Sakurasou no Pet na Kanojo:Volumen 2 Capitulo 2

Capítulo 2 - La tempestad

Parte 1

“Aquí, el pan deluxe de melón de la panadería Hashimoto”

Cuando el segundo día de exámenes de Mashiro había terminado, aun sin que ella se hubiese cambiado, Sorata la llevo a la mesa de la cocina. Ante los ojos de Mashiro, estaba una bolsa de la panadería Hashimoto.

El día anterior, Sorata tuvo que llevar a Mashiro de ida y vuelta, así que mientras Mashiro hacia sus exámenes, él corrió a las a las tiendas e hizo la fila para comprar el pan de melón.

No lo compro como castigo por haber perdido el juego, fue algo que pensó después de horas de consideración; lo usara como cebo para que Mashiro le prometiera algo. Mashiro miro la bolsa que contenía el pan de melón con gran interés con gran interés y sigilosamente trato de alcanzarla, pero antes de que su mano pudiera hacer contacto con la bolsa, Sorata rápidamente movió el pan. La mano de Mashiro corto el espacio vacío mientras veía a Sorata con cara de queja y después centro de nuevo sus ojos en la bolsa de la panadería.

“¿No me lo vas a dar?”

“No le hables a la bolsa”

Con el ceño fruncido, Mashiro finalmente miro a Sorata.

“Ya veo, estas tratando de usar el pan como señuelo”

Jin, que ya estaba en la cocina mientras comía un poco de udon frio para su almuerzo tardío, sonrió mientras los miraba a ambos. Él estaba vistiendo una camiseta polo con un par de pantalones chinos grises . El mantenía su look cool incluso en los dormitorios.

Sorata no quería que alguien viera esto, él contestarle algo a Jin, pero sería algo problemático cambiar la conversación así que decidió ignorar a Jin.

“A cambio de este pan de melón, quiero que me prometas algo.”

“Lo prometo.”

“Ni siquiera te he dicho lo que quiero.”

“……”

“Escucha cuidadosamente, en una semana, Aoyama se mudara aquí, al cuarto que está al lado del tuyo. Ya sabes esto ¿No?”

“Si.” Mashiro asintió con la cabeza.

“Ahora, piensa en esto cuidadosamente. Quien te despierta en la mañana soy yo. Quien prepara tus ropas soy yo. De tu ropa y de tu comida también me ocupo yo… y no solo eso, ¡Quien lava, dobla y escoge tus panties también soy yo!”

“Y quien las usa soy yo.”

“¡No necesitas añadir eso! No importa de qué manera lo mires, es extraño ¿No? ¿Que pensara Aoyama cuando descubra esta impactante verdad?”

Sorata seria catalogado como un pervertido y seria tratado como tal, y los rumores no solo se esparcirían por la escuela, también se sabría en el área comercial lo que haría imposible caminar por el en plena luz del día. Esto deprime a Sorata de solo pensarlo. Pero para Mashiro, esto no significa nada porque esto no ni siquiera entiende una milésima parte de las preocupaciones de Sorata.

“Yo creo que, solo quiero comer el pan.”

“¡Eso es lo que estás pensando en este momento!”

“Eso no es todo.”

“¿Así?, ¿En qué más piensas?”

“En que realmente quiero comérmelo.”

“… Senpai, ¿Qué debería hacer?”

Sorata aceptó su derrota y pidió al espectador un consejo.

“¿Qué?, ¿No ibas a ignorarme?”

Jin sorbió algo de su udon y señalo a Sorata con sus palillos que todavía tenía un pedazo de poro en él .

“Vamos, yo no quise que se viera de esa forma, me disculpo, fui un idiota por unos segundos.”

“Si ella sospecha algo de ustedes, ¿Por qué no simplemente le dices que están saliendo?”

“Fui un idiota por preguntar.”

“Escucha hasta el final.”

Jin se fue de la mesa para poder limpiar su plato, empezó a lavar sus platos hábilmente mientras seguía hablando.

“Piénsalo lógicamente, ¿Realmente piensas que Mashiro puede lavar, doblar y escoger sus ropas por si misma?”

