Editing Toaru Majutsu no Index: URC Capítulo 2 (section)

===Parte 3===

Eso fue todo.

El alma de Saten Ruiko ahora estaba completamente fuera de su boca.

(Estúpida.)

Esta vez no estaba fingiendo.

Los ojos de Saten realmente se habían puesto en blanco mientras ella aullaba por dentro.

(¡¡Estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida!! E-es cierto que no pude ver la pantalla para comprobarlo. ¡Y es cierto que generalmente no reviso cada vez para ver si el flash está encendido! ¿¡La configuración automática decide que la habitación estaba lo suficientemente oscura como para necesitar la luz estroboscópica LED extra brillante!?)

Desafortunadamente, sus silenciosos lamentos no harían retroceder el tiempo.

-…

No hace falta decir que Uiharu Kazari habría notado el destello. Incluso si estuviera usando una gruesa máscara para los ojos y durmiendo una siesta en su asiento, perderse eso habría sido aterrador de una manera completamente nueva. Saten rápidamente soltó el teléfono y devolvió su brazo a su posición original. Pero eso no iba a convencer a Uiharu de que no pasaba nada. De hecho, no podía imaginar qué tipo de milagro llevaría a Uiharu a no vincular ese destello con ella.

No tuvo más remedio que cerrar los ojos y ver qué pasaba.

Los pasos se acercaron. Despacio. El sonido como del cuero tensado puede haber sido el de ella apretando dolorosamente al bastón de policía. En realidad, ¿Thermal Hand le permitiría liberar los límites de sus músculos manteniendo por la fuerza la temperatura de su cuerpo a un nivel que le proporcionara esa fuerza milagrosa que aparece en casos de emergencia? ¿¡Era realmente solo era Nivel 1!? La oscuridad lo hacía todo más aterrador, pero por mucho que a Saten le encantara la información, sabía que abrir los ojos ahora sería el último error que cometería.

(Ah, abh, abwababrabh.)

No habia nada que ella pudiera hacer.

En este punto, abrir mucho los ojos y atacar a Uiharu en un último esfuerzo podría ser una opción, pero le faltaba el coraje para intentarlo.

Trató de recordar algunos recuerdos más agradables para reunir todo el coraje que pudo.

El control emocional era crucial.

(Siempre fue muy fácil engañar a Uiharu con su falda y ropa interior. Ella llevaba unas lindas bragas de lunares ayer. Ah, ja, ja. Eh, je, je.)

-…

Sólo logró deprimirse al descubrir un posible motivo para que Uiharu la matara.

No podía imaginar cómo podría escapar de esto.

Había un poder invisible, un grueso muro de presión y un aura violenta que le decía que no tenía ninguna posibilidad. ¿Por qué Uiharu parecía tan intocable hoy?

Normalmente era tan distraída que Saten no tuvo problemas para acercarse sigilosamente detrás de ella y levantarle la falda.

El corazón de Saten latía con fuerza en su pecho.

Ya ni siquiera era una amenaza física. Algún peso invisible parecía haberse puesto del lado de Uiharu. Ella estaba segura de eso. Esa chica era una gobernante. Mientras permaneciera en esta habitación, sería una pequeña diosa que podría acabar con cualquier insignificante resistencia humana de un solo golpe. Pero este no era el tipo de diosa que se encuentra en un santuario sintoísta como aquel cuyo poder residía en el amuleto de buena suerte de Saten (que ella todavía atesoraba a pesar de insistir siempre en lo último y lo mejor de todo lo demás). Esto sólo podría describirse como una diosa malvada.

Sólo podía soportarlo con los ojos cerrados.

-Saten-san.

No había calidez en la voz de Uiharu Kazari.

Este fue uno de esos acuerdos en los que responder a la voz que te llamaba era un paso en falso. En términos de leyenda urbana, era como Aka Manto o Hasshaku-sama<ref>Aka Manto es un fantasma que, al ir al baño, aparecerá y te preguntara si quieres papel rojo o azul, pero ya sea que digas cualquiera de los dos o que no lo necesitas, te matara de algún modo. Hasshaku-sama es la leyenda de la mujer de 240 cm de altura que ataca a los niños.</ref>, donde responder te robaría el alma. Algo había salido seriamente mal cuando su estrategia se basó en algo tan mal definido como un alma.

