Editing
Zaregoto (Español): Volumen 1: Capítulo 2.1
(section)
Jump to navigation
Jump to search
Warning:
You are not logged in. Your IP address will be publicly visible if you make any edits. If you
log in
or
create an account
, your edits will be attributed to your username, along with other benefits.
Anti-spam check. Do
not
fill this in!
==4== De camino a la habitación de Kanami-san nos cruzamos con Yayoi-san. Quise saludarla pero había algo que te decía que era mejor no acercarse, así que perdí la oportunidad. Continuó caminando en dirección opuesta. Habíamos pasado al lado uno de otro pero era como si no se hubiese percatado de nuestra existencia siquiera. —Me pregunto en que anda —dijo Kunagisa—. Hay algo extraño en ella. —Parece preocupada por algo. O quizás solo está sumida en sus pensamientos. —Bueno. Quizás estuvo mirando en la habitación de Kanami-chan, ¿sabes? Quizás tuvo la misma idea que nosotros. Resolver el caso rápidamente para que pueda irse a casa. —Sí. Quién sabe. Es la que más tiempo ha estado aquí, ¿verdad? Dudo que de repente empaquete y se marche. —Eh, quizás. Pero personalmente, yo odio las islas en las que suceden asesinatos. —Me pregunto por qué. Justo antes de que nos dispersásemos del comedor, Iria-san había proclamado una regla. «Hasta que Aikawa-san llegue en seis días nadie abandonará la isla. Todos somos sospechosos, incluida yo». En otras palabras, Akane-san no era la única que estaba siendo recluida. Y no era solo curiosidad lo que motivaba a Kunagisa a ahondar más. Quería irse a casa como tenía planeado. Tan vaga como era, era extrañamente quisquillosa con sus planes. —Bueno, de cualquier forma, está bien. Desde luego, no me importaría que Yayoi-chan resolviese el caso por nosotros. —No creo que sea eso en lo que está metida. Tenía ese aire de melancolía y pesadumbre. No puedo evitar preguntar si se estaba deshaciendo de alguna prueba o algo. —Eso desde luego nos supondría un problema —dijo Kunagisa, mirándome a través de la cámara digital—. Démonos prisa y comprobémoslo. La puerta de Kanami-san permanecía abierta. Podías ver el interior de la puerta abierta hacia afuera. Nadie parecía estar alrededor. Me pregunté que estarían haciendo los demás, excepto Akane-san, quien supuestamente estaba en la habitación de almacenamiento. Pero decidí ignorar esos pensamientos de momento. La gente hará lo que le dé la gana siempre que se lo permitan. Eso era cierto en la isla y era cierto en cualquier otro sitio. La habitación olía a disolvente de pintura como siempre, pero la pintura parecía estar prácticamente seca en estos momentos. El cuerpo de Kanami-san permanecía en el mismo sitio que esta mañana y por lo que parecía seguía igual. —Echémosle un vistazo… Hay algo terriblemente… cómico sobre un cuerpo decapitado. Lo que hace que los cadáveres sean siniestros y terroríficos es esa cara inexpresiva, pero sin una cabeza que muestre esa cara, el miedo y el terror son reemplazados por hilaridad. Es como mirar a un intento fallido de un maniquí o algo por el estilo. El río de mármol. El abrigo de Kunagisa permanecía justo en medio. —Por cierto, sobre el abrigo. ¿Cuánto te costó? —Era parte de un conjunto de dos piezas que rondaba los veinte mil, creo. —¿Dólares? —No, yenes. Vaya, un precio normal. Estaba sorprendido. —Bueno, deberíamos entrar. —Intenté dar el primer paso, pero me agarró de la manga como había hecho por la mañana—. ¿Qué pasa ahora? —Intenta saltar. —¿Qué? —Vamos. Es un experimento. Coge un poco de impulso desde aquí y mira hasta dónde puedes