“Bueno, es posible, ¡Pero ella tiene que tratar!”

“Simplemente deberías aceptar que es imposible. Realísticamente solo puedes aceptar mi sugerencia. Que tú te levantes cada mañana y que le ayudes a quitar y poner la ropa, y que también se las laves es normal para las parejas. Aoyama de seguro que es capaz de aceptar eso.”

Mientras hablaba, él término de lavar su plato y había regresado a la mesa.

“¡Oh, ya veo! ¡Como esperaba de ti senpai, eres un genio! … ¡Como si pudiera decir eso!”

“Heh, jugar conmigo de esa manera, eso es algo que no haría el Sorata normal.”

“Senpai, ¿Alguna vez una de tus amantes a escogido tus boxers?”

“No soy esa clase de pervertido.”

“¡No me llames pervertido!”

Si Jin lo ve de esa manera, que Nanami lo entienda esta fuera de cuestión.

“No estoy interesado en la ropa interior, es más importante lo que hay debajo de ellos.”

“¡Yo no te pregunte eso!”

Sorata se lamentó de pedir un consejo a alguien como Jin y miro a Mashiro de nuevo.

“Como decía.”

Quien sabe cuándo Mashiro sacó una libreta, porque ya estaba dibujando en ella. Pero lo que era más sorpréndete es que ella estaba dibujando la bolsa del pan de la panadería Hashimoto. Por alguna razón su deseo de comer se apodero de sus dedos también y también sin ninguna razón, el dibujo era realístico y realmente bien hecho.

“Shiina, te lo pido, Aoyama no es del tipo normal de persona que se mudaría a Sakurasou, si continuamos nuestro estilo de vida como es normal, ella no será capaz de volver a la escuela.”

“Ese es un gran problema.”

“¡Entonces trátalo como si lo fuera!”

“Realmente es un gran problema.”

“¡Eso no hace ninguna diferencia!”

No había esperanza, era imposible pedirle a Mashiro que se sintiera de la misma manera en que lo hace él.

“Si no lo entiendes, no se puede hacer nada, pero al menos lavaba y escoge tu propia ropa, ¡Por favor! Así que desde hoy tendremos sesiones de entrenamiento, ¿Entiendes?”

“……”

“Hey, ¿Lo entiendes?”

“Si me como el pan deluxe, tal vez lo entienda.”

“Si ya has terminado, por lo menos dale el pan de melón.”

Bueno al fin al cabo Sorata lo había preparado para ello, así que Sorata le dio el pan de melón a Mashiro. Entonces Mashiro rápidamente sacó el pan de melón de la bolsa y empezó a mordisquearlo.

“Bueno, ¿Lo tienes?”

“Deluxe, lo tengo.”

“… si, si, si.”

Sorata pensó que sería mejor que él la esperaba hasta que acabara de comer, así que se paró de su asiento y fue al refrigerador a por unas bebidas frías. Sorata sirvió un poco de té oolong en unas tasas para Mashiro y él y los llevó a la mesa.

Cuando regreso, vio el desmembrado pan de melón en frente de él, solo los trozos de galletas habían sido comidos. ”

“¡¿Quién te enseño a comer de esta manera?!”

“Te lo doy.”

“Mottanainai Obake te llevara.”

Mientras decía esto, Sorata recogió el ahora pelado pan de melón y le llevo a su boca. El pan deluxe de melón era un simple pan ahora. Bueno, aun así era delicioso.

“Entiendo lo que Sorata quería decirme.”

“Heh, entonces por favor, ¿Dime que has entendido?”

“Entonces.”

“¿Si?”

“Para proteger nuestro secreto.”

“No necesitas decirlo con tono sospechoso.”

“Nosotros.”

“Si.”

“Haremos a Nanami desaparecer.”

“Realmente me estabas escuchando.”

Jin río fuertemente.

“¡Cuando discutimos un plan de asesinato!”

“Justo ahora.”

“¡No es cierto, no es cierto!”

Entonces Mashiro inclino su cabeza como si no supiera nada.

“¡El ser extraño eres tú! ¿¡Porque piensas en asesinatos!?”

