Rokujouma no Shinryakusha!? Volumen 2 Capítulo 5

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

La traducción de este capítulo fue hecha gracias a la versión en inglés que se encuentra en la misma página.

Traducido por ValkarRouse.

Capítulo 5: Ganadores, Perdedores y Tiempo Extra[edit]

Parte 1[edit]

Domingo, 10 de mayo.


“¿E-Eh…?”


Koutarou despertó justo cuando comenzó la ceremonia de victoria del maratón de obstáculos.

Había pasado algo de tiempo desde que Koutarou se desmayó y el escenario ya estaba teñido por el sol de la tarde.


“Finalmente despertaste…”


En frente de él estaba Sanae, quien tenía una expresión sombría en su cara.

Estaba de mal humor después de haber esperado a que Koutarou se despertara luego de que perdiera la consciencia.


“Sanae… Eh, ¡espera, ¿qué pasó con el maratón de obstáculos?! ¡¿En dónde estoy?!”


Koutarou se puso de pie de un salto y miró alrededor.

Estaba en una tienda de campaña para primeros auxilios a un lado de la sede del festival deportivo.

Aunque la tienda de campaña no contaba con el que debería estar en una enfermería.

La única cosa dentro de ella eran bolsas de dormir azules para los participantes heridos.

Aparte de Koutarou, había otras dos acostadas en la tienda: Theia y Kiriha.

Todo el personal de la tienda estaba afuera, se habían dirigido hacia el octavo obstáculo.


“Terminó hace rato. ¡Te desmayaste y te retiraste justo antes del décimo obstáculo!”

“¡¿E-Entonces quién ganó?! ¡¿Theia?! ¡¿Kiriha-san?! ¡¿Quién?!”


Koutarou señaló a las dos, preguntando los resultados de la competencia.

No estaba preguntando los resultados del maratón de obstáculos, sino más bien, la clasificación de los residentes de la habitación 106.


“Ninguna. Fuimos nosotros y Yurika.”

“¿Qué…?”


Al escuchar la respuesta de Sanae, Koutarou se quedó sin palabras; nunca podría haber imaginado ese resultado.

¿Sanae, Yurika y yo ganamos…? ¡Pero me retiré de la carrera!


“¡¿Q-Qué significa eso?! ¿Cómo terminamos ganando Yurika y yo?”


Desconcertado, Koutarou sacudió los hombros de Sanae.


“¡T-T-Tranquilízate!”

“¡¿Cómo podría tranquilizarme?!”


Koutarou siguió sacudiendo a Sanae.

Habiendo renunciado a escapar, Sanae hizo su mejor esfuerzo para tratar de responderle a Koutarou.


“T-Theia y Kiriha se noquearon entre sí después de una pelea a golpes. Aunque obtuvieron una recompensa especial, f-fueron tratadas como si se hubieran retirado. Después de eso, Harumi y Yurika empataron, así que tú, Yurika y yo tomaremos los puntos de Theia y Kiriha.”

“¡E-Espera un minuto, Sanae! ¡¿Eso significa que Sakuraba-senpai y Yurika ganaron?!”


Sorprendido, Koutarou dejó de sacudir a Sanae por un momento, antes de sacudirla al doble de velocidad.

Simplemente no podía creer que Harumi y Yurika habían ganado.


“¡Oyeeeeee, Koooutaaaroouuu, detente…!”

“¡¿Qué quieres decir?! ¡Explícate ahora mismo!”

“¡Si quieres que te explique entonces deja de sacudirme, idiota!”


Un botiquín de primeros auxilios cayó en la cabeza de Koutarou.

Fue debido al Poltergeist de Sanae.


“¡O-Ouch!”


La esquina del botiquín se estrelló en la cabeza de Koutarou.

Debido al impacto, Koutarou dejó ir a Sanae y se agarró la cabeza.


“Uf, cielos…”

“N-No seas tan irracional…”

“¡Eres el único siendo irracional! En serio…”


Finalmente libre de Koutarou, Sanae flotó en el aire, puso sus manos en su cintura y mostró una expresión insatisfecha mientras inflaba las mejillas.

Sin embargo, aun así Sanae explicó apropiadamente la situación.


“Bueno, la mayoría del grupo líder disminuyó la velocidad por el campo minado, ¿cierto? La mayoría de los primeros tuvieron que retirarse.”

