Editing Mushoku Tensei Spanish:Chapter 140 (section)

=== 6ª Parte ===

Aunque ir directo a la cama ahora sería grosero.



En primer lugar tendremos una cena en el primer piso de la taberna.

La comida aquí es realmente deliciosa.

Comida, bebidas, coqueteo.

Entrar en el estado de ánimo es muy importante.

Mi amor por ambas va más allá de meros impulsos sexuales. <ref>¿Nadie más extraña a Eris? :c (un poco pero solo un poco, por lo que le hizo a Ludeus quiera haberlo hecho o no eso no se hace)</ref>

No niego que mis impulsos son fuertes, pero todavía quiero disfrutar junto a ambas un tiempo de pureza.



"Wow, esto se ve impresionante."

"Simplemente no se puede comer esto en cualquier lugar..."



Sentadas una al lado de otra frente a la comida que esta siendo servida, ambas exclamaron.



En el norte, la comida es cara y carece de cantidad.

En consecuencia, las comidas diarias tienden a ser algo flojas.

Pero ahora, estamos en medio de la temporada de cosecha, en un restaurante de lujo para empezar.



Una rica ensalada de vegetales frescos.

Una sopa picante, guisada con pescado de río.

Un filete de Angus negro con especias.

Todo tipo de comida que no puedes encontrar en el día a día.

Además, un vino con un aroma fuerte parecido al whisky.



"Esta sopa está deliciosa.  Me pregunto qué condimento utilizaron."

"Mmm... ¿Creo que semillas de mostaza puestas a fuego lento en aceite?"



Sylphy, preocupada por Lucy, se abstiene de beber alcohol.

Pero parece bastante curiosa con la sopa, saboreando varías veces.



"Quiero investigar un poco más esto. Ludi, si te hago esta sopa, ¿te la comerías?"



Sylphy inclina su pequeña cabeza.

Si lo hace, me lo trago en un dos por tres sin lugar a dudas.



"Jajaja, lo tomaría con un poco de Sylphy."

"En serio, Ludi..."



La parte final es el postre.

Este restaurante ofrece cada postre que se te venga en mente.

Aún así, por el tiempo que consumí los que tenían en el Reino Sagrado de Milis, estos sabrán diferente.



El postre principal es una fruta parecida a la manzana.

Ya la he probado. Comparado con las manzanas de mi vida anterior, estas saben un poco agrio.

Las corte en pequeñas rodajas y las sumergí en un jarabe dulce semejante a la miel.



Sabe como fruta en conserva o un ponche de frutas.

Bastante delicioso.

A pesar de que lo único que viene a mi mente con el sabor de manzana/miel es café dulce, pero ese es mi error.



"¡Esto es...!"



Roxy realmente ama el postre.

Sus ojos brillan poco más soltando chispas, y sin cesar se da un festín de esta.

Mi Sensei realmente ama los dulces.

O tal vez, toda raza Migurdia ama lo dulce.



"¡Increíble, Ni siquiera puedo probar algo como esto, tan al norte!"



Roxy no dice mucho, pero ella se ve realmente emocionada.

Siento que una luz brilla fuera de ella.

Como si en cualquier momento fuera a comenzar hablar en voz alta sobre la caja de joyas que está en su boca. <ref>Referencia a un eslogan de un comediante japonés, Hikomaro. </ref> 



"Aww..."



Acabó su postre en un instante, Roxy miro el plato vacío completamente arrepentida.



"Puedes tomar el mio."



Empuje mi plato hacía Roxy.  La Sorpresa le supera.



"¿Eh, en serio?"



La comida debe ser comida por aquellos que disfrutan de ella.



"Por supuesto.  Aquí, ah-ah."

"Ah - ¿EH? Venga que ya no soy una niñata... Ah-ah."



De todas formas tomó una mascada. La felicidad arrasa su cara.

Aunque quiero darle más de comer, lamentablemente mi parte ha desaparecido también.

Será para la próxima.



Bien entonces, ahora que ya tenemos todo lo que queríamos.

Rellenas de dulces, estas dos damas se han vuelto particularmente dulces también.



"Bueno, señoritas."

"¿Qué pasa, Ludi?"

"¿Qué?"



"En realidad, ya reservé una habitación..."



Finalmente solté la línea que esperé decir toda mi vida.



"... Oh.  Bien, Roxy, pregunto otra vez... ¿Estás bien conmigo?"

"Sí.  Estaré a tu cuidado."



Roxy y Sylphy comparten una mirada y asienten con la cabeza.

Fui al vestíbulo en busca de la llave y cargué a ambas rápidamente hacía nuestra habitación.

Hay un colgador de ropa cercano a la puerta y una alfombra gruesa cubre el piso.

En el otro extremo una cama grande y mullida para que cinco rueden.

La oscuridad entra por la ventana.

Me apuro en cerrar las persianas y encender las ya preparadas velas.

Así, en esta tenue habitación aparecen las siluetas de dos niñas encantadoras.



"..."

"..."



Ruborizadas, ambas quitan lentamente su ropa exterior.

Las miro, convencido una vez más de que esta noche será la noche más maravillosa.