Maru-MA Volumen 04 Capítulo 7

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

Su Majestad, en estos momentos estoy en un lugar tan frío como las tierras del norte poniendo a prueba mi devoción… Voy camino a comenzar mis oraciones matutinas, pero hace varias horas, concluí con el baile del cambio de día… quiero decir, oración…

Con sus palabras convirtiéndose en “La Historia de Shin Makoku, Desde el País del Norte” sin que se diera cuenta, von Christ Günter sube por la larga y oscura escalera paso a paso al área de oración ubicada en el mirador de la azotea.

—¿Cómo es que los cuerpos de la gente de aquí aguantan? ¿Es que no necesitan dormir? ¿Cómo es posible, Dacascos? No dormiste nada, ¿o sí?

—Buuenno, me deshperte unnos cuanntoz pedozzz durangte la nocheee.

—¡¿Qué?! ¡¿Has dicho que te tiraste pedos?! ¡¿Y sin siquiera pensar en mis sentimientos, atrapado en la misma habitación que tú?!

Dacascos deja de bostezar.

—…No me tiré un pedo. Pero, Su Excelencia, si se va a escandalizar por algo como eso, nunca será capaz de casarse.

—No hay problema… Juraré… mi amor y lealtad… únicamente a Su Majestad.

Su respiración se acelera rápidamente.

Pero, de todos modos, ¿Lord von Christ aun no se ha dado por vencido en intentar ganar el favor de Su Majestad?

Dacascos deja escapar un suspiro, con cuidado de no atraer su atención.

Los soldados tienen un pasatiempo privado: El Ranking del Preferido de Su Majestad —abreviado El RP de Su Majestad[1]—. Actualmente, la mayor parte de las apuestas están sobre “Wolfram logrando lo que quiere a la fuerza”, pero la recompensa es baja. Hay varias otras predicciones como “Caerá presa de los encantos de Su Anterior Majestad Cäcilie” y “Se fugará con una belleza tejida a tamaño real de Su Excelencia Gwendal, después de hacer que la sociedad acepte su amor”.

Él tiene algunos amigos buenos en las apuestas por naturaleza que vieron venir el “Conseguirá una chica muy joven y la prepa... educará de acuerdo a sus ideales” y apostaron ese caballo oscuro que les traería una gran ganancia a pesar de llorar esperando que no sea verdad. Pero a esta altura, él ya no podía decir que es un escenario imposible que “Su Excelencia Günter, perdiendo la cabeza, emitirá una voz extraña, secuestrará a Su Majestad y huirá como loco”. Eso recibiría una enorme recompensa. Podría costear todos los pagos de su casa de una sola vez. Su esposa volvería a enamorarse de él otra vez. Muy bien, Su Excelencia Günter, ¡lo compro!

Dacascos escribe eso en su bloc de notas mental.

—Estas escaleras… sí que son largas… ¿verdad?

—Aunque, son un buen entrenamiento.

En comparación con el rito de iniciación de los nuevos soldados, Sentadillas por los Cinco Mil Escalones del Infierno, esta subida no era nada. También tenías que bajar las escaleras haciendo sentadillas, así que todos los años hay soldados que terminan con heridas serias luego de caer desde la cima, soldados que se echan al suelo y abrazan sus rodillas con los ojos vacíos casi a medio camino y montones de soldados que abandonan. Aunque, hay algunos entre los soldados que lo han logrado terminar que consiguieron hacer pasar las piedras de los cálculos renales por sus tractos urinarios[2].

Como Günter va tan lento, muchos monjes se adelantan y pasan por sus lados. Como regla, toda conversación está prohibida fuera de los cuartos personales así que nadie les habla, pero por alguna razón, todos voltean hacia ellos con una sonrisa como si quisieran decir algo.

Más o menos cuando Günter estaba a punto de explotar por saber la razón de esto, un monje joven decidido se le acerca. Para no ser visto por aquellos que los rodean, le da un corto mensaje en voz baja:

—El diario estuvo increíble.

—¿Eh?

Luego de eso, los monjes a su alrededor comienzan a murmurar: “Pienso lo mismo, pienso lo mismo”.

—Me conmovió.

—Lloré.

—¿No hay más?

—¿Va a escribir una continuación?

—Los diarios son realmente increíbles, ¿eh?

Luego de serle entregado tímidamente un cuaderno de dibujo con un: “Intenté hacer algunas ilustraciones para acompañarlo”, Günter finalmente deja de caminar.

—¡¿…Eh?!

Es un monasterio con pocas diversiones.




De acuerdo al Doctor de las Aguas Termales —cuyo nombre suena muy falso—, que declaró nunca haber visto heridas de mazokus antes, aunque le dieran calmantes para el dolor y medicamentos para la infección, y todo tipo de calmantes como para que en este momento probablemente ya no sienta nada, no hay garantía de que sobreviva.

—En este momento, está en la orilla.

—¿No quiere decir “al borde”?

