Ero Manga Sensei:Volumen 2 Capitulo 4

La traducción de este capítulo fue realizada gracias a la versión realizada en inglés de está misma página.

Editado por ValkarRouse

Capítulo 1

Parte 1

Un par de horas más tarde. El sol se había puesto y estaba oscuro afuera.

Elf y yo estábamos tirados en la sala de estar de la residencia Izumi. Me senté en el sofá mientras Elf dejó caer su cabeza sobre la mesa.

“…” Elf

“…” Masamune

Habíamos estado así desde que regresamos. Ninguno de los dos dijo nada, lucíamos como dos muertos.

Considerando lo que había pasado antes–

Cuando la chica de kimono anunció su verdadera identidad.

En ese momento, Muramasa había presionado a Elf un poco demasiado, ella contestó:

"¿Ha? ¿Qué estás haciendo? ¿Qué cosas sin sentido estás diciendo? ¿Y te llamas a ti misma una joven sénior? ¡Piérdete!" Elf

Aunque no supe de donde había salido la parte de ‘joven sénior’, pero como se esperaba, Elf todavía era capaz de contra-atacar, aún en ese estado.

Mientras yo… tal vez debido a mis heridas mentales – estaba tan asustado de Muramasa-senpai... Como sea, no era capaz de hacer nada mientras que Elf sí.

Y así–

“Yamada Elf-sensei, ¿Verdad? Esa es mi línea, piérdete.” Muramasa

Muramasa-senpai me ignoró y comenzó a discutir con Elf.

“Este es un asunto privado entre Masamune-kun y yo.” Muramasa'

“¿Ha? ¿De qué estás hablando?” Elf

“Eres una autora famosa con dos millones de ventas, tú libro está a punto de ser hecho anime, ¿Verdad?” Muramasa

Eso era lo que Elf había dicho antes. Ninguna de esas dos cosas era errónea.

“¡Sí! ¡Arrodíllate y lame mi bota!” Elf

Elf golpeó su pecho y dijo. ...Mwu.

Muramasa-senpai quedo en silencio. Pero entonces giró hacía Kagurazaka-san:

“Tú eres mi editora, ¿Verdad? Tu nombre es –“ Muramasa

“Kagurazaka, Muramasa-senpai... lo sabía, olvidaste mi nombre...” Kagurazaka

Respondió Kagurazaka. Muramasa-senpai parecía avergonzada:

“… Sí.” Muramasa

“Nos hemos visto raramente, y nuestra última reunión fue hace tiempo, así que no puede evitarse. No tienes que preocuparte por mí, solo concéntrate en tu situación. Yo soy la editora de ustedes dos, así que preferiría que resolvieran esto entre ustedes. Sin mencionar que aún si tratase, ustedes no se detendrían.” Kagurazaka

“Así es.” Muramasa

Kagurazaka-san había dicho que 'ella luego tenía que ver a un famoso autor’.

Entonces ella se refería a Muramasa.

Esperen... esa chica... ¿Ella ni siquiera recordaba el nombre de su propia editora? ¿Entonces cómo diablos había logrado trabajar antes? Increíble. Masamune

“Antes de eso… Kagurazaka-san, dime como se está vendiendo mi libro por favor." Muramasa

“... T-Tú misma no lo sabes, ¿Verdad?” Kagurazaka

“...” Muramasa

En el blanco. El rostro de Muramasa-senpai enrojeció.

Pero… ¿Ella ni siquiera sabía cuán bien había vendido su libro? ¿Qué había sobre sus ganancias? ¿Acaso siquiera le importaba? Esa sénior mía todavía no había alcanzado la pubertad, sus ganancias debían ser manejadas por su tutor.

Pero… ¿Ella en verdad no lo sabía?

“Un autor que no conoce sus propias ventas… me recuerdas a alguien que no se atreve a ver los comentarios sobre él. En verdad, en ese aspecto los dos son muy molestos.” Elf

Murmuró Elf para sí misma. ¿Por qué se estaba metiendo en esto de todas formas?

Estábamos hablando sobre otra cosa, entonces ¿Por qué ella tenía que arrojarme una bola baja a mí?

“Las ventas de Muramasa-sensei son –“ Kagurazaka

Kagurazaka-san respondió con lentitud:

“Catorce millones quinientos mil.” Kagurazaka

Oyendo eso, Muramasa-senpai quedó sorprendida:

“… Oh… ¿Cien mil, quinientos?" Muramasa

“Unos ceros más detrás de eso.” Kagurazaka

Muramasa-senpai quedó perpleja, entonces comenzó a contar con sus dedos.