saltar el río de pintura. Tu complexión física no es tan mala, ¿no? —Tampoco tan buena. —Inténtalo. —Está bien. Aceleré un poco e hice mi mejor esfuerzo, pero como era de esperar no pude superar el río. Aterricé con los dos pies, sólo un poco más allá de la mitad. —Eso es todo lo que vas a conseguir de mí. —Vaya. —Kunagisa cruzó pisando sobre su abrigo—. Si ni siquiera tú puedes hacerlo, Shinya-san es el único que tendría una oportunidad de conseguirlo. Es el único hombre aparte de ti. —Sí, pero las criadas también parecen capaces, si soy sincero. Quiero decir, transportaron todo tu equipaje, incluidos los PCs y la estación de trabajo. Y no son precisamente ligeros. —Ya, pero son pequeñas. Es una cuestión de anchura. Aunque la gente dice siempre que las habilidades coinciden con las necesidades. Supongo que ese detalle es un poco turbio. Ahora veamos qué pasa con Kanami-chan —se acercó al cuerpo de Kanami-san con la cámara en mano. Parecía estar particularmente interesada en examinar el cuerpo mientras que yo estaba más preocupado por los lienzos de Kanami-san. Había varios tirados por el suelo, incluyendo el cerezo en flor que había destrozado, al igual que una nueva versión. Temblé al verlo. Incluso yo, que no tengo más que un ligero interés en el arte y la estética, podía negar que lo que estaba observando era una pura e inmaculada belleza. Y ahí estaba el dibujo para el que había hecho de modelo. Kanami-san había prometido dármelo, pero no podía aceptar algo como esto. Después de todo, no tenía nervios de acero. —Probablemente sea una chorrada pero… Fui a recoger la pintura pero me detuve. Podría ser malo dejar huellas. Aunque también podría no importar. ¿Eh? —Oye, Tomo. —¿Sí? —¿No hay algo extraño en esta pintura? —¿Te refieres a tu retrato? ¿A ver? ¿Qué hay de extraño? Solo es una pintura corriente. Desde luego el gusto de Kunagisa no era el más ordinario del mundo, pero eso estaba fuera de contexto. Algo sobre esta pintura estaba fuera de sitio, de una forma molestamente sutil. No era algo sobre la propia imagen, solo ese extraño sentimiento de absurdidad que de alguna manera evocaba. —Bueno, de cualquier forma, sácale una foto, ¿quieres? Hay algo que me inquieta. —De acuerdo. Yo aún no he encontrado nada inusual por aquí. Parecía estar inspeccionando el cuerpo de Kanami-san. —¿De verdad? —le dije dirigiéndome hacia ella. —Sí. No soy profesional, después de todo. La causa de la muerte es un misterio, y tampoco puedo determinar la hora de la muerte. Sin un forense es probablemente imposible. Si solo Iria-chan hubiese invitado también a un genio médico. Como Black Jack, sabes, o algo por el estilo. Aunque aún con un forense sería bastante difícil sin la cabeza del cuerpo. —Supongo que no vamos a encontrar nada después de todo. —Sí. —Levantó el cadáver por debajo del brazo. Incluso hace años no tenía reparos en tocar un cuerpo sin vida—. Esto me trae recuerdos, ¿sabes? Es justo como los viejos tiempos. —Sí, tienes razón, pero… A mí no me lo parece. Es como si estuviese viendo un cuerpo sin vida por primera vez otra vez. Me lleva un rato molestando. Tenía ese sentimiento de desconcierto inexplicable. Como cuando encuentras una cicatriz en tu cuerpo que no recuerdas haberte hecho. —Es jamais vu. —¿Que es qué? —El contrario de déjà vu. Quiere decir que sientes como si estuvieses haciendo algo por primera vez aunque en realidad lo has hecho muchas veces antes. Supuestamente ocurre cuando tus sentidos están adormecidos. En ese caso, mis sentidos llevan adormecidos desde hace