Sakurasou no Pet na Kanojo:Volumen 1 Capitulo 3

From Baka-Tsuki
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Capítulo 3 - Junio es un mes húmedo y lúgubre

Parte 1

“… No puedo dormir…”

Dando vueltas más veces de las que se pueden contar y ahora acostado baca abajo con la cabeza enterrada debajo la almohada, Sorata trato de ver si poniendo la situación en palabras ayudaría.

Por supuesto, no lo hizo. Nada ha cambiado.

Miró la hora en su teléfono en su teléfono celular. Eran las dos de la mañana. Dos horas después de que él se había metido a la cama.

Frustrado, Sorata obligo a sí mismo a levantarse, y a regañadientes encendió las luces

Las brillantes, luces fluorescentes lo segaron. A pesar que sus ojos gritaban por dormir, su mente estaba extrañamente clara, y no podía deshacerse de ese sentimiento de falta de armonía.

Tsubasa, el tabby marrón que haba estado durmiendo acurrucado a los pies de Sorata, lo miro con una expresión un poco molesta. Sorata esperaba un ataque de Tsubasa, pero Tsubasa solo emitió un gran bostezo y se volvió a dormir.

De rodillas sobre la cama sin ninguna razón en absoluto, Sorata de repente se postro y ofreció una oración.

“Dios, por favor, sólo dame algo de somnoliento…” Intento cerrar los ojos por un rato, pero no tenía sueño en absoluto. Más bien, lo único que logro fue despertarse a sí mismo más por pensar en lo estúpido que estaba actuando en ese momento.

Dio un solo suspiro y levanto la cabeza, frotándose los parpados.

¿Por qué no podía dormir, aunque le era difícil incluso abrir los ojos?

Durante la semana pasada, todas sus noches fueron más o menos así.

No sabía cómo llegar a dormir. Honestamente, él no podía recordar lo que había hecho antes para conciliar el sueño.

Incluso sus pensamientos al azar sin sentido, si solo los deja ahí por más tiempo, cambiaria inevitablemente a la cuestión de si es o no iba a dejar Sakurasou. Y otra vez Sorata se dio cuenta donde sus pensamientos giraban, él trataría de escapar de ellos corriendo hacia el mundo de los sueños. Pero no podía conciliar el sueño, así que ese tema solo aria un incesante y despiadado remolino dentro de la cabeza de Sorata.

Pensó que todo el asunta ya había sido enterrado.

Honestamente, él no tenía idea de porque estaba preocupado por todo esto. Y entonces en su ansiedad dio lugar a nuevas preguntas, que solo hacían pesar su mente más y más. Todo lo que hacía Sorata era quitarse el sueña más y más.

“Ugh, ¡¡maldita sea!!”

Si no hacía nada, acabaría concentrando sus pensamientos en ese tema otra vez e ir directamente a un espiral de la muerte. Queriendo por lo menos mantener sus manos ocupadas, Sorata tomo la ropa que había colgado a secar en su habitación, y la tiro toda dentro de una pila gigante sobre su cama.

Empezó a doblar cuidadosamente la ropa, un artículo a la vez. Solo hacer algo como eso podría aclarar su mente de pensamientos.

Sin embargo, Sorata termino pronto de doblar su ropa, dejando solo la ropa de Mashiro.

Dobló la blusa del uniforme escolar con cuidado, asegurándose de no arrugar el cuello, y organizo sus calcetines azul marino (Requerido por la escuela) par por par. Luego estaban las prendas delicadas… Sorata quería solo doblar las ropas delicadas con total normalidad, pero el primerio que agarro fue una negra, camisola lazada y Sorata supo de inmediato que era causa perdida.

Era solo un trozo de tela… era solo un trozo de tela…

Incluso mientras se repetía eso a sí mismo, no podía encontrar la manera de reprimir sus instintos masculinos, y no podía dejar de imaginar cómo luciría Mashiro al llevar esto. Fue atacado por un sentimiento de culpa. Y, para colmo de males, el próximo rival de Sorata era u par de bragas negras que asían juego con la camisola. Sorata sostuvo los dos extremos de las bragas y se puso rígido[1].

Después de haber sido golpeado de nuevo por la realidad, Sorata murmuro.