“Eso es… imposible… mi dinero mensual es solo 4.500 yenes…” Muramasa

Distinto a la familia Yamada, sus padres debían ser muy estrictos. Mi familia era igual, mis ganancias eran cuidadas por mis padres.

“¿Qué estás haciendo? ¿Estás haciendo una muestra de dedos?" Elf

Dijo Elf cansada, en un tono de voz aburrido, mientras devolvía a Muramasa de nuevo a la realidad.

“Sí. Eso quiere decir – Yamada-sensei, lo diré otra vez. Piérdete.” Muramasa

Ella tosió dos veces:

“¡Ya que vendí más de diez millones, tienes que escuchar lo que sea que yo diga! ¡Tenemos más de un millón de diferencia en ventas, es un hecho – fuiste tú quien dijo eso!” Muramasa

Parecía que esa había sido la razón por la que había preguntado por sus ventas. Y la razón por la que ella había estado tan sorprendida era debido a que ella pensaba mis ventas deben ser más altas que las de Elf, pero no estoy del todo segura. Lo cual explicaba su reacción. La verdad era que ella había aplastado a su oponente.

“... ¡¡Kuhhhhhhhhhh!! ¡¡¡¡Kuhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!” Elf

Elf apretó sus dientes por la ira.

Pero no dijo nada, solo se quedó allí.

“Bien, me he ocupado de la problemática. Volvamos al tema principal, Masamune-kun.” Muramasa

“------” Masamune

Ella giró hacía mí, toda duda y pánico habían desaparecido de sus ojos. Eso estaba bien para mí. Yo tampoco quería irme por las ramas con ella. Mi sénior dijo:

“Pareces estar enojado, junior.” Muramasa

“Debido a que senpai insultó nuestro sueño y dijo que quería romperlo.” Masamune

“Ah. ¿Y?” Muramasa

¿Cómo podría seguir soportando eso? Masamune

“Retráctate. De otra manera, aún si eres mi sénior, no te perdonaré.” Masamune

La miré de forma directa. De repente, su expresión cambió, ella sonrió:

“No repitas la frase de uno de tus personajes. Hm, pero lo que dijiste sonó bien, entonces continuare haciendo del tipo malo, para burlarme de ti – la última vez, el boceto de tu novela fue retrasado un año porque robe ese lugar apropósito.” Muramasa

“- ¿Qué?” Masamune

¿Entonces ella apropósito había entregado su manuscrito antes para tomar ese lugar? ¿Para forzarme a esperar un año por mí turno? Masamune

Entonces era ella quién había causado todo ese problema.

“Además supe sobre lo que estabas escribiendo preguntándole a tu editora. Fue bastante fácil tomar tu lugar.” Muramasa

Muramasa-senpai anunció despacio:

“Lo hice con malicia, para destruirte.” Muramasa

“¡¡¡Hey, Muramasa-sensei!!!” Kagurazaka

Kagurazaka-san estaba a punto de decir algo, pero Muramasa-senpai la detuvo con la mirada.

Ella puso su dedo índice sobre sus labios e hizo la señal de silencio.

“¿Saboteaste mi novela apropósito? ¿Podría ser que el último año…?” Masamune

“¿El último año? ¿Qué?” Muramasa

“El último año, el momento en que entregamos manuscritos era casi el mismo. Mismo género, misma edad de los autores… pero mi libro fue rechazado una y otra vez, y eso me hizo incapaz de publicar algo. ¿También hiciste eso apropósito?” Masamune

“...” Muramasa'

Muramasa-senpai abrió bien los ojos. Ella parecía no esperar que yo preguntase eso. La atmosfera entre nosotros era insoportable. Después de un momento de silencio, ella… respiró hondo y dijo:

“¿Qué hay si digo que sí?” Muramasa

“Entonces, te odiare.” Masamune

“…” Muramasa

Muramasa-senpai miró a un costado, lo que me hizo imposible ver su expresión.

“… De paso, sabía cuándo ibas a venir hoy. Por eso es que esperé a último momento para encontrarte.” Muramasa

Para destrozar mí sueño. Tan solo poder decirme eso era suficiente para hacerla venir aquí. Todavía no podía entenderla.