“Ah…”

“Durante ese entonces, Harumi y Yurika alcanzaron a los demás y ganaron la carrera.”


Gracias al campo minado en el octavo obstáculo, la mayoría de los competidores disminuyeron la velocidad.

Muchos de los participantes trataron de correr a través de ellos, pero la mayoría falló y se rindieron.

Pero en el momento en que Harumi y Yurika llegaron ahí, la mayoría de las minas ya habían explotado y fueron capaces de cruzar sin ningún problema.

Y como resultado, el campo minado terminó siendo una gran ayuda para las dos.


“P-Pero aun así, esa dos volviendo desde atrás y ganando es simplemente…”

“En vez de dudar de mí, ¿Por qué no miras la ceremonia de premiación?”


Sanae señaló hacia la salida de la tienda.

Más allá de la salida estaba un podio con una gran cantidad de personas alrededor de él.

Con el fin de echar un vistazo, Koutarou salió de la tienda.


“Oh…”


Justo como Sanae había dicho, encima del podio estaban Harumi y Yurika.


“¡Y los ganadores son la Sociedad de Tejido y la Sociedad de Cosplay! ¡A pesar de tener la desventaja de que ambos son clubes y sociedades literarios! ¡Felicidades, bien hecho!”


La voz emocionada de los participantes podía ser escuchada a través de los altavoces.

Harumi y Yurika estaban siendo alabadas por las personas a su alrededor mientras ellas se sonrojaban.

Siendo introvertidas, las dos no estaban acostumbradas a este tipo de cosas.

Pero cuando recibieron el trofeo de parte del director, sonrieron mientras se veían entre sí.


“R-Realmente ganaron…”

“¿Ves? Te lo dije.”

“No puedo creerlo…”

“Al igual que los demás.”


Sanae se encogió de hombros.

Con el director felicitando a las dos encima del podio, no importaba lo poco que lo creyera.

Ellas dos realmente ganaron.


“… Oh bueno, al final todo salió bien.”

“Podría decirse que sí.”


Harumi se paró en el podio y Koutarou ganó contra las invasoras.

Me pregunto si Dios notó los esfuerzos de Sakuraba-senpai.

Cuando Koutarou pensó en ello de esa manera, se sintió convencido por alguna razón.

Y mostrando una gran sonrisa, miró fijamente a las dos parándose encima del podio.

Estaban sosteniendo el trofeo mientras sonreían.


Parte 2[edit]

“…N-No salió bien del todo…”

“¡¿Propietaria-san?!”


Shizuka de repente interrumpió a Koutarou, quien estaba mirando fijamente el podio.

Todo su cuerpo estaba cubierto de negro y su peinado ahora parecía un afro.


“¡¿Dónde está la idiota que plantó minas en el octavo obstáculo?!”


La razón por la que se veía así fue debido a que había sido alcanzada por varias explosiones en el octavo obstáculo.


“¡Satomi-kun! ¡No te beneficiarás por ocultármelo!”


El cuerpo de Shizuka estaba temblando y sus ojos estaban ardiendo de ira.

Estaba furiosa.


“¡P-Por ahí! ¡Ella está durmiendo en la tienda de campaña!”


Abrumado por la presencia de Shizuka, Koutarou le dijo dónde estaba Theia.

No tenía confianza alguna de que sería capaz de escondérselo a Shizuka, aunque tampoco tenía razón para hacerlo.


“¡¿Así que está por ahííí?!”

Shizuka se tronó los dedos.

Morirá. Theia sin duda morirá…

Koutarou sentía que la esperanza de vida de Theia disminuiría por cada articulación que Shizuka agrieté.

Shizuka dejó atrás a Koutarou y se acercó a la tienda.


“Perdóname, Tulipán…”


A pesar de que sabía que Theia estaba en peligro, Koutarou fue incapaz de moverse.

Le tenía mucho miedo a Shizuka y él mismo todavía estaba enojado con Theia.


“¡No te perdonaré!”


Cuando Koutarou estaba disculpándose hacia la tienda, otra persona se acercó a él.


“¡¿Mackenzie?!”

“Y no soy sólo yo.”


Kenji había aparecido en frente de Koutarou junto a tres grandes hombres.

Kenji lucía similar a Shizuka. Su esmoquin blanco puro y su cara estaban negros como el carbón.


“Hola, mocoso de primer año.”

“¡He estado esperando para conocerte!”

