Fate/Apocrypha:Volumen1 Capitulo3

From Baka-Tsuki
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--- “Amabilidad, Humildad, Honestidad, Pureza, Fe – el corazón de la doncella llevaba todas estas cosas y nada más.”

Place du Vieux Marché, Rouen

…Maldiciones llegaron hasta ella, como una melodía de un país infinitamente distante. No les prestó atención. Sería una mentira decir que no sentía dolor – pero era algo que podía soportar.

Tampoco tenía mucho que temer. Tales emociones como la decepción y los lamentos habían quedado atrás desde el momento en que se decidió a pelear. Jamás encontrarían el camino de regreso a ella.

No deseaba ser arrastrada, así que caminó sin titubear ni un solo paso. Inconscientemente llevó su mano hacia su pecho – pero le habían arrebatado su cruz. Ya no existía nada que le diera fuerza a su corazón. Por esta causa ella sintió algo de tristeza.

Justo cuando se dio cuenta de ello, un hombre Ingles corrió hasta ella y reverentemente le entrego una cruz de madera que parecía como si hubiera sido construida justo en ese momento y lugar. Ella le agradeció en silencio mientras él se arrodillaba con lágrimas recorriendo su rostro. Incluso entre los reproches aún existía gente que lloraba por ella.

Dado que las maldiciones asemejaban melodías de países muy lejanos, el dolor era como la canción de cuna de una madre.

Sus manos se encontraban atadas a una alta estaca de madera que se encontraba detrás de ella – de manera bastante ajustada, tal vez para recordarle que no habría perdón. ¿Pero qué significado tendría escapar después de haber llegado hasta aquí?

El sacerdote terminó de recitar su juicio final y rápidamente lanzó la antorcha, la cual comenzó a arder lentamente bajo sus pies. Ellos creían que la pérdida de la carne era el miedo más grande… Para ellos, este era el castigo más cruel de todos.

La flama quemaba su piel, calcinaba su carne y carbonizaba sus huesos. Una y otra vez ella dijo el nombre del Señor y su Santa Madre.

…Tus plegarias fueron una mentira.

Ellos le recriminaban sin fin con sus palabras de odio. Pero solo pudo encontrarlo algo extraño… porque una plegaria no puede ser ni falsa ni verdadera. Una plegaria es simplemente eso, nada más. Su naturaleza no cambia basada en a quien la realices.

Ella deseaba decirles aquello pero no pudo producir algún sonido. Repentinamente, la escena ante ella fue una del pasado. Una villa rural… con una familia ordinaria. Se vio ella misma, la tonta que huyó y dejo todo a un lado.

Si… Tal vez había sido una tonta. Después de todo, ella sabía cómo terminaría todo desde el comienzo. Era ella misma quien mejor entendía este destino.

…Las cosas no habrían terminado de esta manera si simplemente lo hubiese ignorado.

Esa era la verdad. Si solo hubiera prestado oídos sordos a aquella voz y abandonado a esos soldados a sus lamentaciones – Porque ¿Qué clase de salvación podrían haber tenido? – ella habría vivido su vida, se habría casado y vivido con su esposo e hijo. Hubiera sido natural. Entendía que ella también había tenido ese futuro.

Pero lo abandonó para perseguir un camino diferente.

Ella eligió tomar la espada, ponerse la armadura, levantar el estandarte y montar el caballo en la línea de combate.

…¿Acaso sabias que terminaría de esta forma?

Sí. Por supuesto que lo sabía. Ella sabía que mientras siguiera luchando, este fin llegaría a ella. Así que por supuesto otros la criticarían por su estupides. Sin embargo, ella misma jamás se atrevería a criticarse a sí misma.

“Aun así logro salvar vidas… así que no podría haberse equivocado al tomar este camino.” Estas imágenes – del pasado, de futuros imposibles, incluso de la cruel realidad – carecían de significado ante sus plegarias.

Ella simplemente rezaba – y se ofrecía a sí misma. Incluso si todos fueran a condenar lo que había hecho como algo malo… por lo menos no se traicionara a sí misma.

No miro hacia atrás sobre los caminos que no había tomado, o deseó tener un futuro que no había escogido… solo deseó descansar en silencio.

Incluso en medio de un salvajismo tan brutal, la única cosa que permaneció en su mente y en su corazón hasta el final fue una plegaria – sin mancharse por los lamentos, solo llena de sinceridad.

…O Señor, me ofrezco a mí misma a Ti…

Esas fueron las palabras del final. Su conciencia cesó y fue liberada de todo sufrimiento.

El sueño de la chica termino enfrente de la realidad. Pero ese no fue simplemente el fin. Si, el sueño de la chica había terminado… pero el sueño de La Pucelle solo comenzaba.

BUSQUEDA ……. COMENZANDO BUSQUEDA ……. COMPLETA

COMPATIBILIDAD PERFECTA.

COMPLEXION FISICA ...... COMPATIBLE COMPLEXION ESPIRITUAL ...... COMPATIBLE PERSONALIDAD ...... COMPATIBLE PRANA ...... COMPATIBLE

COMENZANDO POSESIÓN VIA SELLADO PROVISIONAL DE LA PERSONALIDAD PREVIA E INSTALACIÓN ESPIRITUAL DEL ESPIRITU HERÓICO.

PERMISO DE LA PERSONALIDAD PREVIA ...... RECIBIDO RESPALDO DE LA ANATOMIA BASE A TRAVEZ DE LOS DOMINOS ...... COMENZANDO

INSTALACIÓN COMPLETA.

COMENZANDO LA ADAPTACIÓN DE LA COMPLEXION FISICA Y ESPIRITUAL.

ASIGNACIÓN DE HABILIDADES DE CLASE ...... COMENZANDO

COMENZANDO LA INSERCIÓN PERTENECIENTE A LOS DATOS DE TODOS LOS ESPIRITUS HEROICOS Y DE LA ERA MODERA COMO SE REQUIRIÓ.

RESPALDO ...... COMPLETO.

HABILIDAD DE CLASE {SANTIDAD} ASIGNADA. OPCIÓN {CREACIÓN DE LA SABANA SANTA} ESCOGIDA.

INSERCIÓN DE LOS DATOS REQUERIDOS COMPLETADA.

ADAPTACIÓN COMPLETA.

SERVANT CLASE {RULER} ACTUALIZACIÓN COMPLETA.

TODO LISTO.

Ella abrió sus ojos. Los medios por los cuales había sido invocada eran demasiado inusuales… No había precedente de una invocación donde el invocado se encontrara tan débilmente enlazado al mundo actual. ¿Acaso era porque esta Gran Guerra del Santo Grial era tan irregular?

La chica de alguna manera logró tomar forma en el mundo. Tampoco había problemas con sus especificaciones… pero este cuerpo era sin duda de una chica francesa. Aún más, ella poseía la mayoría de sus memorias. Pero en vez de tener a dos personalidades en un solo cuerpo – una llamada personalidad múltiple – era más adecuado decir que ambas personalidades se habían fusionado en una. Tal vez dada su sincronía y su fuerte convicción de fe, ella fue reconocida y aceptó completamente a ‘La Pucelle’ dentro de ella.

“…Por favor préstame tu cuerpo por un tiempo, Laeticia.”

Dijo la chica a la propietaria del cuerpo.

Habiendo decidido su primera tarea, la chica saludo a ‘su’ amiga – moviéndose hacia la otra cama y sacudiéndola. Después de algunos quejidos, ella despertó y frotó sus ojos con apariencia adormilada.

“Mmm… ¿Q-qué…?”

Ella estaba tan claramente adormecida que la chica se sintió mal por despertarla, pero aun así hablo claramente.

“Abandonare este lugar por un tiempo.”

Tal vez al ser incapaz de entender la seriedad de las palabras de la chica ella se dejó caer nuevamente sobre la cama mientras agitaba su mano a modo de despedida – lanzando sus cobijas a un lado unos pocos segundos después en medio de un grito.

“¡¿Qué es lo que acabas de decir?!”

“Lamento marcharme tan repentinamente pero no poseo mucho tiempo.”

“¿Qué? ¿Porque la prisa? Que significa esto tan repentino – ¡acabas de decir ‘Buenas noches’ y ‘Nos vemos mañana’! ¡¿Qué es lo que estás diciendo?!”

La chica miró a su sorprendida – y ruidosa – amiga con paciencia y le dijo tres cosas:

‘Voy a realizar un largo viaje’

‘Debo de ir a como dé lugar.’

‘No te preocupes.’

Su amiga escucho cada palabra sin expresión alguna, su boca completamente abierta, pero finalmente asintió en entendimiento

“De acuerdo… No podemos evitarlo si en realidad debes hacerlo…”

“Así es. Se lo explicare a los profesores.”

“Bien, de acuerdo… Buenas noches entonces.”

“Buenas noches.”

La chica no utilizó taumaturgia para lograr una sugestión en su amiga. Pero como Servant Ruler, ella tenía la habilidad de hacer que los demás creyeran en sus palabras.

Les dijo a los maestros y a sus amigos que debía de salir de viaje y los hizo entender que era absolutamente necesario. Ella probablemente era más insistente de lo que debería de ser pero no había forma de evitarlo – así que suspiro e hizo a un lado tales preocupaciones inútiles.

Afortunadamente, el propietario de este cuerpo vivía en el dormitorio de los estudiantes, muy lejos de sus padres. Era poco probable que siquiera notaran su desaparición aun si fuera por un mes.

Empacando un cambio de ropas, su pasaporte y algunos libros de texto en su mochila, ella abandonó el dormitorio. La propietaria de este cuerpo… Laeticia es aún una estudiante. Ella, por otro lado, proviene del campo y nunca tuvo una oportunidad de aprender a leer o escribir – que extraño había sido el ser capaz de adquirir conocimiento automático de los lenguajes modernos, gracias al Santo Grial.

“…Aun así esto es demasiado extraño.”

Ella debería de haber sido invocada como cualquier otro Servant – actualizado en la ciudad donde se llevaría a cabo la batalla sin tener que tomar prestado el cuerpo físico de alguien más.

Sin embargo, había sido invocada en esta ocasión a través de la posesión de la carne de alguien más, y adicionalmente había sido invocada en su país de origen – una Francia que aun cuenta con vestigios de su pasado.

Además, Ruler debería de ser el octavo Servant invocado – esta ocasión, ella era el quinceavo Servant. Entre todas las Guerras del Santo Grial del pasado, la escala de esta seguramente es la más grande. Tal vez hubo alguna clase de accidente durante la última Guerra del Santo Grial de gran escala…

En cualquier caso – ya que ya había sido invocada – la chica estaba determinada a sobrepasar todas las dificultades para llevar a cabo su misión.

Ella es Jeanne D'Arc – el Servant sin Master de la clase Ruler, y la controladora absoluta de la Guerra del Santo Grial.

--- Y así Ruler se dirigió directo al aeropuerto en el autobús nocturno y se encamino a Bucarest, Rumania. Si tan solo pudiera pasar a la Forma Espiritual… pero parece que es imposible para ella.

Sin ninguna otra opción, tuvo que utilizar su propio dinero – o mejor dicho, el de Laeticia – para comprar un boleto de avión. Tal vez debería de realizar una petición a la Iglesia o a la Asociación más tarde, pensó, deprimiéndose un poco.

En el avión comenzó a repasar el conocimiento que le había sido otorgado. Entendía el lugar que se convertiría en el campo de batalla – la pequeña ciudad de Trifas en Rumania. Era el Segundo Propietario de esa tierra, Yggdmillennia, quien organizó esta Gran Guerra. Oponiéndose a ellos se encontraban los magos de la Torre del Reloj, de la cual se separó Yggdmillennia. Pero el problema con la situación actual es que no se trataba de una guerra de todos contra todos entre siete Servants si no un conflicto de una escala sin precedentes entre dos bandos de siete.

Era difícilmente raro que un duelo a muerte entre dos Servants dejara los edificios a su alrededor completamente destruidos a su conclusión. Y esto cuando eran siete contra siete… Era preocupante el solo pensar acerca de la capacidad de destrucción que una confrontación entre dos bandos provocaría.

¿Era la escala de este conflicto la razón por la que había sido invocada como Ruler? ¿Acaso había sido llamada por el Grial Mayor temiendo un total colapso en la Guerra del Santo Grial?

No lo sabía… y ahora no era el momento para especular.

Primero debía llegar a Trifas – todo comenzaría ahí.

Le tomo un día y medio llegar al Aeropuerto internacional Henri Coandã en Bucarest, incluyendo el tiempo de transferencia y espera. Era poco después del medio día – gruesas y oscuras nubes llenaban el cielo, como si este estuviera a punto de llorar.

Aunque se le había otorgado conocimiento sobre este aeropuerto, construido con las más recientes técnicas de construcción, aun la impactaba lo novedoso de este.

Sus piernas se sentían pesadas, tal vez porque paso todo ese tiempo sentada. Durante el largo viaje aéreo pasó la mitad de su tiempo pensando sobre la Gran Guerra y uso la otra mitad para rezar por un viaje seguro. Gracias a su conocimiento como Servant entendía completamente qué clase de transporte era un avión. Pero eso era completamente diferente a ir realmente en uno. El hecho era que ella no deseaba entender porque esta maza de metal podía volar por los aires… a decir verdad simplemente estaba feliz de que no cayera del cielo.

La visión de una chica de apariencia tan indefensa caminando por ahí con su mochila en sus manos debió de parecer el blanco más fácil del mundo para los ladrones que rondan por el aeropuerto… pero nunca se les ocurrió siquiera ponerle una mano encima. No eran tan descorteses como para ensuciar de fango algo tan puro.

Trifas se encontraba al noroeste. Sería capaz de utilizar algún tipo de transporte para llegar hasta ahí, ya fuera tomando un autobús o pidiendo que la lleven…

"...Hmph."

En el instante en que salió del aeropuerto, múltiples líneas de visión atravesaron a Ruler.

Sin embargo ella no podía detectar ningún Servant en los límites del campo de detección centrado en ella – el cual posee un radio de diez kilómetros.

Ruler puede nulificar incluso la habilidad de Ocultamiento de Presencia de Assassin. Si no podía detectar alguna poderosa habilidad de detección a pesar de sentir las miradas de la gente…

“… debe de tratarse de visión remota o de familiares.”

Generalmente hay dos métodos donde la taumaturgia puede permitir ver cosas desde lejos. La primera es la visión remota – utilizar una bola de cristal, un espejo o similar para observar una locación distante. Mientras que haya una especie de médium uno puede observar el exterior incluso desde la seguridad de su propio taller. Por ello, la mayoría de los magos han dominado este tipo de taumaturgia.

La otra forma es utilizar un familiar – crear un semi ser viviente al modificar un animal pequeño u organismo. Al unir las líneas causales entre maestro y familiar uno puede compartir sus cinco sentidos. Esto también es considerado un tipo básico de taumaturgia por la mayoría de los magos.

