Fate/Apocrypha:Volumen2 Capitulo2

Capítulo 2

Los participantes en la Guerra del Santo Grial eran capaces de ver cosas en sueños. Tal vez a causa de la profunda conexión mental entre Master y Servant.

Ellos eran capaces de ver el pasado del otro en forma de sueño. Era un fenómeno ampliamente conocido ya que había ocurrido en las primeras tres Guerras del Santo Grial y los pequeños enfrentamientos derivados de estas.

—Así que Shishigou Kairi no se sorprendió en lo más mínimo cuando se dio cuenta de que se encontraba en la Bretaña de hace mucho tiempo atrás.

“…Bien, este tipo de cosas también son comunes, eso creo.”

Este probablemente era el pasado de su Servant, Mordred. Cuando se dio cuenta, ella ya estaba a su lado. La espada que sostenía era el arma que también favorecía en esta Guerra del Santo Grial—Clarent: La Espada Radiante del Rey. Originalmente, esta arma no le pertenecía. Era una espada que servía como el símbolo del trono, la cual el Rey Arturo había obtenido y guardado en su armería.

Mordred la había robado y había incitado una rebelión a gran escala para tomar el título de ‘rey’ para sí misma, y ahora estaba sujetando fuertemente esa espada enfrente al Rey Arturo como si lo retara en una pelea uno contra uno.

“…En otras palabras, esto es Camlann, ¿huh?”

Si, este lugar era la colina de Camlann. El sitio de la batalla final decisiva entre la armada rebelde dirigida por Mordred y la armada dirigida por el Rey Arturo. En esta triste y deprimente guerra, las cortinas por fin se cerrarían en esta brillante historia de caballería de la leyenda del Rey Arturo.

Las flechas disparadas atravesaban a los soldados de armadura ligera. Mordred, con su cuerpo cubierto enteramente en su armadura, seguía avanzando desafiando todos los ataques.

El Rey Arturo, quien poseía un carisma tremendo, finalmente había logrado unir Bretaña. Pero a pesar de eso, ¿Por qué tantos soldados aprobaban la rebelión de Mordred?

Con la unificación tan cerca, el cansancio de la guerra se había esparcido sin control por todo el país—esa era una razón.

El escándalo entre la Reina Guinevere y el Caballero del Lago, Lancelot, quien, a pesar de ser exaltado como perfecto, había caído en un amorío inmoral y había causado que la autoridad del rey se debilitara a los ojos de la gente—esa era otra razón.

Muchos caballeros sintieron tanto un extraño miedo e incluso desdén por su rey, quien era demasiado puro y justo y nunca actuaba por sentimientos personales—esa también fue una razón.

Pero había otra razón más.

Al ver a Mordred en el campo de batalla, Shishigou pudo entenderla bastante bien. Su forma de pelear era salvaje. La magnificencia y galantería de la técnica de espada que otros caballeros presumían era como una frágil rama ante su estilo.

Era el estilo de asesinato enfocado en obedecer sus instintos y optimizaba sus hábitos de pelea con la más grande eficiencia.

La moral de las tropas que la seguían detrás era alta. Era el ritmo que apelaba a los instintos de la gente. Sus pasos sonaban fuerte y majestuosamente, como tambores enormes, mientras avanzaba.

—Era una calamidad similar a la de un dragón.

Mordred era un caballero famoso. Ella había trabajado duro para serlo y parecía que realmente lo era en realidad. Aun así, si ella hubiese ido al campo de batalla como un [caballero], cientos de miles de soldados probablemente no la habrían seguido.

Su fuerza era real y de alguna forma parecía estar llena de locura. Pero esa misma locura era su más admirable y adecuada característica en el campo de batalla.

Dado que era tan fuerte como un monstruo y que desperdigaba a sus enemigos como una corriente de viento, sus soldados continuaban siguiéndola como si estuviesen dirigidos por la locura.

—Deseaban ver que tan lejos podría llegar este guerrero enloquecido.

Una fe que respondía al nombre de ‘frenesí’. Si lo hubiesen pensado profundamente, esa probablemente era la única motivación de los soldados. Pero aun si tenían la moral alta, sus números eran finitos. Uno era asesinado, después dos, cientos, miles de ellos morían en el campo de batalla.

Mordred no miro atrás para observarlos. Soldados—no, los seres humanos eran seres que se multiplicaban por su propia voluntad después de una victoria. Así es como ella parecía pensar sobre ellos.

Su prioridad era atacar la densa formación de los soldados enemigos. Cuando los desperdigaba como si fuesen pedazos de madera, buscaba una nueva y densa agrupación enemiga y cabalgaba hasta ella. Los enemigos desfallecían, algunos resistían, otros huían—ella los asesinaba a todos y generaba montañas de cadáveres.

Y como era de esperarse, Mordred no les prestaba ninguna atención a los soldados rasos. El único que acaparaba su atención no era ningún otro que su padre—el Rey Arturo.

“¡¡¿Dónde se encuentra el Rey Arturo?!! ¡¡¿Dónde está el Rey de los Caballeros?!!”

Gritaba y atravesaba a los soldados que la rodeaban en cantidades de dos o tres veces su número. Al retar las densas conglomeraciones de enemigos tenía grandes posibilidades de descubrir donde se encontraba el rey. Sin embargo, como si el destino se lo negara, ellos nunca se encontraban en el campo de batalla sin importar a donde fuese ella.

Pero—una vez que no hubo más muros que la bloqueasen, el destino finalmente concedió su deseo. Tanto la armada del Rey Arturo como el ejército rebelde de Mordred perecieron casi por completo, dejando cuerpos regados por todos lados. Mientras Mordred descansaba utilizando su espada como bastón, el Rey Arturo finalmente apareció ante ella.