"Si alguien más me mira, lo más probable es que piensen que soy un pervertido."

Sorata hace ese análisis más preciso para la situación.

Después de eso, Sorata rápidamente dobló las esquinas de las bragas y las enrollo. Tratando de mantener la ropa interior lo menos a la vista posible, los metió entre la blusa y una toalla.

Por supuesto, no importa cuán cuidadosamente Sorata hizo todo esto, cuando estas cosas vuelvan a la habitación de Mashiro, serán esparcidas al azar por el suelo de nuevo.

Y la limpieza de esa habitación era un parte del trabajo de Sorata como la persona asignada con

“cuidar a Mashiro”.

Si Sorata acaba dejando Sakurasou, Jin se convertiría en la persona encargada de hace esas cosas.

Si Jin es quien la haría, ya que él ya está bastante acostumbrado a ver la ropa interior, sería capaz de hacer estas cosas sin romper a sudar de nervios como Sorata lo hizo. Él sería capaz de manejar todo suavemente. Jin era justo esa clase de persona.

Sin embargo, la idea de que Jin sea quien cuide de Mashiro hizo que Sorata se sintiese violentamente enfermo.

“Pero en serio, que estoy pensando… no de esa manera.”

Lo importante en ese momento es sí, sí o no Sorata se quedaba en Sakurasou. Claro, sus deberes en Sakurasou estaban allí, pero eran su problema y solo de él, por lo que Mashiro no era relevante. Así que, ¿Por qué era que, noche tras noche, sus pensamientos siempre terminaban regresando a Mashiro?

Sorata no tuvo una sola reacción de Mashiro cuando le dijo que se iba. Para bien o mal, ella no se estaba comportando diferente a causa de esta. En otras palabras, Sorata no tenía idea de lo que ella pensaba.

Al darse cuenta de que se volvería loco si seguía pensando en esto, Sorata rápidamente se puso de pie. Si no podía dormir, entonces el solo tenía que estar despierto. Permanecer en su habitación iba a revolver su cerebro, por lo cual Sorata decidió dirigirse al comedor para tomar un vaso de agua.

Para la sorpresa de Sorata, ya había alguien en el comedor cuando llego allí.

Una sola persona estaba sentada delante de la nevera y hurgaba dentro de este. Era Mashiro, en pijama. Ella se veía un poco adormilada, pero aún así tomo energía para tomar una zanahoria de la nevera, acercarla y darle vuela frente a sus ojos y examinarla. No aparentaba estar feliz por su selección, así que regreso la comida para conejo a la nevera, y esta vez sacó un pepino. Sorata se preguntaba si iba a tratar al pepino de la misma manera que trato la zanahoria, cuando vio su nueva selección, cerró sus labios con fuerza y callo en el pensamiento por unos momentos. Una vez que aparentemente termino de pensar, sin previo aviso, le dio un mordisco al pepino.

“¿Eres una kappa o algo así?”[2]

Con el pedazo de pepino todavía en la boca, Mashiro se dio la vuelta con calma y miró a Sorata. No parecía estar ni siquiera un poco sorprendida, aunque Sorata había hablado tan de repente. Ella se limitó a seguir masticando el pepino.

“¿Podría ser que… tenías hambre?”

Masticando lentamente el pepino, Mashiro asintió a Sorata con la cabeza.

“Bien, bien, ¡Deja de comer eso! ¡Voy hacer algo para ti!”

En ese punto, Mashiro tragó.

“Yo no soy un kappa.”

“¡Ya lo sé!”

Sorata sentó a Mashiro en la mesa del comedor, y tomo un vistazo a la nevera. Porque él había estado cuidando de Mashiro por un tiempo, su cocina había mejorado, junto con su repertorio.

Sin embargo, si hacia demasiado ruido, Chihiro iba a enfadarse con él, así que se conformó con una taza de ramen del estante.

Hirvió el agua con el hervidor de agua naranja que Misaki había comprado, y luego vierte el agua en la taza. Y lo puso en frente de Mashiro, que estaba esperando en la mesa.

Ella trato de comer los fideos inmediatamente.

“¡Espere tres minutos!”

Sorata detuvo a Mashiro de continuar.

Y él se quedó allí sorprendido por el hecho de que Mashiro no parecía saber lo que era una taza de ramen.