Analizando el cielo gris, Ruler noto innumerables palomas mirando en su dirección. Parecía ser que se trataban de familiares – pero, aun sin importar cuanto se esforzara, no podía ver signos de inteligencia en sus ojos. Normalmente al concederles cabello o sangre de un mago, la creatura que se convierte en familiar gana cierto grado de inteligencia. Aunque no podían hablar, su intelecto debería de ser detectable.

Aun así se veían justo como simples palomas, aunque era indudable que la estaban observando.

¿Acaso estaban siendo controladas por alguna sugestión hipnótica? Ese sería un método demasiado rebuscado.

Ruler puso una mirada seria, primero en la dirección de donde estaba siendo observada y después a las palomas. Su mirada no contenía ninguna especie de prana o poder, pero dejo en claro sus pensamientos.

La sensación de ser observada desapareció, y todas las palomas volaron al mismo tiempo. Ruler suspiro cuando confirmo esto.

En esencia, un Ruler no forma parte de la Guerra del Santo Grial… Sin embargo, dado que la posición demanda que se juzgue a Master y Servants que violen las reglas, se requiere una cantidad adecuada de fuerza de combate.

No muchos han experimentado la Guerra del Santo Grial dos o tres veces e incluso entre ellos, es dudoso que alguno haya tomado parte en alguna en que un Ruler se haya manifestado. Tal vez deseaban medir el poder de tal Servant.

“Más y más parece que esta guerra requerirá de un juicio difícil de mi parte…”

Esta Gran Guerra presenta un gran punto a favor de Ruler – los catorce Servants están divididos equitativamente en dos campos, Noir y Rouge. En otras palabras, evita un escenario donde los catorce Servants actúen todos de manera independiente. Es una pesadilla suficiente el imaginar a todos esos Servants desbocándose a voluntad – en el peor escenario ellos podrían destruir la ciudad entera.

“Cualquiera que sea el caso, primero debo dirigirme a Trifas…”

Murmurando para sí misma, Ruler comenzó a buscar un autobús, solo para encontrarse con que ninguno se dirigía directamente a Trifas. Ella tendría que dirigirse primero a Sighisoara y avanzar desde ahí. Pero resulta que no habría ningún autobús a Sighisoara hasta mañana. Sin ninguna otra opción, Ruler pregunto en los alrededores para saber si alguien se dirigía a Trifas. Al final, un hombre delgado de lentes, un cazador de venados, dijo que podría llevarla.

“Si, yo mismo me dirijo hacia Trifas.”

“¿Así que podrías…?”

“Pero Trifas en realidad no es un lugar para turistas. Es cierto que tienen un gran castillo – pero, graciosamente, es propiedad privada y no puede ser visitado. Sighisoara es un lugar mucho mejor si estas interesada en la historia, al ser el lugar de nacimiento de Vlad Tepes y todo eso…”

“Tengo a algunos parientes esperándome en Trifas. ¿Podrías por favor ayudarme?”

Bien, de acuerdo, si ese es el caso. Pero llevo un cargamento frágil que debo mantener en el asiento del pasajero, así que no podrás ir ahí. ¿No te importa ir sentada en la parte trasera o sí? “En lo absoluto. Gracias por su generosidad.”

“Solo ruégale a Dios que no llueva.”

El viejo comenzó a reír mientras ella se acurrucaba en la parte trasera de la camioneta.

“Si, eso es lo que hare.”

Ruler respondió rápidamente. Ciertamente ella podía hacer poco más que orar cuando se trataba del clima.

Después de una serie de golpes, como los que uno obtendría de patear un barril vacío de metal, la camioneta se ajustó y comenzó a moverse. Mientras la camioneta rugía, Ruler observaba el escenario de Bucarest pasar a su lado.

La camioneta se agito con un golpe. Algo de humo negro comenzó a fugarse del mofle.

“Si… bastante diferente de un caballo.”

Existe cierta diferencia entre la vibración orgánica de un caballo y el ajetreo repetitivo de una máquina – tal vez, a cambio de la velocidad y durabilidad se había dado a cambio algo de confort.

Ella recordó al caballo blanco que una vez había cruzado el campo de batalla a su lado. Un buen corcel… pero se perdió durante la batalla de Compiègne. Seguramente había sido asesinado, pero tal vez logro encontrar un nuevo jinete.

Mientras la camioneta ganaba velocidad lentamente, varias cajas de madera que llevaba en la parte trasera comenzaron a agitarse. Sorprendentemente, la camioneta se movía a la velocidad de un caballo para ese momento – pero probablemente era porque la camioneta misma estaba por debajo del nivel en términos de rendimiento. Si se tratara de un caballo, estaría cerca de su retiro.

Por supuesto, a diferencia de un caballo, un auto no se queda sin aliento a medio camino. La camioneta se movía hacia Trifas lenta pero constantemente.

“Disculpe señor. ¿Cuánto tiempo tomara llegar a Trifas?”

Ruler atrajo la atención del viejo que se encontraba tarareando en el asiento del conductor.

“Hmm… a esta velocidad, probablemente serán doce horas.”

“¿Tomara tanto tiempo?”

“Bueno, tendremos que hacer una parada de descanso en algún lugar.”

“Ya veo… Tendrá que ser así entonces.”

Ruler se sintió algo decepcionada, pero, caprichosamente, decidió sacar un libro de texto de su mochila.

“El pensar que una simple granjera como yo tuviera la oportunidad de ser educada… Que maravilloso se ha vuelto el mundo.”

Sin embargo, aunque el Santo Grial le había otorgado el conocimiento que necesitaba para sobrevivir en este mundo moderno, aun así no iba tan lejos como para enseñarle sobre el contenido de este libro. En otras palabras, Ruler sabía tanto como la chica a la que estaba poseyendo.

"...Je n'ai aucune idée."

Ruler comenzó con un libro de matemáticas, mientras que un presentimiento de los problemas que vendrían comenzaba a llenarla.

La carretera de Transilvania es la única autopista nacional que puede llegar hasta Trifas, la cual no es accesible incluso por la red de trenes. Muy pocos vehículos se dirigen hacia ‘la última parada’ que representa Trifas. Más de la mitad de las luces de tráfico alineadas en ambos lados del camino se encuentran dañadas. Incluso el gobierno ha decidido cortar el presupuesto, probablemente a causa de la falta de quejas de los conductores.

La pálida luz de la luna fallaba en brillar constantemente en el camino y las señalizaciones. Bajo estas circunstancias solo el sentir el asfalto puede decirte si estas en el camino correcto.

…De acuerdo a los reportes de las palomas, Ruler había decidido – por alguna razón – pedir que la llevaran a Trifas, sin siquiera entrar a su forma espiritual.

Él no tendría que rastrearla – solo esperaría a que su transporte pasara eventualmente. Es por ello que el Lancer de la facción Roja había estado esperando en la autopista en forma física, listo para llevar a cabo sus órdenes.

Para Lancer, no hay tal cosa como que le ‘agrade’ o le ‘disguste’ una orden que se le ha dado. Incluso evitará considerar como es que dichas órdenes se relacionan a la situación actual. El hecho de que sirva al Master que lo ha invocado es de la mayor importancia.

Pero incluso él tiene ciertas dudas sobre la orden actual. Se le ha encomendado, no matar a un Master enemigo o a un Servant rival, o incluso devorar civiles inocentes para recargar prana – si no destrozar a Ruler, el quinceavo Servant que tiene la tarea de presidir esta guerra. No tenía opción más que aceptar las instrucciones de su Master.

En primer lugar, los Servants de la clase Ruler no se supone que deban apoyar un bando u otro. Ellos simplemente llaman la atención a aquellos que rompen las reglas y proporcionan los castigos, para prevenir las situaciones donde la Guerra del Santo Grial misma se vea afectada.

Es seguro que Ruler había sido marcada para su eliminación para evitar una penalización posterior por romper las reglas de alguna forma… pero era una decisión apresurada si ese es el caso. Aun así no podía encontrar otra razón para esta tarea.

En cualquier caso, ordenes son ordenes, y Lancer no era de los que suelen quejarse. En vez de eso tales pensamientos ya habían sido retirados de su mente.

Una vez que se le ordenaba matar – solo necesitaba llevar a cabo esa masacre sin ninguna piedad.

Una sola paloma aterrizo en su hombro y se apresuró a volar en cuanto él retiro una pieza de papel de su pico. Debió de tratarse de un familiar de Assassin.

Aunque el Caster del Campamento Rojo es un Servant único, el Assassin rojo ciertamente no es menos que una maravilla. A pesar de tomar la forma de un Assassin, la Reina de Asiria poseía la increíblemente rara habilidad de ser una Doble Invocación y puede funcionar como Caster también. Por ello, Assassin puede llenar el rol de Caster donde el mismo Caster falla en hacerlo.

"...Hmph."

El mensaje era en verdad conciso – con solo un tipo de vehículo y un número de licencia. Eso era más que suficiente para que él reconociera el blanco.

Lancer se sentó encima de un gigantesco señalamiento en la carretera, dejando caer una pierna y esperando que Ruler se aproximara. A decir verdad casi no sabía nada del tipo de Servant que era su blanco, eso era un hecho. El Grial Mayor probablemente había asegurado toda la información acerca de Ruler.

El Servant Ruler escogido por el Grial Mayor para llevar a cabo la tarea de controlar la Guerra del Santo Grial. De alguna manera era un supervisor que podía imponer castigos a aquellos que involucraran personas ajenas al conflicto. Sin embargo, este poder es insignificante comparado con el que posee el supervisor, un humano real. Más importante es que el Ruler posee el ‘privilegio’ adecuado a su rol como el solitario controlador de toda la Guerra del Santo Grial.

Derribar a un Ruler sería una tarea demasiado compleja para llevarla a cabo – esa era una razón más para tener a ese Servant como alguien digno con quien pelear.

En la distancia, Lancer pudo observar las tenues luces de un coche.

Ella había dormido cerca de tres horas durante su viaje. La camioneta que llevaba a Ruler finalmente comenzaba a aproximarse a Trifas donde Ruler detecto a un Servant algunos kilómetros más adelante.

En un instante, la alarma de su mente fue encendida.

¡Él es peligroso! ¡Ese Servant es peligroso más allá de cualquier comparación!

“¡Detén el auto justo aquí!”

Dijo Ruler al viejo, forzándolo a detener la camioneta.

“¿Qué estas hacie…?”

“Por favor espera hasta el amanecer antes de seguir manejando. Está bien, yo caminare desde aquí.”

Después de hacer que el hombre con el ceño fruncido entendiera y de separase de él, la chica tomó su mochila y corrió a toda velocidad. Tal vez un campo que previniera la entrada de otros ya había sido erigido – después de muchos kilómetros, ella ni siquiera podía sentir la presencia de algún animal, sin siquiera mencionar autos.

Bajando su mochila ella inmediatamente se cambió a su vestimenta de batalla. Una armadura tejida de prana la rodeo. La situación solo parecía ser más y más crítica de lo que ella imaginaba – suficiente como para llevar la pelea hasta Ruler.

“… Servant Ruler, imagino.”

Una voz provino de encima de ella. Mirando hacia arriba, lo que ella pudo ver fue a un joven hombre esperándola, arrodillado en una pierna sobre el gigantesco anuncio de la carretera.

Su cabello era largo, poco cuidado y tan blanco que parecía transparente. Su mirada era aguda como una hoja de acero, y la piedra roja clavada en su pecho expuesto proyectaba un lustro similarmente fascinante. Pero lo que llamaba la atención más que nada era lo que estaba enroscado a su alrededor – o mejor dicho, lo que se había fusionado - con su cuerpo entero: una armadura dorada que irradiaba divinidad.

Aunque cada parte era bella por sus propios méritos, una vez que se combinaba con el hombre, exudaban más ferocidad que atractivo. En verdad se trataba de un hombre curioso.

Ruler lo observo sin bajar su guardia en lo más mínimo, y dijo.

“Tú eres… el Lancer Rojo, ¿cierto?”

“¿Oh? Así que puedes percibir tales cosas incluso sin ver mi arma.”

Sonando bastante intrigado, el hombre – Lancer – asintió.

“Por supuesto. Y también se tu verdadero nombre – Espíritu Heroico Karna.”

"..."

Parece que el nombre fue suficiente para hacer que Lancer se pusiera de pie.

Karna es bien conocido como el héroe invencible del Mahābhārata, una épica de la India antigua.

Traído al mundo por el Dios del Sol Suruya y la mujer humana Kunti, fue dotado con una armadura dorada como la confirmación de su herencia. Karna había nacido para convertirse en un gran héroe.

“Ya veo… Si, está más allá de la duda que tú eres Ruler. El que puedas percibir mi verdadero nombre cuando aún no he sacado mi lanza es prueba de ello.”

“Es correcto. Así que, Lancer, ¿Qué es lo que estás haciendo aquí?”

“…No es sabio preguntar sobre un asunto que ya has comprendido por completo. Mi presencia aquí habla por sí misma – es una declaración de guerra.”

Aunque ella ya estaba segura de que ese era el caso, aun deprimía a Ruler el que lo dijeran en voz alta.

“No, son tú y tu Master a quienes les falta sabiduría. ¿Qué puede resultar de matarme en esta etapa?”

“Yo no lo sé.”

La breve respuesta de Lancer rechazaba cualquier intento de comunicación. Él prosiguió.

“Pero se me ha ordenado que mueras aquí. Eso es todo – simplemente actúo de acuerdo al contrato.”

Instantáneamente, una luz azul blanquecina penetro a través de la mano derecha de Lancer. Sin embargo, solo estaba dándole forma al objeto que debió de haber estado ahí desde un comienzo.

Era una lanza gigantesca, más larga que la altura del mismo hombre. La lanza era tan enorme que no parecía que fuera posible que un humano la portara, y de tan exquisita apariencia que era prácticamente una obra de arte. Solo podía ser descrita como un arma otorgada por los Dioses.

"¡Lancer...!"

“Aquí voy. Desafortunadamente, dado tu ‘privilegio’ como Ruler, no puedo darme el lujo de subestimarte. Dejemos que mi primer ataque decida nuestro duelo.”

Los ojos de Ruler se ampliaron dado que su prana creció de inmediato – Lancer no planeaba intercambiar golpes si no liberar el nombre verdadero de su Noble Phantasm. Actuaria antes de que ella pudiera poner en ejecución su ‘privilegio’…

"¡Kuh...!"

Preparándose, ella invoco su arma… y en ese momento, sintió la presencia de un segundo Servant.

“¡Hazlo Saber!”