Su expresión era completamente serena, sin contener piedad u odio hacia ella. Ese rostro inexpresivo irritaba claramente a Mordred.

En cualquier caso, ambos estuvieron cara a cara. No había ya ningún ser vivo que se interpusiera en sus caminos.

Mordred extendió sus brazos y gritó apasionadamente. Gritó con enojo, placer y todas las emociones que no podía evitar sentir.

“¡¿Qué te parece?! ¡¿Qué te parece Rey Arturo?! ¡Tu país termina aquí! ¡Está acabado! Sin importar quien gane— ¡todo yace en ruinas!”

Aquel que recibió dichas palabras era un rey que tenía la apariencia de un joven, con rasgos muy similares a los de Mordred. Sin poner importancia en las palabras apasionadas de Mordred, o siquiera responder con sus propias palabras, el rey meramente levanto su espada como si fuese algún tipo de máquina.

Esa fue la respuesta más inaceptable para Mordred. Aullando, Mordred blandió su espada.

El Rey Arturo la bloqueo, causando que volaran chispas mientras las dos espadas sagradas chocaban. Ambos estaban exhaustos, pero peleaban duro y se negaban a perder. Pero su pelea no cambiaría nada. Justo como había dicho Mordred, sin importar quien ganara, este país estaba cayendo rápidamente en ruinas.

“¡Debiste de haber sabido que esto sucedería! ¡Debiste de haber sabido que terminaría de esta manera! ¡Si solo hubieses dejado el trono en mi favor, esto no habría resultado de esta manera…!”

Pero aun así, la espada de Mordred no ceso.

Ella había nacido como una hija ilegítima, admiro a su padre, fue rechazada por él, y entonces comenzó a odiarlo—y ahora estaban tratando de matarse el uno al otro en un campo de batalla como este.

—Te odio, te odio. Te odio, rey perfecto. Te odio, aquel que no reconoció mi existencia. Aun cuando era feliz de estar a tu sombra. Ni siquiera una vez te diste la vuelta para verme.

—Es por eso que esto es un castigo natural, Rey Arturo. He destruido todo, ¡todo lo que tenías!

“¿¡Me odias!? ¿¡Me odias tanto!? ¿¡Acaso me odiaste por ser el hijo de Morgana!? Respóndeme… ¡¡Respóndeme Arturo!!”

Ante ese grito, Arturo finalmente le respondió mientras sus espadas se cruzaban. En una fría voz completamente carente de emociones, el rey promulgo su veredicto.

“No te he odiado ni en una sola ocasión. La razón por la cual no te entregue el trono fue porque—”

No posees la capacidad para ser el rey.

Fue una respuesta llena de [indiferencia]. Él apenas comprendía las habilidades de Mordred y, sin la más mínima emoción, divulgo que ella no tenía las capacidades necesarias.

Inmediatamente después de eso, Mordred blandió su espada llena de furia, y entonces, la lanza sagrada del Rey Arturo Rhongomyniad atravesó su pecho. Sin importar que tan dura fuese su armadura, no significaba nada ante esa lanza.

—Sin embargo.

Aun después de ser herida mortalmente, Mordred reunión lo último de su fuerza moribunda y finalmente dio el golpe decisivo al Rey Arturo. El yelmo de Mordred se partió en dos, revelando el rostro de una joven que Shishigou conocía muy bien.

Mientras la sangre fluía de sus labios, Mordred extendió su mano hacia el Rey Arturo quien estaba de pie frente a sus ojos.

“——Pa, dre.”

Mordred cayó sin tocar a su padre. Observándola fijamente, el Rey Arturo entendió que había ganado esta batalla y, sin una palabra, le dio la espalda a Mordred y se marchó caminando.

…Después de ello, el Rey Arturo fue llevado por un caballero que había sobrevivido, Bedivere, e hizo que regresara su espada al lago. Se dice que incluso después de morir, se encuentra curando sus heridas en la tierra de las hadas, Avalon.

Así es como la leyenda del Rey Arturo llego a su fin.

Sin prestarle atención al Rey Arturo mientras se marchaba caminando, Shishigou observo el cadáver de Mordred. Suspiro y murmuro para sí mismo.

“…Maldita sea, que sueño tan horrible.”

Todo era tan real. Este sueño era tan realista que incluso podía oler la sangre en el campo de batalla. Mordred simplemente yacía ahí con una mirada vacía, su expresión completamente sin vida.

Si, el Mordred actual era completamente un cadáver. Ella probablemente perdería todo lo que llevaba puesto y se pudriría devorada por los insectos.

El Rey Arturo se convertiría en leyenda, y Mordred sería recordada como el caballero que mancho esa leyenda.

Dado que todos los soldados que la habían seguido habían sido asesinados, no existía nadie más para recordarla. Eso era natural. Este era un campo de batalla… aquellos que perdieron y se convirtieron en cadáveres pálidos ya no tenían nada que ver con este mundo.

Su pasión, su agudo deseo no había sido grabado en algún lugar y simplemente había desaparecido. En verdad. Justo hasta sus últimos momentos, ella había muerto en la oscuridad sin siquiera un padre que se diera la vuelta para mirarla.

“—Ah, cielos. Me ha tocado un Servant problemático.”

Hay un límite incluso para la compatibilidad, pensó Shishigou. Al final, un Servant simplemente era un visitante del pasado. Conectar el uno con el otro era importante, pero el ahondar demasiado profundo estaba fuera de toda cuestión. En cuanto pusieran sus manos en el Santo Grial, su relación terminaría.