Luego de mi impulsiva y ostentosa declaración de “¡Te desafío!”, ponemos al casi muerto Gegenhuber en una camilla y nos fuimos de forma bastante sencilla con un “Bueno, demos por terminada la noche”. Nos toma un tiempo volver al hotel y probablemente pronto ya amanecerá.

Después de poner al hombre que apenas respira en la cama de Conrad, Greta no se aparta de su lado. Yo ardo de celos. Los padres son infantiles en ocasiones como estas.

—Su Majestad, no se acerque. Si es posible, quédese con Wolf en la habitación contigua.

—¿Por qué? Él ya no tiene la fuerza suficiente para sostener una espada. Ni siquiera yo temo ser asesinado por alguien tan gravemente herido.

—No, no puedes bajar la guardia. Has llegado a un punto en el que quiero registrar tu inexperiencia como novato en el Libro de los Récords Mundiales de Cabezas Huecas o algo —dice Wolf mientras apoya su cabeza contra la pared, sus ojos están rojos por la falta de sueño. ¿Me está halagando?

—Pero, simplemente no lo comprendo. ¿Por qué te atacó Gegenhuber? Sin tener en cuenta la enemistad entre él y Conrart, él no estaba en contra la autoridad real.

—Huber no puede haber sabido que Yuuri es el Maou.

—Ah, ya veo.

Greta definitivamente ha dicho eso, que el rey no era una mujer. Lo que significa que cuando ellos se conocieron antes de que ella viniera al castillo del Pacto de Sangre, es posible que él le dijera que la gobernante de Shin Makoku era Lady Cherie y que si les decía que ella era su hija, sería fácil obtener acceso. Tristemente, esa información tiene medio año de antigüedad y no le dio la versión actual de los hechos.

Greta me atacó con el objetivo de ganar el favor de la realeza de Sverera, bajo la cual fue dejada a su cuidado. Entonces, ¿por qué me atacó él con una espada? Por supuesto, él no podría saber que estoy en buenos términos con Nicola y que su novia va a dar a luz en su hogar. Si lo supiera, sería un ingrato. Aunque no creo que me deba nada.

Me siento con la silla al revés y mi barbilla apoyada en el respaldo, observando hacia la cama. De lejos.

Conrad habla en una voz baja, carente de emociones.

—… Probablemente quería que me ponga serio.

—¿Serio? Ah, independientemente de si yo soy el rey o no, él se dio cuenta de que te enojarías si atacabas a su amigo. Bueno, desde la perspectiva de un desconocido, soy más como el flojo de tu hijo.

—No. Él entendió todo inmediatamente.

Casi pregunto “¿que todo”? pero me detengo porque difícilmente obtendré una respuesta.

Tomando la mano del hombre seriamente herido, Greta comienza a murmurar como si hablara con ella misma.

—…Huber quería morir…

—¿Greta?

—… Huber me contó que en pasado él había hecho algo muy malo. Algo tan horrible, que para él era imperdonable vivir. Pero que como le dieron un trabajo, se las arregló para seguir adelante sin pensar sobre eso. Eventualmente empezó a olvidar el pasado y comenzó a pesar que tal vez estaba bien para él vivir e incluso encontró alguien que le gustaba. Pero…

Conoció a Nicola, se enamoró, y se desvinculó inmediatamente de su vida pasada. Porque ellos son un mazoku y una humana.

—Mientras estuvo sentado en la mazmorra y pasó un largo tiempo, él me dijo que comprendió que no había sido perdonado por lo que ocurrió en el pasado. Pero que cuando intentó tomar su propia vida, una mujer apareció en sus sueños. Ella dijo: “No puedes morir, no puedes morir todavía”. Así que no pudo suicidarse y estaba esperando que alguien lo matara. Fue por eso que nos fuimos juntos del castillo. Porque yo conocía todos los atajos y pasajes secretos incluso mejor que los soldados.

Esto debe tratarse del error que cometió en el pasado y la razón de la enemistad entre él y Conrad. Echo un vistazo preguntándome que clase de cara pone al escuchar esto, pero tiene una expresión más encantadora de lo habitual y no hay rastros de rabia o resentimiento.

—… Estuvimos juntos parte del camino… entonces no separamos y yo fui con Yuuri y Huber fue a otra parte que no fuera Shin Makoku para encontrar gente fuerte.

—Así que se convirtió en guardaespaldas para ser asesinado por alguien más fuerte que él…

Estoy casi seguro de que esa mujer o quienquiera que apareció en sus sueños no le dijo que encontraría su oponente destinado si empuñaba la espada.

—Yuuri.

—¿Mm?

Doy una respuesta idiota al suave llamado de Greta.

—Huber sigue enfriándose… ¡su temperatura sigue bajando!

—¡¿Eh?! Eso es malo, deberíamos hacer que vuelva el doctor, ¡doctor!

—¡Tú curaste mi fiebre, ¿verdad?! ¡Hiciste que Nina se mejorara de su gripe, ¿verdad?! ¡Cura a Huber de esa forma, cura las heridas de Huber!

—Eso fue, em , bueno, no sé si lo que hice en realidad tuvo algún efecto…

Las palabras de la médica vienen a mi mente.