Al mismo tiempo, un hombre con una voz profunda gritó y el pilar de metal que soportaba el anuncio fue partido en dos de un solo corte. El lugar donde Lancer estaba de pie rápidamente colapso – pero por supuesto, eso no es suficiente como para perturbar a un Servant. Lancer dio un salto y aterrizo firmemente en el asfalto, completamente listo.

“Tú…”

Murmuró Lancer, su voz parecía como el viento frio, mientras se daba la vuelta para encarar al Saber que había arribado. Junto a Saber se encontraba de pie un hombre corpulento, quien observaba fieramente a Lancer con un obvio miedo y animosidad. Parecía ser el Master de Saber.

“Tú eres el Saber Negro, entonces. Ciertamente no eres ni Berserker ni Assassin – no con tal presión proveniente de una espada tan imponente.”

El Saber que lo encaro asintió sin palabras.

“Hmm… así que tú objetivo también es Ruler.”

Lancer la miro brevemente. Su objetivo podría ser el mismo, pero su meta probablemente no era eliminarla si no encerrarla. Cualquier bando que tome posesión del Ruler neutral indudablemente ganara una ventaja sobrecogedora.

El Master de Saber – tal vez actuando como alguna clase de portavoz – dio un paso adelante hacia Ruler y respetuosamente extendió su mano.

“Parece que se encontraba en problemas, Oh Ruler.”

Ruler asintió ligeramente en acuerdo.

“Tú eres el Master del Saber Negro, ¿cierto?”

“Si… Mi nombre es Gordes Musik Yggdmillennia, y estoy participando en esta Gran Guerra del Santo Grial como Master del Saber Negro. Ahora…”

Sus mejillas se estiraron en una sonrisa, Gordes señalo con el dedo a Lancer y grito sus acusaciones.

“¡Vil Lancer del campamento Rojo! ¡Hemos sido testigos de tu atentado contra la vida de Ruler! Planear la destrucción del Espíritu Heroico que guía la Guerra del Santo Grial es una total transgresión. Esto no puede ser perdonado con una simple penalización… ¡Ponte de pie y prepárate para aceptar la sentencia otorgada por Saber y Ruler!”

Sus palabras eran tanto una acusación como una propuesta de cooperación. A los ojos de Gordes, el poder del Noble Phantasm que Lancer estaba a punto de liberar no podía ser ignorado. Por ahora, era más sabio pelear a lado de Ruler – con el ‘privilegio’ invencible que poseía – para derrotar a Lancer.

El ataque previo de Lancer seguramente estaba dirigido a Ruler. Era natural que Ruler aceptara este plan… o eso asumió Gordes.

Sin embargo, Ruler le lanzo una mirada aguda a Gordes cuando escucho sus palabras.

“Saber Negro, y Lancer Rojo – No tengo objeciones en que peleen entre ustedes en este lugar. No me mezclare en su batalla, eso puedo asegurárselos.”

"¿...Huh?"

Ruler anuncio esto ante un sorprendido Gordes.

“El atentado de Lancer contra mi vida no tiene en absoluto nada que ver con la batalla entre ustedes dos. Como Ruler, es mi deber el proteger la dirección de este conflicto.”

Gordes emitió un gruñido de tono grave. No podía entender los valores en los que este Servant estaba basando su juicio. ¿Acaso ella realmente planeaba esperar hasta que el que había intentado matarla hubiera terminado su pelea?

“Hmph… ¿Así que estabas tratando de inclinar la situación al lograr que me enfrentara a dos oponentes? ¿Acaso la victoria es la única cosa que te importa? Que despreciable – aunque supongo que también esa es una forma de hacer la guerra. No hace ninguna diferencia para mí.”

Completamente en calma y seguro, Lancer declaró que no tenía ningún problema en enfrentar a ambos Servants a la vez. Sus palabras hablaban volúmenes de su confianza en sí mismo. No lo decía por arrogancia o precipitación, porque para él, era una simple verdad el que no podía ser derrotado.

“¿Qué…?”

Gordes se quedó sin palabras, impresionado tanto por los insultos de Lancer y sus palabras tranquilas, incluso cuando Lancer se encontraba ante el Servant en el que Gordes tenía puesta toda su confianza.

Su sorpresa de inmediato se transformó en odio, Gordes grito con un enojo desafiante.

“¡Mátalo Saber! ¡Aplasta a ese Lancer hasta hacerlo pedazos!”

Saber - quien no había dicho ni una sola palabra en todo este tiempo – asintió ligeramente ante las palabras de su Master y corrió hacia adelante, sin temor o duda en sus pasos.

“… Muy bien. Este duelo es nuestro, Saber de la facción Negra.”

Cuando murmuro esto, Lancer vio algo en el rostro del espadachín – una ligera sonrisa tan tenue y fugaz que difícilmente la habría podido percibir alguien. Por un instante, los labios de Siegfried se arquearon.

La visión de Lancer repentinamente se llenó de recuerdos. ¿Pero qué es lo que este Saber – claramente de una época y tierras diferentes – podrían haberle hecho recordar?

“Conocí a un hombre como tú alguna vez. Tenía la misma mirada que tú.”

Por alguna razón, Lancer decidió gastar unas cuantas palabras en él. Saber asintió ligeramente, como si deseara que continuara.

“Está más allá de la duda que él fue un héroe. Y el que tú me mires con los mismos ojos… Esta batalla entre nosotros no es un resultado de la casualidad, sino de lo inevitable.”

El deseo de Lancer por un combate ardía como un infierno azul. Algún tipo de presión silenciosa comenzó a filtrarse en la espada del silencioso Saber. Un olor a quemado llenaba el aire, como si estuviera quemándose en el sol. Era difícil decir si provenía de las armas de esos dos o del intenso espíritu de pela de los dos Servant que chocaban el uno contra el otro. Cual fuera el caso, Lancer podía vera la clara verdad en esto.

Ya veo. Así que tú también deseas pelear contra mí…

Esa creencia le trajo una gran alegría a Lancer. Si… nada podía interponerse entre ellos ahora. Ellos pelearían y se matarían hasta el final.

Ambos somos Espíritus Heroicos… hombres locos que anduvieron sus respectivos caminos hacia un final amargo incluso cuando continuaban peleando. ¡Ni siquiera el ganar una segunda vida y tomar forma en la era presente ha cambiado nuestra fe!

Ellos no rugieron. No gritaron o gimieron. En vez de ello, sus espíritus se volvieron de un calor blanquecino y quemaron la tierra alrededor de ellos.

Ruler y Gordes retrocedieron en silencio del lugar donde se encontraban. El infierno rugiente hablaba directamente a sus instintos como seres vivos, alertándolos de que estaban demasiado cerca.

Finalmente – cuando Ruler y Gordes finalmente se retiraron a lo que asumían sería una locación segura – ambos comenzaron su duelo y con él, esta Gran Guerra del Santo Grial en su forma adecuada: una pelea a muerte entre Servants.

…Su lanza rugía, partiendo el aire en dos.

…Su espada aullaba, gritando con el viento.

Ellos chocaron. Chispas volaban por el aire como almas perdidas mientras estas dos enormes fuerzas se resistían una a la otra.

Ni siquiera era necesario decir que Lancer y su lanza tenían la ventaja en términos de rango. Solamente la cabeza del arma era fácilmente de más de un metro en toda su feroz longitud.

Sin embargo, el tener un rango más amplio naturalmente alentaba la velocidad del ataque.

Una pequeña cantidad de tiempo se perdía con cada estocada mientras la lanza regresaba a su posición original.

Por supuesto, el trabajo de lanza de Lancer le hacía justicia a Karna, cuyo nombre había hecho eco en cada esquina del mundo. Al ser nada más que un Master, era probable que Gordes ni siquiera comenzara a comprender lo que sucedía frente a él.

Pero aun así este asalto de estocadas de lanza – que parecían formar un impenetrable muro de piedra – estaba siendo recibido por Siegfried, el asesino de Dragones de los Países Bajos, cuya habilidad con la espada había sobrepasado hace mucho a la humanidad. Haciendo uso entero de cada apertura entre las estocadas, él comenzó a acortar la distancia entre ellos un paso a la vez.

Sin embargo, incluso para un espadachín excelente, no es como si cada estocada de la lanza pudiera ser defendida sin fallo. Era más que imposible recibir completamente los constantes ataques de un lancero que se ha adentrado tanto en el dominio de los Dioses.

A pesar de esto, Saber continuó tranquilamente su avance – un acto tan sorprendentemente temerario que incluso Ruler, quien sabia de su leyenda, quería gritar que se detuviera.

‘Nada aventurado, nada ganado’. ‘Encontrar vida a través de la muerte’. Estas palabras en sí mismas eran brutalmente simples. Sin embargo, había una gran dificultad en practicarlas, y la mayoría de quienes lo intentaban solo terminaban como cadáveres hundidos en el fango.

Saber dio otro paso más. Maniobrando su espada con el menor movimiento posible, él se protegía de la lluvia de ataques generados por la lanza. Sin embargo, estaba lejos de ser suficiente. Varias estocadas conectaron directamente con sus puntos vitales. Sus arterias fueron cortadas y su frente fue atravesada – pero resulta que ese no fue el caso.

"¡¿...?!"

Lancer inmediatamente retrocedió por tan bizarra escena. Después de ganar algo de distancia, miro a Saber fríamente.

“Esas heridas son superficiales.”

Lancer ya había perforado a Saber, no una, si no setenta y ocho veces – con cada una de ellas siendo en un punto vital. Aun así Saber sostenía tranquilamente su espada.

No era como si no hubiera recibido ninguna herida, pero la profundidad de cada una era demasiado extraña. Con la cantidad de fuerza que Lancer había puesto en su lanza, sus brazos deberían de haber sido despedazados y sus ojos deberían de haber sido arrancados.

Sin embargo, gracias a la taumaturgia de curación de Gordes, todas las heridas de Saber se cerraron a la vez, probando que eran suficientemente superficiales para permitir una regeneración instantánea.

Pero eso no podía ser posible. Al menos sería lógico, aunque increíble, si Saber hubiera de alguna manera logrado evitar su ataque con la lanza hace unos momentos. Pero el recibir tan poco daño incluso después de haber sido golpeado directamente no podía ser…

Era una imposibilidad y, al mismo tiempo, un fenómeno que había ocurrido con seguridad – así que debía de haber una razón. Un razón del porque el Saber Negro no podía ser herido severamente… tal vez él era un favorito de los Dioses, muy parecido al Rider de su propio bando, o había entrenado para que su cuerpo fuera de esa manera, o…

“Ah… Ya veo. Finalmente lo comprendo.”

Un sentimiento de exaltación – algo que Lancer no había sentido en un largo tiempo – se apodero de su corazón. Si… este Saber en verdad era muy similar a él.

Por supuesto, Saber se sentía tan impresionado como Lancer. Él poseía la

Armadura de Fafnir
La Armadura de Sangre del Dragón Maligno

- una habilidad que permite recrear la leyenda del héroe que se bañó en la sangre del dragón, nulificando todos los ataques de rango B o menor.

En otras palabras, debería de haber sido imposible que Saber fuera herido en este estado… no por esa lanza, la cual solo había sido utilizada como una pieza común de armamento y no había sido activada por completo como un Noble Phantasm.

Aun así cada uno de los setenta y ocho golpes de Lancer le habían causado daño. Las heridas eran suficientemente ligeras para ser curadas instantáneamente por la taumaturgia de su Master… pero eran más que suficiente para aterrorizar a Siegfried.

Quería decir que la lanza de Lancer poseía un poder proporcional a un ataque de rango A. Pero mientras que la lanza misma era ciertamente una gema rara, nunca podría haber penetrado este cuerpo de dragón y logrado generar daño por sí misma. La fuerza destructiva de Lancer viene de su inmensa fuerza física y su técnica trascendental.

Increíble…

Saber mantuvo su apariencia mientras permitía que la felicidad se revelara dentro de sí mismo. Ni en vida había cruzado espadas jamás con una figura tan poderosa. Desde el momento en que derroto al dragón que había causado que muchas villas fueran destruidas, Siegfried había creado numerosas leyendas gracias a su cuerpo inmortal… pero había perdido hace mucho la sensación de luchar contra la muerte… rozando con su alma el punto de no retorno.

Con este cuerpo a prueba de todo ataque. Siegfried simplemente destrozaba a sus enemigos sin siquiera pensar en su hazaña. Nunca había dificultades. Era más cercano a una forma de labor.

Pero esta batalla no era en nada parecida.

Se testigo de su lanza demoniaca penetrando mi armadura de dragón… sus habilidades divinas…

¿Cuántas leyendas habría creado este hombre? ¿Cuántas dificultas habría sobrepasado?

Ese mero pensamiento llenaba a Saber de admiración. Y parecía que el Lancer ante él tenía la misma opinión.

En silencio, ambos asintieron ante el otro – y se entregaron al duelo nuevamente.

La lanza era blandida hacia Saber nuevamente. Entre ellos, había un deseo de luchar, de pelear y matar – dos voluntades de acero.

Saber corrigió su postura con su espada larga. Lancer sujeto su lanza con ambas manos.

La noche carecía de Luna, no había luz… pero no importaba, porque un sol de espíritus elevados y vientos enérgicos brillaba sobre ellos – y estos dos poco comunes Espíritus Heroicos chocaron sus espadas una vez más.


"Grgh..."

Gordes apretó sus dientes mientras observaba la pelea a muerte entre el Saber Negro y el Lancer Rojo. No hubo oportunidad de que siquiera utilizara su taumaturgia – el Master oponente ni siquiera estaba en la escena.

Pero lo que más lo molestaba era el hecho de que su Saber – el gran héroe Siegfried, el más poderoso de los Sabers que podía ignorar cualquier ataque debajo del rango B – no estaba ganando.

Incluso Saber es incapaz de defenderse por completo ante el asalto de Lancer. Debía buscar ayuda.

“Oh Ruler, te lo ruego. Al menos dinos su verdadero nombre -”

“No puedo hacerlo. Eso iría en contra de mi posición como un Servant neutral.”

Respondió Ruler de manera seca. Gordes continúo suplicando.

“¡Pero él trató de matarte! Si el Servant Negro fuese a caer aquí, te convertirías en su objetivo nuevamente. Debemos -”

“Como dije antes, eso no tiene nada que ver con esto. Yo fui invocada como Ruler – no puedo permitir que mis asuntos personales afecten la pelea entre ellos.”

“¡…!”

La impaciencia de Gordes resurgió. Ellos los estaban observando, por supuesto que lo hacían – Darnic y los otros, a través de la visión remota de la taumaturgia de Caster y sus familiares.

Ellos lo observaban, el tonto Master que solo podía quedarse ahí congelado por la increíblemente dominante presencia de dos meros Sevants, incapaz de dar órdenes o apoyar con alguna hechicería.