Es por ello que esta verdad era extremadamente irritante. Una niña que deseaba el amor de su padre era la peor broma para Shishigou.

Mientras esperaba para despertar del sueño, Shishigou se sentó a un lado del cadáver de Mordred. Y él simplemente observo a toda la gente que falleció en este país arruinado.

Sin importar la era o nación, la escena de los últimos momentos de un país siempre era la misma—

Y así, llego la mañana, y las primeras palabras que salieron de la boca de Shishigou fueron dirigidas al Saber Rojo y lo llenaron de mal humor.

“Demonios, no me muestres más sueños extraños.”

“…En realidad no lo comprendo, pero ¿Acaso eso fue mi culpa?”

Incluso el Saber Rojo se quedó con los ojos abiertos ante una queja tan poco razonable.

El lugar en el que ambos despertaron no eran las catacumbas de Trifas. Se trataba de un cuarto en un pequeño hotel en Sighisoara. Solo por si acaso, no estaban utilizando un cuarto que ellos hubieran rentado, sino un cuarto que habían hecho que alguien más pagara utilizando hechicería de sugestión.

Habiendo recibido un mensaje de la Asociación de Magos, Shishigou había decidido retirarse temporalmente de Trifas, donde se habían estado escondiendo, para ir a Sighisoara. Famosa por sus edificios históricos y arquitectura, esta ciudad parecía estar siendo reinada actualmente por el miedo a causa de un asesino serial que había aparecido repentinamente.

“…Así que, ¿Por qué estamos aquí?”

“Por qué los magos de la Asociación de Magos que estaban a la espera aquí como apoyo han sido masacrados.”

El algo desbalanceado par bebía café en un local de terraza abierta, bajo el despejado cielo de otoño. El Saber Rojo apartaba su rostro molesta, y Shishigou leía el periódico local de la ciudad.

“Magos siendo masacrados… huh.”

No había ninguna apertura en Trifas para que la Asociación de Magos entrara en la ciudad, pero la ciudad cercana de Sighisoara era un asunto diferente. Muchos magos se habían situado aquí como personal de apoyo. Aunque su fuerza en batalla era inferior a la de aquellos magos contratados como los Masters Rojos, había incontables cosas que podían hacer como vigilar o enviar familiares.

Ellos habían observado diligentemente la batalla entre el Saber Negro y el Lancer Rojo a las afuera de Trifas y de igual forma habían entregado información valiosa a Shishigou.

Sin embargo, parecía que repentinamente había perdido toda comunicación con ellos. La Asociación de Magos les había ordenado que entregaran reportes periódicos. Era natural pensar que algo anormal había ocurrido.

“Es posible que un Servant esté involucrado. Así que fuimos llamados para averiguar la situación ya que estamos actuando por nuestra cuenta.”

“Devoraron sus almas, huh… ¿Pero por qué están haciendo tal cosa aquí en lugar de en Trifas?”

Para que un Servant permanezca en este mundo es necesaria una enorme cantidad de prana. El proveer el prana es el rol del Master, pero magos de segunda y tercera categoría o gente ordinaria que se convirtió en Master ni siquiera pueden hacer eso. Como resultado, tienen que atacar gente inocente para proveer a su Servant con almas humanas.

Era una práctica normal, pero dependiendo de la naturaleza del Espíritu Heroico, había Servants que rechazarían tal método. También, incluso para un mago, el utilizar este método era una humillación equivalente a declarar que se encontraban acorralados o que eran magos de segunda categoría. No había muchos magos que estarían dispuestos a hacer tal cosa.

“Esa también es una de las cosas que estaremos investigando. Tal vez no deseaban causar una conmoción en Trifas, o—”

Shishigou extendió su periódico y señalo un mapa dibujado de manera bastante simple. Al principio, el asesino comenzó en Bucarest y entonces avanzo gradualmente hacia el norte. Notando esto, Saber asintió en entendimiento.

“Tal vez están devorando almas mientras se dirigen hacia Trifas.”

“Exacto. Todos los Servants Rojos han sido reunidos de acuerdo a Shirou, y él me informo que no están devorando ningún alma. Si confiamos en esas palabras, entonces el culpable debe ser uno de aquellos cuya presencia no ha sido confirmada dentro de los Servants Negros—Assassin.”

Sentía que era algo peligroso el confiar en las palabras de Shirou Kotomine, pero él no mentiría sobre algo como esto. Y, de los Servants Negros, el fallecido Saber y aquellos dentro de la Fortaleza Millennia, Lancer, Rider, Archer y Berserker, ya habían peleado contra algunos de los Servants Rojos al menos en una ocasión. Basándonos en la calidad de los golems con los que habían luchado, Caster, quien se presumía era un usuario de golems, también estaba entre ellos.

Solo la presencia de Assassin no había sido confirmada. Por supuesto, con la habilidad de la clase Assassin, [Ocultamiento de Presencia], la posibilidad de que el Servant estuviese a la espera en la Fortaleza Millennia no podía ser descartada, pero…

En cualquier caso, ellos ya tenían que obtener la confirmación. Si el asesino serial fuese un Servant, haría que Saber peleara con él. Aun si ese no fuese el caso, el asesino serial era un enemigo ya que había asesinado a los magos enviados por la Asociación. Ellos tendrían que deshacerse de cualquier preocupación futura en la medida de lo posible.

“Está bien si es un Servant… Así que ¿Qué es lo que haremos?”

“Esperaremos hasta el anochecer. Mientras tanto, mi intención es ir a darle un vistazo a los cadáveres de los magos en la morgue.”

“Hmm, ¿Y yo?”