“¿No era eso lo que discutíamos?”

“¡Por supuesto que no! ¡Antes de que te acupes de otras personas, ocúpate de ti misma!”

“Que estás diciendo, ¿Sorata?”

“¡Yo soy quien debería preguntar eso! ¿Estas tratando de asesinar a alguien cuando ni siquiera eres capaz de cuidar de ti misma? ¡Los jóvenes de estos días! ¡Trata de pensar más acerca de otras personas!”

Ignorando completamente a Sorata, Mashiro se fue poco a poco a su propio espacio y lentamente se bebió el té oolong en la taza, ella parecía que no le mas Sorata ahora que ya se había comido el pan.

“Te lo digo, di simplemente que están saliendo.”

Después de escuchar eso de Jin repetidamente, ya parecía ser una buena idea.

Antes de que su decisión fuera tomada, Sorata desesperadamente trato de confiar en lo último que quedaba de su voluntad.

“Escucha cuidadosamente Shiina. En una semana desde hoy, te vamos a entrenar, ese es el plan A. Si no funciona, entonces confiaremos en el plan B de senpai.

Parecía que Mashiro no podía entender, porque Mashiro simplemente veía a Sorata.

“Entonces, desaparecerla es el plan C.”

“Rechazado.”

Como reloj suizo, el timbre de la puerta sonó.

Cuando Jin le hizo una seña con los ojos, Sorata se levantó. Él quería reordenar sus pensamientos, así que un visitante era un buen cambio de ritmo.

“Si, ¿Quién es?”

Él preguntó mientras abría la puerta y vio a Nanami Aoyama parada allí con una cara desconforme.

“¡Whoaa!”

“¿Por qué tan sorprendido?”

Bueno, era debido por que justo ahora estaba planeando que hacer con ella, pero el solo murmuró diciendo que no era nada. Sin embargo, su cara sospechosa se quedó.

“¿Por qué estás aquí?”

“¿Todavía mis cosas no han llegado?”

“¿Qué?”

“Fui a la escuela a hablar acerca del cambio de dormitorios…”

Así que esa era la razón por la cual ella estaba en uniforme escolar.

“Pero cuando fui a mi dormitorio, todas mis cosas se habían ido.”

“¿Qué? ¿Alguien uso una magia de tele transporte?”

“No bromes con eso.”

Nanami lo miró con ojos fríos.

“Estoy jugando, lo siento. Pensé en el rostro de cierta persona y lo dije son pensarlo.”

Esa persona era nada más y nada menos que el alíen que vivía en Sakurasou.

El que Nanami esté aquí quiere decir que ella pensó en lo mismo.

“¿Puedo pasar?”

Sorata llevo a Nanami al segundo piso. Sin dudarlo, él fue al final del pasillo donde estaba la habitación 203.

En la puerta, estaba un plato que decía “El cuarto de Nanami”. Mirando el plato, era imposible negar que sus pertenencias estaban allí.

Nanami suspiro en señal de renuncia.

“… Aoyama, ¿Estas bien?”

“Si.”

Nanami respondió calmadamente.

“Algo no se siente bien, y es un poco escalofriante.”

“Fue una gran sorpresa cuando todas mis cosas desaparecieron. Y también, en el camino a aquí, pensé en esto y aquello, y decidí que venir aquí era mi mejor apuesta. Solo necesito preparar mi corazón.”

“… ya veo. Y ahora qué vas a hacer.”

Cuando él pregunto, los ojos de Nanami estaban viendo al picaporte de la puerta, diciéndole a Sorata que abriera la puerta.

Sorata de preparo y abrió la puerta de la habitación 203.

La primera cosa que vio era una gran ventana. Una brisa entro y la cortina color cielo se movió.

La habitación tenía la misma estructura que el cuarto de Sorata, pero por la falta de equipos electrónicos, esta habitación parecía más grande que la de él. Solo había una cama, un closet, un escritorio y una silla.

A ella probablemente le gustaban los objetos hechos de vidrio, porque en el escritorio había unas decoraciones con forma de animales. Mirándolas más detenidamente, todas tenían forma de tigre.