¡Esto es absurdo! ¿Acaso no estamos peleando en la Guerra del Santo Grial? ¿Acaso no es la máxima competición taumatúrgica que se decide entre dos Masters y Servants? ¿Donde se encuentra el Master enemigo? ¿Por qué no se encuentra aquí? ¿Acaso teme por su vida? ¡Sal y déjame derrotarte! ¡Yo debo destruirte!

“¡Muéstrate, Master Rojo! ¡Deja que Gordes Musik Yggdmillennia vea la valía de un perro de la Asociación! Estas observando ¿cierto? ¡¿Cierto?!”

No hubo respuesta. Nadie le puso la mas mínima atención – ni siquiera su propio Servant, ni Lancer o Ruler.

La sensación de ser dejado atrás llevo a Gordes a sentir algo que no había sentido en mucho tiempo – vergüenza y pena.

-- Debo hacer algo.

-- Tengo como hacerlo.

-- Sí, tengo como, justo a mi lado.

Gordes miró el dorso de su mano derecha. Si, la prueba de que era un Master se encontraba justo ahí – el lazo entre él y su Servant, los Hechizos de Comando que estaban gravados por enormes cantidades de prana.

Es cierto – con solo utilizar este Hechizo de Comando el Servant es puesto bajo control sin ningún esfuerzo. Gordes no debía olvidar que su Servant no era un héroe. No era más que una marioneta.

No podía permitirse no hacer nada más que observar lleno de sorpresa como peleaba su Servant. Como Master, ¿No debería buscar la victoria a través de sus habilidades y juicios fríos?

Sin embargo, incluso Gordes era suficientemente centrado como para reconocer que la situación actual no era una en la cual pudiese intervenir. Tal vez era mejor decir que simplemente se encontraba demasiado intimidado.

Cada estoque de Lancer era como un disparo de un cañón, lanzando ráfagas rugientes de viento.

La espada dorada de Saber cortaba el viento y atravesaba la oscuridad.

Cada ataque se encontraba con su opuesto, juntándose y convirtiéndose en chispas. El pináculo de los espadachines y lanceros continuaban su lucha por el dominio.

La superioridad de la técnica de Lancer excedía la de Saber por muy poco, pero Saber poseía un cuerpo aun más resistente. Considerando todas las cosas, estaban casi igualados en fuerza. Un momento de descuido podría llevar a un corazón atravesado o una cabeza cortada.

Cualquiera encontraría difícil decir quién tenía la ventaja, pero aun se encontraba el factor de Gordes. A causa de la taumaturgia curativa de su Master, Saber siempre podía recuperarse del daño. Sin embargo la propia habilidad de curación de Lancer también era considerable, incluso por sí solo. Debía de poseer un poderoso lazo con su Master y debía de estar recibiendo una cantidad substancial de prana.

El sonido de metal chocando hizo eco por más allá de la diez milésima ocasión.

Ellos se encontraban cubiertos por más de mil luces, recuperando sus heridas.

Finalmente, ambos caballeros se detuvieron, pero no por fatiga. Dado que para estos héroes sin par, incluso tres días enteros de lucha nos los dejaría exhaustos. Pero el tiempo no espera por ningún hombre – y la negrura del cielo se estaba volviendo de un color azul oscuro.

De hecho varias horas ya habían transcurrido desde que comenzaron. Ninguno había utilizado sus Noble Phantasm - ni habían tenido la oportunidad de decir su verdadero nombre.

“A este paso pelearemos a plena luz del día, aunque eso no es ninguna preocupación para mí. ¿Qué hay de ti y tu cansado Master?”

“…”

Saber aparto su espada, silencioso hasta el final. Gordes trató de decir algo pero las palabras no afloraron. Aplastado por la voluntad de los hombres inmiscuidos en ese duelo, supo por instinto que no había lugar para que alguien como él abriera su boca. Después de dudarlo un poco, Saber – quien estaba atado a mantenerse en silencio por su Master – también se decidió a hablar.

“Me atrevo a esperar que nuestro siguiente encuentro nos permita pelear hasta estar satisfechos.”

Hubo una curiosa seriedad en sus palabras. El Lancer Rojo, Karna, no sabía nada de lo que se encontraba detrás de la brillante épica de Siegfried. Sin embargo, algo en esas palabras lo impresiono. Con un leve asentimiento, Lancer mostro su aprobación – también era algo que él deseaba en secreto, después de todo.

El llamarlo una promesa o juramento sería demasiado. Ambos lo entendieron y veían al otro como un Servant enemigo. Pero eso era una razón más para que ambos compartieran este sentimiento.

“Debo decir que… la suerte estuvo de mi lado. Agradezco desde el fondo de mi corazón que la primera de mis batallas fuera contigo, Saber Negro.”

Las palabras de aprobación de Lancer eran mucho mejores que cualquier premio. Entre ellos se encontraba el lazo que existe entre los guerreros – casi inocente, una esperanza adolecente de que cada uno cayera muerto en los brazos del otro.

“Hasta luego, Saber.”

“…”

Saber lo vio partir sin ninguna palabra. Abruptamente Lancer cambió a su Forma Espiritual y desapareció. El cielo comenzó a teñirse de un ligero color violeta, señalando el amanecer.

“…Una batalla esplendida. Todo lo que uno podría esperar del más grande héroe de Alemania.”

Saber asintió en silencio ante el elogio de Ruler.

Gordes se encontraba observando con enojo a Saber por haber hablado por un momento por su propia voluntad, pero se compuso y se dio vuelta para encarar a Ruler nuevamente.

“Oh Ruler, ¿Vendrías con nosotros? Si deseas continuar vigilando la Guerra en Trifas, puedo asegurarte que la Fortaleza Millennia te recibiría como invitada de honor como - ”

“Debo declinar. Eso iría en contra de mi imparcialidad. No necesitan preocuparse por mi – mis poderes de detección son muchas veces mayores a los de un Servant normal. Seré capaz de abrirme paso en cualquier batalla que ocurra en Trifas.”

Ruler rechazó el ofrecimiento de manera seca. Esta Gran Guerra del Santo Grial se trataba del choque sin precedentes de dos fuerzas – bajo ninguna circunstancia debería de parecer que ella apoyaba cualquier bando.

“…Nos marchamos Saber.”

Era claro por la molestia en el tono de voz de Gordes que su objetivo desde el comienzo fue asegurar a Ruler, pero sus planes cayeron en el caos a causa de Lancer. Y aun si su Saber pudiese haber retenido por la fuerza a Ruler, ya no le quedaba tiempo. Gordes era un mago después de todo. Nunca sería tan tonto como para pelear con un Servant a plena luz del día.

Con Saber en su forma espiritual, Gordes le dio la espalda a Ruler – sus hombros temblaban de la vergüenza.

Con la partida de Gordes, Ruler nuevamente observo los rastros de destrucción traídos por los dos hombres. No había un sentido, no había orden ni dirección en esta destrucción – prueba de que no hubo ninguna intención maligna en ello, sino que simplemente fue el resultado de un duelo. Si… el signo de trébol de la carretera y el cráter en el piso, que aparentaba ser el impacto de un meteorito, llegó simplemente cómo el resultado de los impactos de la batalla.

Gracias a dios que este no era un puente, pensó Ruler. Habría cedido bajo sus pies y podrían incluso haberlo colapsado por completo. No mataría a un Servant, pero la reconstrucción llevaría un largo tiempo. Eso en verdad sería una lástima.

De cualquier forma, la batalla entre el Saber Negro y el Lancer Rojo había sido un empate. Ninguno había sufrido alguna herida severa o había gastado grandes cantidades de energía. Solo fue un encuentro – nada más que una escaramuza.

Y aun así una simple escaramuza había llevado a tal escena.

De ahora en adelante la guerra solo aumentaría en intensidad, y algunos Servants y Masters probablemente intentarían sobrepasar sus límites. ¿Acaso era por lo que ella – el Servant Ruler, Jeanne D'Arc – había sido invocada?

Insegura de ello, no podía negar la posibilidad ni creer en ella por completo. Una voz en su interior le decía que algo estaba mal en esta ‘Gran Guerra del Santo Grial’.

“…No es de mucha ayuda el pensar en ello ahora. Solo puedo dar mi mejor esfuerzo.”

Ruler se dijo a si misma, apretando sus puños. Entonces, sintiendo algo de vergüenza por estar ahí de pie con toda su ropa de batalla en medio de la luz matinal, rápidamente libero la armadura tejida de energía mágica y regreso a sus ropas normales.

Bajo el cielo de un ligero tono violeta, la chica regresó al camino, tomó su bolsa y comenzó a caminar lentamente hacia Trifas.

Todos me están llamando.

Nos duele… Sálvanos… del dolor…

Sus gritos lo eran todo, más o menos repitiendo estas tres cosas – pero lo que les faltaba en variedad lo compensaban con volumen. Sus llamados por salvación, sus gritos contaban su agonía y su sufrimiento – esas eran las voces de aquellos sin poder, sollozando con miedo a la muerte, aplastados y sobrecogidos por su propio destino.

No… no me están llamando a mí, pensó. Simplemente están gritando – y él puede escuchar todo.

Esa era la verdadera tragedia. Si estuvieran implorándole a alguien que fuera su salvador, entonces al menos tendrían esperanza de salvación. Pero ellos simplemente lloraban, sin nadie que les respondiera… sus voces se diluían en el silencio.

¿Entonces en que me convierte eso…?

Y así, despertó de su sueño. Abrió sus ojos y miro su propio cuerpo. Si… no era nada más que un sueño; sus pequeñas manos no podían sostener una espada, y sus Circuitos Mágicos de primera clase amenazaban con destrozar su propio cuerpo si se atrevía a utilizar taumaturgia.

No tenía el poder de salvar a nadie. Ni el poder de tomar la mano de alguien más. Porque solo era un homúnculo, nacido hace unos meses. Había nacido para ser la batería que proveería de prana a los Servants, y después de ello se supondría que moriría.

Aun que ¿Quiénes serían los que estaban llamándolo? ¿Acaso era la chica a su derecha? ¿O el hombre a su izquierda? ¿O aquellos del otro lado que no pueden tomar forma humana?

Pero quien fuese el que lo hacía, no había nada que él pudiese hacer. El conocimiento que el Santo Grial le otorgaba le permitía entender que tan importante era el rol que él – y ellos – jugarían.

Esencialmente solo se requería una cosa para que los Servants aparecieran en este mundo: prana. Así que en la práctica, el Servant más fuerte es aquel que tenga la más grande cantidad de prana.

Sin importar que tan poderoso pudiese ser el Noble Phantasm de un Servant, sin suficiente prana, se arriesgaba a su propia aniquilación al llamar su verdadero nombre y despertarlo.

Por otra parte, mientras que un Noble Phantasm de bajo costo podría lógicamente ser más débil, podía ser utilizado en múltiples ocasiones sin preocuparse del prana. Comparándolo con una pistola de una sola bala, un arco que siempre puede recargar su fuente de flechas es claramente una mayor ventaja.

Por ello, entre mas prana posea un Master, mayor será la ventaja que posea. Ahí es donde Yggdmillennia logro voltear la situación con sus enemigos.

Su idea era simple y brutal: usar el prana de un tercero, exprimiendo cada gota hasta reducirlos a un cadáver. No utilizaron humanos normales para este propósito – no por alguna razón ética ciertamente – si no porque simplemente hubiese sido más difícil de ocultar… justo como sería difícil reunir suficientes magos para el sacrificio. ¿Pero quién lloraría por un homúnculo? Ellos costaban dinero y esfuerzo, pero solamente eso.

Al robar de los Einzberns y otras grandes casas alquímicas, habían aprendido técnicas que, para un experto, serían consideradas juego de niños – pero eso era más que suficiente para crear baterías vivas cuyo único uso era actuar como una fuente de prana. Yggdmillennia había apostado todo en esta Guerra del Santo Grial y ellos, los homúnculos, eran la clave.

Sin importar que tan costoso fuese el Noble Phantasm, ellos restaurarían su prana instantáneamente. Esto también dejaba libre al Master para utilizar su propia taumaturgia a su máxima extensión sin considerar el suministro del Servant.

Tanto para el Master como el Servant, esta era la mejor solución posible… dejando de lado a aquellos que tendrían que sacrificar sus vidas.

“Es cierto… no puedo ayudar a ninguno de ellos.”

Salvarlos era una ilusión. Solo podía ignorar sus gritos. Después de todo ni siquiera sabía lo que sucedería con él mismo.

  • * *

Se trataba de la calma antes de la tormenta. Los Masters y Servants en la Fortaleza Millennia se encontraban pasando el poco tiempo libre que les quedaba.

Desde su invocación, se volvió tarea de Archer el llevar la silla de ruedas de Fiore. Aun cuando los compararas con los demás, estos dos tenían una gran afinidad entre ellos. Fiore tenía una confianza completa en Archer y pasaba casi todo su tiempo con él.

“¿Acaso era esto lo que deseabas?”

“Si, te lo agradezco.”

Fiore le dio un vistazo más a la solución medicinal que Archer le había entregado, antes de tragarlas de una sola vez. Era un analgésico que ayudaba a reducir el dolor en sus piernas sin vida. Como efecto secundario la droga la adormecía. Ella decidió que estaría bien el descansar por un tiempo.

Mientas esperaba que la medicina hiciera efecto, se le ocurrió repentinamente que había una pregunta importante que nunca le había realizado a su propio Servant.

“Archer… ahora que pienso en ello, nunca te he preguntado cuál es exactamente tu deseo.”

Fiore aun tenía que preguntar lo que probablemente es el asunto más importante para el Servant – lo que deseaba del Santo Grial. Intento preguntárselo desde el comienzo, pero de acuerdo con Archer: ‘es algo pequeño y no causara ningún problema. Hablemos de ello más adelante.’

En ese entonces Fiore puso el asunto en espera, dado que Archer es el único Servant cuya integridad es un asunto de orgullo, pero las escaramuzas comenzaran pronto, sentía que era tiempo de conocer la respuesta.

“¿Te refieres a aquello que deseo pedir al Santo Grial? Eso… sería mentir el decir que no tengo un deseo.”

Archer parecía algo preocupado, evitando hablar de ello. De entre el campamento ‘Negro’, el deseo de Lancer es al que se le dará la más alta prioridad. Aunque todos los Servants tienen sus propias intenciones y estarán observando por una oportunidad de realizar su deseo al Grial, ese fin requiere la victoria en esta Gran Guerra. Ellos deben de enfocar su atención primero en la batalla con el campamento ‘Rojo’.

Tal vez Archer estaba preocupado de que hablar abiertamente sobre su deseo pudiera generar fricciones en el campamento ‘Negro’. Fiore agito su cabeza y calmó su preocupación.

“No necesitas preocuparte. No se lo contare a nadie. Yo soy tu Master… por supuesto que pondré tu deseo sobre cualquier cosa.”

