Toaru Majutsu no Index: GT Volumen 9 Capítulo 4

Capítulo 4: En el centro - Lucha_y_Resiste,CRC.

Parte 1

El pasillo del primer piso del hospital era un camino directo a la UCI donde dormía Anna Sprengel.

-Hee heh.

Los hombros del joven plateado vestido de rojo temblaron de risa.

Se burló de la tontería de Kamijou Touma cuyo hombro chorreaba sangre donde debería estar su brazo.

-Me preguntaba en qué carta de triunfo confiarías al final, pero todo lo que hiciste fue romper el recipiente de vidrio. Normalmente duerme dentro de su ataúd, pero naturalmente se despierta cuando localiza la enfermedad que azota este mundo y regresa a su ataúd una vez que ya no es necesario. Producir el elixir curativo del mundo está muy bien, pero ¿cuánto tiempo podrás durar así? Dada la tasa de pérdida de sangre, calculo que son 10 minutos a partir de aho…

Kamijou Touma no estaba escuchando.

Un solo paso cubrió toda la distancia necesaria. Suavemente envió al dragón translúcido que emergía de su hombro derecho hacia CRC.

No se sentía como golpear con el puño o morder y desgarrar con grandes mandíbulas.

Probablemente fue un ataque minúsculo como golpear los dedos en la frente.

Una masa de sonido comprimido estalló un momento después.

Eso fue todo lo que hizo falta para lanzar a Rosencreutz varias decenas de metros por el pasillo del hospital.

-¡Oh, oh!

Este resultado no debería haber sido posible.

Misaka Mikoto, la otra chica nivel 5, el armamento de próxima generación de Ciudad Academia, los Trascendentes de la Cábala Constructora de Puentes, la biblioteca de grimorios, el Dios Mágico e incluso magos legendarios como Aleister y Kingsford no habían logrado esto.

Este fue el primer golpe limpio contra él.

Y sucedió casi con demasiada facilidad.

-¿¡¡Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!?

Rebotó repetidamente, produciendo sonidos de destrucción física, gritos de músculos y huesos y tos húmeda y sangrienta.

Pero nada de eso explicaba el temblor del CRC.

Estaba mirando su propia mano izquierda.

Aún sentado en el suelo, el joven plateado vio su propia mano presionada contra el suelo y tembló.

-¿Hiciste que este viejo... tocara el suelo?

Esta fue la primera vez.

No había sido permitido que sucediera ni una sola vez hasta ahora.

Siempre se había mantenido erguido en el campo de batalla. Su marcha a través de Ciudad Academia había continuado sin cesar incluso durante el bombardeo de metales pesados del satélite y el cañón acelerador de partículas a gran escala del Hula Hoop. Teniendo esto en cuenta, ¿cuánta potencia se requirió para este pequeño resultado?

Esto superaba con creces los límites humanos.

El chico había elegido cruzar esa línea.

Porque había jurado que salvaría a la más malvada mujer que sólo podía esperar la muerte.

-…

Kamijou Touma no respondió.

No habló triunfalmente y mantuvo la cabeza gacha, ocultando su expresión.

Se produjo un cambio en la propia sombra del niño a sus pies.

Parpadeó.

De forma antinatural, como una luz fluorescente agonizante.

¿Cuánto le había costado este poder?

Era como si el niño, que supuestamente tenía un cuerpo físico, estuviera cambiando al reino de la ilusión sin forma ni peso.

-………………………………………………………………………

Dio otro paso.

Eso fue suficiente para que el mundo se distorsionara y tensara. El espacio a su alrededor definitivamente se hundió. Si hubiera dado un paso con mayor determinación, podría haber provocado un colapso gravitacional hacia adentro en ese espacio, creando un agujero irreparable.

La acción sin palabras transmitía un único propósito.

Kamijou Touma dio un paso adelante para acercarse a CRC una vez más.

Esto no había terminado.

No dejaría que terminara con un solo ataque.

Destrozaría a CRC, lo masticaría y lo eliminaría por completo del mundo. Salvaría a las personas que consideraba importantes, incluso si eso significaba mancharse la mano con sangre.

Él había tomado la decisión.

-Ya veo.

Rosencreutz no habló mucho aquí.

Cuando se llevaron a su límite absoluto, las fórmulas se volvían maravillosamente simples.

Al igual que E=mc2, la conclusión del CRC fue concisa.

Se escucharon crujidos por todo su cuerpo mientras se levantaba. Levantó las caderas del suelo, colocó una mano en la pared y se permitió todas las acciones antiestéticas que requería.

-Lo admito. Has convencido a este anciano: este mundo es un lugar fascinante☆ ¡Eh je je je! Realmente pensé que no le quedaba nada para satisfacer mi alegría y eliminar mis frustraciones. ¿¡Ah, hee heh heh!?

Sus ojos estaban dirigidos directamente al niño dragón.

Ahogándose en sus propias pasiones, el santo hombre finalmente vio a ese chico como un enemigo.

Kamijou Touma y Christian Rosencreutz.

Había comenzado un choque entre superhumanos.

Parte 2

El aire estaba fuertemente comprimido.

No había necesidad de ocultar nada.

Kamijou se acercó desde adelante, por lo que Christian Rosencreutz extendió su palma.

Ese fue un ataque invisible capaz de destruir cualquier cosa.

Ese brutal hechizo era claramente mágico, pero ni siquiera el Imagine Breaker de Kamijou podría haberlo detenido y en su lugar le habría arrancado el brazo.

La compresión del aire pasó hasta cierto punto y retumbó como una explosión.

Pero Kamijou no dijo una palabra.

Instruyó lo que había más allá de su inexistente brazo derecho y el dragón invisible se movió levemente. Eso fue suficiente para revertir todas las suposiciones.

Las fauces del dragón (y sus dientes afilados) mordieron un objeto negro y lo detuvieron en seco.

El objeto era un poco más grande que una pelota de golf.

-¿Un…proyectil? -Murmuró Aradia, con los ojos muy abiertos en estado de shock mientras miraba desde el margen.

Esta era la identidad de la magia extremadamente poderosa que supuestamente hacía imposible la defensa.

No había ningún misterio ni milagro allí. De hecho, si a un proyectil se le diera una cantidad letal de fuerza destructiva, naturalmente se movería demasiado rápido para verlo a simple vista. Esa regla inmutable permaneció igual incluso cuando la magia influyó en la lógica. Era sólo un truco de salón común.

Kamijou no se molestó en burlarse. De hecho, no mostró ninguna reacción humana. Solo movió su brazo de dragón horizontalmente, arrojando a un lado la molestia de un objeto.

¿Por qué perder el tiempo en emociones ordinarias cuando podría dedicarlo a devorar a su presa?

Ese fue el único pensamiento detrás de sus acciones.

Hee heh. Así que finalmente podrás defenderte y dejarme divertirme un poco.

Rosencreutz siguió disparando.

Molesto e irritado por los ataques idénticos, el dragón de Kamijou lanzó un rugido ensordecedor.

Era posible que el chico no pudiera controlarlo por sí mismo. Las mandíbulas mal balanceadas desviaron los proyectiles de CRC hacia un lado, enviándolos rebotando hacia habitaciones de hospital sin conexión con la pelea.

El joven plateado sonrió.

Como diciendo que él había guiado las cosas en esa dirección.

Pero los temibles ataques se desvanecieron en el aire antes de tocar la pared.

-¿Oh? -Murmuró CRC fascinado.

Había sentido algo digno de su interés.

-¿Eliminaste mis ataques sin permiso? No, esto es una simple cuestión de fuerza de voluntad. Cualquier ataque lanzado sin una poderosa intención de matar será absorbido y destruido. Y cualquier ataque que falle rápidamente pierde todo significado.