(O-oh, no. ¿Siento que la sangre se me sube a la cabeza porque está usando Thermal Hand conmigo? ¿No puede matarme desde adentro si obliga a mi temperatura a permanecer en casi 42 grados? No, ya me estoy imaginando esto. Ella no me atacaría cuando cree que ya estoy muerta. O espera. ¿Qué será? ¡No puedo decirlo!)

Ya no podía controlar su corazón acelerado. Ella lo entendía, pero ¿la tensión extrema había provocado que algún tipo de hilo se rompiera y ahora estaba teniendo una ligera experiencia extracorporal?

-Saten-saaan. Sé que estás mirando.

Uiharu llamó de nuevo.

(No, ella está mintiendo. ¡¡No sigas el juego! ¡¡Ella no está usando Thermal Hand!!)

Quizás Uiharu no esperaba una respuesta. Es posible que haya estado observando de cerca cualquier movimiento de los párpados o los hombros. Saten ya no podía decir lo que estaba pensando Uiharu. Incluso era posible que estuviera mirando al vacío y hablando con algún sumo sacerdote o algo así. Oh, pero una explicación completamente ilógica era aún más aterradora de alguna manera.

Uiharu no la llamó por tercera vez.

Porque otro destello brillante surgió del teléfono.

Después de una breve pausa, otra.

Continuaron así. Uiharu finalmente se dio cuenta y expresó su pensamiento en voz alta.

-¿Estaba con temporizador?

-…

Ella se lo había creído.

Saten escuchó un crujido de tela. No podía estar segura con los ojos cerrados, pero Uiharu probablemente se había agachado y levantado el teléfono nuevamente.

Saten había activado el cronómetro justo antes de soltar el teléfono. Si había una razón para que la cámara se disparara sola, había una explicación para el flash que no involucrase la supervivencia de Saten.

-Hm. -Dijo Uiharu después de un largo rato. Ella no confió en ello de inmediato. -Y pensé con seguridad que la había atrapado en mi trampa al atenuar gradualmente la iluminación inteligente de la habitación.

(Wow, ¿entonces eso no fue solo un accidente? ¿¡Cuándo nos adentramos en un mundo de engaños y batallas con superpoderes, Uiharu!?)

Por supuesto que Uiharu tendría cuidado. Ella también estaba arriesgando todo aquí.

Uiharu parecía estar al borde de creerlo, pero si esa balanza se inclinaba en la dirección equivocada, podría simplemente golpear la cabeza de Saten con ese pesado bastón de policía o con la esquina del teléfono.

Finalmente, la voz de Uiharu llegó desde más allá de la oscuridad.

-¿Debería comprobar las fotos?

-¿?

-Si ese destello inicial acabó como una fotografía del techo, no hay nada de qué preocuparse. Pero si tomó una foto desde cualquier otro ángulo, el cronómetro por sí solo no puede explicarlo.

-¿¿¿¡¡¡!!!???

Oh, no.

¡¡Ay no, no, no!!

Saten no pudo cerrar los ojos y reprimir el temblor por mucho más tiempo. Sintió más tensión que en cualquier otro momento de ese día.

Uiharu tomó su mano.

-¿Es un bloqueo de huellas dactilares? No. Tampoco usa sus ojos ni su rostro. Mmm. Saten-san debe haber sabido que una contraseña antigua sigue siendo la opción más segura cuando se trata de problemas cara a cara.

-…

Saten no sentía que hubiera escapado del desastre todavía.

Uiharu parecía terriblemente despreocupada por el fracaso de su plan.