Nanami sin decir ninguna palabra caminó y verifico cada una de sus pertenencias, y cuando termino, ella asintió a Sorata que estaba de pie en el pasillo.

Sorata pidió disculpas por la intrusión mientras caminaba dentro de la habitación hacia la cama. Durmiendo en la cama estaba el origen de todos los males, Misaki, abrasando con una cara de total paz un cojín con forma de tigre y los siete gatos de Sorata.

Dándose cuenta de algo, el gato blanco Hikari miró hacia arriba. Dejo salir un Meow mientras miraba a Sorata y a Nanami. Salto de la cama y se frotó en las piernas de Nanami. Probablemente recordaba a Nanami claramente.

Cuando Sorata recogió a Hikari, Nanami también estaba con él. Antes de que se mudara a Sakurasou, ellos solían alimentarlo juntos.

Esa vez también Sorata fue capaz de hacerse amigo de Nanami.

Nanami acaricio la cabeza de Hikari.

“Has crecido bastante.”

Hikari maulló felizmente.

Oyendo los maúllos de los gatos, las orejas de Misaki se pararon y la reina de los gatos que tomaba una siesta en la cama dejo salir un fuerte gemido mientras se levantaba.

“Unya…”

Ella bostezó y estiró sus brazos. Todos los gatos sorprendidos se levantaron al mismo tiempo. Todos los siete gatos, Incluida Hikari, debieron sentir el mal humor de Nanami, y salieron corriendo rápidamente solo dejando a su dueño detrás.

Si era posible, Sorata también quería echarse a correr.

Pero él no podía correr sin tomar control de la situación primero. El cuerpo de Nanami temblaba mientras veía a Misaki.

“Necesito cambiarme e ir a mi trabajo así que por favor ¿Te puedes retirar?”

La vos de Nanami era inesperadamente calmada.

“Pero Kohai-Kun.”

“Kamiigusa-senpai también.”

“Eh, ¿Qué hay de malo? Las dos somos chicas, así que llevémonos bien…”

“Me niego, hay un límite para la anormalidad. ¿Cómo es normal que alguien mueva las pertenencias de otros.”

Nanami derramo sus palabras sin piedad.

“Si Aoyama, díselo.”

Quien era la mayor víctima era Aoyama, pero el daño hecho a Sorata era grande también. El ahora no era capaz de llevar a cabo el plan A porque él ya no tenía más tiempo para entrenar a Mashiro. Él tenía que pensar en un nuevo método tan pronto como sea posible.

“En la vida, ¡Necesitas una dosis apropiada de sorpresas! ¡Si no, tu cuerpo se secara! ¡Sin sorpresas, no hay vida!”

“Siempre hay un límite para todo. Esto es increíble.”

“Es increíblemente divertido ¿No? ¡Lo pensé justo después que me entere que te ibas a mudar aquí! Es bastante difícil conseguir que el Sainomaku Moving Center movieran las cosas… Dijeron algo acerca de no ser capaces de mover las cosas y yo no entendía, así que les dije que era para poder salvar la vida de alguien y me tomo más de 3 horas explicárselos por teléfono. Pero ver la felicidad de Nanami es un gran suceso.”

Misaki, cuyos ojos brillaban, no tenía ningún remordimiento.

La razón por la cual Sorata no se había dado cuenta es porque él dejó la casa temprano esta mañana para poder llevar a Mashiro a la escuela. Él pensó que si solo se hubiera quedado en Sakurasou, que si solo Mashiro no tuviera exámenes, pero bueno, incluso si se quedaba en Sakurasou, él no sería capaz de detener los planes de Misaki.

“Que desafortunado, ¿Es tiempo de ir con el plan B?”

El volteo a ver y vio a Jin asomando su cabeza por la puerta, él miró a Sorata y gentilmente sonrió. Con solo ver a Jin, se dio cuenta de que Jin ya sabía que las cosas ya se habían movido.

Detrás de Jin, él también pudo ver a Mashiro.

“Mitaka-senpai… y Shiina también.”

Nanami miró a todos y bajo la cabeza.