“Con el inmenso poder de Su Majestad, este nivel de técnica debería ser simple.”

Gisela, ¿es eso verdad? ¿He progresado hasta el punto en el que puedo Curar y Sanar[3]?

—Yuuri, ayuda. Sostén su mano.

—Bueno, supongo que puedo intentar.

Me muevo para pararme, pero soy empujado de nuevo hacia la silla por las grandes manos de Conrad sobre mis hombros. Soy sujetado por sus palmas fuertes, e incluso si pongo fuerza en mis rodillas, no me puedo mover.

—No.

—No digas algo tan cruel, Kaku…

—Incluso si me llama por mi nombre falso, la respuesta sigue siendo no. Lo dije antes. Él apuntó una espada hacia usted y no es impensable que lo vuelva a intentar. No puede acercarse a alguien así. Conozco las capacidades de Gegenhuber mejor que nadie.

—¡Pero, aun así! ¡Es el marido de Nicola y el padre de un niño que está por nacer, ¿verdad?! Él no es el único al que tengo que ayudar, Nicola que espera en el reino también saldrá herida. E incluso si ahora ustedes están en ligas, ¿no solía estar él en tu equipo? ¡No eres un hombre tan frío para quedarte en silencio viendo como muere un ex compañero, ¿no es así?!

Los ojos de Conrad encima de mi repentinamente se ensombrecen y se oscurecen. Las pequeñas motas de plata cambian su apariencia para brillar fríamente.

—Soy ese tipo de hombre.

—Conrad.


MaruMAnovel4155.jpg


—Si lo pone en peligro, abandonaré a Huber. Soy ese tipo de hombre.

El encantador, atractivo, joven, auténticamente agradable Conrad. El hombre en el cual todo es perfecto, excepto por sus malas bromas, Lord Weller Conrart. Si una persona tímida se encontrara con este tipo de expresión de su parte, sería incapaz de desafiarlo.

—... Si yo no fuera el rey… no me habrías detenido.

—Para nada. Si no fuera Su Majestad el Maou, no habría dado estas irritantes explicaciones y simplemente le hubiera arrastrado fuera de la habitación.

—¿Porr cuando diempo van a seguid conesaa conversación complicada?

Medio dormido, y con los ojos medio abiertos, Wolfram se traga un bostezo indiscreto.

—Vass a currar aa Gegenhuber con majutsu curativoo, ¿certo?

—No estás hablando adecuadamente.

—¿Pod qué nomee lo pides?

Mi poder de comprensión no puede seguir el ritmo de esta inesperada manera de hablar.

—Porque Wolf… ¿tienes ese tipo de habilidad?

—No soy tan habilidoso como Gisela, pero tengo algo de experiencia elevando la curación natural de las personas. No hay forma de que yo no pueda realizar una técnica que se semeje a las que tú puedes hacer. Porque eres un…

—Novato.

El chico lindo resopla satisfecho y repite “¿me lo pides?”. Lo hago sin pensarlo dos veces. No me importa si me llama novato.

—Muy bien Yuuri, mira bien. Así es como se usan las artes curativas. ¡Oye Gegenhuber!

Más que sujetar su mano, él agarra su muñeca, la sacude toscamente en el aire y le grita.

—¡¿Estás escuchando, hombre herido?! No quiero ayudarte, pero lo haré porque Yuuri dijo “¡por favor!”. ¡Si vives un poco más, agradécele! ¡Promete que le consagrarás tu lealtad por el resto de tu vida! De verdad tienes agallas para salir gravemente herido y hacer que yo te atienda. No me importa si mueres,esa mujer y Yuuri se entristecerán.

Luego de eso, él hace hincapié en la denigración e incluso se vale del resentimiento del público.

—… Bueno, está incentivando sus ganas de vivir, pero…

—Esta es una situación única, así que por favor no la recuerde y no la imite.

Ya que la condición del hombre herido se estabiliza, me acuesto pensando que podría dormir un poco, pero soy despertado un momento después. De acuerdo a mi valiente reloj digital analógico G-shock, son apenas pasadas las 4:30.

—Si no nos dirigimos al lugar de encuentro, no llegaremos a tiempo para nuestra cita del mediodía.

Conrad revuelve una maleta.

—Será efectivo, así que use esto.

Él saca mi atuendo negro similar a mi uniforme escolar. Aparte de llamar la atención como un estúpido estudiante de preparatoria pública, ¿de qué forma va a ser esto efectivo?

—Si un soukoku vestido de negro mira calmadamente desde los asientos VIP, creo que los espectadores observarán hacia arriba con algo de temor.

—¿No dirán simplemente “da mala suerte” y cruzarán sus dedos? Estoy más preocupado sobre lo de nuestra bestia exótica. Es decir, es una carrera de bestias exóticas, ¿verdad? Si no tenemos un animal para que participe, no tiene sentido. No podemos decir “por favor escoge en mi lugar” o algo similar salido del diálogo de un drama. Si termino corriendo yo mismo, no llegaré muy lejos porque mi posición es de catcher.