“Se lo agradezco Master… y espero que no encuentre graciosa mi respuesta.”

“Por supuesto que no.”

Archer bajó su rostro con ligera vergüenza.

“No es nada más que mi propio egoísmo… pero deseo que los Dioses me regresen aquello que me habían otorgado.”

“¿Los Dioses…? ¿Te refieres a…?”

“Si… Deseo que me regresen la inmortalidad que le otorgué a Prometeo.”

Naturalmente Fiore había leído algo de la leyenda de Chiron antes de invocarlo. Desde su nacimiento poco común hasta su tutelaje de múltiples héroes, Chiron dejó detrás muchas leyendas – pero la más famosa de ellas fue el episodio que lo llevo a convertirse en la constelación de Sagitario.

Atrapado en un conflicto entre el héroe Heracles y sus compañeros Centauros, Chiron fue derribado por error por una flecha de Heracles bañada en veneno de Hidra.

Al ser inmortal, Chiron no podía morir, así que continuó sufriendo la agonía del veneno. Al final le transfirió su inmortalidad a Zeus para que este se la diera a Prometeo y finalmente murió en paz. Lamentando su muerte, Zeus le dio un lugar en el cielo como el Arquero.

“No extraño mi inmortalidad – pero fue un regalo para mí de mi padre y mi madre. El abandonarla es negar todo lo que soy.” El hombre habló silenciosamente de su anhelo.

“Pero Archer, tus padres…”

Fiore dejo de hablar rápidamente; hablar más de ello solo le traería vergüenza a él. De acuerdo a las leyendas, Chiron nació del patrón de la cosecha y la tierra, Cronus, en la forma de un caballo, y la ninfa Philyra. Avergonzada de la apariencia de su descendencia – mitad hombre y mitad caballo – Philyra fue transformada en un árbol de tilo.

El padre y la madre de Chiron nunca lo amaron; él mismo debía saber esto mejor que nadie.

Archer miro directo a los ojos de Fiore, su mirada era firme.

“Es verdad… ellos nunca me amaron. Pero es prueba de que su sangre fluye por mis venas, y deseo que me sea regresada.” Murmuró, luciendo algo apenado.

“No puedo negar que es un deseo egoísta. El que me vuelva inmortal nuevamente no cambiara nada. Pero…”

Era el lazo más tenue el que lo conectaba a él con ellos.

“Archer… mi propio deseo es muy similar. Yo solo deseo utilizar el Grial para curar mis piernas.”

La discapacidad de Fiore Forvedge Yggdmillennia afectaba profundamente su taumaturgia. Circuitos Mágicos existían en sus piernas – pero una malformación en los Circuitos habían hecho que sus dos piernas cesaran su funcionamiento desde su nacimiento, y en algunas ocasiones le ocasionaba un dolor insoportable.

Por supuesto que es posible curarlas. Sin embargo esto involucraría el remover los Circuitos en sus piernas. En otras palabras, significaría dar fin a su vida como mago.

Al estudiar las artes de la ingeniería humana y la evocación de espíritus, Fiore ha aprendido maneras de remplazar las funciones de sus piernas. Sus evocaciones pueden llevar a cabo las funciones de sus miembros y ella incluso es capaz de volar con una escoba. Pero eso no es lo mismo que caminar sobre sus propios pies. Aun así, como sucesora de la casa Forvedge, ella no puede abandonar su taumaturgia – y no lo hará -.

Es por eso que solo puede depender del Grial para mantener sus Circuitos Mágicos como son y aun así recuperar toda la funcionalidad de sus piernas. Si… su deseo simplemente era un lujo.

“Ya veo. Deseas un milagro para no tener que sacrificar ninguno de tus deseos.”

“Así es… mis propios deseos son una niñería comparados con tu deseo honesto. Es una vergüenza ¿cierto? Que bajo he caído.”

“¿En realidad crees eso? Puedo entender tanto el peso de abandonar el arte en el que uno vierte su vida como la alegría de estar de pie con tus propios pies sobre Gaia. No necesitas sentirte avergonzada.”

Pero es exactamente por ello, pensó Fiore.

Sabía en su corazón que el decir su deseo en voz alta llevaría a que Archer tratara de reconfortarla de aquella manera. Por supuesto que ella no mintió. Ese en verdad era su deseo – y en verdad pensaba que no era nada más que un lujo. Sin embargo, había decidido como mago el adquirir ese omnipotente hacedor de deseos. No había razón para decirlo de una manera tan lastimosa, como si deseara causar lastima.

Pero fue de esa manera como se refirió a sus propios deseos: tímidamente, sin confianza, con vergüenza. ¿Por qué se sentiría así sobre la condición con la que nació? Ella actuaba de manera modesta y con gracia para evitar expresar como se sentía realmente. Nunca había pensado que sentiría vergüenza por tal acto… hasta ahora.

“Te lo agradezco, Archer.”

Dijo Fiore mientras se sonrojaba. Ella deseaba que Archer la elogiara más que nadie. También deseaba que pusiera su mano sobre su cabeza y le susurrara palabras amables al oído. Pero se odiaba por tratar de atraer simpatía inconscientemente.

Si… que bajo he caído.

Aun así ella sonrió ante las palabras de Archer. Llevando ese sentimiento en su corazón – algo que no era afecto o amor, algo que aparentaba ser puro y aun así era un poco perverso – Fiore cerró sus ojos suavemente.

“Puedo sentir como trabaja la medicina, Archer. Puedes marcharte.”

“Si, Master.”

Sin un solo sonido, Archer abandonó el cuarto de Fiore.

Caules Forvedge Yggdmillennia nunca deseó unirse a la Guerra del Santo Grial en primer lugar. De hecho ni siquiera había deseado convertirse en un mago.

Aunque es verdad que le agrada la taumaturgia en sí misma – no todos los días se puede tener el placer de llevar a cabo fenómenos absurdos y científicamente imposibles con sus propias manos. Pero nunca deseo dedicar su vida entera a ella.

Además, los magos son humanos que se convierten en algo menos que humanos – ellos en verdad se vuelven inhumanos. Francamente no quería exponerse al mundo como un monstruo que sería capaz de masacra a miles solo por el beneficio de la investigación, como solían hacerlo los magos en tiempos medievales.

Un mago es alguien que busca, alejado de la sentimentalidad, compasión y palabras similares. Ese camino no era uno que Caules deseara tomar.

La razón por la que Caules comenzó a estudiar taumaturgia era igual de risible; él solo existía como un ‘repuesto’ de Fiore. No era que Caules no deseara eso para sí mismo. El destino de su clan entero es una pesada carga para llevar en hombros, pero la única cosa que se requería de él era que estudiara su arte, lo cual era lo suficientemente simple.

Los meses pasaron mientras Fiore se convertía en el cabeza de la familia Forvedge y, eventualmente, se acerco al asiento más alto del clan Yggdmillennia entero. Fue entonces que Caules también decidió explorar otros caminos. Podía pasar el resto de su vida como un mago sin futuro que nunca lograría nada – o podría perseguir una vida diferente. Fue entonces que surgió la Guerra del Santo Grial sin ningún aviso, proyectando su sombra sobre él.

Al comienzo, su único fin sería el de servir de apoyo a Fiore. Sin embargo, cuando arribó a Rumania los signos de los Hechizos de Comando habían comenzado a manifestarse. Caules ya no tenía elección – debía participar en la Guerra del Santo grial como Master, sin importar que tanto lo molestaran las miradas de odio de los magos más experimentados.

Como la suerte lo decidió, rápidamente adquirieron las reliquias sagradas necesarias para utilizar como catalizador. Fiore fue capaz de comprar los esquemas de Frankenstein de un mago mercenario que conocía.

La invocación en si fue exitosa. Incluso el mayor cuello de botella para el Servant Berserker – su gran consumo de prana – tuvo una solución provisional en la provisión de homúnculos, y en su propio Noble Phantasm capaz de asistir en proporcionar prana. Solo quedaba un problema.

“¿Acaso ella… es realmente así de fuerte?”

Esa era una cuestión simple pero extremadamente importante. El rango de La Mejora de la Locura de Berserker – cuyo verdadero nombre era Frankenstein – era sorprendentemente bajo. Aunque había perdido la mayoría de sus habilidades lingüísticas, aun podía separar a amigo de enemigo, y era capaz de comunicar ideas simples.

Sin embargo… él no tenía la mas mínima idea de porque Frankenstein, un hombre gigante que debería de haber medido más de dos metros de alto – apareció en la forma de una joven chica – y una bastante atractiva en realidad. ¿Qué paso con Boris Karloff o Robert de Niro? Al principio, pensó que había invocado a la novia por accidente, pero no había duda de ello; parecía que ella en verdad era Frankenstein – o, para ser mas correctos, el homúnculo creado por Frankenstein.

¿Acaso esta chica puede luchar? Eso era lo que le preocupaba a Caules en estos momentos.

Sin prestarle atención a la preocupación de su Master, la chica prefería permanecer en su forma material, vagando por el castillo. Por supuesto Cuales poseía la autoridad de ordenarle en cualquiera de sus formas, pero prefería no presionar en ese asunto y arruinar su buen humor (después de lo cual sus quejidos de enojo comenzarían a hacer eco en su cabeza).

Como resultado, el Master dejó ser a su propio Servant.

…No es que hubiese posibilidades de que se saliera de control. Ella pasaba la mayor parte de su tiempo en el jardín, cortando flores y mirando el cielo. Algunas veces Rider trataba de hablar con ella, aunque respondía en muy raras ocasiones – e incluso cuando trataba con él era solo para librarse de la molestia.

Caules estaba orgulloso de ser un Master. Si pudieran comunicarse podrían tener una conversación verdadera. Si fuese posible le gustaría que ella entendiera la jerarquía de Master y Servant.

Y así Caules se decidió a hablar con el Berserker del campamento Negro.

Trasladándose al patio, encontró a Berserker recogiendo flores en el jardín. Sería una mentira decir que no encontraba la escena perturbadora, pero Caules dejó salir un pequeño sonido para armarse de valor antes de seguir adelante.

“H-hola.”

Caules comenzó a agitar su mano a modo de un ligero saludo. Berserker miro brevemente a su Master antes de darle la espalda. Claramente había decidido ignorarlo, lo cual lo molesto de cierta manera, pero de nada serviría el marcharse ahora. Debía tomar una posición firme y hablar apropiadamente con ella.

Tomó un respiro profundo… y dirigió sus primeras palabras hacia ella.

“Uh, solo quería decir que… lo siento.”

Bajó su cabeza a modo de disculpa, sus intenciones de mostrar autoridad lo traicionaron. Berserker miro a Caules nuevamente.

“Quiero decir, por aquella ocasión en la que deje salir tu verdadero nombre.”

“Uuuu…”

Ella dejo salir un quejido de molestia. Así que eso es lo que la está molestando, se dio cuenta Caules. Parece que Berserker sentía algo de frustración hacia sí misma.

“No sabemos si ellos se volverán nuestros enemigos en la próxima ocasión. Así que lo lamento.”

“Uu…”

Berserker asintió. Sus quejidos no sonaban tan molestos como antes. Tal vez ella se había tranquilizado al averiguar que Caules entendía lo que seguiría a la Guerra del Santo Grial.

“De cualquier forma, es por ello que solo nos deberíamos de enfocar en sobrevivir en esta Guerra del Santo Grial. ¿Qué opinas de ello?”

Berserker, sujetando ligeramente una flor con su mano, asintió sin palabras para mostrar que estaba de acuerdo.

“Bien, entonces comencemos conociéndonos el uno al otro.”

“¿…?”

Berserker inclino su cabeza hacia un lado. Caules comenzó a explicar.

“Yo investigue algunos detalles sobre ti antes de invocarte. Pero las leyendas no siempre son correctas, y una sola diferencia puede llevar a una situación crítica. Así que es por eso que voy a decirte lo que se sobre ti, y tú vas a corregirme si estoy equivocado.”

Berserker inclino su cabeza, sorprendentemente seria.

Víctor Frankenstein fue un estudiante de las ciencias de la naturaleza. Obsesionado con el delirio de crear al ‘humano ideal’, pasó dos años trabajando en unir partes de humanos muertos y tuvo éxito en otorgarles vida.

Su ideal era ver nacer a un sabio y bello ser humano, perfecto en todo ámbito. Sin embargo, lo que creó fue un monstruo repulsivo. Aterrado, Frankenstein lo desarmó nuevamente y dejó todo detrás…

Pero aun en pedazos, el monstruo siguió con vida. Reconectándose y reparándose a sí mismo, el monstruo rastreo a Frankenstein, quien seguía huyendo, hasta Génova, Suiza – una gran persecución basada en el odio y la admiración.

Éste le rogo a Frankenstein a quien consideraba un padre.

Nunca quise molestarte… pero cuando me creaste, me creaste a mí como el único yo.

Estoy solo, y es doloroso… es una agonía… duele. Así que por favor, solo crea uno más. Por favor, crea uno más de mi clase. Si alguien puede hacerlo, ese eres tú.

Por favor… dame una pareja.

Frankenstein se negó completamente. No era un asunto de poder o no hacerlo. Había puesto todo su enfoque en crear un homúnculo y el resultado había sido el nacimiento de una horrible creatura. Era impensable siquiera considerar crear una segunda creatura.

Deteniéndose por un momento, Caules miro a Berserker. No podía comprender si a Víctor Frankenstein lo había poseído un retorcido sentido de la belleza – o la chica poseía dentro de sí una fealdad inconcebible a pesar de su belleza externa.

Mientras el doctor se negaba una y otra vez, el monstruo comenzó a dares cuenta de la verdad y cayó en una profunda desesperación. Pero, sin importar que, debía lograr que accediera a crear otro.

Así que el monstruo asesinó: a aquellos allegados a Frankenstein, aquellos que no guardaban ninguna relación con él, y, al final, incluso a la amada prometida de Frankenstein. Y aun así, Frankenstein continuó huyendo del monstruo, negándose hasta el final.

El joven hombre del que emanaba la vida y el brillo de la juventud se había ido hace mucho. Con la fragilidad de un anciano, Frankenstein murió sumido en la locura, lamentándose amargamente hasta su último aliento.

El monstruo ya no tenía a nadie más que odiar. El hombre a quien el monstruo admiraba no existía mas.

Partió con Walton, el hombre que observo los momentos finales de Frankenstein, y viajó a lo más profundo del norte. Entonces, construyo una pira y fue consumido por las flamas.

Que mis cenizas sean esparcidas por todos los mares…

Y así terminó el monstruo nacido de la locura de Frankenstein.

Caules concluyo la historia de la vida previa de Frankenstein. Ella no lo interrumpió en ninguna ocasión. ¿Acaso todo había sido correcto o simplemente no le importaba?