“¡Gottsan desu!”


Los hombres junto a Kenji eran del club de rugby, judo y sumo.

También estaban cubiertos de negro y sólo podían ser diferenciados gracias a sus uniformes distintos.


“Bueno, verás, Koutarou. Estos senpai querían hablar contigo.”


Kenji sonrió mientras limpiaba sus gafas con un pañuelo.


“Ugh… ¿E-En qué puedo ayudarles?”


No puede ser…

Un escalofrío recorrió la espalda de Koutarou.

Con Kenji apareciendo junto a tres grandes hombres, sólo había una cosa que podrían querer.


“Queríamos agradecerte por lo que hiciste al principio.”

“Ya que le hemos agradecido al cuatro ojos, quien no tenía nada que ver con ello, no sería justo si tampoco te agradeciéramos, ¿cierto?”

“¡Gottsan desu!”

“¡Lo sabía!”


Debido al desarrollo repentino, Koutarou comenzó a entrar en pánico.

Pensar que Mackenzie y estas personas trabajarían juntos…

La razón por la que Kenji y los demás estaban trabajando juntos era debido al campo minado.

Con el fin de escapar, no tuvieron más remedio que trabajar juntos, así que los cuatro desarrollaron un sentimiento de solidaridad.


“¡S-Sálvame plebeyo! ¡Usa todo en tu poder para protegerme!”

“¡¿Tulipán?!”


En ese momento, Theia saltó a Koutarou, medio llorando.

Sorprendido por el evento repentino, Koutarou de alguna manera fue capaz de atrapar su pequeño cuerpo.

Theia estaba aterrada y cuando Koutarou la bajó, rápidamente se escondió detrás de él.


“¡Y-Ya viene! ¡Shizuka ya viene! ¡Prepárate para la pelea, Koutarou! ¡Mi vida está en peligro!”

“¡¿Qué?!”


Shizuka salió de la tienda justo cuando Koutarou miró hacia allí.

Sus ojos todavía estaban ardiendo de ira y se acercó a Koutarou y Theia, paso a paso.


“Ya veo… Satomi-kun, al final, encubrirás a esa chica…”

“¡¿Q-Qué pasa con esta presión?!”


La mirada feroz de Shizuka se hizo más penetrante. Tenía una fuerte hostilidad hacia Koutarou.

Theia se había escondido detrás de Koutarou por su cuenta, pero debido a eso, Shizuka ahora lo consideraba como un enemigo.


”¡Vamos y pelea, plebeyo! ¡Te convertiré en un aristócrata! ¡Así que muere por mi bien!”

“¡Me rehúso! ¡No me metas en esto!”

“¡No! ¡Me niego a sufrir sola! ¡Es natural que un vasallo viva y muera por su amo!”

“¡No soy tu vasallo!”

“¡A estas alturas no importa si eres mi vasallo o no! ¡Vamos a sufrir juntos!”

“¡M-Maldita seas, Tulipán!”

“Ooojojojo♪.”


Koutarou y Theia estaban desesperados.

Sabían lo aterradora que en realidad era Shizuka cuando se enojaba.

Tenían una probabilidad más alta de ganar una lucha contra un tanque.

Así que Koutarou no quería involucrarse sin importar qué y Theia no quería ser dejada sola.


Parte 3[edit]

“…Como pueden ver, ese es el caso.”

“Ya veo, lo entiendo, cuatro ojos. Permíteme disculparme por confundirte.”

“¡Maldito seas, ¿por qué estás fingiendo que no eres popular?! ¡Eso lastima nuestro orgullo más que nada!”

“¡Gottsan desu!”


Al ver fijamente a Koutarou y Theia discutiendo, los tres hombres sintieron que tenían una relación especial.

También reconocieron a Koutarou y Theia como enemigos y se acercaron, paso a paso.


“Te hemos tratado injustamente, cuatro ojos. Después te dejaremos darnos una paliza por el tiempo que quieras. ¡Pero ahora mismo, vamos a castigar a esa persona insolente frente a nosotros!”

“¡Les ayudaré!”

“¡Bien dicho, mocoso de lentes! ¡Pensar que había alguien como tú entre las personas apuestas!”

“¡Ahora mismo todos estamos tan negros como el carbón, apuestos o no, eso no importa!”

“¡¡Gottsan desu!!”

“En verdad, bien dicho, cuatro ojos. ¡Me agradas!”