Sorata se sentó a lado de Mashiro en la mesa.

Esos tres minutos se sentían como si fueran para siempre. Mashiro no dijo ni una sola palabra mientras miraba fijamente la taza de ramen. Y Sorata tampoco no podía decir nada.

Era bastante obvio porque Mashiro estaba despierta a esas horas. Ella había estado dibujando su manga hoy también. Y sintió hambre en el medio, así que dejo su habitación para bajar aquí.

Este fue un día normal para Mashiro. Desde que llego a Sakurasou, ella había estado siguiendo más o menos el mismo patrón todos los días. Ella trabajaba en su manga hasta quedar dormida, e iría a la escuela después de ser despertada por Sorata. Y una vez que volvía a casa, se encerraba en su cuarto e iba derecho a trabajar en su manga.

Mientras que otras chicas de su edad estaban haciendo cosas como buscar novio, siendo abandonadas por sus terribles novios, dando vueltas por el salón de belleza, comprar ropa, ir al karaoke, gastando todo su dinero, tener que preocuparse por su peso, y por lo general, quejarse de como la vida era tan aburrida e irritante, Mashiro pasaba día tras día de trabajo duro. Todo en aras de alcanzar una meta que se había fijado ella misma.

Para Sorata en ese momento, Mashiro parecía casi segadora. Era difícil mirarla. Tener una persona así de brillantemente segadora en frente suyo, hacia a Sorata más consciente de sus propias fallas.

“Sorata.”

“A-Ahh, ¿Qué pasa?”

“Tres minutos.”

“Adelante, entonces.”

Mashiro quitó la tapa y empezó a sorber los fideos de ramen. Encontrando el silencio asfixiante y esperando un lugar en donde encajar, Sorata habló.

“Umm… la competición que mencionaste antes… ¿la fecha limite va a ser pronto?”

“… A finales de junio.”

“Ah, así que a finales va a ser.”

“… Sí.”

Había alrededor de un mes y medio de sobra.

“Así que, en ese caso, quiero decir… queda mucho tiempo de sobra, ¿Verdad?”

“……”

“Ahh, bueno, eso está bien…”

“… Mmm.”

“Oh, cierto. ¿Cuántas propuestas suelen tener?”

“Setecientos, tal vez ochocientos.”

“Ah, así que son muchos.”

“… Yes.”

La conversación parecía no ir a ningún lado. Y eso era culpa de Sorata.

¿Por qué es importante para ti, cuando te vas?

Sorata estaba esperando que Mashiro dijera algo así, y eso lo hacía más torpe y tímido.

Incluso después de haber terminado de comer, Mashiro se quedó en su asiendo. Sorata se perdió la oportunidad de hacer un salida limpia, y se vio incapaz de moverse. Un aire de incomodidad cayó entre Sorata y Mashiro.

Con el paso del tiempo, Sorata encuentra más difícil de mirar a Mashiro a la cara. Cuando sus ojos se terminaron por encontrar accidentalmente, Sorata sentía un sentimiento de culpa aprieta su pecho por razones que no comprendía, y tuvo que contenerse para no dejar escapar un gemido.

Realmente quería salir de ese lugar tan pronto como sea posible.

Sin embargo, si él se levantaba y se iba primero, parecería como si estuviera huyendo, y él no quería eso.

¡Haz tu mejor esfuerzo!

Eso era todo lo que debía decir, y entonces él podría regresar a su habitación. Pero el no podía. De hecho, eso era lo único que no podía decir.

Él no estaba en condiciones de animar a alguien más de seguir adelante. Él era el único que necesitaba tratar de hacer su mejor esfuerzo. Mashiro tenía sus propios objetivos, y avanzaba rápidamente hacia ellos. Ella ya estaba haciendo su mejor esfuerzo. Y la exposición de ese vacío en su propia en ese momento era demasiado dolorosa para Sorata de soportar.

Mientras Sorata estaba a punto de ser aplastado por un pilar gigante de autocompasión, oyó un ruido procedente de la puerta de entrada. Dándose la vuelta, vio a Jin de pie, ahogado en un bostezo. Como siempre, las marcas de lápiz labial se podían ver en su cuello.

Tan pronto como Jin vio a Sorata y a Mashiro, habló.