mucho. Muchas cosas han pasado desde que llegamos, después de todo. —De cualquier forma —dijo Kunagisa—. No hay heridas de puñaladas. Así que quizás fue estrangulada, después de todo. Y entonces, para esconder las marcas, el asesino le cortó la cabeza. —Suena como una locura pero… hay algo que no entiendo. Lo que fuera que usase el asesino para cortar la cabeza; cuchillo, hacha, lo que fuese; ¿por qué no lo usó para matarla? —Quizás sí lo hizo. No hay marcas de puñalada, pero eso es solo en el cuerpo. Quizás la apuñalaron en la cabeza. —Oh, sí, puede ser —dije—. Hablando de eso, ¿dónde se supone que está la cabeza? Me pregunto dónde la llevó el asesino. Quiero decir, si el asesino se la llevó. —La mitad de la isla es bosque. Quizás la enterraron en algún lugar. O pueden haberla arrojado al mar. Deshacerse de ella no debió ser un problema. —Lo que nos trae a la siguiente pregunta. ¿Por qué el asesino le cortó la cabeza? Pero esa pregunta era un callejón sin salida. —Yo tengo otra pregunta más, Ii-chan. Échale un vistazo a esto. La cabeza fue cortada desde la base del cuello, ¿verdad? ¿Por qué está cortada así? ¿No crees que si fueses a decapitar a alguien el sitio más normal para hacerlo seria sobre la mitad del cuello? La posición del corte era, desde luego, demasiado baja, pero yo no hubiese pensado que era algo significante. Me crucé de brazos y no dije nada. La investigación de la escena del crimen no parecía haber producido ninguna pista al fin y al cabo. Como mucho habíamos confirmado que el río de pintura no podía ser saltado. Pero eso parecía más un paso atrás que un progreso. Kunagisa se dirigió a la balda del teléfono, al lado de la ventana, y cogió el auricular. —Nada extraño por aquí tampoco. —¿Pensabas que habría algo? —Pensé que quizás el circuito había sido amañado para que las llamadas de este teléfono se redirigiesen hacia otro diferente. Pero no parece haber nada extraño en este extremo. No parece que haya sido alterado tampoco. —El teléfono, ¿eh? Dime otra vez, ¿cómo sucedió? ¿Qué le dijo Kanami-san a Shinya-san? —La pintura se ha derramado, estoy ocupada trabajando así que no me molestes, cosas así. Pero Shinya-san debería haber ido a comprobarlo, incluso si ella le dijo que no lo hiciese. Puede parecer estricto, pero es su deber como cuidador. —Tienes razón en eso. Pero no conseguiremos nada hablando de lo que ya está hecho. Y de cualquier forma, Shinya-san ya tenía suficiente con soportar ese peso. No éramos los apropiados para echarle la culpa a él y no hacía falta hacerlo. El mundo es una locura, pero es un mundo en el que tenemos que tomar la responsabilidad de nuestras propias acciones. Y a veces también tenemos que tomar la responsabilidad de nuestra falta de acción. —¿Es posible que restaurasen el teléfono a su estado normal después? —Bueno, no diría que es totalmente imposible, pero prácticamente lo es. No es como enchufar y desenchufar un cable. —Sí, buen punto. Supongo que tendremos que evaluar otras posibilidades. Como lo de la puerta cerrada. —¿Piensas que estaba mintiendo? De repente escuché la voz de Shinya-san a mi espalda, así que me giré. Permanecía apoyado en la puerta, con algo parecido a una bolsa de naranjas en la mano. —Oí la voz de Kanami-san seguro. No es mentira. Por el sonido de su voz parecía muy agotado. Lo que probablemente no hacía falta mencionar. —No estoy diciendo que mintieses, Shinya-san. No hay certeza en nada. ¿Pero es posible que la voz que escuchases no fuese la suya? —No —contestó—. Conozco a Kanami desde hace mucho. Es