-…

-Después de experimentar una cantidad improbablemente uniforme de desgracias, detestas los golpes de suerte de tu enemigo. Y este anciano detesta todas las acciones coincidentes que van en contra de mis pasiones y mi alegría. Veo. Nuestras voluntades enfrentadas han distorsionado el espacio a nivel macro. Pero, -Dijo Rosencreutz con una sonrisa burlona. Extendió la palma de la mano hacia un lado, apuntando casualmente a la pared de allí. -¡¡Kee hee heh, ee heh, hwa haha hahaha!! Eso me deja mucho espacio para jugar. ¡Mientras este anciano dirija su intención de matar hacia esos extraños, todavía puedo golpearlos!

Inmediatamente el espacio fue cortado a una distancia de más de 100 m.

Pero no porque la CRC hubiera atravesado al paciente inocente del hospital más allá de ese muro.

Un momento antes de que pudiera, Kamijou Touma empujó sus mandíbulas de dragón hacia adelante y le hizo exhalar un violento rayo de luz. Luego giró las mandíbulas hacia arriba para cortar el brazo derecho de CRC a la altura del hombro.

Rosencreutz no mostró ningún interés en que su propio brazo derecho girara en el aire.

-Arreglo.

Tan pronto como pronunció esa palabra, los escombros cercanos se juntaron y formaron algo así como el suave brazo de un maniquí para detener su sangrado. Esta no fue una resurrección que lo devolvió a la normalidad. Sólo se estaba reparando creando algo nuevo. Después de viajar por el mundo, reunir todo tipo de conocimientos y enseñar a la gente el arte secreto de crear un ser humano desde cero dentro de un alambique, esta era una tarea sencilla para él. Ni siquiera se molestó en comprobar el movimiento del brazo que era más ágil y hermoso que un brazo humano real. En cambio, levantó la mirada hacia arriba.

El techo se había partido.

Pero no porque lo hubieran cortado.

Como natillas o gelatina, las paredes y el techo del hospital se habían separado a izquierda y derecha para evitar el ataque de Kamijou. Incluyendo las camas, el equipo médico y el cableado en las paredes. Todo olvidó su textura original, se separó en el centro como una baba y luego se volvió a conectar como si nada hubiera pasado.

Era como si el edificio en sí tuviera mente y vida propia.

Christian Rosencreutz recurrió a su vasta sabiduría para explicarlo al instante.

Esto no fue creación ni destrucción.

Fue…

-¿Diste una orden? ¿La intimidación del rey dragón coronado puede dominar a todos los seres vivos, pero también a todos los objetos inanimados?

Esas palabras tenían un significado más profundo de lo que parecía inicialmente. Y no sólo el tonto riesgo de que el propio CRC obedezca la orden si se descuida.

¿Tiros perdidos, rehenes, vidas de otros?

Con este poder supremo, Kamijou no tendría que preocuparse por nada de eso.

Lo que significaba que…

¡¡Realmente no había nadie en el mundo que pudiera detener a Kamijou Touma después de esta monstruosa transformación!!

Atacó de nuevo. Pero esta vez, no fue solo un rayo que salió volando de las fauces del dragón.

El dragón mismo se desprendió de su hombro derecho y salió volando.

-¡¡Ja, ja, ja, ja!!

CRC se rió a carcajadas, giró su cuerpo hacia arriba y lo esquivó atravesando el techo.

Había reaccionado ante la amenaza real en lugar de dejar que lo golpeara y ver qué sucedía. Y en este punto, finalmente había dejado de depender de la magia. Había necesitado moverse más rápido de lo que podía elaborar un hechizo.

El campo de batalla se extendía más allá del largo pasillo.

Se trasladaron a una sala de rehabilitación, una sala de descanso, un quirófano y, finalmente, una estación de enfermería en uno de los pisos superiores.

Todo parecía igual, por lo que Kamijou no podía decir en qué piso estaba. Pero el niño que dio un paso más allá de la humanidad vio un rostro familiar en el pasillo.

Era Aogami Pierce.

Era un chico de preparatoria impotente. Pero él estaba parado protectoramente frente a una niña pequeña en pijama que sostenía un libro ilustrado. Le temblaban las piernas, pero no se había quedado quieto. Había elegido deliberadamente permanecer allí.

Sin embargo, no estaba claro si estaba más interesado en la joven o en su madre.

El bien y el mal no importaban aquí. Él no estaba obligado por eso.

Al ver que su horrible amigo había querido decir lo que dijo, el chico que había caído parcialmente en la ilusión sonrió brevemente como siempre lo hacía en el salón de clases, pero luego renovó su determinación. Kamijou Touma apartó la mirada y en su lugar vio a su poderoso enemigo.

CRC – Christian Rosencreutz.

No podía dejar que ese monstruo quedara libre y concentrarse en ese chico y esa niña.

No importa qué.

-¡¡¡Gahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!

-¿Oh? ¡¡Ke,hee heh, hahahahahahahhahahahahahahahahahhahahhahaha!!

Chocaron de frente.

Kamijou hizo girar al joven plateado hacia un lado.

Lo pateó y luego lo arrojó al piso de arriba.

No se detuvo ahí, por supuesto. Ya había comenzado su siguiente acción.

El aire se congeló.

Las fauces gigantes rechinaban los dientes de forma intermitente, creando un sonido perturbador que ni siquiera una guillotina o una trampa para osos podrían haber imitado.

-Kh.

Mientras se aferraba magnéticamente a la pared exterior del hospital y trataba de continuar la pelea hasta los pisos superiores, Mikoto encontró sus pies congelados en el exterior de una ventana. Congelados por el miedo. Sus instintos se estaban volviendo locos y pesaban mucho sobre su razón.

-¿Qué es esto? ¿Una forma psicológica de parálisis? -Jadeó la chica rubia con sus brazos alrededor de las caderas del #3.

Si se aseguraran de que incluso el próximo ataque golpearía sin importar cuánto tiempo transcurriera, entonces la intimidación de esos colmillos rechinantes podría considerarse un ataque infalible.

Pero no funcionó con el joven plateado.

Un sudor desagradable le mojó la frente, pero seguía sonriendo.

Actuaba por diversión y por el deseo de desahogarse, por lo que esto no podía atarlo. Después de todo, ni siquiera el poder del número 5 había funcionado en él cuando fue utilizado por su misterioso dueño. CRC era un monstruo con la mentalidad necesaria para seguir sonriendo en esta situación.

Y a Kamijou no le importaba.

Algo salió volando de las fauces del dragón como un látigo. Era una lengua larga, parecida a un camaleón. CRC dio un paso atrás antes de que pudiera atraparlo, pero luego se dio cuenta de algo.

-¿Hmm?

Él se había ido.

Kamijou Touma había desaparecido en el breve momento en que los ojos de CRC dejaron de mirar al chico.

Pero podía sentirlo.

¡¡Se acercaba una gran presión desde el frente!!

-Eres un poiquilotermo, es decir, tienes la capacidad de mimetizarte con el entorno que te rodea. ¿Pero realmente pensaste que eso funcionaría contra este viejo?

CRC agitó un solo brazo, sin dudar en golpear un punto de espacio vacío.

Allí apareció una cruz con varias enredaderas de rosas afiladas enredadas. Tenía más de un metro de altura y estaba hecho enteramente de oro pesado.

No importaba. Se escuchó un sonido inquietante de metal doblándose.

Kamijou y las fauces del dragón aparecieron de la nada. Los colmillos y la cruz chocaron entre sí.

El resultado fue una serie de chasquidos.

-Kh.

Al ver la cruz doblarse, CRC pateó una camilla cercana hacia las mandíbulas cerradas. Podría ser difícil saberlo, ya que se hicieron muy livianas para una mayor portabilidad, pero la camilla estaba hecha de acero inoxidable resistente para garantizar que no dejara caer a un paciente crítico. No iba a romperse en las fauces de un cocodrilo ni en las garras de un oso pardo.

Pero las mandíbulas no frenaron.

Se acercaron exactamente a la misma velocidad, la hilera de colmillos se acercó a la mano de Rosencreutz que sostenía la cruz.

Esa cruz no era mágica.

Tampoco era una ilusión, pero las mandíbulas del brazo aun así lo masticaron y borraron los restos intrusos del mundo.