“¿Qué están haciendo?”

Dirigió una pregunta obvia.

“Ah, nada en realidad.”

“Nada… entonces ¿Por qué te ves como un hombre a punto de conseguir sus papeles de divorcio sellados?”

“Hah, ¿Es eso lo que parece?”

“Hey, hey, esa fue una reacción muy blanda para una buena remontada, ¿Sabes?”

En eso Mashiro se puso de pie.

“Gracias por la comida.

Terminando con solo esas palabras, Mashiro salió el comedor. Probablemente estaba regresando a su habitación para volver a su trabajo. Jin observo el silencio en la salida de Mashiro y espero a que el anillo de sus últimas palabras se muriese. Luego casualmente hablo.

“Hey, Sorata.”

“¿Qué?”

“Si no vas a hacer ningún movimiento, voy a tomar a Mashiro-chan para mí mismo.”

“¡¡…!!”

Sorata no podía poner sus sentimientos en palabras. Pero su cuerpo instintivamente reacciono y miro a Jin directamente. No, más bien fulmino a Jin. Una sonrisa se dibujó en el rostro de Jin, y él parecía estar disfrutando de la reacción de Sorata.

“La respuesta estándar se aquí seria decir “¿Por qué dices eso?”

“¿Por qué dices eso?”

“Si no quieres que se te sea quitada, entonces deberías llegar con ella primero.”

“No es como si pienso en Shiina como-“

“Bueno, entonces, ¿qué en el mundo es eso?”

“¿Qué es eso…”

Sorata sentía como si supiera la respuesta a esa pregunta, pero no tenía la confianza de decirla en voz alta. En el minuto en que puso sus sentimientos en palabras, ya no podía hacer más excusas. No había lugar a donde correr. Sin embargo, eso significa ¿Qué él por fin llegara a un acuerdo con sus propios sentimientos? ¿Finalmente llegar a términos con donde sus sentimientos le llevaban...?

“Oh? Jin, has vuelto. Bien venido a casa~ ~.”

Mientras Sorata luchaba con sus palabras, fue salvado por Misaki con apariencia algo somnolienta que había bajado desde el segundo piso. Al ver que ella sostenía un lápiz en sus manos, Sorata supuso que ella había estado ocupada dibujando su anime.

“Ah, sí, estoy en casa.”

“Ooh, tengo sed~ ~.

Completamente ignorando la tensión en el aire, Misaki camino ruidosamente hacia el refrigerador, y sacó una botella de 2 litro de agua, después de beber directamente de la botella, miro a Sorata.

“Kouhai-kun, ¿Quiere un poco?”

Misaki alargo el agua hacia Sorata. Sorata inconscientemente se acercó a tomar la botella, pero Jin cortó por el medio y le arrebató el agua llevándola lejos.

Jin vacío el resto hasta dejar la botella seca, le entrego de nuevo la botella vacía de nuevo a Misaki, Dio las buenas noches a todos, y dejo el comedor.

Misaki, ahora dejada en la habitación con Sorata, miró el labio de la botella de plástico y su puso rígida.

"K-Kouhai-kun, ¿qué debería hacer...?"

Misaki parecía estar completamente distraída por sus propios sentimientos.

“A-acabo de besar a Jin indirectamente…”

Su pregunta parecía ser retórica, porque antes de que Sorata pudiese responder, ella corrió al piso de arriba con las piernas temblorosas, golpeándose con la nevera, la mesa y luego con la pared en su camino.

Dejado solo en el comedor, Sorata no tenía suficiente energía como para moverse más, y solo colapso en una silla. Estaba directamente de frente con las tareas del que hacer pegadas al refrigerador.

Y se veía que Cuidar a Mashiro era el primero enlistado.

Cuando estaba cerca de Mashiro, se sentía consumido por su brillantez, viendo como ella avanzaba hacia su objetivo. Sin embargo él no quería dejar Sakurasou y confiarle su cuidado a Jin. Estaba atrapado entre la espada y la pared, y estaba desesperado por encontrar la salida…

Cuanto más pensaba en ello, mas sus pensamientos y sentimientos se mesclaban entre sí, y más confuso se sentía.

El reloj mostraba que eran las tres de la mañana.

Con el mismo ritmo constante, las agujas del reloj avanzan hacia la mañana.