“Por supuesto que te lo agradecería si me acompañaras. Pero estamos a plena luz del día, así que no te obligare. Sería un desperdicio, pero si juzgo que me encuentro en una situación peligrosa inmediatamente te invocare con un Hechizo de Comando.”

Sin embargo, de cualquier forma Shishigou no creía que tuviese que utilizar un Hechizo de Comando. Todos los incidentes sucedían por la noche. Tal vez el asesino serial estaba protegiendo la regla mínima de esta guerra de no actuar durante el día, o tal vez había una razón para que el culpable tuviese que matar por la noche. De cualquier forma, las probabilidades de ser atacado durante el día eran tan bajas que podía ignorar el peligro. Así que esencialmente iba a tratar esto como tiempo libre.

“¿Quién iría a un lugar tan lúgubre como una morgue? Ahora, ¿Qué debería hacer…?”

Saber aparentemente decidió pasear por las calles. Afortunadamente Sighisoara era uno de los sitios turísticos de Rumania, con edificios que tenían cientos de años de historia y aun se preservaban hasta la fecha. No había nadie que se cansara de — no, esperen.

Después de partir de su lado y estar a medio camino de la morgue, Shishigou se dio cuenta de un punto importante. Ella era un Servant, una persona que había vivido en el lejano pasado.

“Ahora que lo pienso, no hay forma de que ella no hubiese visto tales cosas anteriormente.”

Aun si la gente le decía que los edificios tenían una apariencia de ‘la Edad Media’, ella había vivido en esa misma era.

Shishigou predijo que, al comienzo, Saber vagaría por las calles esperando ver cosas nuevas y curiosas, pero gradualmente se daría cuenta y murmuraría, “Eh, ¿Acaso no hay gran diferencia de la era en la que viví?”, y entonces se molestaría de inmediato y comenzaría a perder el tiempo mientras se quejaba—

“Fue muy aburrido…”

Shishigou y Saber se habían reencontrado cuando el sol comenzó a ponerse. Con una expresión extremadamente decepcionada, Saber comía vorazmente una masiva cantidad de dulces de pan horneados que había comprado en un puesto callejero a causa de su decepción.

“…Eso pensé.”

“Aun cuando quería ver un rascacielos no había ninguno en absoluto. Los edificios en los que se reúnen los turistas no tienen nada de extraño en lo más mínimo… Maldición, perdí mi tiempo sintiéndose fuera de lugar.”

“…Eso pensé.”

“Después de eso, ¡No podre calmarme a menos que pelee con un Servant! Así que, ¿Cómo salieron las cosas en tu caso?”

“Regocíjate Saber. Te tengo buenas noticias. He verificado los cadáveres pero en realidad estaban en un estado terrible.”

Dijo Shishigou de manera alegre, y Saber lo observo de manera sospechosa.

“¿Qué significa eso?”

“Algunos de ellos fueron atacados con cosas con filo y armas contundentes… y otros con golpes y patadas. Hay evidencia de que algunas de las victimas utilizaron armas o hechicería. Y a casi todos ellos les habían sacado el corazón.”

“¿Corazones?”

“El lugar donde la fuente espiritual de un Servant está localizada, y el órgano interno que se dice es la fuente de vida de los humanos. Puede que hayan sido devorados en un ritual para obtener prana.”

Saber pensó sobre esto por un corto momento y murmuró para sí misma.

“… ¿Acaso se los comieron crudos?”

“No digas cosas tan poco placenteras… Sería más horrible si los hubieran comido cocinados.”

El comerse un corazón crudo era comúnmente para utilizarlo en un ritual, pero el cocinarlo y comerlo significaba que el acto era más un pasatiempo. De los dos, la gente que hacia lo segundo era más aterradora.

“En cualquier caso, espero que estemos detrás de un Servant. No te lo perdonare si te equivocas.”

“Yo me enfrentare al Master. Ese tipo está rompiendo completamente la regla universal de los magos de ocultar sus misterios…”

Los artículos en los periódicos ya mostraban encabezados declarando, “Jack el Destripador ha renacido en Rumania” y el país entero se encontraba aterrado. Sin importar como es que Shishigou pensara en ello, solo podía pensar que un mago que hubiese dejado esta situación sola se habría vuelto completamente loco.

Aunque la noche apenas había descendido en Sighisoara, tanto los turistas como los habitantes locales ya se estaban refugiando en la seguridad de sus hogares.

“¿Acaso encontraste algún lugar adecuado cuando estabas vagando?”

Shishigou asintió. La gente que se había convertido en victimas al comienzo eran los ladrones y los gánsteres, y se conjeturo por ello que el asesino serial había entrado a la fuerza a los edificios donde se reunían y los había masacrado. Sin embargo, después de ello—justo cuando los magos de la Asociación habían sido enviados a Sighisoara como apoyo, pareció que el asesino se había decantado por atacarlos solo a ellos.

En otras palabras, era adecuado pensar que había altas probabilidades de que el asesino eligiera a Shishigou Kairi como su siguiente víctima, dado que él era ahora el único mago en Sighisoara.

“Saber, solo por si acaso, cambia a tu armadura. El enemigo es Assassin. Puede que no tengas tiempo de cambiar tus ropas si recibes un ataque sorpresa.”

Ella asintió ante sus palabras y envolvió su cuerpo entero en su armadura de acero. Afortunadamente, a causa del efecto de los incidentes, ellos eran los únicos andando por el camino esa noche. Podría ser que se encontraran con algún policía vigilando, pero podrían engañarlo fácilmente utilizando hechicería de sugestión si se diese el caso.

“De acuerdo… vamos.”

Y así, el mago y el Servant comenzaron a caminar temerariamente por las calles, utilizándose a sí mismos como carnada.