Esas mandíbulas destruirían incluso la realidad inquebrantable.

Este era un nuevo poder que Kamijou Touma había adquirido a costa de su propia destrucción.

Fue un ataque que no permitía respuesta.

Y lo más probable es que fuera un poder trágico obtenido cuando alguien se rindió con otra persona.

-Ya veo.

Rosencreutz sonrió mientras se empapaba del sudor de la tensión y el deseo de luchar.

Esa sonrisa contenía un calor inusual mientras gritaba.

-Dime. ¿Por qué llegar a tales extremos para proteger a Anna Sprengel? Hee heh, ¿cuánto te queda? ¿Qué descubriste al aceptar tu propia destrucción asegurada?

Sólo ahora el lenguaje humano salió de los labios de Kamijou Touma.

En una situación que gritaba que hacerlo era la anormalidad aquí.

-Yo... protegeré a Anna.

Pero estas fueron definitivamente sus palabras.

Porque…

-Me… equivoqué al… buscar… razones… excusas para pelear…

Esa era la última humanidad que quedaba dentro del chico que se había convertido en un monstruo.

Era como una pequeña piedra repiqueteando dentro de él, pero era algo que no podía permitirse perder.

Por eso se negó a perderlo.

Ese chico común y corriente nunca más bajaría la cabeza y pasaría por alto una atrocidad mágica.

-Interesante, hee heh, ¡pero no lo suficientemente bueno!

Rosencreutz extendió la palma vacía hacia el rostro del chico.

Mientras sus armas estaban bloqueadas.

Ese ataque ya había sido identificado como un proyectil. Pero en este momento, el dragón invisible no pudo moverse para detener el ataque del proyectil a quemarropa.

Con el desagradable sonido del aire comprimido, toda la cabeza de Kamijou Touma quedó destruida.

Ni siquiera tuvo tiempo de parpadear.

Kamijou dio otro paso adelante como si nada hubiera pasado. Su cabeza ya se había regenerado. Una cola de dragón apareció de la nada y se alejó girando en su lugar. Probablemente era la cola de un lagarto que recibiría cualquier daño que recibiera. Pero Kamijou supo sin que se lo dijeran que era un movimiento que sólo podía usar una vez.

Ahora que sabía que tenía esa opción, deseó haberla conservado por más tiempo.

Su mirada se desvió hacia un lado. La acción mostró un arrepentimiento persistente. Todo parecía como si le estuviera pasando a otra persona. Un solo uso y no saber el efecto hasta que lo usaste era una combinación devastadoramente mala.

Y con sus ojos todavía en esa dirección, casualmente envió el ataque de Dragón directamente hacia CRC.

-Tch.

Rosencreutz inmediatamente retrocedió.

Escapó más allá del alcance de las mandíbulas, pero Kamijou no pestañeó.

Toda la superficie de las invisibles fauces del dragón estalló. Todas sus escamas afiladas salieron disparadas. Se apresuraron a golpear todo el cuerpo de Rosencreutz como un disparo de escopeta a quemarropa.

-¡Ohhhh! -Gritó CRC justo antes de que un vapor blanco llenara explosivamente el espacio.

En la camarilla rosacruz, las nubes eran un símbolo importante para ocultar la sabiduría y la verdad para evitar que los indignos las vieran. Dentro de esa nube, ningún ataque podría golpearlo incluso si se realiza desde 0 cm de distancia. Todo el espacio podría llenarse con una densa dispersión, pero sería tan inútil como intentar atacar a un gato que puede estar o no allí porque nadie podría observarlo.

Kamijou barrió al dragón horizontalmente para romper la espesa nube en un instante y luego el color rojo se esparció.

La nube no importaba en absoluto.

El dragón soltó el aliento.

Parecía una hoja afilada de color púrpura brillante, pero ¿era en realidad el veneno almacenado en el cuerpo de un dragón malvado que se liberaba bajo una presión extrema?

La caja fue destrozada, el gato de Schrodinger fue obligado a salir para confirmar su vida y luego fue asesinado.

-Keh heh.

CRC se rió y tomó medidas evasivas inmediatas, pero también ignoró la toxina mortal que viajaba por su torrente sanguíneo.

A ese joven plateado se le contaron muchas leyendas sobre él, pero en el fondo era un alquimista. Usó la alquimia como punto de partida para todos sus milagros, desde la vida artificial dentro del cristal hasta el elixir rojo.

Entonces…

-¿Usarías una toxina inexistente contra este viejo? Todos los venenos y sustancias nocivas pueden convertirse en medicamentos y sustancias beneficiosas si se manipulan adecuadamente. Así como la radiación puede inducir la cancerización de las células, también se utiliza para tratar el cáncer. ¡¡Sería de mala educación no presentarte mi propia sabiduría a cambio!!

Rosencreutz sacó una baraja de cartas que tenía en la mano.

Los abrió en abanico y los giró en un círculo completo en violación de la gravedad.

-El hechizo secreto de Rota se puede invertir para formar Taro, por lo que se puede convertir en las cartas que indican las 10 esferas y los 22 caminos. Despierten, 78 cartas. ¡¡Tú eres la única entrada adecuada a la luz que fluye desde más allá del árbol – es decir, el Ain Soph Aur, Ain Soph, Ain!!

Una violenta luz blanca explotó desde el vacío en el centro del círculo de cartas.

Un rayo de luz más afilado que una navaja quema el aire mientras corre hacia el brazo derecho de Kamijou. Las fauces del dragón que todo lo destruían se dividieron en dos. Mientras el dragón que lo golpeaba caóticamente lo arrastraba, aún más sangre brotó del hombro del niño.

El rojo tóxico salpicó el suelo y las paredes.

Christian Rosencreutz se burló de la colorida obra de arte.

-¡Hee heh heh heh heh! ¿Cuánto falta ahora? ¿Se siente mareado? ¿No puedes detener el sudor frío? ¿Preocupado por el pulso que le late con fuerza en el pecho? ¡¡Nada de lo que hagas podrá alcanzar a este viejo!! ¡¡Incluso si exprimes hasta la última gota de lo más profundo de tu corazón!!

Un momento después, rayos de luz surgieron aparentemente de todas direcciones.

-¿¡Qué-!?

CRC se dio cuenta de que las manchas de sangre del niño habían dibujado patrones extraños.

En el instante en que jadeó al darse cuenta de lo que significaban esos patrones, los círculos mágicos brillaron con una luz inquietante.

El suelo y las paredes burbujeaban de color rojo. No fueron sólo las vigas blancas. Surgieron serpientes carmesí que deberían haber sido controladas por una lámpara, al igual que la arena amarilla de Citrinitas que había envuelto a Los Ángeles.

Rodearon a CRC y se lanzaron hacia él todos a la vez.

Su brazo derecho ya era falso, así que lo sacrificó mientras retrocedía del caos mortal, con los ojos muy abiertos al presenciar lo que no debería haber sido posible.

-¿Un esper científico como tú ha entrado en el reino de la magia?

Ese ya no era territorio exclusivo de CRC. Kamijou se había entrometido en la leyenda de la rosa y la cruz.

¿Pero cómo podría ser esto?

Christian Rosencreutz no era un mago cualquiera. Su misma existencia se había convertido en una leyenda. Se negó a aceptar que incluso un experto rosacruz pudiera comprender y utilizar inmediatamente los hechizos que él utilizaba.

Pero el hecho era que la sangre roja que salpicaba las paredes y el suelo se arrastraba, brillaba y burbujeaba.

Todo esto sacó a la luz textos secretos y círculos mágicos que sólo conocía CRC. A pesar de que estos eran los hechizos más secretos que nunca había compartido con los demás en la Casa del Espíritu Santo, donde todos habían compartido tanto conocimiento como si estuvieran compartiendo una comida. Ni siquiera la biblioteca de grimorios habría podido encontrar estos hechizos si ella los hubiera buscado.

¿Kamijou Touma ya se había convertido en un monstruo que podía acceder al mundo mismo y usar automáticamente la magia que encontraba allí?