—En cuanto a eso, por favor no se preocupe. He conseguido una bestia rápida y encantadora que está por encima del 80% de las demás en la escala de bestias exóticas.

Mientras me pongo mis zapatos nuevos, recuerdo que vinimos aquí para curar mi tobillo, no para hacer una gran apuesta o salvar a alguien. Es sorprendente que no ha pasado ni un día desde que llegamos a la ciudad turística de Hildyard.

En la cama contigua, Wolfram balbucea tiernamente: “No puedo comer más”.

Lord Weller llama al servicio a la habitación y me pasa una bandeja con comida ligera.

—Tiene que comer al menos un poco. Aunque, puede ser que no tenga hambre debido al estrés.

—¿Estrés? Estrés, eh. Es verdad, sería raro no estar estresado.

En el calor del momento, puse mi propio cuerpo como recompensa de una apuesta. Si gano, obtengo los derechos comerciales del distrito Oeste, Izura y Nina serán liberadas y habrá una enorme celebración. Pero en el caso improbable de que pierda, mi cuerpo se convertirá en posesión de la escoria humana de Louis Buiron y no tengo ni idea de a dónde me llevará. Si las cosas salen mal, puede que termine disecado y exhibido en la sala de estar de algún millonario. ¿Me pregunto que harán con mi ropa interior? Tal vez es innecesaria gracias a mi hermoso cuerpo entrenado.

—Diré esto por adelantado, pero si sucede algún accidente imprevisto y de casualidad perdemos…

Como era de esperarse, el siempre preparado Conrad ya tiene un plan en caso de que el evento concluya en derrota.

—…Haré algo cobarde. Si eso sucede, por favor no me odie ni hable mal de mí.

—¿Algo cobarde? ¿Cómo qué?

—Levantaré a Su Majestad y huiré con mis pies descalzos.

—¿Por qué con los pies descalzos? ¿Vas a abandonar también tu billetera?

Termino riéndome un poco. Supongo que la velocidad es importante de cualquier modo.

Durante este evento que se da una vez cada década, la Carrera de Bestias Exóticas en la Capital del Placer Hildyard, el pequeño centro formado por carpas cierra rápidamente y se reorganiza formando un hipódromo especial para el espectáculo.

Tal vez se deba a que los subordinados de Louis Buiron trabajaron muy duro, pero una instalación similar a una pista de carreras apareció durante la noche. Los espectadores ya están tomando asiento sobre el pasto fuera de la cerca.

—Entonces, ¿exactamente qué va a correr esta carrera? No podemos utilizar caballos normales, ¿verdad?

—En estos momentos nos esperan en el prado.

Solo pasearme con mi uniforme escolar puesto hace que los humanos a mi alrededor despejen el mi camino.

En un terreno abierto frente a nosotros, un animal da vueltas en círculos pequeños.

Se mueve con gracia sobre sus cuatro patas y da pasos pesados. A su lado está un hombre pequeño que está ocupado acariciándolo y poniéndolo a tono. Tiene un pelaje con patrones a dos colores, beige y marrón. A primera vista, es una de las especies en peligro de extinción de la Tierra.

—¡Gyeh!

Wolfram deja escapar un sonido como el de un sapo. El color de su rostro está cambiando delante de mis ojos.

—¡¿No-no es posible que pienses en confiar la vida de Yuuri a esta criatura insolente, jari?!

—Oye Wolf, estás volviendo a hacer lo mismo, estás usando jari otra vez.

—¡Cá-Cállate, Jari! No estoy diciendo “jari jari”, jari!

Moviéndose torpemente sobre el corto pasto de invierno está un oso de arna que se e igual a un panda gigante. El hombre pequeño que es el entrenador y jinete del animal nos saluda con ambas manos al vernos.

—¡Su Majestad! ¡Su Majestad!

Sus ojos estrechos son de un gentil color gris, quiero comprobar adecuadamente si es capaz de ver. Han pasado unos cuatro meses desde su encuentro fatídico en las dunas de arena. Tal y como dijo ese día, Ryan y el oso de arena se han vuelto famosos en este pueblo turístico.

—Su Majestad, permítame presentarle a Keiji. Oye, Keiji, parece que Su Majestad el Maou ha tenido al gentileza de venir a verte correr.

—…De hecho, ya que habitualmente está dentro de la jaula del circo, ¿realmente es capaz de correr rápido?

—Oh, es extremadamente rápido. Toda su vida ha habitado en las duna, así que ha desarrollado mucho la fuerza de la parte inferior de su cuerpo para ser capaz de correr a través de la arena.

Bueno, un panda rápido puede calificar como una bestia exótica.

El oso de arena, que parece ser cinco veces más pesado que Ryan, inclina todo su cuerpo sobre él. Está frotándolo juguetonamente con una patas con garras que parecen ser capaces de arrancar un corazón.

—¡Guajaja, Keiji es un amor! ¡Oh, mi corazoncito~!