“En verdad ya no hay nadie fuera en lo absoluto.”

Rikudou Reika suspiro mientras observaba desde la ventana de un tercer piso las calles desiertas sin ningún signo de algún humano presente. Recientemente las cosas se habían vuelto de esta manera. Cuando llegaba la noche, la ciudad se volvía tan tranquila como la muerte.

“Madre”, ¿Acaso no deberíamos marcharnos a un pueblo diferente pronto?

El Servant de Reika—el Assassin Negro tiraba de la manga de su camisa.

“Supongo que sí. Ahora sigue Trifas, ¿cierto?”

Assassin asintió. Pero su expresión inmediatamente lucio deprimida.

“Pero, puede que eso sea un poco peligroso. Ya que todos los demás aún siguen con vida.”

“¿Los demás?”

“Los otros Servants como ‘nosotras’.”

“…Si. Ahora que lo mencionas, existen otros además de Jack. Sería un poco aterrador el ir a donde se encuentran.”

Comentó Reika de manera despreocupada, y Assassin también concordó.

“Sí. Nosotras somos Assassin después de todo. Los ataques sorpresa son nuestra especialidad, pero es imposible para nosotras el enfrentar a múltiples enemigos. Definitivamente moriríamos primero.”

Assassin, que poseía el rostro de una chica muy joven, habló tranquilamente sobre ese frio hecho.

“Pero ellos están tratando de matarse los unos a los otros, ¿cierto?”

“Sí. Los magos y los Servants se han dividido en el Campamento Rojo y Negro y deben de encontrarse a la mitad de la lucha entre ellos.”

“Entonces por ahora, ¿por qué no vamos hacia allá mientras que al mismo tiempo tomamos una postura de esperar y ver los resultados? Si hay alguna posibilidad, podrías ir y comer, y si es peligroso, podremos huir.”

El Assassin Negro pensó sobre la sugerencia de Reika por un corto tiempo. Aunque Reika y Assassin estaban conectados a través de su contrato, Reika era una total amateur cuando se trataba de hechicería, así que casi no podía proporcionar prana. Por lo tanto, Assassin se había estado proporcionando ella misma de prana al devorar el alma de los humanos.

Naturalmente, este método tenía fuertes implicaciones para un Servant, pero también poseía ligeras ventajas. Reika no emitía ninguna presencia de hechicería, así que las probabilidades de ser descubiertos por otro Master eran extremadamente bajas. Si Assassin utilizaba su [Ocultamiento de Presencia] también, Rikudou Reika probablemente sería pasada por alto como una humana ordinaria.

Sobre todo, Assassin deseaba confirmar cuantos Servants que ella no pudiese asesinar por si misma quedaban actualmente.

“Si, nosotras podríamos ir ahora. —Pero parece ser que otro mago ha venido a esta ciudad.”

Después de pensar si ir o no a Trifas, ambas llegaron a una conclusión por el momento.

“Oh cielos, ¿en verdad? ¿Entonces deberíamos convertirlo en tu ultimo alimento en Sighisoara?”

“…Si, hagámoslo. Pero Madre, no puedes venir a observar en esta ocasión. Podría ser más peligroso que de costumbre.”

“De acuerdo. Entonces esperare aquí. Ten cuidado.”

“Sí. Nos marchamos. Hey, hey. Cuando regresemos deseamos comer hamburguesas de nuevo… ¿Estaría bien?”

“Por supuesto. Ya he comprador los ingredientes, así que tomare prestada la cocina para prepararlas.”

Assassin estaba extremadamente alegre ante esas palabras, y entonces saltó de la ventana del tercer piso. Reika se despidió agitando su mano con una sonrisa en su rostro y observo cómo se marchaba.

Reika no sabía en qué momento Assassin iría a regresar, pero en cualquier caso, tenía que preparar una deliciosa comida para esa adorable chica—

No existía una ciudad tan única como Sighisoara en Rumania o incluso en toda Europa. Esto haciendo referencia a su naturaleza ‘sin cambios’. Era una pequeña ciudad con una población de treinta mil, pero la gente que venía como turista sentía como si hubiese regresado en el tiempo a la Edad Media con tan solo caminar por el distrito histórico de la ciudad, el cual era etiquetado como un Sitio de Patrimonio Mundial.

Si uno caminaba sobre su extremadamente duro camino pavimentado de piedra, uno podría encontrar casas particulares que parecían ser exactamente como habían sido en el siglo dieciséis alineadas en las calles e incluso las plazas públicas donde los juicios de la inquisición se habían llevado a cabo.

Otros puntos turísticos incluían la casa en la que Vlad III había nacido (ahora era un restaurante), el punto de encuentro de la torre del reloj del pueblo, y una iglesia en la cima de la montaña del distrito viejo. De cualquier forma, la ciudad era bastante adecuada para que los turistas extranjeros experimentaran la ‘Europa del pasado’.

Y actualmente, Sighisoara era presa del miedo a causa del asesino serial. Era una situación fantasmal donde los turistas que visitaban habían sido asesinados uno tras otro y se había extraído el corazón de sus cadáveres.

No había evidencia además de los cadáveres abandonados, y no se pudo encontrar un vínculo entre las víctimas. Pero solo una selecta cantidad de gente sabía la verdad. Todas las víctimas eran magos—en otras palabras, algo extraordinariamente ‘anormal’ estaba ocurriendo en Sighisoara.