Y esa mañana seria el amanecer para todos.

Sin embargo, sería mucho tiempo más antes de que la obscuridad profunda en el corazón de Sorata se disipada.

===Parte 2===[3] “Tú, enserio, ya basta.”

En cierto día de Julio, Sorata fue llamado al salón de maestros, donde se encontró con una extremadamente enojada Chihiro.

“Solo déjame decirte una cosa.”

Ella había dejado salir eso. Y después, reclinándose en su silla con las piernas y sus brazos cruzados, y con su usual expresión molesta, ella le dijo secamente a Sorata lo que exactamente estaba en su mente.

“Bueno, que coincidencia. Estaba pensando en que debería tomar un descanso también.”

Sorata estaba tratando de aligerar el ambiente un poco, pero toda su observación había hecho que el brillo en los ojos de Chihiro se hiciera más nítido.

“Esto no es acerca de la encuesta de carrera ¿Verdad?”

Sorata probó las aguas con una pregunta que ya sabía la respuesta.[4]

“¿Por qué en el mundo te iba a llamar aquí por algo tan estúpido como eso?”

“Bueno, creo que algo como mantener sitio en la nevera para que tenga espacio para poner los huevos es importante.”

A lo que Chihiro se estaba refiriendo era el estado de ánimo fuerte que flotaba sobre Sakurasou últimamente, al igual que los cielos nublados de los exteriores. Incluso cuando había una mancha de sol, este era rápidamente cubierto por las densas nubes, y una sensación de melancolía llenaba el aire. Y, al igual que las nubes de lluvia que no se iban, por más de un mes, la atmosfera de Sakurasou había sido triste y persistente.

Era culpa de Sorata.

“Me voy a ir. He querido hacer eso desde el principio.”

Todo comenzó cuando él había dicho eso.

Él pensó en esas palabras día tras día. Y cada vez que pensaba en ellos, de repente encontraba más difícil respirar. El sabía que todos sus problemas desaparecerían si podía tomar un decisión, Sin embargo, poder decidirse, aun sabiendo eso, era otro problema por completo.

Mientras tanto, en el otro lado del espectro, Jin había estado viniendo a Sakurasou cuatro días a la semana desde que tuvieron esa conversación, como si estuviera tratando de demostrar que su oferta era seria. En este mes, también había hecho un gran progreso en la búsqueda de los nuevos dueños de los gatos de Sorata, y esa misma mañana le había dicho a Sorata que había encontrado a los futuros propietarios de cuatro de ellos.

Llámalo una diferencia de personalidad, pero no parece que esto le sea difícil en absoluto, y todas las mañanas, en lugar de desearle los buenos días a Sorata, él decía:

“¿Ya te has decidido?”

“No, todavía estoy pensando.”

Sorata respondería de esa manera, en ese punto…

“Ahh, bueno, solo asegúrate de pensar duro acerca de ello, kouhai-kun.”

Y Misaki vino y le dio una palmadita en la espalda.

Gracias a estas cosas, Sorata se pudo mantener a flote de las aguas del mar de la desesperación. Misaki le trataba de la misma manera de antes, y, como de costumbre, cada mañana el chateaba con Ryuunosuke.

Sin embargo, Ryuunosuke había enviado un disparo de advertencia hace tres días.

Esta atmosfera venenosa que ha estado rondando Sakurasou últimamente proviene de Kanda. Se necesita urgentemente que trates con ella. No te molestes en responder, Solo arréglalo.

Ese correo apareció de repente en el buzón electrónico de Sorata.

Sorata conjuro desesperadamente un montón de excusas, y envió una respuesta absurda de regreso, cuando…

Si sigues diciendo cosas aburridas, te vas a encontrar a ti mismo hundiéndose en la bahía de Sagami. De Maid-chan, quien recomienda la bahía de Sagami, ya que está más cerca de la bahía de Tokio.

Él acababa de conseguir esa disgustante respuesta de regreso.

Y su relación con Mashiro también se convirtió en un problema. Su misma, extraña rutina diaria de Sorata despertándola, haciéndole su almuerzo, y luego darle baumkuchen cuando se lo pida, pero sus conversaciones se sentían extrañamente fuera de tiempo.

