a pronunciar una sola palabra de rechazo.”

Pero no sé cómo hacer otra cosa, aparte de la luchar - Maiya murmuró suavemente a sí misma. No había exageración en esa frase. Sin objetivos y sin esperanza, su corazón estaba tan desolado como un campo devastado por el fuego.

A pesar de que sus sentimientos eran totalmente diferentes a los de Kiritsugu, eran sorprendentemente similares como soldados. La existencia de Maiya constantemente sirvió como un recordatorio a Kiritsugu, y al mismo tiempo le proveo un ejemplo. Debido a la existencia cercana de Maiya, Kiritsugu se había encerrado dentro de este dilema y se convirtió en una cruel máquina de caza, carente de misericordia.

"¿Qué... quieres hacer después de que Kiritsugu logre su deseo?"

Cuando Irisviel preguntó esto, los ojos de Maiya se confundieron una vez más.

"- Nunca imaginé que sería capaz de completar esta tarea y vivir. Si realmente logro mantenerme con vida, no tendría ninguna razón para seguir viviendo. No debería haber un lugar para mí en el mundo cambiado por Kiritsugu.”

Un mundo sin guerra no tiene lugar para alguien como ella, alguien quien no conoce nada sino el combate. Para Maiya, era la conclusión lógica.

Tales sentimientos tristes y melancólicos hicieron hablar a Irisviel.

"No, eso no es cierto. Maiya, todavía tienes cosas que tienes por hacer después de que termine la guerra.”

"..."

Irisviel continuó hablando mientras miraba los ojos confusos de la mujer soldado.

"Tú debes buscar a tu familia, tu propio nombre y el paradero de tu hijo. Son cosas que no deben ser olvidadas. Son cosas que deben ser recordadas."

"Es eso así..."

Al contrario de la pasión de Irisviel, la respuesta de Maiya estaba llena de indiferencia sin emoción.

"Si realmente podemos ser acomodados en un mundo sin guerra, entonces los recuerdos de la gente como yo serían nada menos que una pesadilla. Recordarlos sólo me harían más dolorosa. ¿Quieres que lleve la semilla del odio a la utopía que por fin hemos creado?"

"Eso no es cierto. Tu vida no era un sueño. Contiene hechos que realmente sucedieron. Una paz creada al enterrar todos esos recuerdos en la oscuridad del pasado, no es más que una mentira pecadora. Creo que un mundo verdaderamente pacífico no debe simplemente olvidar esos dolores del pasado. En su lugar, debemos recordar solemnemente esos previos dolores y sacrificios para que no vayamos por el mismo camino triste y podamos continuar en la creación de un nuevo mundo pacífico."

"..."

Maiya miró a Irisviel en silencio - luego habló con una cara un poco más aliviada.

"Deberías haber dicho estas cosas a Kiritsugu antes. Si hubiera hecho eso, tal vez ya habría obtenido la salvación."

Las sentidas palabras de Maiya trajeron ambas, alegría y soledad al corazón de Irisviel.

Quizás - como estaba al borde de la destrucción, ella nunca tendría la oportunidad de charlar con su esposo otra vez.

"- Entonces, Maiya, confío en ti para que le lleves estas palabras a él. Dile que yo las dije."

Maiya respondió con una vaga encogida de sus hombros.

"Voy a hacerlo cuando lo considere oportuno. Pero eso está por venir una vez finalizada la guerra. No debemos ser descuidadas por el momento."

Aunque el tono de Maiya era muy frío, Irisviel aún escuchó la alegría en sus palabras.

"Realmente, eres -"

Antes de que Irisviel terminara de hablar, la bodega subterránea repentinamente comenzó a temblar violentamente.

Maiya se apresuró a Irisviel y sostuvo sus hombros, cambiando rápidamente al modo de batalla. Su mirada se hizo tan afilada como la de una espada, y tomó su ametralladora ligera con la mano derecha y apuntó a las puertas de hierro de la bodega subterránea.

La bodega subterránea se sacudió una vez más. Esta vez, la puerta de hierro grueso y pesado se deformó con un violento impacto desde el exterior, como si alguien afuera estuviese golpeando poderosamente en él. Fue una hazaña terrible, sólo posible mediante el uso de una grúa mecánica. Para los dos participantes de este Toque del Cielo, no era algo digno de sorpresa - por el contrario, sólo sintieron desesperación.

Si realmente era un Sirviente intentando entrar a la bodega subterránea, entonces las armas de Maiya serían completamente inútiles contra él. Además, ni siquiera podían escapar en la situación actual, realmente atrapadas en un callejón sin salida.

Sin embargo, antes de que el terror pueda incluso pasar a través de sus mentes, vino una desconcertante confusión.

¿Quién podría haber sabido que Irisviel estaba escondida en esta bodega subterránea?

La barrera de protección debería haber detectado cualquier clarividencia o familiares que llegan. Sin embargo, el enemigo se saltó cualquier reconocimiento y envío directamente al Sirviente a la casa de seguridad de Irisviel con tal exactitud, ¿podría ser que el enemigo se había enterado de este lugar hace mucho tiempo?

Una tercera onda de choque. Antes que las puertas de hierro fueran destruidas, las paredes de tierra alrededor de ellas no pudieron soportar tal poderoso impacto y colapsaron primero.

Con el polvo levantado, las puertas de hierro cayeron en la bodega subterránea. La puesta del sol brillaba a través de la puerta, tiñendo la sala de un tono rojo como mancha de sangre.

Y esa gigantesca figura que se cierne sobre los escombros y el polvo fue, sin duda – el Sirviente Rider, Rey de los Conquistadores, Alexander.

Maiya sólo podía aferrarse a la ametralladora ligera en sus manos con absoluta desesperación.

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