“¿De verdad está jugando contigo, o es que está tratando de seccionar a su presa” es lo que quiero preguntar, pero me muerdo la lengua. Obviamente existe un vínculo entre esta bestia exótica y su entrenador que nosotros, la gente común, no podemos entender.

Cuando el lugar para los espectadores está bastante lleno, se toca con fuerza algo similar a una fanfarria de trompetas con instrumentos de latón. En la sección VIP que parece una torre de vigilancia solo hay espacio para cinco personas así que nos sentamos todos todos juntos con los muslos pegados entre ellos. El Sr. Buiron se relaja cómodamente en la torre de vigilancia contigua junto a una sola persona.

Cuando los animales participantes son anunciados, la pista de carreras se inunda del sonido de los espectadores pisoteando.

—¡En la pista rojo! ¡Del Circo O’Sullivan y Los Animales Más Peligrosos del Mundo, El extranjero 167, el oso de arena Keiji…!

Hay exclamaciones de: “¡Oh, un oso de arena!”, “¡Comen humanos en el desierto!”, “¡Podré ver correr a un oso de arena!”, “¡Los osos de arena son tan lindos!”, etc, etc.

—Sabes, esto no suena como el anuncio de una carrera… pero, de todos modos, ¿qué significa extranjero 167? ¿Qué se supone que significa “extranjero”?

—¡En la pista azul! Propiedad del mundialmente famoso Louis Buiron, el extranjero 201, El Goala del Paraíso del Infierno…!

Se elevan las voces emocionadas: “¡Guau! ¿Un Goala del Paraíso del Infierno?”, “¡AH, dijo Goala del Paraíso del Infierno!”, “¡Se convierte en un monstruo al no estar colgando y su alimento básico es prescripto!”, “¡Voy a ver algo asombroso!”, etc, etc.

—Su alimento básico no es prescripto, es eucalipto[4], ¿no es así? Pero, de todas formas, ¿qué clase de animal es un Goala? Y “Paraíso del Infierno” suena como alguna clase de frase budista…

Pero, lo que aparece en el césped es un koala completamente normal. Por supuesto, es enorme; del mismo tamaño o incluso más grande que el oso de arena Keiji. Es traído junto con un tronco grueso, pero está sujeto a una rama con sus ojos cerrados mientras cuelga de allí felizmente.

—¿Qué es tan “Paraíso del Infierno” en esa cosa?

—Será interesante si lo mira atentamente. Es lo que se puede llamar Dr. Jekyll y Mr. Hyde[5].

Es una vuelta de la pista de carreras y la meta está frente a nosotros. Ryan monta en el lomo del oso de arena Keiji, pero junto al goala solo hay tres hombres con hachas parados alrededor del tronco. Me preguntó si son los tipos que anoche hacían “¡Hah! ¡Hah! ¡Ho”.

El juez de salida levanta su mano derecha en alto y tan pronto como la mueve hacia abajo, las hachas comienzan a moverse. El grueso tronco hace unos ruidos sordos, se mece y el goala cae de la rama. Tan pronto como está en el piso, la expresión del animal cambia. Sus ojos abiertos están inyectados en sangre y son completamente rojos, y pareciera como si le fueran a saltar las venas hacia afuera sobre su nariz marrón. Al abrir su boca deja al descubierto sus grandes dientes, y suelta algo más parecido a un grito de guerra que un rugido. —¡GOAA!

—¡E-Es aterrador!

Apenas posa sus ojos en el oso de arena Keiji, que ha comenzado la carrera sin problemas, comienza a perseguirlo a paso de cazador. Ya veo, así que no necesita jinete. ¿Tiene una regla de que nadie —¿o nada?— tiene permitido correr frente a él?

—Me pregunto si Ryan y Keiji van a estar bien. Pareciera que serán devorados si esa cosa los alcanza.

—Probablemente, los Goalas del Paraíso del Infierno son carnívoros.

¡Esto es peligroso, Detective Oso de Arena[6]! ¡¿Acaso tus refuerzos del departamento de policía llegarán a tiempo?!

Justo como ha alardeado el entrenador de animales, las bestias exóticas son tan rápidas como los caballos. Sus patas delanteras y traseras se mueven tan velozmente que mis habilidades visuales no pueden seguir sus movimientos.

—Anoche fui a ver a Ryan para darle su indemnización.

—Ah, así que fuiste a lo de un chico, no a lo de una chica.

—… Lo que vi allí, realmente no es de este mundo. Quiero decir, Ryan y el oso de arena estaban viviendo juntos.

Que es mas increíble, ¿eso o las habitaciones de chicas que no saben cómo limpiar?

Ya sea porque ha nacido parar correr o solo porque tiene hambre, el goala acorta la distancia y gana el terreno perdido de la tardía largada. Las rayas blancas ondulantes que salen de su hocico no son ni cuerdas ni hilos, sino baba. Incluso su agitada respiración acorta la distancia hacia ellos.

—¡Lo va a alcanzar! ¡Lo va a alcanzar! ¡Y ya va en la tercera esquina! ¡¿Es en verdad tan malo que la pista no sea de arena?!