La pantalla de bloqueo del teléfono era bastante confiable frente a una persona común, pero Uiharu Kazari estaba lejos de ser común. Probablemente era la principal especialista en delitos cibernéticos de Judgement. En otras palabras, ella era una hacker muy habilidosa. Podría fácilmente superar el bloqueo de contraseña de un teléfono comercial.

Y no hace falta decir que el ángulo de esa foto inicial no encajaba porque Saten había estado sosteniendo el teléfono hacia la puerta. Una vez que Uiharu encontrara esa foto, sabría con certeza que Saten todavía estaba viva y que ella misma había tomado la foto.

En pocas palabras, Saten quedaría arruinada una vez que se analizara su teléfono.

Entonces Uiharu terminaría el trabajo con esa arma contundente extragrande. Muchas aplicaciones de entrenamiento cerebral prometían hacer que tu cerebro fuera más flexible, pero Uiharu iba a adoptar un enfoque mucho más literal al respecto.

Saten se preguntó por qué su mente intentaba hacer bromas raras en situaciones extremas como ésta. Tal vez el terror era tan grande que gritaría si lo enfrentara directamente.

(¿¡Qu-qu-qu-qué-qué hago!?)

Se obligó a abrir un poco los ojos para ver lo que podía ver.

Uiharu parecía estar conectando el teléfono de Saten a su computadora con un cable. ¿Y qué si ella destruyó la computadora? No se atrevió a mover la cabeza, así que usó sólo los ojos para mirar a su alrededor. Había gruesos cables enredados en el suelo. Los cables de alimentación del microondas, la cafetera, etc. estaban conectados a una regleta. Uno por supuesto conectado a la computadora.

Esto funcionaría.

¿Pero podría hacerlo?

Los cables estaban bastante tensos. Si extendiera la pierna y la atrapara con el pie, podría sacar todo el enchufe de la pared. ¿Qué parte de la computadora estaba funcionando cuando ese LED parpadeaba? Ella no lo sabía, pero pensó que dañaría la computadora si se quedaba sin energía en medio de ese trabajo.

Pero espera.

¿Eso realmente funcionaría?

No importaba lo que eligiera, la cobardía se apoderaba de ella y la golpeaba en el corazón.

No se garantizaba que cortar la energía dañara la computadora. Tal vez lo sería para una computadora normal, pero ¿qué pasaría si las de Judgement fueran especialmente resistentes? Uiharu lo sabría, pero Saten no podía exactamente preguntarle y tampoco tenía su teléfono para buscarlo. Estaba estancada. Su mente daba vueltas infructuosamente y no podía rechazar la preocupante posibilidad.

Además.

Incluso si ella desconectara el cable de alimentación y apagara la computadora, ¿no se preguntaría Uiharu por qué el cable se había desenchufado? Saten sólo estaría atrayendo sospechas hacia ella misma. Pero si no lo hacía, era sólo cuestión de tiempo antes de que Uiharu atravesara la pantalla de bloqueo. Estaba condenada si no escapaba de la amenaza inmediata, por lo que no podía quedarse sentada preocupándose por la amenaza que vendría después de eso. ¡Sólo tenía que hacerlo! ¡Incluso si todas las opciones disponibles para ella fueran profundamente defectuosas!

Abandona tu pesimismo, Saten Ruiko.

Renace.

Si quieres escapar de esto y seguir viviendo, ¡¡debes actuar!!

(Kh.)

Mientras hacía todo lo posible para no perturbar el charco de sangre falsa en el suelo, gradualmente reunió fuerza en su pierna. La estiró lentamente, haciendo todo lo posible para no hacer ningún ruido. No le gustó que se le subiera la falda mientras lo hacía, pero podría preocuparse por eso más tarde. Concentró su mente en el dedo gordo del pie. ¿Podría alcanzar el cable de alimentación que estaba en el suelo? Apenas. Iba a estar cerca. De hecho, ¡estaba tensando tanto la pierna que estaba a punto de tener calambres!

Tenía que tener cuidado.

Una sola gota de agua podría arruinarlo todo.