“Yo soy Nanami Aoyama, de segundo año en el plan de estudios normal. Estaba realmente planeando mudarme a Sakurasou el primero de Agosto, pero parece que viviré aquí desde ahora. Por favor, cuiden de mí.”

“Quiero vivir con Nanami tan pronto como sea posible.”

Misaki contesto primero.

“Bien, llevémonos bien.”

Sorata fue el último en responder

“¿Pero que era el plan B?”

Cuando Nanami quien tiene un gran sentido auditivo le pregunto a Jin, Sorata le rogó a Jin que no dijera cosas innecesarias con señales de ojos.

“Para más detalles, pregúntale a Sorata.”

Dejó salir la peor respuesta

Él simplemente disfrutaba de ver a otros en problemas.

Sorata pretendió no darse cuenta que Nanami le clavaba dagas con la mirada y la ignoró.

“Hmm, realmente no importa, creo… de cualquier modo, necesito ir a mi trabajo de tiempo parcial, así que ¿pueden salir todos? Además, el segundo piso está prohibido para los chicos.”

Nanami secamente respondió.

“No se cómo era antes, pero ahora que me he mudado, espero que se apeguen a eso.”

Cuando Nanami miró a todos de una manera acusadora, Jin levantó sus dos manos en una pose de rendición. Ahora es casi imposible cuidar de Mashiro. Que debería él hacer.

Cuando la atención de todos estaba enfocada en algo más, Misaki que estaba en el closet dejó salir un gran escándalo. Ella estaba sosteniendo piezas de blancas ropas en sus manos.

“¡Mira esto Kohai-Kun! ¡Nanami viste estas cosas sensuales!”

Las cosas que Nanami había empujado en su cara eran unas panties blancas con lasos en ella. Era tan delgada, que era casi posible ver a través de él, no, era totalmente visible, porque él podía ver la cara de Misaki claramente.

“Misaki-senpai, eres muy valiente.”

Era realmente impactante ver como ella podía esculcar en los closets y cajones de otras personas tan naturalmente.

“¿Ah? No eso no… ¿Cómo lo encontró?”

Nanami no era capaz de entender que estaba pasando y simplemente parpadeaba sorprendida.

“Aquellos que son amanerados y diligentes, siempre tienen un lado oculto. “

Jin analizó de manera cortante.

“¡Po… por favor devuélvemelo!”

Nanami que se recuperó de su shock rápidamente agarro las panties y las robo de las manos de Misaki.

“Eso… eso era algo que me fue dado por uno de mis amigos como broma en mi cumpleaños. Yo no fui quien lo compro. Y… y nunca los he vestido antes.”

“Entonces muéstramelo cuando los vistas por primera vez.”

Jin fríamente bromeo.

La cara de Nanami rápidamente se sonrojo de un color rojo brillante.

“¡Nunca las vestiré! Tu… tu sabes eso ¿No, Kanda?”

“Todavía no he dicho nada…”

“Si, eso es correcto. Sorata ya está acostumbrado a ver panties.”

“¿Qué?”

“Senpai, ¡Por favor no digas cosas inútiles!”

“Bueno, serás atrapado pronto de todas maneras.”

Jin miró a Mashiro. Nanami no era el tipo de persona que no note eso. Y por supuesto, Sorata también se dio cuenta el pequeño cambio en la expresión de la cara de Nanami. Se preparó para lo que estaba por venir.

Pero fue Misaki quien hablo antes que Nanami.

“Chicos… chicos… ¡Hay algo más por aquí!”

Eran panties blancas también. Eran del tipo que tienes que anudar una cuerda a ambos lados.

“Ah, me gustan más esas, son más fáciles de quitar.”

Jin deliberadamente dio su opinión.

“Senpai, si estuvieras en juego RPG extranjero, ya hubieras sido asesinado a tiros.”

Él sintió lástima por Nanami.

“¡Por favor no estés revisando mis cosas! ¡Eso… eso es algo que una amigo escogió por mí, no es como si lo hubiera escogido por mí misma!”

Como si estuviera asechando una presa, Nanami ágilmente le arrebato las panties.