A Rosencreutz se le ocurrió algo una vez que consideró esa posibilidad.

…¿Conocido sólo por CRC?

-Ahora lo entiendo. Esta es una prueba de Rorschach.

Debería haberse dado cuenta más rápido.

Un Esper como Kamijou estaba usando magia pero no mostraba efectos secundarios.

-El conocimiento mágico no vino de este esper roto. ¡Sino de mostrar a este anciano manchas de sangre indistintas, que interpreté como los textos secretos y círculos mágicos que conocía, extrayendo sin querer su magia!

Pero como sea que se hubiera hecho, la magia que sólo Rosencreutz conocía todavía le había mostrado sus colmillos. Conocer la lógica detrás de esto no impidió que su mente imaginara esas formas cuando vio las manchas de sangre.

Por supuesto, Kamijou también corría riesgo. No tenía forma de guiar lo que Rosencreutz imaginaba al ver las manchas de sangre. Esta era un arma de doble filo que fácilmente podría capturar al propio Kamijou en una poderosa explosión mágica.

-¡¡Tritemio!! -gritó CRC, moviendo intrincadamente sus dedos.

Inmediatamente, la luz mágica que se acercaba a él se congeló en su lugar y dejó de moverse. Había utilizado el método de cifrado que Westcott había descubierto casualmente. Rosencreutz había aplicado un cifrado aleatorio a las manchas de sangre que se habían convertido en textos secretos y círculos mágicos, encerrándolos eternamente para que nunca pudieran usarse. Muy parecido al ransomware que cifra un disco duro.

Rosencreutz sintió un chisporroteo en la sien.

Esto no era como antes. Esta emoción era ira.

El estado interno del joven plateado había cambiado de marcha.

-¿Te atreves a obligar a este anciano a usar magia por algo más que pasión o alegría? ¡¡¡Sigues demostrando que eres mi mayor némesis!!!

¿Y eso qué?

Kamijou ignoró eso y tomó medidas.

Algo creció desde la base de las grandes mandíbulas que habían reemplazado su brazo derecho. Parecía una capa gigante, pero en realidad era una siniestra ala de murciélago. La única ala recogió el aire y luego agitó.

El aire se convirtió en una masa sólida y luego se convirtió en un proyectil extraordinario que atravesó el hospital.

Al mismo tiempo, todas las ventanas se congelaron, el aire se electrizó y gruesos relámpagos se precipitaron hacia Rosencreutz desde todas direcciones. ¿Era esto lo que le pasaría a alguien si fuera arrojado dentro de una nube cumulonimbus grande e hinchada?

-No se acaba de crear viento. ¿¡La presión del aire obedece a tu voluntad, permitiéndote controlar el clima!?

Esto estaba dentro del territorio divino, lo que lo convertía en un milagro legítimo.

Podría ser una lluvia bendita o podría ser un castigo divino eléctrico.

Y CRC también podría controlar las nubes. Se llevó dos dedos a la boca y sopló entre ellos. Una nube chocó contra otra, las condiciones climáticas cambiaron drásticamente y los relámpagos cambiaron de rumbo.

Kamijou Touma ya estaba allí.

Había cubierto rápidamente el espacio entre ellos, llegando justo en frente de Rosencreutz.

-Kh.

El joven plateado dividió el piso debajo de él y atravesó todos los pisos debajo de ese, terminando en el sótano del hospital.

No le tenía miedo a un puñetazo normal.

Solo se dio cuenta después del hecho de que había sido un golpe hacia abajo desde directamente arriba.

Pero el hospital en sí no sufrió daños. Todos los pisos en el camino se habían partido como gelatina por sí solos. Después de que el domador de dragones Kamijou saltó detrás de él, los agujeros silenciosamente se cerraron por sí solos también.

CRC extendió su palma hacia una gruesa puerta de metal.

-¡El elixir rojo puede vencer todas las enfermedades mortales e incluso manipular la esperanza de vida!

Con una serie de ruidos metálicos sólidos, la puerta, un carrito, un dispositivo de escaneo más grande que un refrigerador y varias otras cosas se juntaron y tomaron la forma de una muñeca gigante. No importaba que todos fueran elementos inorgánicos. Un tanque de nitrógeno líquido debió reventar porque una espesa escarcha blanca lo cubría todo.

Pero Kamijou tomó medidas antes de poder hacer algo. De hecho, Kamijou había golpeado a Rosencreutz aquí porque quería algo aquí abajo: el incinerador de desechos médicos.

Ese horno eléctrico especial podía alcanzar temperaturas de hasta 3.500 grados centígrados.

-…

La pared justo al lado de Kamijou se rompió audiblemente.

Los siguientes crujidos no provinieron de las invisibles fauces del dragón.

Kamijou Touma lo estaba masticando en su propia boca.

Y el chico levantó su brazo derecho. Las fauces del dragón frontal se abrieron lo más posible. Esto era algo nuevo. Algo enorme y brutal llenó las profundidades de esa boca con una luz peligrosa.

No dudó en desatarlo.

Aliento de Dragón Magnetrón.

Todo el polvo y la humedad del aire ardieron mientras un temible torrente blanco arrasaba a Christian Rosencreutz.

Otro tabú fue revelado y ese monstruo fue arrinconado aún más.

Parte 3

La luz se comprimió, el sonido se liberó en todas direcciones y, sin embargo, ningún tercero se vio afectado.

Ni uno.

Las chicas estaban muy ocupadas simplemente manteniéndose al día con el campo de batalla en constante movimiento. Misaka Mikoto se movía libremente a lo largo de la pared exterior del hospital con su magnetismo y Shokuhou Misaki se aferraba a las caderas de Mikoto, pero ambas sólo podían ver cómo se desarrollaba la intensa lucha. Eso tenía que ser lo mismo para Aradia y la Súcubo de Bolonia que probablemente estaban afuera volando en el cielo. Nadie podría intervenir en este choque directo entre superhumanos. Intentarlo haría que todo se desmoronara. Al igual que cualquier estímulo al calentar agua tranquilamente podría provocar un hervor explosivo. No, eso no fue todo. Esa fue sólo una excusa para su propia inacción. Sus verdaderas razones no eran nada tan nobles.

(Fui yo.)

Mikoto apretó los dientes ante la idea.

Ella estaba mirando pálida hacia donde debería haber estado el brazo derecho del niño.

(¡Yo apreté el gatillo final!)

Simplemente tenía miedo de hacer algo más.

Sintió una profunda aversión, como si estuviera enfrentando una maldición desconocida. Pero esta no fue una maldición lúgubre nacida del rencor o el odio de un individuo. La abrumó la misma sensación de incorrección que tenía la gente al ver o tocar algo santo e inviolable.

-¿Qué se supone que debo hacer al respecto? -Murmuró distraídamente.

Este puede haber sido el mismo sentimiento que Kamijou Touma de Nivel 0 había sentido cuando eran Anti-Skill, Judgment, las Nivel 5 y los Trascendentes los que luchaban.

Sus papeles se habían invertido.

Ahora ese chico era el único que tenía control total del campo de batalla.

Sólo él podría enfrentarse a este enemigo.

Los títulos habían perdido todo significado.

Y la situación todavía estaba en curso. No era momento de quedarse estancado. Kamijou no era una fuente de posibilidades ilimitadas. Tampoco tenía ningún poder oculto ni habilidad especial.

Su sombra parpadeaba inestablemente. Este poder lo adquirió a costa de su propia destrucción.

Lo que significaba que tenía que haber un límite de tiempo.

Parte 4

Kamijou y Rosencreutz chocaron de frente y el chico atravesó una pared, volando por el pasillo que conducía al ascensor. Fue lanzado por el hueco del ascensor y rodó por el suelo antes de detenerse.

Se encontraba en una gran cafetería.

Sintió una sensación desagradable debajo de él.

Apenas podía verlo sin forzar la vista, pero la culpable era la arena amarilla.

El color de la derrota había impregnado la zona.

Aunque un hospital debía estar lo más limpio y estéril posible.