“Así que… tu deseo, Berserker, es una pareja del mismo tipo de ser que tú, ¿correcto?”

Uu…

Ella movió su cabeza de arriba abajo. Parecía que era correcto.

“Y los homúnculos en el castillo… ¿ellos no son suficientemente buenos cierto? Quiero decir, ellos son muy similares a ti…”

"..."

Berserker simplemente puso la flor en su mano en el rostro de Caules. No le dolió tanto como lo sorprendió.

“Entonces tomare eso como un no.”

Berserker asintió fuertemente. A su propia manera, había líneas que se negaba a cruzar.

Repentinamente, ella observo directamente el rostro de Caules, sus ojos grises se asomaban por las aperturas de su largo cabello, su mano tiraba de él ligeramente.

“¿Quieres saber cuál es mi deseo?”

Berserker agito su cabeza de arriba abajo. Caules se sumió en sus pensamientos. Sería razonable decir que él deseaba alcanzar la Raíz, y con ello la cuestión seria saldada. Después de todo, eso era algo por lo que cualquier mago daría su vida. Y Berserker, habiendo obtenido cierto conocimiento del Santo Grial no encontraría esto cuestionable.

Pero a Caules no le gustaba mentir.

“Bien, en realidad no me he decidido aun.”

“…”

Ella lo estaba observando fijamente. Caules comenzó a rascar su cabeza con un semblante que parecía estar ofreciendo disculpas. “No es que no posea uno. Yo también soy un mago, por supuesto que deseo alcanzar la Raíz y todo eso… pero pienso que también existen otras cosas que deseo.”

¿Acaso será tan fácil alcanzar la Raíz incluso con un concede deseos omnipotente como el Grial? Caules lo dudaba bastante. Ciertamente sería el primer paso para alcanzar la meta. Pero el camino aun era demasiado largo.

“De cualquier forma, no lo sabré hasta que lleguemos a ese punto. Por ejemplo, si mi hermana muere en la guerra, podría desear resucitarla. Algo como eso sobrescribiría mi propio deseo. La hermana que tengo ahora significa más para mí que la Raíz que alcanzare en cien años.”

Bueno… no es que ella me fuera a traer de vuelta a si muriera, pensó Caules.

En medio de esos pensamientos despreocupados Berserker realizo un sonido en voz baja. Parecía que estaba de acuerdo, al menos hasta cierto punto.

“Está bien mientras lo comprendas. Regresare a mi cuarto ahora.”

Caules se puso de pie, pero Berserker tiró de su camisa. Dándose la vuelta se encontró repentinamente con una flor directamente en su rostro.

“¿Tú… quieres que tome esto?”

Berserker asintió y Caules la acepto con un gracias. Después de eso, ella comenzó a recolectar flores nuevamente. Y entonces, viéndola comenzar a destrozar las flores en pedazos, una a uno, decidió apresurarse y retirarse. No había un lago en ese lugar – y él sería incapaz de evitar que ella lo arrojara en uno de cualquier forma.

La lengua fría de Celenike Icecolle Yggdmillennia reptó lentamente alrededor de la nuca de Rider.

“Hey…”

Él se encontraba recostado en la cama, con ambas manos atadas por correas de cuero. Su peto y partes de su armadura habían sido removidos, exponiendo su pecho desnudo, su cuello delgado y su piel pálida. Era una pose increíblemente sugestiva.

Celenike se encontraba sobre él, con sus mejillas sonrojadas y observando con ojos llenos de lujuria sus ataduras… sus labios… su carne.

Sin embargo, la expresión de Rider no era una de vergüenza o dolor, si no de total aburrimiento. Hablo sonando harto.

“¿Podrías dejarme en paz?”

“No. Es que eres tan bello… podría probarte un día entero y no me aburriría.”

“Pero yo sí.”

“No me interesa. Todo lo que importa es lo que yo deseo.”

Rider dejó salir un suspiro exasperado. Todos los días, sin fallo, desde que había sido invocado, su Master hacia lo que quería con su cuerpo. El suyo era un amor pervertido – sus dedos y su resbalosa lengua recorrían su cuerpo, pero nunca fue una muestra ‘normal’ de romance.

Si tuviese que describirlo, él diría que estaba siendo amado como un trabajo de arte – y ponía en duda que un ser humano llegase a cubrir una pintura o estatua con su propia saliva.

“En verdad eres sobrecogedor…”

Celenike suspiró sorprendida. Normalmente no dudaría en abrazar a cualquiera que le dijera algo así – fuera hombre o mujer – pero Rider no se encontraba particularmente feliz de escucharlo de ella.

Era un pequeño alivio que ella aun no hubiera hecho algo impulsivo y tonto como utilizar un Hechizo de Comando para obligarlo… pero eso podría cambiar si ambos siguen con vida una vez que la batalla fuera decidida. Siendo una forma de taumaturgia, los Hechizos de Comando pueden ser evitados por su anti-taumaturgia – pero incluso con su habilidad Rango A, solo sería capaz de desobedecer un comando. Si ella utilizara dos no tendría más opción que obedecer.

Ahora, si tan solo gastara un Hechizo de Comando en alguna otra orden inútil…

“Es una lástima… ¿Por qué mi cuchillo no puede cortarte?”

Celenike realizó una observación perturbadora.

“Sabias, yo fui invocado para pelear… Oh, casi es hora.”

Buen momento – Rider destrozo sus ataduras y se puso de pie. Celenike, lanzada a un lado, hizo berrinches protestando.

“¿Acaso en verdad no te intereso?”

“Eso en verdad no es el problema.”

“Como dice la leyenda… Astolfo en verdad era un don juan.”

“¡Eso no tiene nada que ver con esto! Cielos…”

Lo que ella dijo podría ser verdad, pero todo lo que significaba es que él se involucraba en un romance con cualquier mujer que deseara, cuando él lo deseaba – lo cual no podía ser más lejano que el ser perseguido por la fuerza por una sola mujer.

Y más aun, la peste de la muerte que seguía a este mago era demasiado espesa. Ella probablemente había sido cubierta de sangre y entrañas desde el momento que nació. Podría usar perfumes y bañarse para retirar el olor, pero la muerte misma no la abandonaría.

Ella había nacido en la familia Icecolle, una línea de sangre relativamente vieja de practicantes de las artes oscuras. Forzados a huir por la devastadora cacería de brujas de la Edad Media – desde el oeste de Europa hasta Siberia – ellos perdieron los fundamentos de su taumaturgia y eventualmente comenzaron a declinar.

Celenike era la primera hija nacida en esa línea de sangre decadente desde hace mucho tiempo. Sus mayores, quienes habían dedicado sus vidas a perfeccionar las artes oscuras, convergieron en ella y vertieron todas las enseñanzas que tenían sobre ella.

Las artes oscuras requieren una disposición particular, específicamente una que no dude en despedazar sacrificios vivos. Una que no dude ante las suplicas hasta alcanzar la cantidad de sufrimiento requerida, proveniente de los hijos de bestias y hombres, excelentes seres humanos y animales amables, ancianos y mascotas viejas, las embarazadas y los no nacidos.

Ella aprendió a presentarse a si misma externamente y controlarse internamente. Dado que solo un fracasado se perdería en la alegría de la matanza.

Matanza, pero solo cuando la matanza es requerida. Dolor, pero solo cuando el dolor es requerido.

Celenike era una practicante sorprendente. Cuando ofrecía sacrificios, su voluntad de hierro suprimía todas sus emociones y le permitía llevar a cabo cualquier tipo de rituales perversos.

Tenía completo control sobre sus pasiones. Después de todo, el placer de causar dolor y la alegría de abusar son las cosas más peligrosas para todos los que practican las artes oscuras.

Es por todo esto que los deseos de Celenike son forzados a salir cuando no está actuando como un mago. Nadie ha pasado una noche con ella y ha permanecido en una pieza.

Ella podía tomar un chico, inocente en cuanto a los caminos del mundo, y pervertía y violaba cada parte de su cuerpo, lamiendo sus lágrimas de sufrimiento. Convirtió las artes oscuras en una forma de vida, caminando en la línea entre un mago y un usuario. Habiendo hecho de su ocupación algo en lo que terminaría cubierta de sangre. Tal es la existencia del monstruo llamado Celenike Icecolle Yggdmillennia.

La única razón por la que nunca había ido mas allá de ‘amar’ al Servant que había invocado era a causa de la absoluta diferencia de poder entre ellos. Rider es, después de todo, un Servant – no era algo contra lo que pudiera utilizar la violencia. Como mago, ella entendía que hasta que la guerra fuera decidida, él sería incapaz de utilizar su fuerza al máximo.

Aunque una vez que la guerra hubiese terminado… ella tenía pocas dudas de que perdería todas sus inhibiciones y cedería ante sus deseos. Utilizando sus Hechizos de Comando, profanaría a este Espíritu Heroico, al cual solo la palabra ‘atractivo’ podría describirlo, y lo llenaría de vergüenza.

No le podía importar menos el segundo conflicto que se llevaría a cabo alrededor del Santo Grial. La única cosa que deseaba era estar con Astolfo.

El suyo era un amor… bastante… extremadamente perverso.

“Tengo algo de lo cual hacerme cargo. Discúlpame.”

Celenike yacio tendida en la cama, observando perezosamente mientras Astolfo se apresuraba a cambiarse de ropa.

“¿No estás pensando en salir nuevamente o sí?”

“Mm, algo parecido.”

Los ojos de Celenike se entrecerraron ante la vaga respuesta.

“No has estado conviviendo con la gente del pueblo ¿o sí?”

“Solo estoy saliendo a divertirme. Después de todo he regresado al mundo con un cuerpo. ¿Qué tiene de malo jugar un poco hasta que la guerra comience?”

Ella ni siquiera podía comenzar a decirle que tan mal estaba eso. Un Servant pasando todo su tiempo fuera jugando podría también abandonar sus deberes. Pero Celenike sabía que esto no era algo que ella pudiera arreglar regañándolo. Solo dejo salir un murmullo con algo de resignación.

“Por supuesto que está mal. Si Darnic se enoja con alguien será conmigo…”

“¡Lo siento! ¡Es hora de marcharme!”

Celenike observó como Rider se marchaba – y entonces se dio cuenta.

El leve tono rojizo de sus mejillas y un leve toque de timidez en su rostro hacían que pareciera muy probable el que fuese a encontrarse con alguien querido.

“Bien, primero que nada, ¡Pienso que deberías marcharte de este perverso nido de basura y villanía tan rápido como puedas!” La sugerencia de Rider fue alegre al extremo. Ellos apenas habían comenzado a hablar y el homúnculo ya se sentía algo desconcertado, aprendiendo en carne propia a convivir con la locura de Astolfo.

Pero… ¿Escapar? ¿Escapar a donde?

“Cualquier lugar menos aquí. No podría ser peor ¿o sí?”

Esta en lo correcto, pensó el homúnculo. ¿Pero cómo escaparía?

“Bien, ¡No perdamos más tiempo! ¡Podemos cabalgar fuera de aquí en mi amado corcel! Si no nos marchamos mi Master probablemente me llamará de nuevo.”

¿Usar el corcel de Rider? Sí, eso podría funcionar… pero el corcel de Astolfo es…

“¿Oh? ¿Acaso sabes de mi hipogrifo?”

Lo sabía, como parte de su conocimiento de esta Gran Guerra. Astolfo dio vida a varias leyendas en la espalda de monturas como un grifo y el famoso Rabicano, pero algo particularmente famoso entre ellas es algo inconcebible para este mundo – el hipogrifo. Este caballo fantasmal era una bestia mágica nacida de la unión de un grifo y una yegua. Con el cuerpo superior de un águila y el inferior de un caballo, este fruto entre los dos no debería de haber sido posible.

Bueno… eso no es el problema en estos momentos. El problema radica en el hecho de que el hipogrifo seguramente es el Noble Phantasm de Rider. Al utilizarlo Rider gastará una enorme cantidad de prana – y serían los homúnculos los que tendrían que pagar el costo. Aun poniendo eso de lado, tal gasto de prana inevitablemente señalara el uso de un Noble Phantasm.

“¡Pero es muy rápido! ¡Es como un whooooosh! ¡Nos iremos tan lejos como podamos y simplemente regresare con un whooooosh! No creo que utilice demasiado prana con tan solo volar.”

A pesar de los divertidos intentos de Rider de transmitir la velocidad de su hipogrifo a través de una variedad de gestos corporales, él no podía aceptar ese plan.

“Oh, de acuerdo. Hmmm, ¿Entonces que deberíamos hacer? Tal vez deberíamos discutirlo con Chiron.”

Él dejó salir de repente el verdadero nombre de Archer. Cuando el homúnculo señalo esto, el rostro de Rider rápidamente se torno pálido. Parecía que realmente entendía, hasta cierto punto, que el haberlo dicho era una muy mala idea.

“¿Huh? ¡Oh, cierto! ¡Lo lamento! ¡Olvida lo que dije!”

Esa información no era particularmente útil de cualquier forma.

“Phew. Qué alivio. No dejes que los otros se enteren, ¿de acuerdo?”

Podía notar algo de vergüenza en Rider mientras éste estallaba en un mar de carcajadas. Si una facción opositora podía lograr retener a este Servant, definitivamente dominarían al enemigo en el ámbito de la inteligencia e información. O al menos eso pensó el homúnculo.

Después de pensarlo por un tiempo Rider hizo una sugerencia.

“¿Qué tal esto? Esta guerra entre Servants comenzara muy pronto. En medio de todas esas batallas será un poco difícil detectar a un homúnculo prófugo ¿no lo crees? Y aun si nos descubren de cualquier forma no tendrán los recursos para perseguirnos. Así que esperare el momento preciso para sacarte de este lugar.”

Era un plan bastante bueno, un cambio completo de su idea anterior.

“Si, eso debería de funcionar, Rider.”

El homúnculo se puso tenso ante las palabras de Archer. El Servant había abierto, cruzado y cerrado la puerta, y se movió detrás de Rider sin que el homúnculo siquiera se diera cuenta.

Por otro lado Rider no se mostro sorprendido y parecía saber de su presencia. Giró su cabeza hacia Archer quien estaba de pie detrás de él.

“¿También lo crees Archer?”

“Si, yo soy Archer… por favor no me llames ‘Chiron’ por error de nueva cuenta.”

“De acuerdo, lo entiendo… Discúlpame. En verdad me siento mal por ello.”

Archer tomó asiento en el escritorio y observo al homúnculo.

“Tienes miedo.”

“Por supuesto. ¿Quién no estaría atemorizado de gente como nosotros?”

Respondió Rider. En realidad el homúnculo ya no se encontraba atemorizado por Rider, pero decidió no discutir el punto.

“Me temo que tendré que poner un poco mas de miedo en ti. Hablare claramente – a lo mucho tienes tres años más de vida.”