Shishigou y el Saber Rojo habían estado caminando cerca de una hora por las calles, iluminadas ligeramente por lámparas de vapor de sodio, tensos todo ese tiempo. La armadura de Saber hacia demasiado ruido, pero afortunadamente no había nadie en los alrededores para interrogarlos. Un vagabundo borracho que llevaba una botella de vino en una mano observo a Shishigou y a Saber con la boca abierta. Sin molestarse siquiera en utilizar hechicería de sugestión, Shishigou agito su mano frente a él y el hombre dejo caer su cabeza y comenzó a beber de nuevo.

Aunque se habían encontrado a varios oficiales de policía en múltiples ocasiones, ellos eran apartados inmediatamente utilizando la hechicería de sugestión de Shishigou. Incluso los policías probablemente no deseaban la labor de permanecer vigilantes a causa de un asesino loco. Shishigou fue capaz de alejarlos sin siquiera forzarlos demasiado.

Pero aún más importante, Saber se encontraba más seria en estos momentos. No hace mucho, se había estado quejando con su “Esto es aburrido”, “Que estúpido”, y “¿Acaso no han aparecido aun?” una y otra vez, pero ahora se había quedado en silencio.

“¿Qué sucede Saber?”

“…Lo lamento, por favor déjame concentrar. Tengo un mal presentimiento.”

El rostro de Shishigou se tensó ante esas palabras. Si ella estaba tomando una actitud tan vigilante entonces definitivamente había un Servant cerca.

En algún momento, su caminata bajó su velocidad y se volvió cautelosa. Ambos vigilaban sus alrededores—la pálida luz de las lámparas de las calles parecía hacer que su visión se volviera más difusa. Un viento frio paso a través de tal forma que pareció lamer la nuca del cuello de Shishigou.

“…Se está formando niebla.”

Justo como Saber había mencionado, antes de que se dieran cuenta, neblina había aparecido alrededor de ellos. Esto obstruiría su visión más y más————no, esperen.

“¿Niebla…?”

Aun cuando el aire se encontraba limpio hace algunos momentos, ¿Acaso podía aparecer tan repentinamente una niebla que fuera tan densa como para obstruir su visión? …Imposible.

Shishigou y Saber dejaron de caminar casi al mismo tiempo. Saber ya había sacado su espada, y Shishigou tenía sus manos en la funda de escopeta favorita.

“Esta niebla es…”

En el instante en que Shishigou intentó murmurar algo, la parte interior de su nariz fue golpeada por un dolor como de chispas de electricidad. Tosió por reflejo y cubrió su boca.

“¿¡Master!?”

“¡Es venenosa! ¡No la respires, Saber!”

Shishigou se agacho mientras cubría su boca y su nariz. Incluso el respirar un poco causó que el interior de su nariz explotara de dolor y que su visión comenzara a nublarse.

“¡Hey, resiste Master!”

Tomando una decisión instantánea, Shishigou tomo su chaqueta y la utilizo para cubrir su boca y nariz. La chaqueta, hecha de la piel de una bestia mágica, era capaz de cancelar la mayoría de los hechizos simples. Cuando respiro a través de la chaqueta, el dolor se mitigo un poco. Parecía que la niebla en verdad era creada con prana.

“…Maldición. Por ahora, salgamos de esta niebla.”

“Si, ¡eso si eres capaz de correr! ¡Te dirigiré, sígueme!”

Saber sostenía su espada en su mano derecha y sujeto fuertemente la mano de Shishigou con la izquierda mientras comenzaba a correr. Afortunadamente, tal vez a causa de que el rango de su Resistencia Mágica era alto, Saber parecía no recibir casi ningún daño de la niebla y no parecía importarle la perdida de visibilidad en lo absoluto. Su agudo [instinto] hizo que la niebla no fuese ninguna obstrucción para ella.

Pero Saber y Shishigou estaban seguros. Dado que esta no era una niebla ordinaria, naturalmente algo vendría ‘después’. El asunto es cuando sucedería… Aun cuando seguían corriendo y tratando de escapar de la niebla, Saber estimaba prudentemente el momento en que ocurriría.

Tal vez a causa de que ella había sido capaz de escoger su ruta de escape de manera precisa, la niebla comenzó a desaparecer gradualmente.

—La gente siempre desea la tranquilidad. Cuando caen en una situación peligrosa, sin importar que tan calmadamente se hagan cargo de la situación, sus mentes se relajaran inmediatamente después de escapar de ella.

—Por solo un momento después de escapar de las fauces de la muerte que se encontraban a la espera de ellos, sin importar que tipo de persona son, siempre había una apertura cuando se detenían a tomar aliento.

—Los asesinos seriales nunca dejaban pasar ese momento de relajación. Ellos blandían sus cuchillas, las cuales habían bebido la sangre de incontables personas, y se escabullían detrás de ellos.

“¡De acuerdo, hemos salido…!”

Saber y Shishigou habían tenido éxito en abandonar la niebla. En ese instante, el único pensamiento en la cabeza de Shishigou fue el respirar aire fresco. Habiendo escapado del miedo de la muerte, su mente se relajó ligeramente. De detrás de él, un asesino se acercó para cortar su garganta—

Pero Saber, quien estaba de pie frente a Shishigou, blandió hacia abajo la espada en su mano derecha justo mientras se daba la vuelta, y envió a Shishigou a rodar en el piso al golpear ligeramente sus pies.

Hubo un resplandor.

Un sonido agudo resonó en el piso de piedra. La espada de Saber había alejado el cuchillo que Assassin sujetaba en su mano.

“…Ah.”

“—Lo siento, pero ese tipo es mi Master. Con quien combatirás será conmigo.”

Cuando Shishigou se dio la vuelta, había alguien de pie casi justo detrás de él. No lo había notado—a pesar de haber estado así de cerca, no lo había notado en lo absoluto.