-…

Kamijou Touma se levantó silenciosamente y luego se tambaleó hacia un lado.

Como si estuviera luchando por soportar el peso de las enormes mandíbulas.

La sangre todavía manaba a borbotones del hombro donde le habían arrancado el brazo. No iba a durar mucho así. En sólo unos minutos más, colapsaría por la pérdida de sangre y no podría volver a levantarse.

Miró fijamente a CRC. A ese hombre impulsado por la alegría y la curiosidad que ahora sonreía con el sudor empapando su rostro.

-Ah.

Entonces.

A Kamijou no le importa lo que le pase a él mismo. Su propia destrucción había sido parte del plan desde el principio.

Tenía que encontrar alguna manera de terminar con esto antes de que se le acabara el tiempo.

-¡¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!

Suponiendo que se avecinaba un gran ataque, CRC agarró algo de la nada.

Fuera lo que fuese, brillaba en rojo.

-El brillo del rubí apunta al rojo puro de la rosa. Ese símbolo femenino es un par de la cruz y puede producir cualquier cosa. ¡¡Así que produce en masa monstruos de muerte y destrucción aquí y ahora!!

Un temblor recorrió el edificio.

Y no sólo uno. Aparecieron más y más orbes plateados de 2 m conocidos como Carcasas sin Alma, hasta que llenaron el espacio.

Las gigantescas burbujas plateadas se abrieron todas a la vez. Ni siquiera Rosencreutz sabía lo que sucedería. Aún sosteniendo el dispositivo madre, el símbolo de la rosa roja, CRC sólo se rió.

Estas cosas absorbieron poder místico como un chamán.

Lo decodificaron mecánicamente.

Y lo lanzaron al mundo.

-Herramientas de piedra: la forma más antigua de un golpe mortal. Palos de madera: la forma más antigua de azotar mortalmente. Uranio: la forma más antigua de envenenamiento por radiación. La forma más antigua de ahogamiento. La forma más antigua de disparo mortal. La forma más antigua de quema mortal. La forma más antigua de asesinato por causas heroicas. La forma más antigua de ahorcamiento. ¡¡¡La forma más antigua de decapitación, de ensartado, de vibración mortal, de aplastamiento, de electrocución, de envenenamiento, de homicidio vehicular, de muerte por exceso de trabajo, de muerte por picoteo, de muerte explosiva, de muerte por ser enterrado vivo!!!

Se abrieron.

Kamijou apretó los dientes.

Y soltó un brutal aliento púrpura del dragón.

La muerte mutua estaba bien para él.

-¿¡Gahhhhhhh!?

Había leyendas de ese tipo.

Por ejemplo, la mitología nórdica hablaba de una gran serpiente que había crecido hasta poder rodear el mundo entero. Durante la batalla final de Ragnarok, ese dragón incluso logró derrotar al dios número 2 a costa de su propia vida.

-Jormungand de la… ¿mitología nórdica? ¿Usaste el peso que ni siquiera Thor podía levantar para aplastar por la fuerza tu propia herida y detener la hemorragia?

Kamijou no entendía nada de eso.

Y no importaba si lo hacía o no.

Había un precedente. A cambio de perder una cantidad de sangre posiblemente mortal, este dragón que emergió de su mano derecha le había robado todo el poder a una niña después de que ella se convirtió en un dios del rayo.

-Kh.

El brazo derecho, el dragón invisible, obtuvo mayor control sobre el niño.

La sombra a sus pies parpadeó de manera inestable. Parecía listo para apagarse permanentemente en cualquier momento.

Pero una voluntad de hierro de “por mí está bien” se podía ver dentro del chico.

Si podía proteger a Anna Sprengel y a las personas que habían ayudado a intentar salvarla, estaba dispuesto a ir más allá de los límites de la humanidad aquí.

Entonces, cuando Kamijou Touma levantó la cabeza, la luz en sus ojos no vaciló ni un ápice.

-¡~ ~ ~!

Las lágrimas se formaron en los ojos de Rosencreutz.

No había sucumbido al miedo.

CRC tuvo una visión objetiva de su propia crisis y se conmovió hasta las lágrimas como si estuviera viendo una película.

-Ha ha.

Y esa emoción barata e irresponsable fue lo que permitió a ese malvado santo impulsado por la pasión recurrir a su mayor poder.

-¡¡Ah, ja, ja, ja, ja, ja!! Increíble, simplemente increíble☆ ¿Este viejo realmente está siendo arrinconado? ¿La muerte se ha acercado tanto? Hee heh. Aquí es donde comienza todo. Una vez que este anciano logre un regreso milagroso y escape con vida, ¡¡realmente me ahogaré en mis lágrimaaaaaaaaaaaaaaas!!!

Eso fue como un detonante.

No importa cuán retorcido y podrido estuviera, su lado juguetón podía resistir la tentación de lograr la destrucción mutua con su némesis.

Y una vez que dio un giro total hacia la supervivencia, sólo le quedaba una opción.

Es decir…

-¡¡¡Huir!!!

Él no dudó.

Rompió una ventana aún intacta y saltó por ella.

Por mucho poder que Kamijou ahora posee, ha perdido mucha sangre de su brazo cortado. En realidad no había necesidad de luchar contra él. Al alejarse, CRC podría esperar hasta que a Kamijou se le acabara el tiempo y colapsara.

Kamijou moriría solo tal como estaban las cosas y, si intentara usar primeros auxilios para recuperarse, CRC sólo tendría que cortarle la cabeza al niño o arrancarle el corazón.

Rosencreutz nunca lo habría permitido antes. No porque fuera demasiado orgulloso. Su alegría y su deseo de desahogarse simplemente no lo habrían aceptado.

Pero su objetivo ya había cambiado.

El orgullo era sólo una forma de disfrute. Ahora que había cambiado su objetivo de “victoria” a “supervivencia” y anhelaba el placer de lograrlo, sabía que huir era la mejor opción.

-¡¡Hee, ha, ha!! ¡¡Nos volveremos a encontrar después de que la barrera del tiempo te haya aplastado y te haya robado todo!! -Gritó.

Al momento siguiente, algo explotó.

Rosencreutz fue obligado a regresar al hospital.

No era una barrera misteriosa ni un hechizo de ataque definitivo nunca antes visto.

No era más que un trozo de plástico de 45 cm.

Un triángulo isósceles voló justo fuera de la ventana. Era un dron Cabeza de serpiente y no estaba solo. Un gran grupo de ellos volaba juntos como una bandada de estorninos o murciélagos. La masa retorcida de máquinas parecía una serpiente negra volando por el cielo.

No se trataba en absoluto de oficios de élite. Todo lo que hicieron fue localizar su objetivo, encender su combustible sólido, abordarlo a gran velocidad y detonar sus explosivos internos.

Pero aun así habían impedido la fuga de Rosencreutz.

Éstas eran sólo armas producidas en masa, pero CRC era sólo un humano. Si no respondía de alguna manera, su cuerpo sería destruido y perdería la vida. Este no fue un golpe decisivo, pero aun así lo obligó a responder, limitando sus opciones.

Una voz habló desde sus pequeños parlantes.

-No intentes cargar con el destino de esta ciudad por tu cuenta, fenómeno monstruoso.

No se trataba de ponerse al día o permanecer en el mismo campo.

Un grupo de peones desechables fue suficiente.

-Aún eres humano y uno de los residentes de Ciudad Academia del que soy responsable como Presidente de la Junta. ¡¡No te atrevas a olvidar eso!!

Cada vez se encendieron más drones.

Cada explosión no fue más poderosa que un cohete antitanque disparado desde el hombro y no causó ningún daño real al CRC. Pero esto nunca tuvo como objetivo derrotar a ese hombre. Tuvo que deshacerse de su orgullo como el número uno. Si estos ataques aparentemente inútiles pudieron mantener a Rosencreutz quieto el tiempo suficiente para que Kamijou Touma lanzara su propio ataque, eso sería una victoria más que suficiente.

Parte 5

Todo empezó ahí.