“¿Por qué sigues tratando de iniciar una pelea conmigo?” Masamune

Ella nunca se preocupaba por nadie. Nunca se enojaba. Nunca mostraba su interés en nada. Igual que una santa - ¿No era eso así? Oyendo mi pregunta, Muramasa-senpai me miró:

“Porque te odio. Izumi Masamune – odio a quién sigue aferrándose a ese sueño tan infantil. Esta vez, tu sueño está en el camino del mío, te odio aún más por escribir esa clase de novelas inútiles.” Muramasa

Entonces ella quería destruirme.

Muramasa-sensei anunció su meta una vez más.

... Ah... entonces es así... ya veo. Masamune

Aunque las razones para mis momentos difíciles del pasado eran reveladas un poco tarde... aún estaban siendo reveladas... Debido a que ella era mi némesis, no mi rival sino mi némesis, quién quería destruir a su oponente más que nada.

“… ¿Quieres agregar una condición sobre que el perdedor deba obedecer al ganador?” Masamune

Le dirigí una mirada.

“Quién gane El Campeonato Mundial de la Novela Ligera puede ordenarle al perdedor hacer lo que sea.” Masamune

“Hey hey, espera Masamune…” Elf

Elf tomó mi mano, preocupada, pero no me importó.

“De otra manera, no seremos capaces de terminar esto. Lo diré de antemano, no renunciaré a mi sueño solo por una derrota. No importa cuántas veces me venzas, yo cumpliré mi sueño.” Masamune

Por el otro lado, Muramasa sería igual. Ella no me dejaría escapar si solo ganaba.

“Entonces tengamos un duelo. Si gano, nunca volverás a interponerte en mi sueño. Si pierdo… puedes hacer lo que quieras conmigo.” Muramasa

“Eso es mejor de lo que esperaba… no te arrepientas.” Masamune

Muramasa estaba sorprendida, pero estuvo de acuerdo. ¿Oh? ¿De verdad? Estoy segura de que ganaré, ¿Este tipo de verdad quiere hacer una apuesta como esa? Eso debía ser lo que ella estaba pensando.

Si tuviese que usar una analogía de Yamada Elf-sensei… 14.500.000 puntos de batalla contra 220.000 puntos de batalla. No tenía absolutamente ninguna oportunidad de ganar – al menos normalmente. Eso era entendible.

Ustedes no tienen idea de lo asustado que yo estaba.

“¡Sí! ¡Nuestro sueño no es infantil! ¡No perderemos ante ti!” Masamune

Yo grité:

“¡Lucha hasta la muerta Muramasa! ¡Hare que te arrodilles frente a nuestro sueño!” Masamune

- Básicamente así había sido.

Entonces tomamos el tren de regreso en silencio. Ninguno de los dos quería contarle a Eromanga-sensei, los dos estábamos demasiado exhaustos y colapsamos en la sala de estar.

Con su cabeza sobre la mesa, Elf dijo con cansancio:

“… Perdón, Masamune. Hiciste esa apuesta ridícula por mí.” Elf

“¿Cómo podría ser eso tu culpa?” Masamune

“Porque… no puedes soportar ver que Muramasa me menosprecie… así que te enojaste e hiciste esa apuesta, ¿No? Déjame ver… tal vez haya otra forma…” Elf

“¿Ha? ¿Qué cosas sin sentido estás diciendo? No es así." Masamune

Elf miró sorprendida:

“¿Eh? ¿No es así?” Elf

“Por supuesto que no. ¿Qué estás diciendo?” Masamune

“Entonces, entonces ¿por qué...?” Elf

“¿Por qué me veo así? Bueno, a decir verdad, yo mismo no estoy seguro.” Masamune

Me tiré sobre el sofá.

“No lamento haber hecho esa apuesta con ella. Como dijiste, tal vez haya otra forma. Pero aún si tuviera una máquina del tiempo y regresara a ese momento, mi elección seguiría siendo la misma.” Masamune

Porque ella se atrevió a decir que nuestro sueño era infantil. No puedes decidir eso por ti misma sin leer lo que escribí. Eso era imperdonable. Pero–

“Aunque no lo lamento, me siento avergonzado.” Masamune

“¿Qué quieres decir?” Elf

“Yo aposté nuestro sueño – solo. Entonces aquí estoy, sin lamentarlo, sin pensar que hice algo equivocado… siento que le debo a mi compañera Eromanga-sensei, quién me ayudo a hacer el boceto de mi novela, mi hermana, quién dibujó mis ilustraciones, una disculpa…” Masamune

Esa era la razón por la que yo estaba así.

“En verdad – no sé qué decirle a mi hermana.” Masamune

Así que cuando regresé a casa, colapse allí en lugar de ir al segundo piso. Pero...