Y fue impactado por la sorpresa de una cosa más.

La persona detrás de Shishigou era una chica joven. Parecía ser dos o tres años más joven que su propio Servant, el Saber Rojo. Tenía un corto y revuelto pelo plateado y ojos de color azul, los cuales se encontraban abiertos ligeramente por la sorpresa. Llevaba varias fundas de cuchillos colgando sobre su cintura, pero no llevaba la falda vital para cubrir la parte inferior de su cuerpo. Junto con las ropas de piel en la parte superior de su cuerpo, poseía una atmosfera sensual como la de una prostituta a pesar de su apariencia tan joven.

“Blandiste tu espada contra nosotras. Que horrible.”

Murmurando eso, miró directamente hacia el rostro de Saber.

“— ¿Qué quieres decir con ‘horrible’? ¡Un desecho como tú que devora almas a pesar de ser un Servant no tiene derecho a decirme eso!”

Sin molestarse en ocultar su molestia, Saber alisto su espada. Assassin, sin parecer tenerle miedo a la espada, inclino su cabeza y respondió con una expresión extremadamente inocente.

“No hay nada de malo en ello… ¿cierto?”

Al siguiente instante, Saber repelió un cuchillo lanzado a su rostro con su guantelete. Assassin había lanzado un cuchillo con un movimiento extremadamente natural mientras hablaba, sin el más mínimo movimiento de su muñeca.

La razón por la que Saber fue capaz de responder a tan repentino ataque sorpresa fue a causa de sus instintos y habilidad. Pero una apertura se creó en el instante en que bloqueo el cuchillo con su guantelete y Assassin salto detrás de ella. La niebla aun flotaba fuertemente en el aire de ese lugar e inmediatamente la hizo desaparecer de la vista.

“¡Espere aquí, Master!”

Después de decir tal cosa, Saber saltó nuevamente a la niebla. Respirar en la niebla hacia que su cuerpo se sintiera un poco más pesado, pero Saber juzgaba que no resultaría un impedimento en este nivel.

Ella forzó sus oídos por el más mínimo sonido y blandió su espada de acuerdo a sus instintos. El mismo sonido de antes resonó—había golpeado un escalpelo que había sido lanzado.

“Wow. En verdad eres buena.”

Saber chasqueo su lengua ante la voz de la chica. La voz podía ser escuchada desde todas las direcciones y no podía encontrar su punto de origen en lo absoluto.

“Guárdate tus habladurías. ¿Qué de bueno tienen las palabras de un ‘personal de limpieza’ como Assassin que ni siquiera es un Espíritu Heroico? No, ni siquiera eres un personal de limpieza. ¡Solo eres una asesina, solo una homicida!”

“¿Oh? ¿Cómo es que lo supiste?”

“¿Qué—?”

La mente de Saber se congelo por un instante debido a la impresión.

“Nuestro nombre es Jack el Destripador. Hey, hey, hey, hey, ¿Acaso no nos dirás tu nombre?”

La voz susurraba directamente a su oído. Saber inmediatamente blandió su espada en esa dirección, pero no sintió ninguna resistencia contra su espada ya que meramente corto a través de la niebla. Pero justo ahora, el hecho de que hubiese averiguado el verdadero nombre de su enemigo era aún más importante.

—Se trataba de un incidente de hace ciento veinte años. La gente de Londres en Gran Bretaña había temblado a causa del terror. La gente que él había fijado como blanco eran prostitutas del lado Este. La cantidad de gente que había asesinado solo habían de hecho sido cinco, fue el primer asesino serial del mundo, aquel que dejo varias leyendas y misterios antes de desaparecer.

Basándose en la firma escrita en una carta publicada en los periódicos, la gente lo llamaba Jack el Destripador.

Solo había sucedido hace ciento veinte años atrás. Desde el punto de vista de otros misterios con conceptos firmes que eran mucho más antiguos, este Servant probablemente era el más frágil en ese respecto dentro de esta Gran Guerra del Santo Grial.

El Rey Arturo había salido en muchas campañas y había cumplido magníficos logros. La misma Mordred había grabado su nombre en la historia como el Caballero de la Traición. Otros Servants generalmente eran similares. Aunque sus eras y sociedades diferían, deberían de haber podido sobreponerse a batallas legendarias y lograron dejar sus nombres grabados en la memoria de la gente.

Pero—Saber ajustó el agarre de su espada y enfoco su mente.

¿Por qué alguien como este asesino había sido elevado a un nivel donde pudo ser invocada como un Servant?

…La única explicación posible era que la carrera del asesino había estado rodeada de demasiados misterios y llenó a la gente de demasiado terror. La gente podía emocionarse mientras veían pelear a un héroe. Podrían llenarse de coraje y luchar contra otros mientras preparaban sus puños. Pero esta chica era diferente.

Ella había grabado su nombre en el mundo de manera arbitraria, a través de la desesperación de la matanza. Si había gente que creyera en ella, seguramente solo serían asesinos similares.

Es verdad, ella era apropiada como Assassin. Sin ningún sonido o signo de su presencia, simplemente asesinaba a su blanco. No había nadie más especializado en matar Masters que ella.

Para Saber, esta niebla no era demasiada obstrucción. Sin embargo, a causa de la habilidad de la clase Assassin [Ocultamiento de Presencia], no podía sentir su presencia en lo más mínimo. Dado que la voz de Assassin resonaba alrededor de Saber, definitivamente debería de estar cera, pero—

“¡Ah, justo como pensamos! Eres una mujer ¿cierto?”

Saber apretó su mandíbula involuntariamente ante esas palabras.