Sin ese acto, probablemente nunca hubieran tenido otra oportunidad.

Shokuhou Misaki se mordió el labio, tomó una decisión y apuntó el control remoto de su televisor.

-No subestimes el poder de una chica enamorada.

Ella no tenía que entender las cosas.

Pero aun así decidió ser parte de esta batalla.

-Categoría 909: Preservar la Conciencia. ¡¡Te apoyaré tanto como sea necesario☆ ¡¡Así que nunca te perdonaré si renuncias a tu capacidad mental por algo tan tonto como la pérdida de sangre!!

Kamijou Touma había estado tambaleándose inestablemente de lado a lado, pero ahora se mantuvo erguido y sólido.

Puede que esto no haya tenido mucho efecto en el chico cuando tenía su mano derecha, pero las cosas habían cambiado.

La Súcubo de Bolonia también se unió.

-Ups, me ganaste. Pero además de eso agregaré mi genial Cold Mistress. ¡¡Los placeres de la muerte y la resignación te llegarán como el dolor más insoportable, así que no bajes la guardia, chico!!

-Otra vez ella me está robando mi parte.

-No tengo idea de lo que quieres decir♪

Claramente algo había cambiado.

Todo se volvía en contra de Christian Rosencreutz.

Quizás ninguno de ellos pudiera derrotarlo. No podrían desempeñar un papel tan importante. Pero detener su cobarde huida era otra cuestión. Siempre y cuando condujera al final, ese chico había acortado su propia vida para lograrlo.

Todavía tenían opciones.

Y esa comprensión encendió los corazones de todos los presentes.

¡¡Reunieron todo su poder aquí para asegurarse de que su espíritu no se rompiera!!

-¡¡Tch!!

Rosencreutz chasqueó la lengua en esa situación de hormiga león.

Si dejaba de luchar y era arrastrado hacia el centro, le esperaban esas mandíbulas excepcionalmente mortales.

-¿Qué es esto, CRC?

Avergonzada de sí misma por confiar en esto, la Diosa Bruja Aradia bailó como si se deslizara por el suelo. Sus pies descalzos mezclaron el ungüento necesario para preparar su Triple Recarga.

-Pareces terriblemente enojado por alguien que planeó masacrarnos a los Trascendentes para evitar el aburrimiento. ¿Es eso porque el mundo que encuentras ante ti no es nada aburrido? Sí, este es un mundo colorido de estímulos poderosos donde todo es posible: la vida, la muerte, la victoria y la derrota.

-¿¡!?

-Al final, eres el tipo de hombre santo que sólo puede hablar en grande cuando tiene una ventaja abrumadora. Alguien así nunca podrá comprender las profundidades de ese niño. -Susurró Buena Vieja Mary. El hechizo de resurrección de la Transcendente significaría que ella había visto todas las formas en que las personas encontraron la muerte. -En verdad, él no es tan poderoso. De hecho, perdió la vida varias veces en el camino hacia aquí. Pero cada una de esas muertes fue el resultado final de vivir su vida al máximo; ni una sola vez se tomó la molestia de vivir. Luchaba constantemente por ganar, pero cuando perdía, recogía los pedazos y seguía adelante de todos modos. No podría ser más diferente de ti, que se aburrió de su fuerza pero aún así se aferró vergonzosamente a su estado actual.

Se escuchó un leve tintineo metálico.

Misaka Mikoto había lanzado una moneda arcade al aire.

Cuando volvió a aterrizar en su pulgar, apuntó.

Y ella rugió.

-Estoy disparando un Railgun. ¡¡¡Todos, despejen la línea de fuego!!!

El aire estaba comprimido.

Normalmente, esto no habría sido una amenaza para el CRC. Pero en ese momento, el joven plateado definitivamente frunció el ceño. Estaba molesto. Lo que significaba que esto era efectivo.

En total, no habrían podido ganar más de un minuto de tiempo.

Pero eso era suficiente. Sin decir una palabra, Kamijou Touma se acercó una vez más.

Medio arrastrando las fauces del dragón gigante con él.

Y…

Parte 6

En la UCI, la pequeña Anna Sprengel estaba acostada en una cama y rodeada de maquinaria dura y fría. Su expresión parecía pacífica al principio, pero habría agobiado a un experto médico con gran ansiedad. No le estaban dando ningún tipo de anestesia, por lo que la falta de respuesta al dolor no era una buena señal.

El color rojo fluía a través de varios tubos transparentes.

Había muchos más tubos de lo normal.

-¿Cómo va la diálisis? -Preguntó el médico con cara de rana con una tensión inusual en su voz.

-El proceso en sí va sin problemas.

El cabello de Anna sufrió daños anormales. La sangre no fluía a través de los pelos, pero aun así recibían oxígeno y nutrientes para mantenerse sanos.

Eso significaba que algo andaba mal con la sangre del paciente.

-El procesamiento de la sangre antes de que regrese a su cuerpo también está funcionando. Su tipo de sangre está siendo alterado temporalmente.

El técnico y una enfermera estaban ocupados trabajando incluso ahora.

Proporcionarle a alguien el tipo de sangre incorrecto lo pondría en condición crítica. Eso era innegable. Pero también era cierto que el tipo de sangre de algunas personas había cambiado después de un trasplante de médula ósea que creaba la sangre.

Entonces, si se cambiaba toda la sangre y no solo una parte, había posibilidades de supervivencia.

-Esta llamada 'maldición' lleva a cabo su ataque fatal después de identificar a un individuo por su sangre.

El médico con cara de rana era un médico del lado científico.

Pero incluso si no podía explicarlo con su propio conocimiento, no era el tipo de persona que le decía a un paciente que sufría y moría que su dolor no podía ser real porque ninguno de los textos médicos describía nada parecido.

Él salvaría a todos los que padecen enfermedades.

Incluso si la enfermedad aún no hubiera sido escrita en ningún texto médico.

-Entonces, si el tipo de sangre que fluye por sus venas cambia, esta 'maldición' debería perder de vista su objetivo y dejar de funcionar. Sólo espero que esto acabe con esto.

La palabra “maldición” le daba una impresión arcaica y exagerada, pero sólo tenía que pensar en ella como una forma de alergia al polen que reaccionaba ante el rostro o el nombre de un individuo.

(Espero que esta “maldición” no pueda durar para siempre sin un objetivo.)

Las bacterias dañaban a las personas para sobrevivir y las toxinas dañaban a las personas porque reemplazaban una sustancia necesaria. Entonces, si no pudieran funcionar correctamente, eventualmente se descompondrían, serían expulsadas del cuerpo y desaparecerían naturalmente. No eran ni buenas ni malvadas. No fue más que una lucha por la supervivencia.

-A este paso. -Murmuró el médico con cara de rana.

Fue entonces cuando un temblor sordo sacudió el edificio.

Y las luces del techo parpadearon.

Si bien esto no era un apagón completo, fue muy inusual. El hospital siempre contaba con múltiples fuentes de energía para garantizar la supervivencia de sus pacientes críticos. Entonces, en lugar de un problema con la instalación de generación de energía en sí, tenía que haber algún problema con el cableado en la pared o el techo.

Algo había cambiado.

Cambiado de forma crítica.

Parte 7

Kamijou Touma lentamente colapsó hacia adelante.

Nadie pudo detenerlo.

Había perdido demasiada sangre.

Su límite de tiempo siempre había sido de 10 minutos como máximo.

Ni siquiera Shokuhou Misaki y el apoyo psicológico de la Súcubo de Bolonia pudieron llevarlo a superar los límites de su cuerpo físico.

La única carta de triunfo capaz de derrotar a Rosencreutz se había roto.

Cayó al suelo.

El dragón desapareció en el aire.

-Ha ha.

La risa resonó.

Por supuesto, vino nada menos que de Christian Rosencreutz.