Pero fue interrumpida por otro giro inesperado de los acontecimientos. Este vino desde fuera de su campo de visión. El fuerte ruido no procedía del interior de la habitación. Probablemente provenía del pasillo afuera de la puerta.

-¿Uiharu? Es casi la hora de salir. Debes prepararte para el entrenamiento conjunto de hoy con Anti-Skill. Estamos haciendo un simulacro de investigación de la escena del crimen de un robo a una tienda de conveniencia. Mi familia nos dio una tienda entera para trabajar.

(¿¡Eh!? ¿¡Sh-Shirai-san!? ¿¡Por qué tuvo que aparecer ahora!?)

El corazón de Saten se estaba acercando a su límite, pero luego recordó que Shirai era miembro de Judgement y visitaba la Rama 177 con bastante frecuencia. Una forastera como Saten era la que no tenía por qué estar aquí.

Además.

No podía dejar que la sorpresa la distrajera. ¿No era ésta la oportunidad que necesitaba?

Armado con ese bastón de policía más largo que una espada de bambú, Uiharu era el dios de esta sala, pero esa divinidad localizada no significaría nada contra una Teletransportadora de Nivel 4 o la Railgun de Nivel 5. Sólo era válido contra una persona común y corriente como Saten. Uiharu podría romper la conservación de la masa para ocultar toda la evidencia de su crimen, pero no podría derrotar a Shirai Kuroko en un conflicto directo.

(¡¡Sí!! ¡¡Mi salvador finalmente ha llegado!! Así es. Hay más en este mundo que terror. ¿¡Shirai-san siempre ha sido como Templeborn T-san<ref>Templeborn, también llamado T-san, es el arquetipo de exorcista o cazador de Yokais que aparece en leyendas urbanas.</ref>!?)

Entonces podía esperar.

Podría cerrar los ojos, tumbarse en el suelo y dejar que todo transcurriera.

Sin hacer un solo crujido de tela.

Equivocarse ahora y llevar al personal de la policía a la cabeza 3 segundos antes de que llegara la ayuda sería demasiado trágico para considerarlo. Lo mejor era ni siquiera intentarlo.

Y Uiharu parecía nerviosa de repente.

-¿Eh? ¿Ehh? ¿¡S-Shirai-san!?

De hecho, su voz se elevó. Su voz era temblorosa y llorosa.

El dios de la destrucción se había desinflado rápidamente.

Ella era la habitual Uiharu parecida a un ratón otra vez.

Shirai Kuroko no se dio cuenta de todo esto, por lo que la puerta se abrió sin siquiera llamar.

-¿Qué estás haciendo aquí, Uiharu? Necesitas prepararte para-

¡¡Thump!! ¡¡¡¡Paff!!!!

…………………………………………………………………………………………………………………………

(¿Eh?)

Esta vez, el tiempo realmente se detuvo para Saten Ruiko.

Tenía los ojos todavía cerrados, por lo que empezó a preguntarse si el mundo entero se había desvanecido a su alrededor.

Era así de silencioso.

¿Cuáles habían sido esos sonidos? ¿¡Qué fue este doloroso silencio!? ¿¡Su salvadora, la Santa Shirai Kuroko, había sido noqueada por la vara de policía!? Seguramente no, ¿verdad?

Luego escuchó el esfuerzo de un objeto sólido bajo tensión. Lo más probable es que se tratara de la vara policial de plástico ecológico que alguien apretaba con fuerza.

El Thermal Hand de Uiharu era solo de Nivel 1, pero ¿qué pasaría si pudiera alterar la temperatura de su cuerpo con agua caliente o el aire acondicionado y luego mantenerla así para activar o desactivar libremente los limitadores de sus músculos?

(¿Eh? ¿Eh?)

Es posible que Saten haya cometido un grave error.

Incluso un Nivel 4 seguía siendo humano. Un golpe inesperado en la cabeza los mataría igual que a cualquier otra persona. Era posible que ella hubiera podido evitar esto. Tal vez debería haberlo arriesgado todo y levantarse para decirle a Shirai que tuviera cuidado.

Pero ya era demasiado tarde.