—Si fuera arena, él rodaría por ella, cavaría un hoyo, se metería, haría una cueva, pondría su trampa y esto no sería una carrera en lo absoluto. No necesita ser arena. De todas formas, fue bueno para nosotros que hayan hecho una pista especial en este lugar abierto. Mire allí. Justo antes de la meta hay un enorme árbol que parece ser muy viejo, ¿verdad?

—See, ese árbol robusto.

—Esa es la clave.

El Sr. Brillante va y viene entre el júbilo extremo y el abatimiento. A mi lado, Conrad sonríe calmadamente y empuja a Wolfram, que tiene aspecto de cansado, de vez en cuando.

Dando la vuelta a la última esquina, los dos animales se echan a la carga directo hacia la meta. Los filosos colmillos del goala están en una posición que da la impresión que va a morder la recta y corta cola del oso de arena en cualquier momento.

—¡Ah, Keiji, cuidado! ¡Ryan! ¡Ryan!

No sé si exista una palabra que se pueda aplicar a esto, pero una nube de pasto genera una cortina delante de nuestro campo de visión, y cuando estaban por pasar junto al árbol gigante en cuestión, los espectadores pierden de vista la carrera. ¡Y! Solo el oso de arena Keiji atraviesa la línea de meta frente a nosotros.

—¡¿Eh?

Ryan rodea con sus brazos el cuello de su querido oso y luego de un abrazo, hace una pose triunfal desde su posición encorvada sobre él.

Hay un rugido enorme de regocijo de la multitud y un montón de talones de apuestas perdedores que revolotean en el aire. Oye, espera, ¿desde cuándo esta carrera se convirtió esto en una apuesta pública?

—¿…Qué? Qué, qué, por qué solo Keiji… ¿a dónde fue el goala?

Cuando miro de la forma en que Conrad me indica, veo al Goala del Paraíso del Infierno colgando de una rama prominente que sobresale del árbol enorme antes de la línea de la meta.

Se aferra a la rama amarilla y nudosa, y sus ojos están cerrados en éxtasis. Parece estar completamente en modo paraíso.

—Los goalas son feroces carnívoros, pero no pueden resistirse el colgarse de ramas que les gusten. Sin importar cuál sea la situación, si se encuentra frente a su árbol favorito, pierde el control de sí mismo.

Mientras la bestia gris dormida está pegada al árbol, si no le prestas atención a la perspectiva, es tan linda como el símbolo de Australia. Si no viste la repentina transformación a un Goala Violento, podría incluso convertirse en un personaje mascota.

Pero no importa lo lindo que sea, claramente da señales de haberse dado por vencido. Ya que ha abandonado al competencia, la victoria de Keiji y Ryan está decidida y mi cuerpo vuelve a ser propiedad mía.

—¡No aceptaré esto!

Louis Buiron se pone de pie con expresión colérica en la torre de vigilancia contigua a dos metros de la nuestra. Ese enojo no viene a cuento, pero su puño tiembla.

—¡Absolutamente no aceptaré esto! Ya que fue interrumpida por un accidente, ¡esta carrera es inválida! ¡Solicito la revancha!

—Debes estar bromeando. No fue un accidente ni nada. El participante que escogiste simplemente se retiró. El que hayas perdido, ¿acaso no es culpa del hecho de que el propietario usó un caballo en la carrera sin conocer su personalidad, o cómo se comportaría en este ambiente? Quejarse diciendo que “es inválido” o que “quiero la revancha” es patético.

—No lo aceptaré, que un Goala del Paraíso del Infierno haya perdido contra un oso de arena… ¡alguien! ¡Traigan otra montura! Esta es una carrera inválida, inválida. Vamos a tener otra carrera.

Un mechón largo de su cabello estilo Kinpachi se mete en su boca. Sus cejas levantadas han sido subidas de categoría a una versión Monte Fuji[7], y está golpeando al subordinado que tiene al lado.

—¡Traigan otra! ¡Ah, un labakap! ¡¡Traigan un labakap!!

—¡¿Estás bromeando?! ¡El que decide si un partido ha terminado es el árbitro, no los jugadores! Y, de todas formas, ¡¿qué es esa criatura exótica que suena como Robocop, que no es un burro, o un caballo, o ni siquiera una kappa[8]?!

Hyscliff se pone de pie suavemente y saca el documento firmado que consiguió ayer por la noche.

—No sabe cuando rendirse, Louis Buiron. Usted ha aceptado los términos como son. Cualquier tipo de resistencia solo herirá su reputación. Sin embargo, usted tiene que elegir cuidadosamente entre la mala reputación y la mala fama… ah.

Me ha sorprendido. Una cabra negra desgarra el documento que sostiene y comienza a comerlo sin siquiera haberlo leído.

Este no es momento de quedarme sentado mirando. Buscando algo que intercambiar por el papel hecho bola en su boca, meto la mano en mi bolsillo y sacó un objeto arrugado. ¿Qué era esto? Al abrirlo, veo que por dentro es dinero y por fuera está en blanco.