“Es de mañana, Shiina.”

“… Buenos días.”

“Ah, buenos días.”

“……”

“……”

Sorata no podía dejar de sobre analizar estas laguna de silencio en sus conversaciones.

“Que buen clima estamos teniendo.”

“Si, buen clima.”

“……”

“……”

Sorata se preguntó si ella estaba tratando de contener algo que ella quisiese decir. Por lo contrario, la idea de que ella no sentía absolutamente nada también puso a Sorata en un estado complicado de la mente.

Al principio, Sorata no presto atención a este pequeño agujero en su relación, pero este solo se hizo más grande y más grande con el tiempo, y pronto todos en Sakurasou, se vieron envueltos en gruesas nubes obscuras.

Y luego, al no ser capaz de soportar esta atmosfera por más tiempo, Chihiro llamó a Sorata a su oficina. Ella cito la razón por la cual todo ese asunto era molesto, pero para la inimaginablemente floja Chihiro, lidiar con los asuntos Sakurasou no era algo cotidiano. De hecho, no tenía precedentes.

“Kanda, ¿Estas escuchando?”

“Mmm.”

Eso era todo lo que Sorata respondió a Chihiro al momento que se abalanzó sobre el como un borracho con sus quejas.

“¿No es triste que tenga que lidiar con vivir en una casa que se siente como si estuviera en medio de una juicio de divorcio?”

“Sabes, la esposa de Takatsu-sensei volvió a casa de sus padres el mes pasado, y nos está dando una mirada feroz en este momento. Muestra un poco más de tacto.”

“Bueno, están casados, así que no es como si su esposa pueda escapar de él.”

“Suena como si estuvieras completamente celosa.”

“Sabes, a mí, no me interesan los problemas de las demás personas, así que no me arrastre adentro.”

“¡¿Eso es algo que un maestro no debería decir dentro de la sala de profesores?!”

“Gaste toda mi vida siendo discreta y sigo soltera, así que no me importa.”

“Además, Sensei, ¿No dijiste que solo ibas a decir una cosa?”

“Detalles, detalles.”

“¡Sensei, realmente deberías preocuparte un poco más por los detalles!”

Todos los oídos en la sala de profesores estaban sobre Chihiro y Sorata. Claro, todos estaban fingiendo apatía y seguían haciendo su trabajo, pero todos los maestros estaban claramente espiando, y daban miradas fugaces a ellos de vez en cuando.”

Desde su punto de vista, esto era, lo que Chihiro amaba decir, “No es asunto mío”, y como se esperaba nadie interrumpió la conversación.”

“Hehehe, están en probleeeeeeemas ~~. Esto es lo que obtienes por siempre dormirte en mi clase.”

Bueno, no, una persona estaba interrumpiendo.

Ella estaba sentada al otro lado de Chihiro. La maestra de japonés Shiroyama Koharu miraba a Sorata con una sonrisa en la cara y su barbilla apoyada en sus manos. Ella no parecía como si tuviera algo mejor que hacer. No, ella estaba viendo la guerra que se despliega desde primera fila.

“Koharu, cállate. La única razón por la que todos se duermen en tu clase es porque ninguno de los estudiantes te toma enserio.”

“Oooooooooooooo. Yo pensé que Chihiro-chan estaba de mi lado…”

Ella inflo sus mejillas infantilmente. Y pensar que una mujer de treinta años de edad se comportara de esa manera parecía apropiado.

“Kanda.”

“¿Qué?”

“Te voy a dar una tarea.”

“Gah, ¡¿Por qué!?”

“Es el castigo por hacerme sentir infeliz.”

“Uwaah, suenas como un dictador.”

“No me importa si terminas decidiendo si te vas o no, pero cual sea tu elección, asegúrate de limpiar tu propio culo. Definitivamente no quiero ser quien limpie tu inmaduro culo por ti.”[5]

“…Uhh…”

“Si no puedes, entonces como castigo, voy hacer que te cases conmigo o con Koharu.”

“Uwaah, eso es tan extremo…”

“Kanda-kuuuun, ¿¿Qué quieres decir con eso ~ ~??”

“Si, si, Kanda. Yo soy una buena chica como me veo, y aunque Koharu se ve como una idiota, ella siempre se jacta de que ella es increíblemente feroz en la cama, así que estoy segura que te divertirás con eso.”