“¿Qué estás haciendo, idiota? Lo entiendes todo mal.” Elf

De repente Elf se paró y dijo eso. La apariencia moribunda que tenía hace un momento había desaparecido por completo.

“Siempre dices que te gusta tu hermana yadda yadda, pero no la entiendes para nada –“ Elf

“¿Eh?” Masamune

Antes de que pudiese preguntar qué era lo que quería decir, Elf me levantó. Al mismo tiempo–

*Thud thud thud*

Escuché los golpes en el techo que servían como llamados.

Elf levantó la vista y entonces palmeó mi espalda.

“Ve. Ella está llamándote. Ve.” Elf

Fui empujado fuera y de manera automática mis piernas me condujeron al cuarto cerrado.

“... Soy yo, Sagiri.” Masamune

Golpeé con suavidad… nadie respondió.

“… ¿Eh?” Masamune

Pero ella había llamado hacía un momento… Esperé un instante, pero nada ocurrió.

Como si ella hubiese regresado a la forma en que Eromanga-sensei era antes.

“¿Sa-Sagiri?” Masamune

Levanté mi mano hacia el picaporte sin demasiada esperanza – pero la puerta no estaba cerrada.

A través de la pequeña abertura, el cuarto parecía oscuro y no se podía ver con claridad.

“Permiso…” Masamune

Dudé por un momento, pero entré al cuarto. Y entonces –

“… Ah.” Masamune

Había algo grande en la cama.

“¿Sa-Sagiri? ¿Estás durmiendo?” Masamune

[… Hmph.] Sagiri

“Guau.” Masamune

Su voz enojada vino del altavoz de la computadora, no desde la manta… parecía que había llevado el micrófono con ella.

“No estás durmiendo. ¿Qué significa esto?” Masamune

[¡Hmph! ¡Ya no me importa nada de ti! ¡Casanova!] Sagiri

“¿Eh? ¿Eeehhh?” Masamune

Esperen, ¿Qué? ¿Por qué ella sonaba tan enojada? Masamune

Estaba claro que yo no había hablado con ella desde que había salido esa mañana.

[¿Su cita fue divertida?] Sagiri

“¿Ha?” Masamune

[… Estoy preguntando si su cita fue divertida.] Sagiri

“¿Qué?” Masamune

[… Tch… comparado con una chica que se rehúsa a salir afuera, ir a una cita con alguien en el exterior seguro es mejor. Incluso pueden comer pastel juntos.] Sagiri

“Er… ¿Te refieres a lo que escribió Elf?” Masamune

¡Estoy teniendo una cita con Izumi Masamune-sensei!

[…] Sagiri

¡En el blanco!

“Espera, está claro que Elf bromeaba. ¡Te dije que iría a ver a mi editora hoy! ¡Aunque si comimos pastel juntos, no cuenta como una cita!" Masamune

[… ¡Hmph!] Sagiri

“¡Estoy diciéndote la verdad! ¡Créeme por favor!” Masamune

¿Por qué estoy explicándole cosas a mi hermana? ¿Y por qué suena como si estuviese buscando excusas? Masamune

“Hey, ¿Cómo puedes saber eso sin dejar este cuarto?” Masamune

[Hmph, puedo olerlo a millas de distancia.] Sagiri

¿De verdad? ¿Es esa una habilidad especial de un hikikomori? Masamune

[¿Y entonces? ¿Por qué estas coqueteando con Elf-chan en la sala de estar?] Sagiri

“¡Eso no es lo que estoy haciendo!” Sagiri

Mientras trataba de explicar que no había ido a una cita con Elf, ni que estaba coqueteando con ella, Sagiri susurró de repente:

[… Nii-san, no tienes permitido tener una cita con una chica por el resto de tu vida, ¿Lo entiendes?] Sagiri

…Ella de repente me dio una orden irracional.

“¿Por qué?... ¿Por el resto de mi vida?” Masamune

[Sí. Por el resto de tu vida. Porque…] Sagiri

“¿Porque qué?” Masamune

[¡Nada! ¿Por qué no viniste de inmediato? ¿Sabes lo preocupada que estaba?] Sagiri

“Eso es porque…” Masamune

Yo confesé.

“Sentí que… debía disculparme contigo.” Masamune

[¿Qué?] Sagiri

Oyendo eso, Sagiri asomó su cabeza.

[¿Qué quieres decir?] Sagiri

Me puse de pie y la miré a los ojos… entonces respiré hondo y le dije lo que había pasado ese día.

“En realidad –” Masamune

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