“¡Por… porque son así chicos!”

“¿Por qué no mejor Misaki-senpai y Jin-senpai salen? A este ritmo, la mente de Aoyama se romperá.”

Jin murmuro así mismo bien, bien mientras salía de la habitación. Mashiro sin ninguna palabra las siguió.

“¡Tú también, Kanda!”

“¿Huh? ¿Por qué estoy recibiendo el mismo trato?”

“Eres simplemente un bestia…”

Nanami murmuro para sí misma.

“No hables para ti misma.”

Entonces Nanami respiro hondo.

“¡Bestia!”

“¡Nunca dije que deberías decirlo claramente!”

“Ah… en serio… ¡Entonces que quieres que haga! De cualquier modo, ¡Déjame sola!”

Misaki fue arrastrada por Jin que había regresado.

“¡Tú también salte!”

“Aoyama.”

“¿Qué?”

“¿Te estas arrepintiendo de esto?”

“Si, pero no hay razón para pensar en ello ahora. Es mi culpa por no poder pagar por los honorarios del dormitorio. No es tiempo de ser exigente.”

Eso era realmente algo Nanami diría.

“También puede que sea una gran oportunidad para mí”

Nanami lo dijo con una débil voz y miró a Sorata.

“S… sí. No estoy seguro de lo que pueda significar, pero da lo mejor.”

“Yep. No quiero escuchar eso de ti, pero sé que no será fácil no doy lo mejor.”

Nanami movió sus hombros de manera cansada. Sus ojos estaban centrados en la puerta por la cual Mashiro ya había salido.

“Aoyama, solo quiero hacerte saber de antemano.”

“¿Qué cosa?”

“No es como si Misaki tratare de ser mala al respecto, ella realmente quiere darte la bienvenida. Así que por favor ten en mente eso.”

“¿Me das la bienvenida también?”

“Por supuesto.”

Hubiera sido mejor si ella se mudaba después de que entrenara a Mashiro, pero estaba dándole la bienvenida a su amiga.

“Lo he estado esperando por un largo tiempo. Incluso podrías decir que he estado esperando por toda mi vida.”

“¿Yo? ¿Qu… que se supone que significa?”

“Deberías saberlo sin necesidad que te lo diga.”

“Si no lo dices, no sabré nada… acerca de ello…”

Nanami miraba a Sorata con gran expectativa. Ella espera que el dijera algo. A causa de ello, Sorata no era capaz de echarse atrás. El decidió dejar salir sus sentimientos honestos.

“Siempre he pensado que eres una buena persona.”

“¿En… enserio?”

“Si. Realmente quería que te mudaras así podrías regañar a los demás en Sakurasou.”

La cara de Nanami se congeló y bajó la cabeza, temblando furiosamente.

Pero Sorata no se dio cuenta.

“Espero que mueras golpeado por un meteorito.”

Nanami dijo en voz baja.

“¿Qué?”

“Olvídalo, ¡Así que salte!” Siendo golpeado por el cojín con forma de tigre que Nanami había lanzado, Sorata corrió fuera de la habitación rápidamente. Mashiro, Jin y Misaki estaban en el pasillo.

“Vamos a ser odiados desde el primer día, como ella va a ir a su trabajo de medio tiempo, ¿deberíamos dejar la fiesta de bienvenida para otra ocasión?”

“Eh, quiero llevarme bien con Nanamin.”

“¡De quien crees que es la culpa!”

“¡Es toda de Kohai-Kun!”

“Concuerdo con ello.”

“Yo también.”

Mashiro también estuvo de acuerdo rápidamente.

“Shiina, ¡Incluso tú estás de acuerdo!”

“¡Kanda! ¡No seas ruidoso enfrente de la habitación!”

Cuando la voz de Nanami resonó, Jin y Misaki tenían una cara triunfante. Mashiro lo miraba con una mirada lastimosa.

“¿Hi... hice algo malo?”

“Creo que es porque no eres consiente.”

Desafortunadamente, Sorata no podía entender lo que Jin acaba de decir.

“Sorata, siempre hay un plan C.”

“¡Rechazado!”

Notas de Traductor

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