Archer confirmó la cruel realidad sin ningún miramiento. El homúnculo asintió con entendimiento. La declaración de Archer al lado de su lecho se grabo directamente en su mente.

“Si fueras solo un niño me lamentaría y sentiría simpatía. Sin embargo eres un homúnculo – de cierta forma tú naciste completo. Es por ello que ahora debes considerarlo por ti mismo.”

¿Considerar qué? Pregunto el homúnculo. Archer lo observo directamente con sus agudos y penetrantes ojos.

“Considerar como vivirás.”

Para el homúnculo esto parecía una tarea que sería imposible de realizar en su tiempo de vida.

La vida misma en si era un milagro para él. ¿Cómo sería posible que supiera cómo vivirla? Sin embargo, Archer declaró seriamente.

“Aun así debes considerarlo. Si no lo haces, ¿entonces que tendría tu vida de diferente - o como terminaría diferente – aun si sobrevives a esta guerra? No tendría sentido nada de esto.”

“Bien, yo pienso que estar con vida ya es una bendición…”

Murmuro Rider como comentario.

“Eso no será suficiente.”

Archer ignoro la opinión de Rider con una respuesta simple y corta.

El homúnculo no pudo responder antes las palabras de Archer. No sabía cómo. ¿En que podría pensar? ¿Cómo pensaría sobre ello? Se sentía como una rama caída a la deriva en el mar.

“Bien… siempre puedes pedir la opinión de otros. Afortunadamente Rider está aquí para ayudarte. Pregúntale si hay algo que no tengas claro.”

“Espera, ¿Por qué me encuentro envuelto en esto de repente?”

“Eso es lo que significa tomar responsabilidad, Rider. Oh, sí, y una cosa más – comienza por aprender como caminar. Tus pies se han vuelto demasiado suaves. Una vez que puedas caminar puede que seas capaz de utilizar algo de taumaturgia simple. Eso debería de aliviar algo del estrés de tu cuerpo físico.”

El homúnculo ya no se sentía tan preocupado, tal vez a causa de la meta tan clara y entendible que se le había dado. Después de todo, el que caminara por ahí no molestaría a nadie. Incluso podía comenzar justo ahora.

Archer se puso de pie y le dio una palmada a Rider en el hombro.

“Marchémonos Rider. Cerrare con llave la puerta. Nadie se atreverá a entrar a este cuarto durante la reunión.”

“De acuerdo…”

Rider se puso de pie también, luciendo molesto. Claramente se encontraba insatisfecho, pero el homúnculo no podía identificar la causa.

“Nos vemos mas tarde. Volveré, ¿de acuerdo?”

Tenga cuidado, dijo el homúnculo mientras los veía partir, y Rider apretó su mano, viéndose extrañamente complacido. Tan pronto como la puerta se cerró, él comenzó a actuar. Por ahora – debía comenzar a caminar.

Sus dos pies se posaron firmemente en el suelo. Eran pequeños y suaves, pero podían soportar su cuerpo – por un corto tiempo por lo menos. Dio un paso y sintió un ligero dolor. Sus pies se ensuciaron. Sin embargo, en esta ocasión, no se encontraba guiado por la desesperación. Con caminar como su única meta, no se sentiría perdido.

Por ahora, debo caminar – caminar hasta que no puedas dar otro paso.

Mientras tanto Rider rápidamente volvió a su estado de molestia mientras caminaba de nuevo por el corredor.

“¿Acaso no estás siendo demasiado duro con él?”

“Y tú estás siendo demasiado suave. Solo deseaba generar un balance.”

Archer sonrío mientras respondía, pero Rider hizo un berrinche y comenzó a gruñir.

“¿Acaso tú no estás siendo demasiado suave con tu Master también?”

“Ah, ¿Acaso es por eso que tu animo decayó? Rider… el modo más adecuado para educar depende y difiere con cada persona. Mi Master trabaja duro para remover una debilidad que posee desde su nacimiento, como si fuera un asunto de vida o muerte. Pero, como mago, ella tiene que aceptarlo como si fuera natural. Sin duda alguna se vendría abajo un día si no hay nadie que la elogie por sus esfuerzos.”

“Así que ¿piensas que él no está esforzándose?”

“Él no entiende la diferencia entre esfuerzo y pereza para empezar. Considerando su corta vida, no puede permitirse el ser flojo. Eso solo lo llevaría a lamentarse al final.”

Rider gruño, pero permaneció en silencio y no habló más.

“Por supuesto… el que lo mimes es otro asunto. Sin alguien a quien aferrarse, es muy poco probable que pueda escapar de este lugar. Sin embargo, no pierdas de vista el porqué fuiste invocado aquí como un Servant.”

“Suenas como un maestro o algo similar.”

“Oh, pero eso soy.”

Respondió Archer alegremente y trató de poner una mano en la cabeza de Rider, pero un molesto Rider lo hizo a un lado.

Parecía que ellos dos eran los últimos en llegar a la sala del trono. Ante la señal de Darnic, Caster manipulo el Menorah para mostrar una escena del exterior de la fortaleza. Esta técnica, que utilizaba golems voladores como repetidores, excedía en mucho el máximo rango de visión de una taumaturgia de vigilancia remota normal utilizada por los magos.

La escena que los golems mostraban era algo difícil de describir – se trataba de un enorme hombre, semi desnudo, con apariencia de tonto, marchando por el bosque.

Darnic fue el primero en hablar.

“Soldados de Yggmilennia – de acuerdo a Caster, este Servant ha estado avanzando por el bosque día y noche, en un curso directo hacia el castillo.”

Los otros se quedaron sin palabras. Se encontraban en guerra, por supuesto, así que era obvio que serían atacados por un Servant – pero debería de haber más de un ataque a la vez, algunas emboscadas y otros ataques frontales. Y alguien, como el Lancer Rojo, llevaría a cabo otras tareas también.

Pero no parecía que hubiera subordinados alrededor de este Servant – lo que significaba que estaba avanzando hacia la fortaleza por sí mismo. Era un acto de total estupidez – pero había una clase de Servant que podría llevar a cabo esos actos calmadamente.

“Mi juicio indica que se trata del Berserker de la facción Roja. Lo más probable es que posea un rango alto de Mejora de la Locura – avanzando solo por su deseo de pelear con el enemigo.”

Aquellos invocados como Berserker tienen rangos variado de Mejora de la Locura basándonos en las anécdotas de sus vidas pasadas. Aquellos con un rango bajo no recibirán una mejora muy grande en parámetros, pero son capaces de discutir y comunicarse con otros hasta cierto grado. Aquellos con un rango alto pueden esperar una gran mejora en sus parámetros, pero se vuelve imposible para ellos el siquiera seguir instrucciones, mucho menos intercambiar ideas.

“¿Qué es lo que debemos hacer Abuelo?”

“No dejaremos esperar esta oportunidad, por supuesto. Enviar a tres Servants debería de ser suficiente. Pero esto presenta una oportunidad única – si todo va bien, podríamos ser capaces de convertir en un peón a este Berserker del campamento Rojo.”

Ante la declaración de Darnic, una ola de susurros llenó el cuarto. Lancer espero hasta que la conmoción se calmo antes de preguntar tranquilamente.

“Déjanos escuchar concisamente este plan tuyo. Es por esto que has reunido a todo los Servants aquí ¿cierto?”

“Si, mi lord.”

Bajo las órdenes de Darnic, el plan para apoderarse del Berserker Rojo fue organizado. Dicho Berserker se encontraba avanzando a través de la ruta más corta, pero con su velocidad relativamente lenta se estimaba que pasarían uno o dos días antes de su llegada.

La victoria estaba asegurada – el problema era como lograr el objetivo de la captura. ¿Acaso los seis Servants serian capaces de contener a tal hombre?

Llegando a Trifas al atardecer, lo primero que Ruler debía de hacer es encontrar un lugar donde quedarse, pero se encontró con un problema imprevisto.

Era como menciono el anciano; Trifas no poseía ninguna atracción turística de ningún tipo. Solo había tres hoteles y todos se encontraban llenos.

“Esta es la primera ocasión en que nos sucede esto… Lo lamento profundamente.”

Dándole la espalda al encargado del hotel que proseguía disculpándose, Ruler observo al hombre y la mujer que platicaban en el recibidor. De la ligera reacción de prana, parecía que eran magos – miembros de Yggdmillennia probablemente. Seguramente se estaban alojando en todos los hoteles de Trifas.

“No se preocupe, no es su culpa. ¿Acaso tendría alguna idea de donde más podría alojarme?”

“¿Tal vez podría intentar en la iglesia?”

Si – existía una iglesia. Ruler se sintió algo avergonzada por no pensar en ello antes. Todo este conocimiento moderno debió de haberla confundido. Ese debió de haber sido el primer lugar a visitar.

Después de preguntar la dirección en el recibidor principal, comenzó a caminar hacia la iglesia. Tal vez la habían escuchado en el hotel; podía detectar a varios individuos siguiéndola.

“Deberían de estar más atentos… Soy un Servant, no un mago…”

Probablemente se debía a la ropa casual que llevaba puesta. Y, desafortunadamente, la forma espiritual que todos los Servants deberían de ser capaces de tomar era algo imposible para ella, dado que poseía un huésped.

En cualquier caso, ellos saben que me alojare en la iglesia. Y, por el bien de mi huésped, preferiría no dormir al aire libre. Sin ninguna otra opción, Ruler se dirigió a la iglesia. Toco a la puerta de la pequeña iglesia de madera, pidiendo alojarse ahí por varios días, y la hermana accedió felizmente.

“Lo lamento, pero solo nos queda libre el ático. ¿Estás de acuerdo en quedarte ahí?”

Ella no se encontraba en posición para demandar lujos – y realmente no le importaba mucho en primer lugar.

“Cualquier lugar donde pueda recostarme será suficiente. Se lo agradezco mucho.”

Alma Petresia era el nombre de la hermana. La gentil mujer en verdad encajaba en un lugar tan idílico – una mujer que no necesitaba más que el amor de Dios.

“Por favor sígame.”

Alma se ofreció a mostrarle el camino, y Ruler la siguió al segundo piso y después ascendió las escaleras que dirigían al ático.

“¿Acaso es usted una turista?”

“No, estoy aquí para estudiar la historia de la Rumania medieval.”

“En ese caso, Sighisoara se adecuaría mas a sus necesidades. Hay aun bastantes edificios de la Edad Media en este lugar, pero no creo que tengan demasiado valor histórico.”

“Alguien mas ya está investigando Sighisoara.”

“Oh, ya veo. Si, supongo que no hay demasiada gente interesada en Trifas aun.”

Y al final de la escalera que rechinaba, llegaron al ático. El cuarto era usado en raras ocasiones, de acuerdo a la hermana, pero no había ni una mota de polvo o suciedad en la cama o la lámpara. El cuarto parecía ser limpiado regularmente.

“Podría prepararte algo de comer también, si lo deseas.”

“Oh, no – mis hábitos alimenticios son algo erráticos. No quiero causarte molestias.”

A demás de no ser capaz de usar su forma espiritual, la chica también debía comer. Ella no moriría por falta de alimento como cualquier ser humano lo haría, por supuesto – pero la condición física de la chica empeoraría a causa de la hambruna. Era un hecho que, dado que no había comido nada desde hace mucho, comenzaba a sentir dolor de estomago.

A decir verdad, aunque en realidad se sentía muy agradecida ante la sugerencia de Alma, sería descuidado de ella recibir tal trato – dado que probablemente se estaría escabullendo durante las noches.

“No será ninguna molestia. Lo único que tendrás que hacer será calentar la comida nuevamente.”

“¿Calentarla…?”

Ruler inclino su cabeza ligeramente. La hermana la miro de manera extraña.

“Así es… ¿con el microondas?”

“Oh… si. El microondas.”

Si, por supuesto – no había ninguna necesidad de hacer una fogata solo para calentar algo de comida.

“Aunque en verdad disfrutaría compartir mis alimentos con otra persona.”

Después de un rápido momento de deliberación, Ruler decidió aceptar su oferta. Si la hermana la llamaba y ella respondía comerían juntas; si no, entonces dejaría su parte en el refrigerador. Ese fue el acuerdo al que llegaron. No sería demasiado problemático para ninguna de ellas.

“Bien, entonces… oh, olvidaba algo muy importante. ¿Podría saber tu nombre?”

“Ah, sí. Por favor llámeme Jeanne.”

Dijo su nombre sin ninguna duda. Ruler no ponía demasiado énfasis en mantenerlo en secreto. No le molestaba en lo personal, y difícilmente representaba una debilidad clara, como lo era para el Saber de la facción Negra.

“Jeanne… ese es un nombre maravilloso.”

“Se lo agradezco. En realidad hay una cosa más que me gustaría preguntarle. Si hay algo de tiempo antes de la comida… ¿podría entrar a la capilla a orar?”

“Si, por supuesto – es para eso que esta ahí.”

Ruler guardo sus cosas en el ático. Después de eso descendió, se arrodillo ante el altar, juntó sus manos, inclinó su cabeza ligeramente y cerró sus ojos.

No era muy diferente de cuando se encontraba con vida. El momento en que iniciaba sus plegarias, ella se separaba del mundo – desaparecía el pasado, el futuro y la realidad misma. No se encontraba ahí por un propósito en particular, sino simplemente para ofrecer sus plegarias a Dios. Al hacer eso, el rumbo que debería de seguir estaría fijo.

Para ella, cada segundo de oración era tan importante como cada respiro; no pasaba un día sin que realice sus oraciones. Habiendo nacido en una familia de plebeyos, Jeanne nunca conoció los contenidos de muchos libros de plegarias. Se esforzó mucho en aprenderlas, pero parecía que simplemente había nacido incapaz de leer o escribir. Lo más que había logrado era aprender como firmar con su nombre. Aunque se preocupaba de ello, al final decidió que necesitaba de algo más para poder rezarle a Dios. Ella recordaba que uno de sus compañeros que cabalgo a su lado, Gilles, una vez se burlo y prometió que ella era más que suficiente…

“¿Jeanne?”

Se dio cuenta de que había estado arrodillada rezando por largo tiempo. La hermana le hablo, luciendo algo apenada.

“Lamento interrumpirte.”

“Oh, no – A veces tiendo a dejar libre mi mente y olvido el paso del tiempo. No me gustaría desmayarme por el hambre por ello.”

“Entonces es bueno que te llamara. Ya esta lista la cena – vayamos antes de que se enfrié.”

“Ya veo. Se lo agradezco.”

Alma la guío hasta el comedor. Había un antiguo juego de mesas y sillas hechas de roble, adecuadas para esta pequeña iglesia. “¿Alguien más nos estará acompañando?”