-Ahora tu derrota está asegurada. -Dijo el joven plateado, mirando al suelo. Tranquilamente. -Nunca hubo una respuesta. Nunca habrías podido encontrar una manera de derrotar a este viejo. Pero este resultado sigue siendo una fatalidad nacida de sus propias decisiones. Buscaste fuerza como humano, pero aun así te aferraste al poder inhumano una vez que estuviste desesperado. Todos los que vieron esto debieron haber pensado lo mismo: "Oh, Kamijou Touma se ha desviado de sus costumbres habituales". Y esa desviación es lo que trajo este resultado. Cometiste un error y nunca encontrarías poder real en ese error. Ninguno en absoluto.

La violencia perversa había triunfado al final.

Y.

La muerte barrió.

El Súcubo de Bolonia fue volada como un proyectil de artillería y la Diosa Bruja Aradia quedó incrustada en una pared. El radar de microondas de Misaka Mikoto no fue suficiente para detectar qué la hizo girar en el aire y estrellarse contra el suelo. Shokuhou Misaki presionó el control remoto de un televisor contra su propia sien, pero algo impactó la parte posterior de su cabeza antes de que pudiera impulsar el movimiento de sus ojos. Esto no era como si alguien fuera noqueado en una película o drama. Algo invisible claramente se rompió y partió dentro de su cabeza.

Accelerator solo podía mirar mientras controlaba remotamente el enjambre de drones Cabeza de serpiente.

Se les acabó el tiempo y la derrota los llevó a esto.

-Kee Hee, ee heh. ¡Hee,ha ha hahahahahaha!

Muerte.

Matanza.

Y rojo.

-¡¡¡Ah, ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha ha!!! …Ufff.

Christian Rosencreutz volvió a aparecer desde el fondo. No, finalmente se había detenido después de moverse tan rápido que no se había convertido en más que líneas fluidas.

El único enemigo que le quedaba era la Buena Vieja Mary.

¿La había dejado intencionalmente para el final o fue sólo una coincidencia? También podría ser que ella se hubiera defendido parcialmente de su ataque.

-Ahora, carta del triunfo. ¿A quién resucitarás con esa carta de triunfo de un solo uso?

-…

-Y no esperes que este anciano se quede de brazos cruzados y mire. Sólo podrás resucitar a uno de ellos a costa de tu propia vida. …Y, Buena Vieja Mary, dudo seriamente que puedas derrotar a este anciano por tu cuenta. Tu único valor está en tu resurrección. Entonces, ¿a quién le confiarás tus sueños? ¿A quién elegirás para cambiar esto?

¿Sería Misaka Mikoto o Shokuhou Misaki?

¿O sería Aradia o la Súcubo de Bolonia?

Cada una de ellos poseía un poder tremendo. Ninguna de ellas era un humano común y corriente. Con el As, la Reina y tantos otros con variados talentos disponibles, ¿a quién elegiría Buena Vieja Mary?

-Tómate tu tiempo y piénsalo.

Él rió.

Él se burló.

Porque la respuesta fue obvia desde el principio.

-¡¡Hee ha haah!! ¡Pero no hay una respuesta real! No importa a quién le devuelvas la vida, no podrán derrotar a este anciano. Si la muerte humana fuera absoluta, podrías haberte dado por vencida. Pero como posees esa carta de triunfo de la resurrección, ahora estás atrapada en mi prisión, alquimista de cocina. ¿¡Agonizarás por esto por la eternidad, o la presión será demasiado para soportar así que tomarás una decisión descuidada solo para que este anciano los haga trizas a los dos!? Observa cómo tus propias acciones revelan de qué lado te has puesto y a quién has convertido en tu enemigo. Kee ha ha hahaha. ¡¡¡Arrepiéntete de tus propias decisiones mientras buscas en vano una respuesta!!!

En respuesta, el último Trascendente restante exhaló un suave suspiro.

Y Buena Vieja Mary habló.

-A nadie.

-¿?

-No me molestaré en resucitar a nadie en este momento. Tú eres el que se ha quedado sin tiempo. Un segundo antes y quizás lo hubieras logrado. Pero perdiste de vista lo que realmente importa aquí, continuaste ignorando la vida en la que deberías haberte concentrado y cruzaste descuidadamente la encrucijada final. Es demasiado tarde para que las cosas vuelvan a ser como estaban. No importa cuánto lo intentes.

Inclinó la cabeza.

CRC expresó pura confusión.

Pero el joven plateado debería haberse estremecido de miedo ante esa simple verdad. Se estaba quedando en blanco. No se le ocurrió nada que se adaptara a la situación que se le presentó. Pero si fuera lo que fuese se le escapaba de la mente, ¿cuánta amenaza podría representar realmente?

Todavía no lo entendía, así que Buena Vieja Mary señaló hacia otra parte.

La respuesta estaba ahí.

Aleister Crowley.

El mago que CRC había derrotado y procedido a ignorar se había levantado.

Estaba gravemente herido.

Era increíble que todavía estuviera vivo.

Si hubiera fingido su muerte, podría haber tenido mayores posibilidades de sobrevivir.

Pero en lugar de eso, apretó los dientes y se puso de pie. ¿Quién lo había inspirado a hacer eso? ¿Por qué ese humano podría desafiar a CRC una y otra vez con el golden retriever a su lado?

¿A quién aspiraba realmente ese ser humano a emular?

-No me importa... cuántas veces falles.

Las palabras brotaron de sus labios agrietados.

La persona a la que le había confiado esta lucha ya se había derrumbado.

Y como resultado, el 99% de las personas que habían confiado lo suficiente en ese chico como para reunirse aquí ahora estaban muertas.

Esa era la derrota.

Kamijou Touma no cumplió con sus expectativas.

Pero a pesar de las manchas rojas y negras que cubrían su cuerpo, el espíritu de ese humano no estaba roto.

Porque…

-No perderé la esperanza en ti, no importa cuántas veces pierdas o caigas. Lo juro. Pensando en retrospectiva, era raro que encontraras una victoria fácil de principio a fin. Pero siempre te asegurabas de recuperar la vida de alguien antes de que se perdiera. Eso no fue una ilusión. Entonces creeré en ti. …¿Esperas que acepte que una pequeña cosa como la derrota es suficiente para que te rindas? No importa cuántas veces caigas de rodillas, sé con certeza que volverás a levantarte.

-¿Joven?

-Así que consúmeme si es necesario. ¡Gran Demonio Coronzon! ¡¡Santo Ángel Guardián Aiwass!! Ustedes, monstruos, siempre fueron demasiado para que los manejara un fracaso constante como yo. Pero sólo por esta vez, apóyame. Ayúdame a ganar el tiempo que necesitamos. ¡¡Dame el poder para cumplir mi promesa!!

-¿Crees que volverá a levantarse? ¿Basado en nada? ¿Ese perdedor está empapado en su propio vómito sangriento y aun así pondrías todas tus esperanzas en él? Buena Vieja Mary tal vez podría resucitar al menos a una persona aquí si estuviera dispuesta a sacrificarse por mi ataque, ¿¡aunque tú ni siquiera podrías hacer eso!?

-Eso no es lo que significa creer en alguien. -Afirmó Buena Vieja Mary. Ella cortó directamente las palabras de ese adversario imbatible. -No se cree en alguien porque sea lógico o porque las probabilidades sean favorables. Los seres humanos creen y rezan a las personas en las que realmente quieren creer. Alguna vez fuiste blanco de ese tipo de creencia. Si has olvidado esto, entonces realmente no eres digno. Desafortunadamente, el salvador al que oraron mamá y el resto de los Trascendentes no fue en absoluto lo que esperábamos.

La Buena Vieja Mary había elegido creer en ese chico.

Creer de verdad.

Si ella se sacrificaba para resucitar a una persona aquí, todo terminaría allí mismo. Una vez que ella muriera, su resurrección nunca más podría usarse nuevamente. Pero si era paciente, sobrevivía y creía que esta batalla mortal sería superada sin elegir la opción fácil del autosacrificio, podría usar su resurrección en todos y cada uno de ellos. Sólo entonces estaba disponible la posibilidad de salvar a todos.

Eso era lo que significaba creer en alguien.

