Editing Toaru Majutsu no Index: ITEM2 Capítulo 3 (section)

===Parte 12===

Tachiuo Mary había sido derrotada.

Takitsubo Rikou miró en silencio el resultado por un momento, con una ligera nube sobre su rostro.

-¿Mugino?

Ninguna respuesta.

La mano de Mugino cayó sin fuerzas al suelo mojado. Ella no reaccionó en absoluto a la llamada de Takitsubo. Mugino Shizuri estaba inconsciente. ¿Estaba completamente agotada después de ese ataque final o se había desmayado antes de eso?

(¿Qué fue eso hace un momento?)

Takitsubo decidió que necesitaba ocultar lo que había sucedido, incluso del resto de ITEM. Al mismo tiempo…

-¡¡Cough!! ¿¡Hack, coff!?

Ni siquiera tuvo tiempo de taparse la boca. Ella se dobló por reflejo y tosió mucha sangre.

Este fue el resultado de todo el Body Crystal que había tomado.

Tenía que haber un costo. El sonido de la reducción de su esperanza de vida pareció resonar a través de sus huesos.

Sin embargo, ella lo había superado.

Había usado su poder para las personas importantes para ella.

Tachiuo Mary debía haber estado alcanzando la misma cima. Esa tímida estudiante de preparatoria había luchado tan duro, pero todavía no estaba claro qué ganaba ella con esto. ¿De qué le servía realizar el Proyecto Angélica? Ese no podría ser su objetivo. Ese monstruo probablemente sólo quería pasar tiempo con Ainame Caroline.

Al igual que Takitsubo no dudó en consumir su propia vida sin ningún beneficio directo para ella misma.

Tachiuo María era similar.

-Ah…

-Despierta, Mugino. Ella todavía respira.

-Ow… Esa herida es fatal. Simplemente no puede desangrarse y morir de inmediato porque la herida intestinal fue cauterizada. La batalla ya ha terminado.

Frenda y Kinuhata estaban... todavía inconscientes.

Mugino y Takitsubo se aseguraron de que todavía respiraban y tenían pulso, pero no reaccionaron ante una ligera bofetada en la mejilla. Tampoco se movieron con la lluvia torrencial que caía sobre ellas. Necesitarían sales aromáticas más especializadas para despertarlas.

-Takitsubo. Un laboratorio como este seguramente tendrá carbonato de amonio por alguna parte. Podemos separarnos y...

-Mugino.

Takitsubo interrumpió para dar una advertencia con el cabello mojado pegado a sus mejillas.

Mugino lo notó un momento después.

La lluvia había estado cayendo a cántaros desde que arrancaron el techo, pero había cesado.

Probablemente eso no era más que el fenómeno natural ordinario de entrar en el ojo de la tormenta, pero se sentía más como si incluso ese desastre natural masivo estuviera conteniendo la respiración por miedo a cierta chica.

Sí, alguien se acercaba desde el final del pasillo. Era la niña genio de 10 años con el traje tóxico que le quedaba mal a su cuerpo terriblemente pequeño.

Era Ainame Caroline.

-Espera. ¿Tachiuo-chan? Maldita sea, ¿realmente perdiste? Eso es lo que yo llamo patético. Supongo que incluso a ti te costó enfrentarte a las cuatro a la vez.

-Ugh. -Gimió Tachiuo Mary, todavía incapaz de levantarse del suelo.

Pero aun así logró esbozar una débil sonrisa detrás de su máscara.

-¿Lo encontró, Lady Carol?

-Lo hice.

-Bien. Entonces tal vez esto valió la pena…

Tachiuo Mary sonrió a pesar de que le faltaban órganos.

Ella era el tipo de persona que podía sonreír incluso ahora.

La pequeña gyaru marrón asintió rápidamente. Metió la mano en el bolsillo de su falda excepcionalmente corta y sacó algo demasiado anticuado para un laboratorio de última generación.

Ella sostenía una cinta de casete.

-Mientras las mantenías ocupadas, accedí a través del servidor personal en la parte de atrás. En momentos como éste, deberían aprender una lección de lo que hacen las grandes corporaciones cuando respaldan la información personal que obtienen de decenas de millones de personas con sus tarjetas de puntos: si deseas realizar una copia de seguridad segura de sus datos más importantes, deberías hacerlo con una linda cinta magnética digital☆ Los discos duros que se venden con descuento en las tiendas de electrónica son todos memoria no volátil disfrazada, así que realmente no confiaría en ellos si fuera tú.

¿Podría Ainame Caroline controlar su servidor personal desde cualquier computadora del laboratorio?

Hizo girar el casete digital lleno de sus secretos de investigación como si estuviera realizando un truco de cartas y luego lo insertó entre el alambre envuelto en el centro del pecho plano de su bikini.