—¿…Dinero falso? ¡Correcto, así es, es dinero falso! Oye, Marca de Bolsos, no, ¡Louis Buiron! Incluso si tratas de esconder la evidencia de esa manera, ¡no puedes esconder tus actos malvados! Hiciste un gran depósito de dinero falso ilegal bajo la cosa de dos cuernos en la tienda contigua, ¿no es así? Mira, aquí tengo dos de los billetes. Solo la parte de arriba está impresa y la parte trasera es de un blanco puro, obviamente es una falsificación.

Agito en el aire el papel delgado.

—Su Majestad…

—¿Hm? ¿Qué, Conrad? ¿Por qué estás usando un tono de voz tan compungido?

—Siento tener que informarle esto… es difícil de decir, pero… bueno, los billetes de Hildyard son…

Me entrega nerviosamente un billete tan fresco y nuevo que solo podrías encontrarlo en el sobre de un banco.

—¡Uy!

—… normalmente impresos por un solo lado.

La parte trasera es de un blanco puro. Mi cerebro también se pone blanco.

—¡Hmph! ¿Qué puede saber un joven mocoso extranjero? ¡No toleraré estas acusaciones extremadamente groseras!

Ante el grito de Buiron, Hyscliff alza las cejas de la indignación, y con sus dedos en la empuñadura de su espada, dice:

—¡Pero el problema no es el dinero de Hildyard, sino el dinero de mi país natal Cavalcade!

El color de la cara de Kinpachi Buiron cambia. —¡Por supuesto que los billetes dracma[9] de mi madre patria no están impresos de un solo lado! Ahora, Sr. Louis Buiron, ¿qué clase de historia me va a contar?

La cabeza del Sr. Brillante brilla resplandeciente bajo el sol mientras avanza incesantemente.

—Incluso si soborna a los oficiales de Hildyard, no podrá escapar de una investigación hecha por Cavalcade. Ahora, ríndase y renuncie al título de propiedad, avergüéncese de sus acciones y confínece en su hogar.

—¿... Tanto quiere los derechos comerciales de esta tierra?

Todos, incluyéndome, nos preparamos preguntándonos qué va a decir a estas alturas del partido. Solo Greta mira a su alrededor, y sus fosas nasales se contraen como un animal pequeño.

Louis Buiron deja escapar una risa insana y se quita los mechones de cabello fuera de la boca.

—Entonces, se los daré como desea. ¡Perder uno o dos páramos turísticos en un área como esta no me preocupa en lo absoluto! Tal y como está escrito, gustosamente le dejaré empezar un negocio hipócritamente limpio en el nuevo y renovado distrito Oeste. Yo, Louis Buiron, limpiaré de inmediato mis negocios para no causarles molestias.

Ahora no es solo la nariz de Greta, mi nariz también se contrae. A juzgar por el olor a quemado, ¿hay alguien que está quemando basura ilegalmente en alguna parte?

—¡Sobre el distrito del placer purificado por las llamas, incluso podrá construir una iglesia o un templo!

—¡Yuuri, por ahí!

Escuchado su risa aguda e histérica detrás de mí, volteo para observar hacia donde apunta Greta. El humo y las llamas se elevan desde los edificios de madera alrededor de la plaza. —¡¿Lo prendiste fuego?!

Los espectadores que vinieron a la pista de carreras especial empiezan a luchar entre sí para escapar en dirección opuesta. Presionada por el peso del flujo de personas, la torre de vigilancia se agita y ni siquiera podemos bajar al suelo.

—¡Maldito seas, Louis Buiron! ¡Este es un acto de cobardía!

—¡El camión de los bomberos, ¿dónde está el camión de los bomberos?! ¿Dónde están los bomberos?! Y… ¡wa!

Dos ventanas cerradas explotan repentinamente y las llamas explotan desde el interior. Las llamaradas que hicieron volar a Kurt Russel están justo frente a mis ojos[10].

En un abrir y cerrar de ojos, el fuego consume la construcción y empieza a extenderse hacia las tiendas vecinas y el pasto de los alrededores. Finalmente, los hombres que parecen bomberos llegan corriendo, tirando a mano de un carro con una bomba. Sin embargo, las llamas son tan vigorosas que ya no sé si es posible contenerlas y están acercándose a numerosos edificios de madera.

—De hecho… ¿por qué no están evacuado las chicas?

Los que escapan corriendo por sus vidas son todos empleados hombres y no puedo ver a ninguna de las muchas chicas que trabajan allí.

—Para que trabajen durante la noche como es debido, pon, les dejo muchas horas de descanso exhaustivo, pon. Mis condiciones laborales son justas. En este momento están profundamente dormidas, pon. Para mantener un ambiente seguro en el que puedan descansar, impido que nadie entre y por eso cierro la puerta con llave. Como ves, quería que estén bien cuidadas.

—Entonces… no pueden salir… Los subordinados de Hyscliff se abren paso entre la multitud y avanzan para ayudar a los bomberos.

—Louis Buiron, usted, esto es de lo mas vil.