Nunca se habló de esa creencia en términos de “al menos”.

No todo se reducía a acciones sobrehumanas. Había opciones que estaban disponibles si las deseabas con todas tus fuerzas.

Nadie estaba discutiendo lógica o probabilidades. El hilo de la posibilidad era muy tenue, pero Buena Vieja Mary eligió creer en el futuro en el que más quería creer. Porque sabía que el tonto compromiso de obligarse a sí misma a creer en algo en lo que no quería creer nunca lograría conducir a un mundo amable y feliz.

-Y por absurdo que parezca, hay ocasiones en las que nuestras expectativas y creencias egoístas reciben respuesta. Hay personas que se arrastrarán por el barro y harán lo que sea necesario para que eso suceda, sin importar cuán escasas sean sus posibilidades. Y a veces finalmente alcanzarán aquello por lo que estaban luchando.

-…

-La gente valora las cosas como los milagros. CRC, estoy seguro de que alguna vez fuiste capaz de hacer eso. Es posible que lo haya hecho incluso en el mundo moderno. Pero mientras dejaste que tus pasiones y tu alegría te guiaran, pasaste la encrucijada final y llegaste a un punto del que nunca podrás regresar.

Por el rabillo del ojo, Christian Rosencreutz vio algo levantarse.

Fuera lo que fuese, estaba teñido de rojo y negro. Era alguien que no debería haber estado vivo todavía.

La respuesta era obvia.

Esto era en lo que todos los vivos y los muertos habían creído.

Kamijou.

Kamijou Touma.

-Imposible… -Murmuró Christian Rosencreutz, temblando de repente. -Nunca tuviste la oportunidad de usar tu resurrección. Este viejo nunca se lo habría perdido.

-Tienes razón. Pero mamá no lo usó con nadie. Ni siquiera con él.

-¡Entonces esto no puede estar pasando! A un humano normal le cortaron el brazo y lo dejaron desangrarse durante 10 minutos. ¿¡Tienes idea de cuánta sangre habría perdido en ese tiempo!? ¡La respuesta está en litros! ¿¡Y esperas que crea que superó eso por alguna tontería sobre creer en él!?

-¿Realmente deberías estar diciendo tonterías en este momento, CRC? ¿Necesito recordarte que eres el cadáver en el que alguna vez creyó la Cábala Constructora de Puentes? -Dijo solemnemente Buena Vieja Mary. -Él respondió a nuestro llamado. A diferencia de ti, él no huyó del poder de la fe. Las reglas han cambiado. Te perdiste por completo la encrucijada que no podías permitirte cruzar y seguiste adelante. La leyenda en la que tanta gente creía y en la que rezaban ya no existe. Ahora no eres más que un cebo. Un cebo que usaremos para mostrar una nueva leyenda que ha aceptado el poder de la creencia y está trabajando para crear un futuro mejor. Te permitiste ser reducido a esto, CRC.

Kamijou hizo un movimiento horizontal con su inexistente brazo derecho.

El dragón invisible estalló.

Surgió una vez más.

Esa era la respuesta.

Kamijou Touma y Aleister Crowley estaban uno al lado del otro, ambos ensangrentados y maltratados. No necesitaban intercambiar ninguna palabra. Este equipo debería haber sido imposible, pero fue posible dentro de la leyenda de este momento.

No hubo ninguna señal.

Aleister simplemente dio una mirada pensativa.

Un momento después, ambos corrieron hacia adelante.

Directamente hacia su mayor enemigo: Christian Rosencreutz.

-¡¡Ahhhhh!!

-¡¡Ohhhhhh!!

En respuesta, CRC tragó saliva y con calma elaboró la respuesta en su cabeza.

-El ángel científico Kazakiri Hyouka y el demonio artificial Qliphah Puzzle 545.

Y la persona detrás de esas dos.

Del nuevo presidente de la junta directiva Accelerator.

-Ese cañón acelerador de partículas que reunió todo el poder de la ciudad no estaba dirigido a este anciano.

Usar el acelerador de partículas Hula Hoop para lanzar un ataque mortal dentro de la ciudad era una cosa, pero ¿qué pasaba del otro lado? No podían permitir que atravesara el muro exterior en el lado opuesto de la ciudad y luego quemara Shinjuku y Yokohama más allá. Este grupo era demasiado blando para aceptar ese nivel de sacrificio. Entonces, ¿qué habían hecho?

Su modelo en miniatura era útil para realizar búsquedas, pero había una cosa de la que debía tener cuidado.

Sólo proporcionaba la información que él buscaba activamente.

Lo que significaba que podría perderse algo.

Especialmente cuando vino de un punto ciego que no había considerado.

-Tenías a dos no humanos en reserva, pero sabías que no podrían derrotar a este anciano si simplemente los enviabas tras de mí. Así que encontraste una manera de inyectarles una enorme cantidad de energía sin que yo me diera cuenta. Los ángeles y los demonios son efectivamente formaciones de energía, ¿así que esto aumentó su fuerza bruta y les dio energía?

Se habían puesto del lado de Kamijou Touma.

Al darse cuenta de que no podían derrotar a CRC ni siquiera en sus formas mejoradas, ¿el ángel científico y el demonio mágico habían optado por ayudar a Kamijou?

Como líder en la cima, la pregunta para Accelerator no es quién obtenía la victoria. Mientras pudiera eliminar la amenaza de Rosencreutz y devolver la paz a la ciudad, nada más le importaba.

No era una cuestión de lógica o probabilidades.

La gente creía en la persona en la que querían creer.

Entonces, aunque no estaba físicamente presente, el número uno no dudó en concentrarse en esa carta de triunfo en particular.

-¿Usaste la ausencia de su mano derecha para introducirlos en su cuerpo? ¿¡Para que sus manos invisibles pudieran apretar su corazón parado y hacerlo comenzar a latir una vez más!?

Por lo tanto, no fueron sólo dos personas las que se acercaron a Rosencreutz.

Mucha más gente había creído en ese chico. Le habían confiado sus vidas, su futuro y el destino de Ciudad Academia y el mundo.

-Rosencreutz. No importa cuán desesperada seas la realidad.

-Sí, y no importa cuánto de este mundo destruyas.

Kamijou Touma no huiría.

Llevaba todas esas cosas en su espalda mientras vertía todas sus fuerzas en el dragón invisible.

-Si insistes en que no podemos salvar a nadie aquí…

-Sí, y si insistes en que los buenos y los malos no pueden salvarse por igual…

Los golpes aterrizaron simultáneamente.

-¡¡¡Entonces destruiremos esa ilusión!!!

Aquel que Purifica a Dios y Exorciza Demonios, y el Conquistador de la Batalla de Blythe Road.

Dos puños inhumanos volaron y lanzaron sin piedad a Christian Rosencreutz más allá de las fronteras del Distrito 7.

Parte 8

Cuando la pequeña mujer malvada abrió los ojos, no tenía idea de dónde estaba. Vio un techo blanco, detectó un olor químico en el aire y notó una gran cantidad de equipo médico a su alrededor. La máscara de plástico duro que cubría la parte inferior de su rostro la irritaba. Pero ella dudaba en moverse. No creía que pudiera moverse de inmediato y, dada la sensación de tirón debajo de su piel, podía adivinar que tenía varias agujas perforando sus vasos sanguíneos y tubos y cables eléctricos conectados por todo su cuerpo.

Sin embargo, ella estaba viva.

Anna Sprengel estaba viva.

-¿Dónde… estoy?

Mirándola desde arriba había un médico con cara de rana.

Él le dedicó una suave sonrisa.

Este médico había estado a la altura de la creencia que cierto chico había depositado en él.

Heaven Canceler habló de la misma manera que siempre lo hizo.

-Vas a estar bien. Todo ha terminado ahora.

Algunos de los que vieron esto podrían haberlo elogiado como un milagro.

El milagro común de la vida.

Entre Líneas 4

-Uf, ¿esto es real, mi señora?

-Sí. Aunque preferiría no creerlo, así parece.

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