-Jajaja. Me hace reír. Ahora tengo los planos completos para el equipo médico exclusivo del laboratorio. Sinceramente, es triste que todo ese esfuerzo se haya centrado en este pequeño casete digital. Pero si combino esto con el mapa de ADN de Mugino Shizuri, puedo continuar mi investigación y completar Angélica sin necesidad de este estúpido laboratorio. Ahora es sólo cuestión de tiempo.

-¿Y cómo vas a encontrar ese tiempo? El único momento que tienes es el tiempo que te queda de vida. Eso es algo valioso. Un trabajador a tiempo parcial no repartirá muestras gratis en la esquina de la calle. -Escupió Mugino, ignorando que estaba tan mojada que su ropa interior se veía a través de su ropa. -Incluso con ese gran agujero en el estómago, ella todavía tiene que pesar el doble que tú. ¿Piensas que podrías escapar de mi Meltdowner mientras luchas por arrastrarla con tus delgados brazos?

Ainame Caroline inclinó un poco la cabeza.

Hizo girar su teléfono con orejas de conejo en una mano y miró hacia abajo.

-Tachiuo-chan.

-¿…Sí?

-Gracias por todo.

Incluso a distancia, Mugino escuchó claramente el horrible sonido de un cerebro friéndose.

Las correas de la máscara se soltaron de las orejas de Tachiuo Mary.

Pero ella ya no se movía.

Una línea de sangre roja goteó silenciosamente desde la comisura de su boca expuesta.

Ainame Caroline tenía una forma de Pensamiento-grafía. Según el “hospital” al que ITEM había llevado a su conductor delincuente, ella usó una tinta de hierro especial para grabar un patrón aleatorio en la superficie del cerebro, obstruyendo los nervios craneales y evitando así la conciencia.

Con su intestino reventado y múltiples órganos desaparecidos, Tachiuo Mary no habría podido salvarse de todos modos.

Pero Ainame Caroline había dudado muy poco.

-Ah, ja, ja☆ Y ahora una niña tan pequeña y linda como yo puede escapar ágilmente. Problema resuelto.

-¿Qué demonios te pasa?

-Patético. ¿Podrías recordame quién la hirió fatalmente? Por cierto, esa sangre que gotea de su boca no es culpa mía. Deja de actuar con rectitud cuando eres tú quien la mató. Eso es simplemente aburrido.

Ainame Caroline hizo girar su teléfono con orejas de conejo resistente a explosiones con una expresión gélida en su rostro.

Ella no se detuvo solo con uno.

Siguieron más sonidos chisporroteantes. Esta vez de las inconscientes Frenda Seivelun y Kinuhata Saiai. Acabar con un enemigo caído antes de que pudiera levantarse de nuevo puede haber sido una práctica estándar en el lado oscuro, pero ese no era el punto.

Eso eliminaba la posibilidad de retirarse.

Ni siquiera encontrar sales aromáticas de carbonato de amonio en el laboratorio ayudaría ahora. Esas dos nunca volverían a despertar a menos que se quitara el poder de esa pedazo de mierda o ella fuera borrada de la faz de la Tierra.

-Mugino.

Takitsubo intentó decir algo, pero Mugino ni siquiera miró en su dirección y extendió una mano para detenerla.

Dirigió una leve sonrisa hacia la fuente de todo este problema.

-¿Qué opción tengo? Tachiuo-chan se rompió antes de que pudiera convertirla en una completa Angélica. Ella perdió las funciones en las que puedo confiar, así que no veo ninguna razón para mantenerla cerca.

-…

Mugino consideró esto mientras miraba a Tachiuo Mary colapsada e inmóvil.

Tal vez esto estuvo mal ya que ella fue quien le había dado a esa chica la herida fatal.

Pero algo en esa chica le recordaba al mayordomo Mujinayama, quien estaría de su lado en cualquier momento.

No había nada en esto para Tachiuo Mary.

Probablemente no le importaba mucho si el Proyecto Angélica se completaba o no.

Y, sin embargo, había luchado hasta el final. A pesar de la falta de cualquier beneficio personal real. No estaba claro qué conexión tenían esas dos o qué deuda podría tener Tachiuo Mary con Ainame Caroline, pero en última instancia, solo había una razón por la que Tachiuo Mary había aceptado consistentemente más riesgos sin ningún beneficio personal.

Ella había querido estar con ella.

Esa pequeña investigadora se había topado con un obstáculo en el Proyecto Angélica, destruyó algunos espers prometedores en su impaciencia por volver a la progresar, fue expulsada del laboratorio y se encontró en el lado oscuro sin ningún lugar adónde ir. Esa era a quien Tachiuo Mary había conocido. Pero en lugar de simpatizar con la niña con problemas, Tachiuo Mary la había respetado por tener lo que no tenía. Por eso había agarrado la manita ofrecida. Había visto a Ainame Caroline como alguien digna de admirar y había creído que ayudarla pondría una sonrisa en esa carita. La tímida y tímida estudiante de preparatoria había reunido mucho coraje por alguien que no fuera ella misma.

Ella misma había decidido cómo utilizar su vida.