“Sensei, ¿Qué demonios estas diciendo en medio de la sala de profesores?”

“No te preocupes, Los maestros son adultos, así que pueden saber cuándo esto bromeando.”

Si ese es el caso, entonces ¿Por qué el profesor de historia del mundo está tosiendo violentamente después de parecer ahogarse con la pasta de Batata que estaba comiendo? Y, oh mira, el profesor de física giro su taza de té y ahora está saltando arriba y abajo para hacer frente a las quemaduras. Y debe ser la imaginación de Sorata, pero todos los maestros hombres parecían estar mirando a Koharu, tratando de evaluar si Chihiro había dicho la verdad.

“Hmm… Kanda-kun, ¿huh…? Yo prefiero a alguien un poco más lindo, para ser honesta…, pero puedo dejarlo pasar. Quiero decir, nadie me ha estado haciendo compañía últimamente tampocoooo ~~.”

“Chihiro-Sensei, por favor detenla. Está completamente loca.”

“No quiero, deja de molestarme.”

Es lo que Sorata pensó que iba a decir. Pero en cambio…

“Más importante aún, esa chica, está esperando por ti, ¿No?”

Cuando Sorata vio por la ventana de la sala de maestros, vio a Mashiro esperándole delante de la puerta de la escuela. Estaba sosteniendo una sombrilla roja que no le hacía juego en absoluto, y estaba allí de pie e inmóvil.

“Solo no hagas otra molestia de las que ya tienes.”

Recibiendo una cálida y confusa despedida, Sorata dejo la sala de profesores atrás.

Después de parar en su salón de clases por su bolsa, Sorata sin decir ninguna palabra salió por la puerta de la escuela, en la cual escucho los pasos de Mashiro siguiéndolo por detrás.

Sorata camino a su propio paso sobre el asfalto, que se había vuelto negro y mojado por la lluvia. Ocasionalmente, Mashiro se quedaba un poco atrás y tuvo que hacer un poco de trote para alcanzarlo. A pesar de ser consciente de lo que estaba sucediendo, Sorata tenía toda la intención de dejar a Mashiro atrás, Y solo continúo caminando sin ninguna pausa.

Al mismo tiempo, sintió la presencia de Mashiro detrás de él, y tuvo la sensación de que ella quería decir algo.

Sorata trato de hacer su maldito mayor esfuerzo para no voltear.

Sin embargo, pronto un sentimiento de culpa le broto, y rápidamente le empezó a comer el corazón.

Al final, antes de que caminaran la mitad de la distancia hasta Sakurasou, fue Sorata el que se rompió.

Se detuvo de caminar en frente de una vieja zona de juegos en la cual había jugado muy a menudo, un parque infantil sin nada, solo una caja de arena y un columpio.

El sonido de los pasos de Mashiro también se detuvo.

“Algo pasa, ¿No es así?”

Sorata estaba convencido que si intentaba hablar con Mashiro, ella rápidamente cambiaría la plática al tema que si se iba o no de Sakurasou.

Pero desde ese día, Mashiro no había dicho ninguna palabra sobre eso.

Sorata tampoco decía ninguna palabra al respecto.

Desde el momento en que Sorata había dicho que se iba a ir, la situación parecía haberse estancado.

Sintiéndose completamente indefenso, Sorata se dio la vuelta, y fue recibido con una vista completa de un paraguas rojo.

“Ese paraguas no te hace juego en absoluto.”

“Es de Misaki.”

“¿y que paso con el tuyo?”

“Se rompió.”

“Bueno, ¿Por qué no compraste uno nuevo?”

“No se me permite ir de compras.”

“Lo sé.”

Si se le permitía salir por su cuenta, no había forma de saber las cosas locas que iba a hacer.”

“Si Sorata viene conmigo…”

“Si me da la gana.”

“…Si.”

“¿Tenias algo más que decir?”

Sorata deliberadamente espero por su respuesta.

Mashiro lo pensó un poco.

“Quería decir esto desde hace un tiempo.”

Después de murmurar eso, ella miro directamente a los ojos de Sorata.

Sorata se armó de valor hasta el núcleo para prepararse para cualquier palabra que pudiera venir después.