“¡Prepárense, Satomi-kun, Theia-san! ¡Los haremos pagar por todos los problemas que causaron!”


Kenji, Shizuka y los tres grandes hombres se acercaron a Koutarou y Theia.

Explicarles o razonar con ellos no funcionaría ahora.

Así que esto es todo… ¡parece que no tengo opción!

Frente a esos cinco, Koutarou finalmente tomó una decisión.


“¡Corramos, Tulipán!”

“¡S-Sí!”


Koutarou tiró de la mano de Theia y comenzaron a correr.


“¡Kou! ¡Espera!”

“¡Tras ellos! ¡¡No dejen que se escapen!!

“¡Gottsan desu!”

“¡Mackenzie-kun, corta su ruta de escape!”


Por supuesto, los cinco los persiguieron.


“¡Plebeyo, conviértete en mi señuelo! ¡A cambio, me aseguraré de no pisarte empezando desde mañana!”

“¡De ninguna manera! ¡No me importa si me pisas! ¡¡Sé tú el señuelo!!”


Con los dos corriendo y los cinco persiguiéndolos, el maratón de obstáculos entró en tiempo extra.


“Idiotas…”

“No digas eso, aun así, Theia-dono trató de ser considerada.”


Sanae y Kiriha se pararon frente a la tienda de campaña utilizada como enfermería y vieron correr a Koutarou y los demás.


“¿Trató de ser considerada? Eso es una mentira…”

“Nadie fue herido o lastimado, ¿cierto?”

“Eso es verdad, pero… Era obvio que Shizuka se enojaría si usaba algo como eso. ¿Por qué no lo entiende…?”

“Esa princesa odia perder. Lo hizo a pesar de saber lo que pasaría.”


Las minas fueron diseñadas para usar luz brillante y ondas de choque para inhabilitar a su víctima, así que las heridas rara vez sucedían.

Una ligera quemadura y un afro como máximo.

Y cuando Yurika pasó el octavo obstáculo, utilizó magia de curación, reduciendo las lesiones aún más.

Por supuesto, nadie notó la ayuda de Yurika.


“No actúes tan inocente. Ya lo sé. El que se cayeran todos al principio fue obra tuya, ¿cierto?”

“No tengo idea de qué estás hablando…”


Basada en la situación, Sanae sintió que Kiriha corriendo en la delantera era lo más sospechoso.

Sin embargo, Kiriha alejó las dudas con una sonrisa.

En su caso, no había evidencia.


“… Como lo pensé, realmente eres la más problemática.”

“Qué grosera. Sólo quiero convertirme en la enamorada de Koutarou. Juntos, podremos crear una familia feliz.”

“Mentirosa, eso no es lo que piensas en absoluto… Caray, qué pasa con todos hoy…”


Hoy, Sanae parecía ser la más normal. Todos los demás estaban actuando extraño.


“Fufufu, déjalo ir.”

“Desearía que entendieras mis preocupaciones… Caray.”


Mientras Sanae se quejaba, Koutarou y Theia pasaron corriendo frente a ellas.


“¡O-Oye, plebeyo! ¡En realidad todavía tengo una mina más!”

“¡Detente, Tulipán! ¡Si usas eso, definitivamente serás asesinada!”

“¡Pero escaparemos de ser atrapados ahora mismo!”

“¡Detenteeee! ¡Usa la cabeza!”


¡¿Por qué Koutarou está acaparando toda la diversión?!

Sanae estaba descontenta por ser dejada fuera del grupo.


“¡Mira esto! ¡No puedo creerlo! ¡Nunca antes había visto un fantasma así de denso y estable!”

“¡¿Crees que seremos capaces de venderla a un alto precio si la atrapamos?!”


Ellos estaban en una esquina del patio, señalando a Sanae con un dispositivo extraño que parecía una pistola radar y midiendo alguna clase de número.

Y estaban saltando de alegría debido a los resultados de esa medición.


“¡Sí, nos volveremos multimillonarios! ¡Podremos escapar de la pobreza!”

“¡Lo hicimos, Aniki!”


Habían estado siguiendo a Sanae a todas partes desde que supieron de su existencia hace unos días.

Las miradas que Koutarou había sentido hoy no eran de alguien viéndolo a él, sino a Sanae.


Regresar al Capítulo 4 Regresar a Página Principal Avanzar al Palabras del Autor