imposible que confundiese su voz. ¿Estás dudando de mí? —No es eso. No hay ninguna razón por la que la hubieses matado, después de todo. —No lo sé, quizás no nos llevábamos tan bien como parecía —sonrío débilmente. Entonces pisando sobre la pintura seca se acercó a nosotros. Visto de cerca estaba claro lo que era la bolsa de naranjas. Era un saco de dormir. Me miró—. No podemos dejarla aquí, ¿verdad? —dijo—. Tengo permiso de Iria-san, incluso. He decidido enterrarla en la parte de atrás de la montaña. No es como si Iria-san fuese a llamar a la policía y todo esto es de su propiedad. Enterrar a Kanami es todo lo que puedo hacer por ahora. —Te ayudaremos —le dije. Él intentó pensar en una respuesta apropiada pero dándose cuenta del beneficio de tener dos personas extra ayudándole, no dijo nada. Entre todos levantamos el cuerpo de Kanami-san y en silencio lo pusimos dentro del saco de dormir. Sé que no hace falta decirlo, pero su cuerpo estaba carente de todo tipo de calor. —Shinya-san, ¿tienes algo con lo que cavar? —Debería haber una pala grande en la entrada. Kunagisa-chan, ¿puedes llevarla tú por nosotros? Esto, dime, ¿eso es una cámara digital? —Sí —asintió Kunagisa—. Debemos dejar un registro de la escena del crimen para cuando el Señor Detective llegue. No creo que el cuerpo demande derechos de autor después de todo, ¿verdad? Eso era probablemente la peor forma que tenía de decirlo, pero Shinya-san respondió con un asentimiento de cabeza y una sonrisa. —Ya veo. ¿Deberíamos irnos ya? —Esto, ¿Shinya-san? Sobre el cuadro… —¿Qué? Ah. El cuadro de Kanami. Es bonito, ¿no es así? Es el último cuadro que realizó, pero tenía la intención de dártelo, así que cógelo por favor. —¿Está bien eso? —Quiero respetar sus últimos deseos. Sus últimos deseos. Sí, estaba muerta. No quedaba nada que cumplir. —¿Podrías cogerla por los pies? Yo llevaré la cabeza y… —se cortó a la mitad, probablemente dándose cuenta de que no había cabeza que llevar. Sin decir nada la agarré por los pies. Desde luego deseaba enterrar la cabeza junto al cuerpo pero su paradero permanecía desconocido. O bien el asesino la escondió en algún sitio o había sido arrojada al bosque o tirada al mar, como había dicho Kunagisa. Mientras sostenía las piernas, me di cuenta de lo pesado que era un cuerpo. Más pesado de lo que esperarías. Probablemente, no era imposible para una sola persona cargarlo, pero con dos personas era, desde luego, mejor. Desde este punto, ninguno de nosotros habló. En silencio, levantamos el cuerpo y abandonamos la mansión; en silencio, nos dirigimos a la parte de atrás de la montaña; y en silencio, cavamos un hoyo. El saco de dormir que contenía el cuerpo era una excusa barata como ataúd, no podía sino encontrarlo cómico. En ese momento sentí que la muerte no era más que un mal chiste. La gente muere. Eso es algo que conocía demasiado bien, hasta un punto en que era sofocante, hasta un punto en el que quería vomitar, y Kunagisa también lo sabía. Y Shinya-san, siendo un adulto hecho y derecho, era obvio que también había sido tocado por la muerte con anterioridad. Probablemente esa era la razón por la que todos permanecíamos callados. Al final, Shinya-san habló. —Vosotros dos podéis volver ya —dijo—. Yo voy a quedarme aquí un rato más. Quise decir algo pero no pude. Kunagisa me tiró de la mano y nos marchamos sin decir ni una palabra. Quizás Shinya-san iba a llorar. Quizás no. De cualquier forma, no teníamos ninguna razón para permanecer allí. Después de todo, solo éramos espectadores. —Me pregunto si fue