“Desde hace un tiempo, yo pensé que “Mangle” era una mala palabra.”

“……”

“……”

“¡¿Huh?!”

“Desde hace un tiempo, yo pensé que “Mangle” era una mala palabra.”

“Espera. Dame un segundo. Necesito enfrentarme con qué demonios acaba de pasar.”

Sorata se agacho y puso sus brazos sobre su cabeza.

Tomo un minuto para ponerse de cuclillas y ordenar sus pensamientos.

“¿No será que estabas siendo discreta en este momento, y solo hiciste un broma para aligerar el ambiente?”

“……”

Considerando que es Mashiro, las posibilidades de esto eran casi nulas.

Lo que significaba que, todo lo que había dicho Mashiro, lo dijo con toda seriedad y con una completa naturalidad. Y para decírselo, ella había esperado hasta ahora. Sorata tenía dificultades para comprender eso…

“¡¿Hay una razón por la cual decir eso ahora?! ¡¿No la hay, verdad?! ¡¿Definitivamente no la hay, verdad?!”

“Entonces, ¿Cuándo quieres que te lo diga?”

“Honestamente, ¡Solo quiero que guardes eso para ti misma!”

Sorata sabia más o menos como era Mashiro, pero esto era solo demasiado.

Por otro lado, ese asunto del cual Sorata no quería hablar no había salido, por lo que en silencio dio un suspiro de alivio.

Empezó a caminar de nuevo, cuando…

“Espera.”

Mashiro le dijo que parara.

“¿Qué?”

Aun de espaldas, Sorata espero que Mashiro le respondiera desde detrás.

“Sal conmigo el domingo.”

“……”

“Estoy recogiendo datos para usarlos para escenario de fondo, y hay lugares a los que quiero ir.”

“¿Es para el manga que vas a enviar a la competencia?”

“Sí”

“Ya veo… pero, lo siento. Estoy ocupado el domingo.”

Sorata no tenía ningún plan. Solo que no tenía tiempo libre para cuidar de los problemas de otra persona. Además, si él la seguía en su viaje de recolección de datos, una vez más empezaría a odiarse a sí mismo por no haber ningún progreso en su decisión. Así que él no estaba exactamente interesado en lanzarse a un barranco espinoso.

“Pregúntale a Jin o algo.”

Sorata sonaba como un niño molesto cuando dejo eso. Buscaba sonar un poco más tranquilo y sereno, pero no pareció importar lo que tratara de hacer en ese momento, todo termino en el camino del fracaso.


“Entiendo. Lo hare.”

Mashiro empezó a caminar primero esta vez. Si era posible, Sorata no quiera hablar de nada más. Sin embargo, Mashiro no parecía inclinada a pagar ese lujo.

“Hey, Shiina.”

“¿Si?”

“¿Adónde exactamente piensas que vas?”

“Voy a volver a Sakurasou.”

“¡Los dormitorios están del otro lado!”

“… Lo sé.”

“¡Mentirosa! ¡Tú enserio pensaste que ese era el camino correcto!”

“No lo hice.”

“¡Si lo hiciste!”

“No lo hice.”

“Tu enserio no tienes esperanza. Estoy realmente sorprendido.”

“Sorata necesita ver un doctor.”

“¡Tu deberías de checar tu cabeza!”

Hoy, Sorata y Mashiro caminaron todo el trayecto a Sakurasou, hablando de ida y vuelta en su habitual sentido, improductivo.



Notas de Traductor

  1. Ooo de donde?
  2. Una criatura mitica japonesa que ama los pepinos.
  3. Lo siento por las vacaciones de la semana pasada, esperen, ¿al menos saben que trato de subir por lo menos una parte a la semana?
  4. Literalmente, "él lanzo su otra bola." Sin embargo, Las referencias al béisbol son menos impactantes en Inglés, así que no la deje adentro, no tiene nada que ver con el hecho de que no me gusta el béisbol. No me mires así. En serio, esto era un cambio totalmente imparcial ... HEY Mira hacia allá esa cosa! * Huye *
  5. Como que no escaja ¿verdad?, aquí les dejo otra: pero cual sea tu elección, asegúrate de limpiar el desorden que causaste. Definitivamente no quiero ser quien limpie tu inmaduro desorden por ti.
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