“Oh, yo soy la única en este lugar. Aun no han decidido quien suplirá al Padre Luxter desde que murió hace cinco años.” Para empezar Trifas era una ciudad pequeña con una población de menos de veinte mil. Y también se habían construido otras iglesias. Para estos momentos los únicos que visitaban esta pequeña capilla son los ancianos que viven cerca de ella. Aunque Ruler no creía que hubiese diferencia entres los lugares de culto, ya fueran pequeños o grandes.

“Ahora, ¿Deberíamos de hacer nuestras plegarias?”

“Si, hagámoslo.”

Después de que terminaron de alistar la mesa, Alma y Ruler se sentaron en lados opuestos y susurraron sus plegarias de agradecimiento. Para cuando terminaron, su hambre había llegado a su límite. Con cuchillo y tenedor en mano, Ruler cortó una porción del humeante sarmale (Rollos de lechuga Rumanos) y lo puso en su boca. Tan pronto como lo hizo el sabor dulce y amargo de la lechuga, el tomate y el jugo de la carne picada alcanzo su paladar.

“¿Qué tal esta?”

“Es… maravilloso.”

Ruler dio una corta respuesta antes de entregarse a sus alimentos. Con cada mordida su estomago contraído se expandió – y entre mas comía, se volvía mas grande, haciendo que deseara mas y mas. Era un círculo vicioso en el cual solo se incrementaba su hambre.

“Hay más si lo deseas.”

“Si, por favor.”

Jeanne respondió de inmediato y sin dudar. Habiendo sido la hija de un granjero, ella tenía un apetito que era más que rival para los rufianes famélicos que eran sus iguales. El condimentado de la cocina Rumana tradicional también se adecuaba a su gusto extremadamente bien.

Ruler comió hasta llenarse, tan feliz que le sonreía resplandeciente a la hermana que había preparado ese alimento para ella. Después de eso, ella entró al baño para lavarse.

Cuando caiga la noche, los magos y Servants realizaran su movimiento. Ahí es cuando el verdadero trabajo de Ruler comenzara.

El cielo tenía su usual tono gris. De acuerdo a las predicciones del clima habría una ligera llovizna durante la noche. Shishigou Kairi y Saber caminaban por las calles de Trifas – pero no por placer, por supuesto. Estaban examinando la ciudad para determinar las locaciones que eran o no adecuadas para la batalla.

Pero el que un lugar sea adecuado no quiere decir que sea utilizable. Trifas estaba literalmente bajo control enemigo y naturalmente habría miembros del clan ocultos entre la población. También era probable que hubiese numerosos campos de restricción – algunos con capacidades de detección, otros con varios distractores – ocultos en los lugares que habían revisado.

“Maldición…”

“¿Las cosas no están saliendo bien, Master?”

Por encima de un muro, Saber llamo a Shishigou mientras este se arrastraba en sus manos y pies, buscando una manera de destruir el campo de restricción. Su voz no contenía ni la más mínima pizca de simpatía.

Shishigou suspiro y rápidamente decidió abandonar también esta locación. Sería una molestia el asegurarlo por tan mínima ventaja.

“¿Qué es mejor para ti Saber? ¿El nivel del piso o las callejuelas?”

“Hmm… a nivel de piso, diría yo. Ya he mencionado esto, pero mi Noble Phantasm es un armamento anti ejercito. Entre más espacio abierto, mas espacio tendré para dar lo máximo. Un campo abierto sería lo más ventajoso.”

“En ese caso, tal vez sería mejor si lleváramos la pelea afuera.”

“¿Afuera?”

La Fortaleza Millennia rodeaba una porción de Trifas con sus muros. Fuera de esos muros se encontraban varias construcciones, un número que ha continuado incrementándose con el paso de cerca de trescientos años. El castillo está localizado en la punta más cercana al este de la parte norte de la ciudad. Pero más allá de ello había un gran bosque y una planicie en el este – aunque ellos se encontraban al otro lado de un acantilado. Seria difícil infiltrar el castillo por ese flanco.

“Esperemos que ellos vengan a nosotros.”

“Ya veo. Eso sería mucho mejor para mi también – aun mas que luchar en esta pequeña ciudad tan llena de construcciones.”

“Si. Trifas es solo un conjunto de casas que se han ido amontonando desde el siglo dieciséis – aunque eso no es demasiado problema cuando puedes simplemente demolerlas todas.”

“¿Qué? Por supuesto que eso es un problema.”

“Bien… si llegamos a eso, todos – ya sean aliados o enemigos – desean ganar, sin importar lo que conlleve ello.”

Los magos son aquellos que no están atados por la lógica humana. Mientras que protejan la regla fundamental de mantener todo en secreto, pueden sacrificar tantos civiles como lo deseen.

Por supuesto, uno debería moderarse en todas las cosas. Una sola muerte puede solo causar algo de dolor en la gente relacionada – pero cuando una muerte se convierte en diez, o cien, las instituciones públicas se comienzan a poner en marcha. Y si la situación se vuelve imposible de ocultar para una sola persona, la Asociación entrara en acción. Es por eso que las peleas se llevan a cabo en la noche, y el porqué un campo de restricción debe erigirse antes de un combate para alejar a la gente normal.

Pero esta era la Gran Guerra del Santo Grial. ¿Acaso realmente habría una opción para no sacrificar esta ciudad a aquellos héroes de los mitos y leyendas que fueron llamados para causar destrucción a placer? Además, cada palo y piedra en Trifas le pertenece a Yggdmillennia.

Saber permaneció inesperadamente callada. Shishigou, curioso, se dio la vuelta y vio que ella mostraba una expresión contrariada.

“No permitiré que eso suceda.”

“¿Qué suceda qué?”

“Sacrificar a los plebeyos. ¿Por qué es que los magos nunca parecen capaces de comprender una lógica tan simple?”

Dijo Saber con obvio disgusto.

“Bien, es porque así es como son.”

“Asquerosos. Yo nunca caería tan bajo, Master.”

“Si, si… trataremos de no involucrar a los plebeyos, Su Majestad.”

Las piernas de Saber, meciéndose de atrás a adelante desde la cima del muro, se detuvieron repentinamente.

“¿Cómo… acabas de llamarme?”

“¿Hm? Dije ‘Su Majestad’. Bien, tú eres quien los llama plebeyos. Solo la gente en una posición alta tiene la autoridad de hacer eso. ¿Y no es tu deseo convertirte en rey? ¿Qué hay de malo en llamarte así ahora si te vas a convertir en uno eventualmente?”

El rostro de Saber se congelo.

“Su… supongo que no hay nada de malo.”

“Así que, de cualquier forma – es tu política el inmiscuir a la gente normal tan poco como sea posible. ¿Es cierto?”

Tomó unos cuantos carraspeos antes de que Saber pudiera cambiar esa expresión. Mientras se ponía de pie en el muro, altiva y orgullosa, el rey miro hacia abajo, donde se encontraba Shishigou, y proclamo.

“¡Así es! Y tampoco los atacare para recuperar mi prana.”

“De acuerdo, entendido. Trabajaremos basándonos en ello.”

Shishigou era un mago completo. Naturalmente ambos actos habían sido incorporados en sus estrategias, como medidas de emergencia. Sin embargo, si la pieza esencial de dichos actos – el mismo Servant – se negaba a tomar parte en ello no podía evitarse. Todo está bien si el Servant desea recargar su prana de tal manera, pero si no, el asunto no debería de ser forzado.

La política de Shishigou no era dejar que Saber actuara como él deseaba. Era dejar actuar a Saber como ella deseaba, para él.

En una Guerra del Santo Grial normal, había pocas opciones más que el que el Master y el Servant pusieran sus vidas en las manos del otro; era una necesidad, pese a que ambos tuvieran un vinculo o no, dado que se encontraban rodeados de seis pares de enemigos. Aunque en este caso, los Servants tienen una excesivamente alta probabilidad de sobrevivir a las muertes de sus Masters. En casos extremos un Servant superviviente podría incluso traicionar a sus aliados por un Master sin Servant del otro bando.

Lo que esto significaba era que aquel Master que no construya una relación de confianza mutua con su Servant solo recibirá un cuchillo en su espalda por sus problemas – especialmente en el caso de este Saber de la facción Roja, quien ve la conexión Master-Servant como un simple ‘pacto’. Si ella alguna vez siente que hay alguna diferencia en sus perspectivas, o que la alianza no la beneficiara, probablemente haga a un lado a su Master.

No se trataría de una traición, si no simplemente se desharía de él. Era adecuado para alguien que se convertiría en rey.

“Espera un momento… ¿Te estás burlando de mi…?”

“Estas imaginando ofensas, mi rey. De cualquier forma, este lugar no es bueno. Ahora nosotros…”

Ambos movieron su mirada al cielo ante el sonido de graznidos y el batir de alas. Una sola paloma dejo caer un pedazo de papel en sus pies y salió volando. Solo sus benefactores mutuos – El Padre Shirou y Assassin – entregarían algo de esa manera.

“Un mensaje…”

Tan pronto como lo leyó el rostro de Shishigou se volvió sombrío. Malas noticias, imagino – pensó Saber mientras saltaba del muro y le daba un vistazo a la nota.

“¿‘Berserker se ha salido de control y está avanzando hacia el castillo’…?”

“¡Hey, no lo digas en voz alta!”

Shishigou se apresuro a detenerla. No era algo que debiera de ser dicho a plena luz del día. Sin embargo, Saber respondió tranquilamente.

“¿Qué es lo que alguien externo podría interpretar de tales palabras excepto tonterías? Mas importante, ¿Qué es lo que quieren decir con ‘se ha salido de control’?”

“Si… Te lo explicare en cuanto regresemos al altar.”

“Explícalo ahora.

La necedad de Saber se negaba a ceder. Francamente, Shishigou miró a Saber y suspiro, pero a ella no le importo en lo absoluto. “Aparentemente, nuestro Berserker tiene un rango bastante único de Mejora de la Locura. Se podía hablar con él, así que pensaron que en realidad podrían comunicarle ideas, pero…”

Shishigou extendió sus brazos.

“… no las entendió en lo absoluto. Berserker no cambiara de idea, sin importar lo que le digan, y no se detendrá. Así que en estos momentos se dirige a su objetivo.”

“Huh… ¿Y cuál sería ese objetivo?”

“Una pelea probablemente. Bien, ¿Qué más podría ser? Esto es malo.”

“¿Por qué es malo?”

Shishigou la miro incrédulo.

“Esta Guerra es de siete contra siete. Si se lanza a la carga solo – morirá obviamente. Y entonces tendremos a siete contra seis. Sin nada que pueda remplazar el poder de un Servant definitivamente estaremos en desventaja.”

Como regla ellos no deberían de enviar sus fuerzas poco a poco. El hecho de que no tenga refuerzos disponibles solo fortalece esa idea, Y aun así, Berserker comenzó su alboroto. Si no encuentran una manera de salvarlo, el Berserker de la facción Roja seguramente encontrara su fin.

Para Shishigou – un Master del campamento Rojo – estas eran noticias desalentadoras. Por otro lado, su Servant ya no parecía interesado ahora que sabía toda la historia.

“¿Qué importa? Él no es más que un simple Berserker, y los Berserker siempre encuentran su fin en guerras como esta. Solo es cuestión de tiempo. Yo digo que lo dejemos ser.”

Dicho esto, ella mordió la manzana que Shishigou le había comprado en el mercado – y entonces de inmediato frunció el ceño y se la entrego a él.

“Que absoluta basura… te la regreso.”

“Sabes que eres terrible, ¿cierto? Cielos, esto es mierda.”

Shishigou también le dio una mordida y frunció el ceño.

Una vez que Alma se durmió, Ruler abandonó el ático y salió a la calle. Trifas de noche regresaba nuevamente a un silencio mortífero. Sin embargo, el aroma de cuerpos, de prana, llevado por el aire sobrenatural era prueba de que estas calles eran anfitrionas de una Guerra del Santo Grial.

Ruler mojó su mano en el agua bendita que había recolectado en la iglesia y la lanzó al aire. El agua brillo ligeramente y comenzó a dibujar un mapa tridimensional de la ciudad. Este era uno de los muchos privilegios otorgados al manejador de la Guerra: la función de localizar Servants.

La búsqueda dio un resultado. Solo un Servant de la facción Roja fue confirmado dentro de Trifas.

“Hmm…”

Inclinando su cabeza, ella expandió el rango de detección. Seis Servants se encontraban reunidos en la Fortaleza Millennia. Pertenecían al campamento Negro.

“¿Seis Servants del campamento Rojo faltantes… y uno del Negro también…?”

Parecía que el campamento Rojo se mantenía alejado de la ciudad y la observaba a la distancia, entendiendo que cada parte de Trifas era territorio enemigo. En ese caso, el Servant solitario debía de ser un vigía.

¿Acaso eso significaba que el Servant faltante del campamento Negro estaba llevando el mismo rol? Muy probablemente el campamento Rojo estaba localizado cerca de Sighisoara. Hablando estrictamente la Guerra del Santo Grial solo se lleva a cabo en una sola locación. Podría considerarse una violación el que sus participantes estén alojados en una ciudad cercana.

“Pero, dada la situación, supongo que no tienen muchas opciones en este caso.”

Después de todo esta tierra era controlada por el campamento Negro. A diferencia de Fuyuki, donde las tres grandes familias permitían algo de justicia, un clan solitario era el poder absoluto en este lugar.

Esto sin mencionar el pequeño tamaño de la ciudad, donde a las calles rusticas aparentemente se les había prohibido desarrollarse más. Nuevamente, a diferencia de Fuyuki, hay una severa falta de lugares donde un mago externo pueda ocultarse. Del lado opuesto, Yggdmillennia solo tiene que defender su Fortaleza imposible de asediar.

Poseedores del Gran Grial o no, la situación simplemente es demasiado desbalanceada. Al menos, ella debería dejarlos tomar campamento fuera de Trifas.

Las calles se encontraban tranquilas a un grado perturbador. Normalmente debería ya de haber una o dos escaramuzas…

“…pero mientras un bando no haga su movimiento, el otro tampoco lo hará.”

Tal vez esta será una noche tranquila.

Como si estuvieran en abierta rebeldía con sus pensamientos, los Servants dentro del castillo comenzaron a moverse. Se dirigían, no a las calles si no fuera de la ciudad.

“¿El bosque…?”

Ella cambio el área de búsqueda al bosque que llenaba el área al este de Trifas. Ahí confirmo la presencia de tres Servants.

Parece que el plan es pelear la guerra fuera de las calles, como si desearan mantener la paz en la ciudad.

“Bien, mientas la población este a salvo…”

Aunque la destrucción del ambiente también es problemática a su propia manera. Con suerte el bosque no terminara incinerado por el Lancer de la facción Roja…

Eso pensó Ruler mientras tomaba un camino y se dirigía hacia el bosque.


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