—Por favor pare, Sr. Hyscliff, es deshonroso. Este es solo un desafortunado accidente. Un desafortunado accidente por el cual pagará mi seguro.

—Su Majestad, y también Greta. No deberían mirar…

Una ventana que apunta en nuestra dirección se abre y se asoma una chica. Preguntándome si era Izura o Nina, observo intensamente mientras el humo me hiere los ojos, pero el cabello rubio pálido pertenece a un rostro que no conozco. Al ver la gran distancia entre el tercer piso y el suelo, la chica duda y vuelve a entrar. Seria capaz de escapar del fuego si saltara, pero quién sabe cuán mal herida terminará cayendo desde esa altura.

—¿Su Majestad?

No puedo dejar de mirar a la chica. Sin saberlo, comienzo a gritar en mi mente “¡No saltes!”. No saltes, solo espera un poco. Alguien definitivamente vendrá a ayudarte.

¿Y quién es “alguien”?

—…Quién es… alguien… Quién seria capaz de... enfrentar esto…

Con las llamas rozando su espalda, la chica pone su pie en el alféizar de la ventana. Cuando levanta la cabeza nuestras miradas se encuentran por un instante.

—¡Detente!

Tengo la sensación de que ella ríe.

—¿… por qué…?

Simplemente contemplo la ventana, ahora vacía, sin el coraje ni la preparación necesarias para ver que pasó. La habitacion se ilumina con un resplandor naranja, o mejor dicho, se llena de una luz de aspecto divino.

Mi capacidad de pensar queda en banco por mi ira, desesperación e impotencia.

La imagen residual del cuerpo cayendo directamente al piso se proyecta al otro lado del humo.

¿Cómo pasó esto?

La maseki en mi pecho arde e incluso el aire frente a mis ojos se sacude. En alguna parte dentro de mi cráneo, una pequeña corriente eléctrica corre a través de mis sinapsis. El shock que trepa hacia arriba por mi espina se vuelve cada vez mas intenso naturalmente con una pulsación rítmica. Mis oídos son atacados por un pesado tono grave y un zumbido agudo de una intensidad insoportable.

—Solo un poco… son niñas…

El naranja de las llamas y el gris del humo se esparcen, el destello que borra todo vuelve mi visión de un blanco puro.

Con mi adrenalina y dopamina mezcladas, se esparce por todo mi cuerpo la energía y una sensación de éxtasis.

Convirtiéndose en un recuerdo fuera de los pliegues de mi alma y haciendo acto de presencia, la persona que me protege sonríe en forma de luz.

Hazlo.

Adelante.

Es imposible. No puedo hacer algo como distorsionar el mundo por mi cuenta.

Entonces, ¿qué quieres hacer?

¿El poder de quién quieres tomar prestado?

—No.

Quiero avanzar con mi propio poder. Quiero mi propio poder.

Los plegarias se vuelven realidad cuando uno hace un juramento con firmeza y decisión, venciendo el miedo y las ganas de darse por vencido.

Te conviertes en la persona que anhelas ser cuando lo deseas desde el fondo de tu corazón, y si tienes fe, tu esfuerzo dará fruto.



Página principal Anterior Siguiente

Referencias

  1. El nombre original es El Toto de Su Majestad, con un significado muy similar al de español sin abreviar, aunque también podría ser algo como “el pronostico sobre el amor de Su Majestad”; en resumen, con quien se va a quedar Yuuri. Pero hay un chiste en la abreviatura. Toto es una marca de inodoros, y la forma que está escrito es muy similar a los kanjis que usa la marca (también me parece gracioso que, al menos en mi país, toto (o totó) significa culo en español). Y además, abreviado en japones también se puede entender como “la persona muy, muy especial de Su Majestad”. En español quedó como RP, lo cual podríamos entender como chiste ya que esas son las siglas de “role playing” (estuve a punto de volverlo RPG, agregando la palabra galán al final, pero no funcionaba para ambos géneros).
  2. Suerte de ser hija de médicos, entiendo esta referencia. El chiste está en que para los hombres hacer pasar las piedras por el tracto urinario de manera natural causa un dolor equivalente al de dar a luz. Es decir, es uno de los peores dolores a soportar en la vida y cualquiera preferiría la cirugía, pero luego de terminar las sentadillas del infierno no resulta tan imposible de superar.
  3. Referencia a poderes comunes en los videojuegos.
  4. La rima original tenia aun menos sentido, el presentador dice que el alimento es “yuukai” (abducción) y Yuuri dice yuukari (eucalipto).
  5. Referencia a la novela clásica El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde, que analiza las dos caras de la misma moneda, y a la doble personalidad. Un lado bueno y un lado malo.
  6. Keiji, el nombre del oso, también se puede leer como detective en japonés.
  7. La forma de sus cejas se volvió completamente triangular, como la silueta del monte.
  8. Este es un juego de palabras perdido que no pude recuperar, ni siquiera se que era.
  9. Dracma era la antigua moneda de Grecia antes del euro.
  10. Referencia a la película Backdraft (Llamaradas), donde Kurt Russel es el protagonista bombero.