buena idea enterrarla —dijo Kunagisa. —Creo que sí. Shinya-san parecía ser la única cosa parecida a un ser querido y eso es lo único que quería hacer. Y no podíamos dejarla toda la semana tendida en el estudio. —Cierto. Cierto, pero… —Dime, Tomo. ¿Cómo de grave crees que es dejar abandonado un cuerpo? —Probablemente tendrías una sentencia de algo menos de tres años. Pero probablemente también te diesen la condicional. Y tú y yo somos ambos menores de edad, así que no te preocupes. No importa lo que suceda, siempre nos podemos librar con un poco de dinero. Que conversación más insípida. Aunque tampoco es como si buscase una más entretenida. —Hablando de chorradas… Kunagisa me dirigió una mirada divertida. <noinclude> {| border="1" cellpadding="5" cellspacing="0" style="margin: 1em 1em 1em 0; background: #f9f9f9; border: 1px #aaaaaa solid; padding: 0.2em; border-collapse: collapse;" |- | Retroceder a [[Zaregoto (Español): Volumen 1: Capítulo 1.2|Capítulo 1.2]] | Regresar a [[Zaregoto ~ (Spanish)|Página principal]] | Avanzar a [[Zaregoto (Español): Volumen 1: Capítulo 2.2|Capítulo 2.2]] |- |} </noinclude>
Summary:
Please note that all contributions to Baka-Tsuki are considered to be released under the TLG Translation Common Agreement v.0.4.1 (see
Baka-Tsuki:Copyrights
for details). If you do not want your writing to be edited mercilessly and redistributed at will, then do not submit it here.
You are also promising us that you wrote this yourself, or copied it from a public domain or similar free resource.
Do not submit copyrighted work without permission!
To protect the wiki against automated edit spam, please solve the following captcha:
Cancel
Editing help
(opens in new window)
Navigation menu
Personal tools
English
Not logged in
Talk
Contributions
Create account
Log in
Namespaces
Page
Discussion
English
Views
Read
Edit
View history
More
Search
Navigation
Charter of Guidance
Project Presentation
Recent Changes
Categories
Quick Links
About Baka-Tsuki
Getting Started
Rules & Guidelines
IRC: #Baka-Tsuki
Discord server
Annex
MAIN PROJECTS
Alternative Languages
Teaser Projects
Web Novel Projects
Audio Novel Project
Network
Forum
Facebook
Twitter
IRC: #Baka-Tsuki
Discord
Youtube
Completed Series
Baka to test to shoukanjuu
Chrome Shelled Regios
Clash of Hexennacht
Cube × Cursed × Curious
Fate/Zero
Hello, Hello and Hello
Hikaru ga Chikyuu ni Itakoro......
Kamisama no Memochou
Kamisu Reina Series
Leviathan of the Covenant
Magika no Kenshi to Basileus
Masou Gakuen HxH
Maou na Ore to Fushihime no Yubiwa
Owari no Chronicle
Seirei Tsukai no Blade Dance
Silver Cross and Draculea
A Simple Survey
Ultimate Antihero
The Zashiki Warashi of Intellectual Village
One-shots
Amaryllis in the Ice Country
(The) Circumstances Leading to Waltraute's Marriage
Gekkou
Iris on Rainy Days
Mimizuku to Yoru no Ou
Tabi ni Deyou, Horobiyuku Sekai no Hate Made
Tada, Sore Dake de Yokattan Desu
The World God Only Knows
Tosho Meikyuu
Up-to-Date (Within 1 Volume)
Heavy Object
Hyouka
I'm a High School Boy and a Bestselling Light Novel author, strangled by my female classmate who is my junior and a voice actress
The Unexplored Summon://Blood-Sign
Toaru Majutsu no Index: Genesis Testament
Regularly Updated
City Series
Kyoukai Senjou no Horizon
Visual Novels
Anniversary no Kuni no Alice
Fate/Stay Night
Tomoyo After
White Album 2
Original Light Novels
Ancient Magic Arc
Dantega
Daybreak on Hyperion
The Longing Of Shiina Ryo
Mother of Learning
The Devil's Spice
Tools
What links here
Related changes
Special pages
Page information