“En ese caso—”

“Sí. En ese caso—”

“Hagámoslo.”

—Sonaba como si ella estuviese conversando con alguien más. Un sentimiento escabroso que Saber no había experimentado en mucho tiempo repto a través de su pecho.

Se trataba de miedo. Un asesino desconocido asechando en la oscuridad. Ella nunca pelearía de frente, siempre utilizaría ataques sorpresa, siempre tomaría la iniciativa. Si Saber predecía erróneamente su siguiente movimiento, se dirigirá instantáneamente hacia su propia muerte.

Así que— ¿qué debería hacer?

“…Ha. ¡¡No me subestimes, mocosa de mierda!!”

Una respuesta instantánea. Saber guardó su yelmo dentro de su armadura como si estuviese retirándose la piel por la cual reptaba el miedo. Al mismo tiempo que exponía su rostro de apariencia noble, levanto su espada en su mano y grito.

“… ¡Relámpago Carmesí!”

“——”

Si se encontraba en una oscuridad aterradora, lo único que tenía que hacer era disiparla con su propia luz. Concentrando todo su prana en su espada, esta comenzó a despedir relámpagos carmesíes a su alrededor.

La niebla se desvaneció literalmente—y Assassin miro a Saber con una expresión boqui abierta.

“Se terminó, Assassin. Si vas a gritar hasta satisfacer tu corazón, ahora es tu oportunidad. Una vez que te decapite te será imposible gritar.”

“No queremos eso. Nuestro estomago aún está vacío.”

Hablando como una niña ella sostuvo un cuchillo de carnicero en cada una de sus manos.

“Deberías de rendirte y huir,” dijo Saber con una sonrisa intrépida mientras media el momento para activar su [Explosión de Prana]. Dado que la niebla se había desvanecido, su cuerpo ya no se sentía pesado. Así que no habría forma de que Saber, el Servant de la clase más fuerte, cayera ante un asesino que no podía ocultarse en la oscuridad.

Observando la pelea desde lejos, Shishigou tenía una fe definitiva sobre ese punto. Sin embargo, había solo un factor que lo dejaba intranquilo. Después de salir de la niebla, él había sacado una pieza de equipamiento del bolsillo de su chaqueta.

Era la muñeca de un mono mágico bañada en cera mortuoria. En situaciones donde le era imposible moverse de su posición, él utilizaba esta muñeca para construir de manera veloz un Campo de Restricción que alejaba a la gente. No se trataba tampoco de una pieza de hechicería mal hecha. Esta muñeca reptaba alrededor de manera independiente como un ratón, y mientras lo hacía creaba un área completamente sellada como si cortara ese espacio de todo lo demás.

Aun no la había utilizado de esa manera, pero aun si estuviese en la intersección de las calles de Nueva York por la noche o de Shibuya en Tokio, estaba confiado de que podría alejar completamente a toda la gente de esa área. Aunque aún existían ojos además de los de la gente, como las cámaras, en esos distritos, así que no sería efectiva de cualquier forma.

—La fuente de esa incertidumbre era…

…el hecho de que ellos se encontraban en una situación de emergencia no favorable, dado que alguien había logrado irrumpir en este espacio donde todos además de él y las dos Servants femeninas habían sido alejados.

La palma de su mano dolía como si hubiese sido atravesada por agujas. Así es como Shishigou sentía que un intruso había penetrado su Campo de Restricción.

“¡Saber!”

Sus palabras explotaron en el aire mientras la situación crítica comenzaba a desarrollarse. El Saber Rojo y el Assassin Negro estaban cargando el uno contra el otro.

Saber tenía como objetivo blandir su espada desde arriba y cortar a Assassin a la mitad de un solo golpe con la fuerza de su impacto. Por otro lado, Assassin la retaba a un combate cuerpo a cuerpo nuevamente con movimientos tan suaves que se veían tremendamente tenebrosos. Su blanco era el cuello de Saber, un punto vital. Si el golpe de Saber era una ataque sobre humano que trascendía el reino del hombre, entonces Assassin había abandonado su humanidad de manera tan completa que había alcanzado el dominio de las bestias inhumanas.

—Ganare.

En el instante en que ella dio un paso adelante, Saber estaba segura de ello. No tenía ninguna duda de que su golpe generaría una herida fatal en Assassin. El momento, la velocidad, el poder; todo estaba en perfecta sincronía.

—Pero.

Al mismo tiempo, la mente de Saber estaba preocupada por el grito de Shishigou. Definitivamente había una razón para ese grito. Si no, no habría llamado su nombre. Cuando pensó en ello se dio cuenta con un escalofrió.

No sabía de dónde. Pero definitivamente alguien le estaba apuntando.

Un disparo lanzado desde una larga distancia. El enemigo probablemente era Lancer o Archer. De cualquier forma, ¡a este paso sería asesinada…!

Su cuerpo se movió antes de que su cerebro pensara en ello. Apenas pudo frenar la intensa carga hacia adelante y giro su cuerpo a la fuerza. Eso fue todo lo que podía hacer. Inclinando su cuerpo miró hacia la torre del reloj la cual era uno de los puntos relevantes de esta ciudad.

Ella la observo llena de sorpresa. Dos figuras estaban de pie en el pináculo de la torre del reloj. Iluminadas por la ligera luz de la Luna, ¡la persona que vio apuntando con un arco y una flecha hacia ella definitivamente era un Servant—!

En el siguiente instante, un impacto y un rugido estruendosos golpearon el cuerpo entero de Saber.

La flecha disparada impacto justo como había sido planeado. Pero el blanco no se había movido como se había planeado. Sin bajar su arco, Archer cargo su siguiente flecha.