Ella había decidido desechar sus propias posibilidades, darle la espalda a la ley y convertirse en una villana que aun así había elegido actuar como un cebo para su pareja.

Esa idiota había tomado la decisión sin dudarlo ni arrepentirse.

-Es cierto que Tachiuo-chan era un espécimen valioso, pero puedo crear una nueva Angélica con tu mapa de ADN y los planos del equipo en esta cinta de casete. Y entonces, como dije, es sólo cuestión de tiempo. Esto sólo retrasa lo inevitable. Una vez que investigue las irregularidades del ADN, eventualmente encontraré una definición científica de la vida y el alma. Je, ja, ja. Me hace reír tanto que me tomó tanto tiempo recuperar lo que esencialmente había creado☆.

Si no entendías el valor de la vida y la mente de las personas, lo mejor era evitar meterte con ellas. Pero esta chica los había pisoteado. Ya fuera enemiga o aliada, ella había destruido las vidas y las mentes de las personas que habían encontrado sus propias razones para arriesgar sus vidas y luchar en el lado oscuro.

Los estafadores más peligrosos no necesitaban un cambio consciente para empezar a mentir.

Ella no dudó ni se arrepintió de haber eliminado a uno de los suyos.

¿Era eso insuficiente?

¿Todavía no era razón suficiente para comenzar una pelea entre grupos del lado oscuro?

Ese sucio pedazo de mierda no merecía existir ni siquiera en el infierno que era el lado oscuro.

Incluso si este no fuera el final que Tachiuo Mary hubiera querido.

-¿Los humanos no valen nada para ti, investigador de mierda?

-Los humanos son sólo conjuntos de funciones. Tomemos como ejemplo a mi hermana muerta. Ella era alguien que se levantaba temprano todos los días para hacerme un almuerzo temático. Esa era una de sus funciones y por eso la respetaba.

Esa niña deseaba sinceramente aprender qué era la vida humana.

Ella todavía no tenía una respuesta en ese momento así que sonrió aquí.

No importaba qué tipo de historia de fondo lacrimógena tuviera, nada cambiaría el hecho de que este monstruo era una mala persona de principio a fin. Con personas realmente malas, no era necesario considerar la posibilidad de que algún evento especial les hiciera cambiar de opinión.

Ni siquiera Mugino engañaría a los compañeros que la apoyaban.

Era despiadada cuando se trataba de traidores, pero eso era una señal de cuánto odiaba a los mentirosos y farsantes.

Pero Ainame Caroline no se había preparado para engañar maliciosamente a su enemigo, ni se sentía culpable por traicionar a sus aliados. Ella simplemente no tenía moral y tenía un gatillo muy fácil cuando se trataba de mentir.

Ella no merecía el título de villana.

Ella era simplemente una desgraciada.

¿Qué pasaría si alguien como ella completara Angélica y obtuviera la capacidad de aumentar o disminuir libremente la cantidad de Nivel 5?

Era poco probable que señalara la llegada de un nuevo mundo perverso.

Y no porque el ganador escriba la historia. Sólo conduciría a una desgracia, jugar con vidas y consumirlas por diversión.

Sólo significaría más escenas sangrientas de ese tipo.

-En realidad me estás haciendo lucir decente. -Dijo Mugino. -Si eso no es una señal de detenerse, no sé qué lo será.

Ainame Caroline era investigadora.

Sin su cerebro brillantemente roto, Meltdowner de Mugino nunca se habría completado. No importa cuánto se odiaran, eso era innegable. Mugino necesitaba agradecer a esa chica por permitirle reinar sobre el lado oscuro y apoyar su vida y sustento como un raro Nivel 5.

Pero este era un tema aparte.

Ningún vínculo causal entre un Nivel 5 y su investigador podría compensar lo que había sucedido aquí. Como villana del lado oscuro, esto no era algo que pudiera dejar pasar.

Mugino nunca perdonaría a alguien que se burlara de las personas que ella había aceptado como dignas.

Tachiuo Mary había sido una rival respetable. Eso la hacía digna.

Frenda Seivelun y Kinuhata Saiai tenían las habilidades necesarias para cuidarla. Eso las hizo dignas.

Entonces, ¿qué haría ella ahora?

¿Era esa siquiera una pregunta en este momento?

-Takitsubo.

-¿Sí?

-Cuida de Frenda y Kinuhata. Si el carbonato de amonio no las despierta, al menos mantenlas a salvo. Predecir líneas de movimiento y fuego es tu especialidad, ¿verdad? No te quedes en un solo lugar. Arrástralas a las dos si es necesario.

-¿Qué pasará contigo?

-Borraré este pedazo de mierda de la faz de la Tierra. No estaré satisfecha hasta no quedar ni una sola mota de polvo.

Mugino ni siquiera necesitaba pensar en ello.

Se tronó el cuello antes de continuar.

-Porque eliminar elementos peligrosos en Ciudad Academia es nuestro trabajo como ITEM.