Ese barco había zarpado. No había vuelta atrás a esa encrucijada.

-Ja. Ja ja.

Escuchó una risa seca.

La voz de Uiharu Kazari sonaba inestable ya que no hablaba con nadie en particular.

-No puedes simplemente irrumpir sin llamar, Shirai-san. Afortunadamente, deshacerse de dos cuerpos no es mucho más difícil que de solo uno.

(O-oh, no. Di que no es así, Shirai-san.)

Saten ya no pudo reprimir el temblor.

(Si ella puede noquear a un Nivel 4 como Shirai tan fácilmente, ¿¡qué posibilidades tiene una Nivel 0 como yo!? ¿¡Q-qu-qué-qué hago!? ¡¡Por favor, dime que esto no está sucediendo realmente!! ¡No confíes en las clasificaciones de nivel de poder y busques la ayuda de Konori-senpai o Misaka-san! ¿Pero quién queda tras eso? ¿Haruue-san? ¿Edasaki-san? ¡Incluso aceptaría la ayuda de Janie o Febrie ahora mismo<ref>Son personajes de Railgun, aunque honestamente pensaba que Janie y Febrie no eran canónicas ya que salieron en el relleno de Railgun S.</ref>! ¡Oh, nunca debería haberlas dejado ir! ¿¡Es este mi castigo por olvidar completamente que existieron recientemente!? De todos modos, necesito alguna persona de buen corazón de un mundo más honesto, ¡¡o esto sólo va a empeorar!!)

En realidad, ¿no se suponía que Uiharu Kazari era una de esas personas reconfortantemente buenas? Cuando el divertido de la fiesta se descarrilaba por completo, una oscuridad pegajosa llenaba rápidamente el mundo entero. Fue como hundirse en un pantano.

La oscuridad de sus ojos cerrados la estaba asustando demasiado ahora. No podía permanecer así para siempre, así que lentamente los abrió un poco mientras aún estaba acostada de lado.

A sólo unos centímetros de distancia, la chica de dos coletas yacía completamente inmóvil con sangre goteando sobre sus ojos abiertos.

Su rostro ya ni siquiera era simétrico.

Un lado parecía extrañamente sombreado porque estaba abollado en el costado.

Algo rosado y más espeso que la sangre rezumaba detrás del ojo de ese lado.

No había duda de ello. ¡¡Shirai Kuroko tenía que estar muerta!!

-Bh-

Ese era su límite.

Balbuceos sin sentido abandonaron su boca antes de que su mente pudiera seguir el ritmo.

-¡¡Bwbhbjhahaerh!! ¿¡Bhjfhwieurhbng!?

Shirai estaba muerta.

¿¡Eso significaba que estaba respirando el mismo aire que rodeaba a un cadáver real!?

¿Y las reglas de esta pequeña tierra santa le impidieron derrocar a su amo? Ella ya había visto lo que le pasaba a cualquiera que la desafiara.

No podía dejar que el dueño de esta habitación supiera que todavía estaba viva.

Al darse cuenta de que acababa de gritar en voz alta, se puso rígida y tembló violentamente.

¿Qué podría hacer ella ahora? ¿¡Qué opciones quedaron!?

-Ja ja. Saten-san.

Ella estaba asustada.

Miedo de dar la vuelta.

Pero ella seguía siendo la misma amante de las leyendas urbanas que nunca estaba satisfecha hasta haber reunido toda la información. Ella eligió mirar detrás de ella en lugar de encontrar su final sin saberlo.

Ella se volvió en silencio.

Una niña salpicada con la sangre de su víctima tenía una sonrisa incongruentemente dulce en su rostro.

Saten escuchó un sonido sordo y tenso.

La muchacha sonriente apretaba en su mano una vara de policía empapada de rojo. Thermal Hand de Nivel 1 demostró estar lejos de ser inofensiva y cualquier cosa menos ordinaria, ya que mostró sus colmillos aquí.

-Sabía que tenías que estar todavía viva. Y ya es demasiado tarde para escapar☆